DEVOCIONALES DIARIOS
Domingo 24 de septiembre, 2023
Puedes ver el sermón de hoy a partir de las 11 am haciendo click aquí.
¡Dios te bendiga!
“Aquel que lo sabe todo”
“Oh Jehová, tú me has examinado y conocido. Tú has conocido mi sentarme y mi levantarme; has entendido desde lejos mis pensamientos. Has escudriñado mi andar y mi reposo, y todos mis caminos te son conocidos. Pues aún no está la palabra en mi lengua, y he aquí, oh Jehová, tú la sabes toda. Detrás y delante me rodeaste, y sobre mí pusiste tu mano.” Salmo 139:1-5.
Dios es Omnisciente, todo lo sabe. Observa de qué manera se detalla este atributo de Dios en estos versículos:
Dios nos diseñó desde la eternidad, nos creó y nos formó. Conoce cada detalle de nuestro espíritu, alma y cuerpo. Sabe de nuestras debilidades y fortalezas. Conoce nuestros éxitos y fracasos. ¡Todo lo sabe! “Oh Jehová, tú me has examinado y conocido”. V. 1.
Dios conoce todas nuestras acciones y obras. Tiene en su memoria todos nuestros tiempos, desde que nos levantamos hasta que nos acostamos. “Tú has conocido mi sentarme y mi levantarme”. V. 2.
Dios sabe lo que pensamos. Es el único que puede conocer nuestros pensamientos. Ni mentalistas, ni profetas, ni el mismo Satanás saben lo que pensamos. Solo Dios es Omnisciente. “Has entendido desde lejos mis pensamientos”. V. 2.
El Señor conoce las decisiones que vamos a tomar mucho antes de que las ejecutemos. “Has escudriñado mi andar y mi reposo, y todos mis caminos te son conocidos”. V. 3.
Dios no solo sabe lo que vamos decir, sino que entiende lo que intentamos comunicar. ¡Cuántas veces no sabemos cómo orar! Sin embargo, Dios conoce lo que hay en nuestro corazón aun antes de expresarlo. “Pues aún no está la palabra en mi lengua, y he aquí, oh Jehová, tú la sabes toda”. V. 4.
Dios sabe cómo protegernos. Estamos rodeados de su presencia, de su amor, de su misericordia y de su gracia infinita. “Detrás y delante me rodeaste”. V. 5.
Dios sabe cómo bendecirnos. Como hijos suyos su anhelo es que seamos bendecidos siempre. “Y sobre mí pusiste tu mano”. V. 5.
Dios tiene un plan para ti en este día. Vive confiado en la Omnisciencia de Dios. Todo estará bajo Su control si le has dado el primer lugar en tu vida.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Viernes 22 de septiembre, 2023
“Hijos de un Dios Santo”
“Entonces hizo un azote de cuerdas y expulsó del templo a todos, y a las ovejas y bueyes; esparció las monedas de los cambistas y volcó las mesas, y dijo a los que vendían palomas: ‘Saquen esto de aquí, y no conviertan la casa de mi Padre en un mercado’”. Juan 2:15-16.
El templo era un caos. Se escuchaban balidos de animales, los gritos de los vendedores, anuncios de los cambistas y las quejas de los que venían a adorar a Dios. En medio de ese desorden apareció Jesús.
En el v. 15 leemos que el Señor se hizo un azote de cuerdas. Un látigo no se arma en unos segundos, tomó un poco de tiempo. Debió trenzar las cuerdas y unirlas fuerte para que no se rompieran. Me imagino a Jesús probando el látigo contra el piso. Entonces empezó a poner las cosas en orden. Echó fuera a todos los que habían convertido el lugar de adoración a Dios en una cueva de ladrones (Mateo 21:13); incluso sacó a los animales. ¡Increíble que estuvieran dentro del templo!
En ningún momento Jesús azotó a una persona. El látigo le sirvió para llamar la atención y mostrar autoridad. Entonces volcó las mesas de los cambistas y reprendió a todo el que estaba haciendo negocios. El Señor tenía derecho a hacerlo por ser judío, pero sobre todo por ser el Hijo de Dios. Una vez que hubo limpiado el templo, entraron los que realmente querían adorar a Dios. Incluso Jesús pudo sanar a mucha gente. “Y vinieron a él en el templo ciegos y cojos, y los sanó”. (Mateo 21:14).
Siempre mencionamos este pasaje para referirnos a los negocios literales que “mercaderes” del evangelio llevan a cabo en algunos templos actualmente, sin embargo, pocas veces lo aplicamos a nuestra vida. Ahora nosotros somos el templo del Espíritu Santo (1 Co. 3:16,17; 6:19) y debemos vigilar que nada se interponga en nuestra relación con el Señor.
No permitamos que nada contamine nuestra devoción al Señor. Que nuestras acciones se correspondan con nuestra identidad: Hijos de un Dios Santo.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Jueves 21 de septiembre, 2023
“Mayor es el que está en ti”
“Volviendo los mensajeros otra vez, dijeron: Así dijo Ben-adad: Yo te envié a decir: Tu plata y tu oro, y tus mujeres y tus hijos me darás… Y he aquí un profeta vino a Acab rey de Israel, y le dijo: Así ha dicho Jehová: ¿Has visto esta gran multitud? He aquí yo te la entregaré hoy en tu mano, para que conozcas que yo soy Jehová.” 1 Reyes 20:5,13.
Esta historia no es solo el relato de un acontecimiento histórico, sino que tiene como propósito mostrarnos cómo opera el enemigo y la victoria que Dios da a los confían en Él.
Muchas veces los ataques del enemigo se dirigen a nuestras finanzas: “Tu oro y plata me darás”. Cuando nuestros bienes o trabajo están en peligro, analicemos las causas, el origen de la situación. A veces es el resultado de nuestras malas decisiones, pero en otras oportunidades son ataques del enemigo para robarnos las bendiciones de Dios.
Satanás no se quedará satisfecho solo con robarnos bienes materiales, él quiere arrasarlo todo. Está enfocado en destruir tu familia. “Tus mujeres y tus hijos me darás” le dijo el enemigo al rey de Israel. Por eso necesitamos estar alertas y no darle ningún lugar en nuestro hogar. Debemos intervenir a tiempo si identificamos su intromisión.
No permitas que el diablo te robe el amor que te unió a tu cónyuge. No dejes que tus hijos se pierdan al ser presionados por programas educativas ateos, o entretenimiento que desprecia los valores bíblicos, o compañías que influyen negativamente sobre sus vidas. Actúa enseguida. Enséñales a tus hijos a relacionarse con Dios, a experimentar su amor y a saber reconocer los ataques de Satanás.
Recuerda que nuestra lucha no es “contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes.” (Efesios 6:12), pero bajo la sangre de Jesús ¡somos más que vencedores!
Enfrenta tus batallas en oración y con la autoridad que te delegó el Señor para deshacer todo ataque del diablo. Nunca olvides que “Mayor es el que está en ti que el que está en el mundo” (1 Juan 4:4).
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Miércoles 20 de septiembre, 2023
“Sigue orando”
“Porque el hijo deshonra al padre, la hija se levanta contra la madre, la nuera contra su suegra, y los enemigos del hombre son los de su casa. Mas yo a Jehová miraré, esperaré al Dios de mi salvación; el Dios mío me oirá”. Miqueas 7:6-7.
Miqueas fue llamado a profetizar lo que le sucedería a Israel y a Judá por haberse apartado de los caminos de Dios. Eran tiempos difíciles para alguien que quería ser fiel al Señor. No se podía confiar en los líderes políticos ni religiosos, tampoco en los amigos (v.5) ni en la familia. Los justos eran condenados y los ricos opresores actuaban con total impunidad.
Hoy vivimos tiempos parecidos. De hecho Jesús lo profetizó: “Estará dividido el padre contra el hijo, y el hijo contra el padre; la madre contra la hija, y la hija contra la madre; la suegra contra su nuera, y la nuera contra su suegra.” (Lucas 12:53). Lamentablemente, para muchos seguidores de Jesús, la familia ha dejado de ser el ámbito de protección, seguridad y confianza.
Aunque Miqueas se sentía solo, tomó la mejor decisión de su vida: “Mas yo a Jehová miraré”. Es la manera de no desilusionarse cuando los que se suponen deben apoyarte de manera incondicional en los momentos difíciles, te abandonan. Hebreos nos anima a hacer lo mismo que Miqueas: “Puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, el cual por el gozo puesto delante de él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio, y se sentó a la diestra del trono de Dios. Considerad a aquel que sufrió tal contradicción de pecadores contra sí mismo, para que vuestro ánimo no se canse hasta desmayar.” (Hebreos 12:2-3).
Hay momentos en que lo único que podemos hacer por nuestros seres queridos es orar ya que hemos agotado todos los recursos y argumentos posibles para acercarlos al Señor sin ver resultados. Miqueas estaba seguro de que Dios lo oiría y esa debe ser también nuestra seguridad.
No bajes los brazos. Pon tu mirada en Cristo y continúa orando por tus seres queridos. Tus oraciones hacen la diferencia.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Martes 19 de septiembre, 2023
“Toma tiempo para escuchar”
“Mas el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, él os enseñará todas las cosas, y os recordará todo lo que yo os he dicho”. (Juan 14:26).
El Espíritu Santo ha venido a morar en el corazón de todo aquel que ha recibido a Cristo como Salvador y Señor de su vida. Habita en nosotros con muchos propósitos y uno de ellos es hablar a nuestro espíritu.
Desde que el Espíritu Santo irrumpió en la Iglesia a partir de Hechos 2, ha sido notorio que Él habla permanentemente a los creyentes. No se expresa a través una voz audible, sino que es esa voz interior que debemos aprender a reconocer.
Presta atención a los siguientes pasajes bíblicos: “Y mientras Pedro pensaba en la visión, le dijo el Espíritu: He aquí, tres hombres te buscan”. (Hch. 10:19). “Y el Espíritu me dijo que fuese con ellos sin dudar”. (Hch. 11:12). “Ministrando éstos al Señor, y ayunando, dijo el Espíritu Santo: Apartadme a Bernabé y a Saulo para la obra a que los he llamado”. (Hch. 13:2). “Esto dice el Espíritu Santo: Así atarán los judíos en Jerusalén al varón de quien es este cinto, y le entregarán en manos de los gentiles.” (Hch. 21:11). “El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias.” (Apocalipsis 2:7ª). El Espíritu Santo habla a todo aquel que le quiere oír.
Aprendemos a escuchar… escuchando. No se trata de tomar un curso, sino de desarrollar nuestros oídos espirituales a través de una comunión diaria con el Espíritu Santo. Él te hablará y nada de lo que te diga se va a contradecir con la Palabra de Dios. Esto te servirá también para distinguir Su voz de otras voces.
Dedica suficiente tiempo a la comunión con el Espíritu Santo. Él no hablará con nadie que tenga prisa. Permítele enseñarte las cosas profundas y ocultas de Dios. Cuanto más nos rindamos a Él, más transformados seremos a imagen de Cristo, más dispuestos estaremos a llevar a cabo la voluntad de Dios y mejor equipados para servirle.
Ser guiados por el Espíritu Santo debe ser el estilo de vida de todo hijo de Dios.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Lunes 18 de septiembre, 2023
“Excelso”
“Entonces Melquisedec, rey de Salem y sacerdote del Dios Altísimo, sacó pan y vino; y le bendijo diciendo: Bendito sea Abram del Dios Altísimo, creador de los cielos y de la tierra; y bendito sea el Dios Altísimo, que entregó tus enemigos en tu mano.” Génesis 14:18-20.
Esta es la primera vez que se usa el término “El-Elión” para referirse a Dios. Su significado es: “Excelso, supremo, lo más elevado, mayor, superior”.
Este es uno de los nombres de Dios más importante para los hebreos porque expresa su grandeza, infinitud, eternidad, soberanía y poder ilimitados. Piensa en el universo, en lo que conocemos y en lo desconocido, sobre todo está el Altísimo. ¡Qué grande es nuestro Dios!
Esta palabra también se aplica directamente a Jesús. La utilizó el ángel Gabriel en el anuncio a María: “Este será grande, y será llamado Hijo del Altísimo; y el Señor Dios le dará el trono de David su padre; y reinará sobre la casa de Jacob para siempre, y su reino no tendrá fin”. (Lucas 1:32-33). ¡Bendito sea Jesús, Hijo de Dios, Altísimo Señor!
Si Jesús es más grande que cualquier cosa creada, entonces de qué preocuparse. Si Él creó todas las cosas y todo está sujeto a Él, imagínate lo que puede hacer.
El amor de Jesús también es altísimo. “…Cuál sea la anchura, la longitud, la profundidad y la altura, y de conocer el amor de Cristo, que excede a todo conocimiento, para que seáis llenos de toda la plenitud de Dios.” (Efesios 3:18b-19). No podemos medirlo, nos sobrepasa, no alcanzamos a comprenderlo en plenitud, pero lo podemos recibir y disfrutar. Su amor nos transforma.
Si estamos al abrigo del Altísimo, nada ni nadie nos puede separar de Él. “Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir, ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro.” Romanos 8:38-39. ¡Eternamente seguros!
Si nuestro Dios es El-Elión, merece toda la gloria, honra, alabanza y adoración. Comienza tu día adorando al Altísimo y descansa en la seguridad de estar bajo su protección.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Domingo 17 de septiembre, 2023
Puedes ver el sermón de hoy a partir de las 11 am haciendo click aquí.
¡Dios te bendiga!
“Él nunca llega tarde”
“Y viéndoles remar con gran fatiga, porque el viento les era contrario, cerca de la cuarta vigilia de la noche vino a ellos andando sobre el mar, y quería adelantárseles.” Marcos 6:48.
Las intervenciones sobrenaturales de Dios se hacen patentes cuando sus hijos están pasando por necesidades. Así sucedió en esta historia. El milagro fue extraordinario: ¡Jesús caminó sobre el agua!
Los apóstoles llevaban bastante tiempo remando con el viento en contra. El Señor les había pedido que cruzaran al otro lado, pero sus esfuerzos parecían inútiles. El viento soplaba más fuerte, a tal punto que parecían estancados en medio de la tormenta. Sin embargo, es importante notar, que no retrocedieron.
Marcos dice que Jesús vio que remaban con “gran fatiga”. Esta palabra en griego es basanízo que significa “afligido, atormentado, agobiado”. El sentimiento de los discípulos era de agobio y frustración por no poder avanzar. Toda su experiencia en el mar parecía no servir de mucho en ese punto.
¿Has llegado a sentirte como los discípulos? ¿Estás pasando por situaciones difíciles y nada parece mejorar? Jesús sabe cómo te sientes. Él no solo está viendo tu fatiga y aflicción, sino que también ¡intervendrá a tu favor!
El Maestro llegó en el momento justo para ayudar a sus discípulos. De pronto… ¡se adelantó! ¿A dónde va Jesús? ¿Nos dejará solos? Por supuesto que no. Jesús se subió al barco y calmó la tempestad en un segundo. ¡Aleluya! Él nunca llega tarde, sus tiempos son perfectos y sigue cumpliendo sus propósitos en medio de nuestras tormentas.
Jesús tiene el control de tu tempestad, y si clamas a Él se asegurará de que llegues a puerto seguro.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Viernes 15 de septiembre, 2023
“Conducidos a un lugar más alto”
“Seis días después, Jesús tomó a Pedro, a Jacobo y a Juan su hermano, y los llevó aparte a un monte alto; y se transfiguró delante de ellos, y resplandeció su rostro como el sol, y sus vestidos se hicieron blancos como la luz.” Mateo 17:1-2.
Jesús jamás hizo acepción de personas, pero hubo eventos en los que solo participaron Pedro, Jacobo y Juan. ¿Por qué? Porque ellos querían más.
A estos buscadores de todo lo que podían recibir de Dios, el Señor se les reveló de una manera especial, única. Eso fue lo que sucedió en aquel monte alto. Literalmente el versículo dice que Jesús los “llevó”. Esta palabra en griego es anafero y significa “conducir a personas a un lugar más elevado”. Interesante. Para experimentar la gloria de Dios debemos ser conducidos a lugares más altos, espiritualmente hablando.
Algunos se preguntan: ¿Por qué hay personas que escuchan la voz del Espíritu Santo y otros no? ¿Por qué no son muchos los que tienen experiencias extraordinarias con Dios? ¿Acaso Dios tiene hijos “preferidos”? No, de ninguna manera. La respuesta a estas preguntas es simple: Quienes más buscan más reciben.
Jesús conduce a lugares más altos a aquellos que no se conforman con los panes y los peces, a quienes se atreven a dar unos pasos sobre el agua mientras los demás miran, a quienes no practican un cristianismo nominal.
Dios sigue buscando hombres y mujeres que anhelen más de Él, que quieran seguir creciendo. A ellos les dará a conocer su poder y su gloria. “Entonces me invocaréis, y vendréis y oraréis a mí, y yo os oiré; y me buscaréis y me hallaréis, porque me buscaréis de todo vuestro corazón. Y seré hallado por vosotros, dice Jehová.” Jeremías 29:12-14ª.
¿Eres uno de ellos?
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Jueves 14 de septiembre, 2023
“Cambio heridas por cicatrices”
“Y llamó José a su hijo mayor Manasés, porque dijo: Dios me hizo olvidar todos mis sufrimientos y a todos los de la casa de mi padre”. Génesis 41:51.
La historia de José es impactante. Después de trece años de sufrimiento, vendido por sus hermanos, esclavo de Potifar, enviado a la cárcel por falsas acusaciones, al fin Dios lo reivindica y termina siendo gobernador de Egipto. En medio de esa etapa de restauración y recompensa de parte de Dios nace su primer hijo y lo llama Manasés, que en hebreo significa “hacer olvidar”.
José no perdió la memoria, lo que perdió fue el dolor. Él siempre recordó a su padre y a sus hermanos. Su amor por su familia era tan profundo que pudo perdonarlos con la ayuda de Dios.
“Dios me hizo olvidar”, es decir, me ayudó a olvidar las penas y removió el resentimiento de mi corazón. Esto fue evidente cuando se reencontró con sus hermanos; después de probarlos, les dio abrigo, vivienda y alimento en Egipto. Me imagino lo feliz que se sentiría José cuando les presentó a su hijo Manasés. Seguramente toda la familia supo enseguida lo que significaba su nombre.
Dios es el que sana nuestras heridas y las transforma en cicatrices. Tal vez tengamos muchas marcas físicas de accidentes o golpes. Incluso podemos tener otras en el corazón producidas por personas o situaciones que nos lastimaron, pero Dios es nuestro sanador.
Dios nunca dijo que obraría en nuestra memoria al punto de hacernos olvidar toda circunstancia difícil. Lo que nos prometió es quitarnos el dolor y transformar nuestras heridas en cicatriz como testimonio de su obra restauradora.
¿Cómo está tu corazón? ¿Hay recuerdos que todavía te duelen? ¿Hay personas, lugares o situaciones que al recordarlas te producen angustia? Puede ser muy difícil traer a la luz esas situaciones desgarradoras, pero vale la pena si sigues el ejemplo de José: entregarle a Dios el dolor que tú nunca podrás manejar y permitirle hacer un milagro en tu corazón.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Miércoles 13 de septiembre, 2023
“Caminos más altos”
“¡Oh profundidad de las riquezas de la sabiduría y de la ciencia de Dios! ¡Cuán insondables son sus juicios, e inescrutables sus caminos! Romanos 11:33.
Si no pusiéramos la cita a estas palabras, seguramente pensaríamos que se trata de un Salmo de David, pero son palabras del apóstol Pablo. A través de ellas el apóstol alaba a Dios por la perfección de sus planes eternos.
Los caminos de Dios son “inescrutables”, significa que no pueden ser comprendidos plenamente por el ser humano. Aun así, cuando pasamos por experiencias difíciles de explicar y no llegamos a entenderlas plenamente, nuestra fe nos dice que Dios sabe lo que está haciendo. Él no actúa de manera arbitraria, sino que gobierna nuestras vidas con perfecta sabiduría, justicia y amor.
Al leer las historias completas de hombres y mujeres como Abraham, Moisés, José, Ester, Rut, Elías, Daniel, y tantos otros, no tenemos ninguna duda acerca de lo perfecto que fueron los planes y propósitos de Dios. Sin embargo, atravesaron situaciones que en principio eran difíciles e incomprensibles.
Lo mismo puede sucedernos a nosotros hoy. No entendemos por qué el Señor está permitiendo ciertas circunstancias en nuestra vida, pero debemos seguir adelante, creyendo que no hay equivocación en los planes de Dios.
En Isaías 55:8-11 Dios mismo nos dice: "Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni vuestros caminos mis caminos, dice el Señor. Como son más altos los cielos que la tierra, así son mis caminos más altos que vuestros caminos, y mis pensamientos más que vuestros pensamientos. Así como la lluvia y la nieve caen de los cielos, y no vuelven allá, sino que riegan la tierra y la hacen germinar y producir…así también mi palabra, cuando sale de mi boca, no vuelve a mí vacía, sino que hace todo lo que yo quiero, y tiene éxito en todo aquello para lo cual la envié”.
Teniendo en cuenta que Dios quiere lo mejor para sus hijos, descansemos en su sabiduría y amor infinitos. “Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados.” Romanos 8:28.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Martes 12 de septiembre, 2023
“Saber esperar”
“Y él esperó siete días, conforme al plazo que Samuel había dicho; pero Samuel no venía a Gilgal, y el pueblo se le desertaba. Entonces dijo Saúl: Traedme holocausto y ofrendas de paz. Y ofreció el holocausto. Y cuando él acababa de ofrecer el holocausto, he aquí Samuel que venía… Entonces Samuel dijo: ¿Qué has hecho?” 1 Samuel 13:8-11.
¿Alguna vez haz considerado lo que revela la impaciencia?
Orgullo. Si lees las historias de Saúl verás que solo quería quedar bien ante los ojos del pueblo. Buscaba el reconocimiento y la adulación. Ser aprobado. Él creía que estaba por encima de todos, incluso de Dios. Prov. 16:18: "Al orgullo le sigue la destrucción; a la altanería el fracaso". Los orgullosos pocas veces se dan cuenta de su problema, a pesar de que quienes los rodean están muy conscientes de ello.
Sabios en nuestra propia opinión. Podemos llegar a pensar que manejamos el tiempo mejor que Dios. Que podemos ayudarlo con sus “retrasos”. Que si Él no hace lo que dijo que iba a hacer, nosotros podemos encargarnos. Ser sabio en su propia opinión llevó a Saúl a tomar el lugar del sacerdote, cosa que Dios había prohibido, y sufrió las consecuencias. Prov. 3:7: "No seas sabio en tu propia opinión; teme a Dios y apártate del mal".
Independencia. Presta atención a las palabras de Saúl: “Ahora descenderán los filisteos contra mí a Gilgal, y yo no he implorado el favor de Jehová. Me esforcé, pues, y ofrecí holocausto”. “No he implorado”, “me esforcé”, “ofrecí”. ¡Qué ciego estaba al pensar que podía ignorar a Dios!
Muchas veces nosotros sabemos por la Palabra de Dios lo que es correcto, pero las presiones de los demás, los plazos que nos imponen, la ayuda que no llega, nos impacienta y empezamos a tomar decisiones fuera de la voluntad del Señor.
La madurez espiritual se manifiesta en la capacidad de esperar con tranquila confianza, teniendo fe de que, en el tiempo de Dios, llegarán las respuestas que necesitamos.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Lunes 11 de septiembre, 2023
“No vuelvas a ser esclavo”
“Cristo nos redimió de la maldición de la ley, hecho por nosotros maldición (porque está escrito: Maldito todo el que es colgado en un madero), para que en Cristo Jesús la bendición de Abraham alcanzase a los gentiles, a fin de que por la fe recibiésemos la promesa del Espíritu.” Gálatas 3:13-14.
El sacrificio de Jesús en la cruz fue perfecto. Esto significa que no debemos añadirle acciones de ningún tipo a su obra redentora. ¡Todo lo que necesitábamos para ser salvos ya fue provisto por Jesucristo! No hay nada que completar. ¡Aleluya!
Para muchos este concepto bíblico está claro en la teoría, pero en la práctica se contradicen. La culpa, la vergüenza y el temor nos pueden jugar una mala pasada y podemos terminar creyendo las mentiras con las que Satanás busca esclavizarnos espiritualmente.
En la mayoría de las culturas hispanas, la consulta a brujos, santeros, médiums, es normal. Muchos se acercan a estas personas para que les ayuden con problemas de salud, relaciones rotas, venganzas, deshacer maldiciones, entre otras cosas. El diablo, el dios de este siglo, ha cegado el entendimiento de la gente para que crean más en cuestiones esotéricas que en la Palabra de Dios. Incluso muchos cristianos son capaces de leer el horóscopo para saber cómo les irá en el día… y después ¡¡leen la Biblia!!
Haber vivido en estos ambientes ha condicionado la fe de muchos cristianos, y aunque creen que Jesús tiene poder para salvar, piensan que ciertas historias de su pasado relacionadas con la hechicería y maldiciones, siguen siendo parte de su vida. Frente a semejante mentira del infierno, debemos recordar el pasaje con el comenzamos. Cristo murió en la cruz para llevarse toda maldición sobre Él, y esta fue una obra perfecta y completa. No hay ningún mal que la cruz no haya podido cancelar. Toda persona es libre desde el mismo momento que acepta a Cristo como su Salvador y Señor. Ya no hay lugar para el enemigo porque el Espíritu Santo viene a hacer morada en ella. “Sabemos que el que ha nacido de Dios no está en pecado: Jesucristo, que nació de Dios, le guarda y el maligno no le toca.” (1 Juan 5:18).
No permitas que Satanás y sus demonios te hagan dudar del sacrificio perfecto de Jesús en la cruz. No permitas que aquellos que distorsionan la Palabra Dios con el fin de manipularte te mantengan esclavizado. Pablo nos exhorta: “Por precio fuisteis comprados; no os hagáis esclavos de los hombres.” (1 Corintios 7:23). El apóstol no está hablando de la esclavitud literal sino espiritual. Y otra vez: “Estad, pues, firmes en la libertad con que Cristo nos hizo libres, y no estéis otra vez sujetos al yugo de esclavitud.” (Gálatas 5:1).
¡¡Dale gracias al Señor por su sacrificio perfecto!!
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Domingo 10 de septiembre, 2023
“¿A quién vas a agradar?”
“Pues, ¿busco ahora el favor de los hombres o el de Dios? ¿O trato de agradar a los hombres? Pues si todavía agradara a los hombres, no sería siervo de Cristo”. Gálatas 1:10.
Los hermanos de Galacia estaban apartándose de la gracia y volviéndose a guardar la Ley de Moisés creyendo que así obtendrían la salvación. Entonces Pablo les dice claramente que quien sigue “otro evangelio” diferente al de la gracia de Cristo, sea maldito. ¿Por qué es tan contundente? Porque quiere agradar a Dios antes que a los hombres.
La palabra “agradar” en griego es aresko y significa “complacer a otros con emoción”, “adaptarse a las opiniones y deseos de otros para complacerlos”. Por supuesto el apóstol jamás iba a complacer a los que seguían sus propios caminos, falsas enseñanzas o torcían la Palabra de Dios. Pablo sabía a quién iba a rendirle cuentas. Fíjate cómo lo dice: “Sino que según fuimos aprobados por Dios para que se nos confiase el evangelio, así hablamos; no como para agradar a los hombres, sino a Dios, que prueba nuestros corazones”. (1 Tesalonicenses 2:4).
No está mal agradar a los que amamos, a los hermanos en la fe, a los que necesitan del Señor. El apóstol Pablo también lo hacía. El problema radica en poner a Dios en segundo lugar para no perder ciertos beneficios otorgados por los hombres, como aceptación, estima, compañía, seguridad, dinero, bienes materiales, reconocimiento…
Cuando entendemos que el Señor es todo para nosotros, que nos ha dado vida eterna y abundante, que nos delegó autoridad para vivir en victoria, que además nos colma de bendiciones, pero por sobre todas las cosas que es nuestro Padre, Señor y Rey, entonces podemos compartir la misma convicción del apóstol: Si no agradara a Dios, no sería siervo de Cristo.
¿A quién estás sirviendo? ¿De quién estás buscando aprobación? No hay mayor gozo para un hijo de Dios que agradar a su Padre Celestial, ahora y por la eternidad. ¡Que mi vida entera sea agradable a ti Señor!
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Viernes 8 de septiembre, 2023
“Necesitamos conectarnos”
“Entonces aquellos cinco hombres salieron, y vinieron a Lais; y vieron que el pueblo que habitaba en ella estaba seguro, ocioso y confiado, conforme a la costumbre de los de Sidón… Y estaban lejos de los sidonios, y no tenían negocios con nadie… llegaron a Lais, al pueblo tranquilo y confiado; y los hirieron a filo de espada, y quemaron la ciudad. Y no hubo quien los defendiese, porque estaban lejos de Sidón, y no tenían negocios con nadie.” (Jueces 18:7, 27,28).
Lais era una ciudad cananea situada el norte de Jerusalén. Estaba separada de los de Sidón y no había establecido alianzas militares con nadie. Los habitantes de esa ciudad tenían costumbres parecidas a los sidonios, abocados más a la agricultura y el comercio que a los conflictos bélicos.
La principal debilidad de esta ciudad fue estar aislada. Sus habitantes se sentían autónomos, independientes y auto protegidos. Creían que no necesitaban la ayuda de nadie. ¿Cómo llegaron a este punto? Dice el versículo que leímos que “estaban seguros, ociosos y confiados”. Ese fue el motivo de su caída.
Puede que en algún momento de nuestra vida nos sintamos como los ciudadanos de Lais, “seguros, ociosos y confiados”, a tal punto que dejemos de relacionarnos, de comunicarnos, de animarnos y orar unos por otros. El diablo es muy astuto y sabe que si logra separarnos del Cuerpo de Cristo somos presa fácil.
Hay una vieja ilustración que vale la pena recordar. Un pastor fue a visitar a un hermano que hacía tiempo que no veía. Mientras los dos se sentaban frente a una fogata, este hermano comenzó a hablar acerca de todas las razones que le impedían asistir a la iglesia. El pastor, en medio de la conversación se inclinó hacia el fuego y separó una brasa que poco a poco alejada de las llamas se fue apagando. Enseguida el hermano entendió el mensaje y a partir de ese día nunca dejó de congregarse. Buen ejemplo para nosotros.
Hebreros 10:25 dice: “No dejemos de congregarnos, como acostumbran hacerlo algunos, sino animémonos unos a otros, y con mayor razón ahora que vemos que aquel día se acerca”.
Nunca abandones la comunión. Ahora más que nunca necesitamos seguir preocupados unos por otros, nutriéndonos y creciendo espiritualmente y siendo de bendición.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Jueves 7 de septiembre, 2023
“Continúa aunque se corte la luz”
“Aunque ande en valle de sombra de muerte, No temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo”. Salmo 23:4
Había un domador de tigres extraordinario que hacía funciones diarias en un circo. Un día, en medio de la función, mientras se encontraba frente al tigre llevando en una mano un látigo y en la otra una silla, se cortó la luz. Todos los espectadores lanzaron un grito de espanto porque sabían que los tigres pueden ver muy bien en la oscuridad. Los segundos que corrían parecían horas interminables, hasta que de pronto volvió la luz. La escena era la misma, el domador seguía frente al tigre y el tigre inmóvil. Todos aplaudieron maravillados… o más bien aliviados.
Después de la función, un espectador se acercó al domador y le preguntó: “¿Cómo hizo para continuar sin problemas cuando se cortó la luz? Todos sabemos que los tigres pueden ver muy bien en la oscuridad…” El domador respondió: “Es que el tigre no sabe que yo no puedo ver en la oscuridad; así que seguí haciendo la función como si lo estuviera viendo”.
A veces nos pasa como a este domador, nuestra fe viene creciendo, nos sentimos victoriosos, parece que todas las preguntas tienen respuestas, las oraciones son contestadas… Pero en un momento, de manera abrupta, “se corta la luz”. Parece que espiritualmente no vemos nada. Ahora tenemos respuestas a peticiones pendientes, promesas en pausa, y parece que Dios no nos escucha. Entonces la fe empieza a flaquear y empezamos a ser gobernados por nuestras emociones.
Hay una gran diferencia entre sentirnos victoriosos y vivir como victoriosos. Romanos 8:37 dice: “Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó.” No importa cómo te sientas, Dios dice que eres más que vencedor. No depende de tus circunstancias sino de lo que Dios dice.
Cuando empieces a detectar que tus sentimientos parecen ser mayores que tu fe, recurre inmediatamente a Dios. No hace falta un prólogo, ni ser muy elocuentes para hablar con el Señor, Él nos dice que debemos “acercarnos confiadamente al trono de la gracia para hallar el oportuno socorro”.
Solo abandónate en sus brazos y escucha lo que Él quiera decirte porque tiene dirección para tu vida. Afirma tu fe en las declaraciones de Dios a sus hijos: “Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis. Entonces me invocaréis, y vendréis y oraréis a mí, y yo os oiré; y me buscaréis y me hallaréis, porque me buscaréis de todo vuestro corazón. Y seré hallado por vosotros, dice Jehová…” Jeremías 29:11-14.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Miércoles 6 de septiembre, 2023
“Designados para esta hora”
“¿Quién sabe si no llegaste a ser reina precisamente para un momento como este?” Ester 4:14.
Ester, una hermosa doncella judía, gana el primer lugar en el concurso de belleza Miss Persia y con ello se convierte en reina, esposa del rey Asuero. ¿Se imagina la satisfacción de esta joven? Era el orgullo de todos los hebreos. ¿Puede escuchar a Mardoqueo susurrarle al oído a una invitada a la boda: “Esa… es mi ahijada”? Si hubieran existido las revistas dedicadas a las noticias sociales uno de sus titulares habría sido: “De esclava a reina”. Ester, la joven que llegó a lo más alto... en un año.
Todo marchaba fantásticamente bien. Pero Amán, el malo de la película, logra que el rey firme un documento para que todos los judíos fueran sentenciados a muerte en una fecha determinada. La única manera de poder evitar esa tragedia estaba solo en las manos de Ester. Bajo estas circunstancias su tío Mardoqueo le dice: “No creas que por estar en el palacio escaparás cuando todos los demás judíos sean asesinados. Si te quedas callada en un momento como este, el alivio y la liberación para los judíos surgirán de algún otro lado, pero tú y tus parientes morirán. ¿Quién sabe si no llegaste a ser reina precisamente para un momento como este?” Ester 4:13-14.
Mardoqueo dio en la tecla. Si Dios en su providencia había permitido que Ester ocupara ese lugar, era con un propósito. Ella entendió el mensaje, asumió el riesgo y terminó siendo la heroína de la historia. Por su valor y determinación vino la salvación a su pueblo.
¿Y qué de nosotros? ¿Sabemos cómo nos quiere usar Dios en este momento? La misión más importante que se nos ha encomendado es mostrar el camino de salvación a todos los que nos rodean, y necesitamos hacerlo con el mismo valor que lo hizo Ester.
Como hijos de Dios hemos llegado hasta aquí para ser instrumentos suyos en medio del caos, ansiedad, desesperanza y confusión. Tú has experimentado los beneficios de la salvación de Cristo, por lo tanto, sabes de qué se trata. Con tus palabras, a tu manera, eres hoy el portador del mensaje. ¿Por qué crees que Dios se ha manifestado tantas veces a tu vida? ¿Con qué propósito Dios te ha sanado? ¿Por qué crees que Dios te puso en contacto con tantas personas? ¿Por qué crees que Dios te ha bendecido tanto?
Muchos necesitan creen en Jesucristo para alcanzar salvación eterna hoy y tú has sido designado por Dios para esta hora.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Martes 5 de septiembre, 2023
"El Dios Todo Suficiente"
“Y dijo a José: El Dios Omnipotente me apareció en Luz en la tierra de Canaán, y me bendijo”. Gn. 48:3.
Cada uno de los nombres de Dios describe un aspecto diferente de su carácter y su obra. Uno de ellos es El Shaddai que significa "uno que nutre, suple y satisface". Esta palabra es traducida como "Dios Todopoderoso", “Dios Omnipotente” o "Dios que es más que suficiente". Los teólogos concluyen que el significado completo de este nombre es el “Dios todo suficiente para las necesidades de su pueblo”.
Dios comenzó a revelarse con este nombre en la vida de Abraham. El Shaddai fue todo suficiente para sus necesidades, proveyendo esperanza y paciencia, fuerza, sabiduría y recursos materiales.
Dios continuó revelándose como El Shaddai a su descendencia. Isaac, el hijo de Abraham, usó este nombre para bendecir a su hijo Jacob: “Y el Dios Omnipotente te bendiga, y te haga fructificar y te multiplique, hasta llegar a ser multitud de pueblos; y te dé la bendición de Abraham, y a tu descendencia contigo...” (Gn. 28:3-4).
Dios vuelve a utilizar este nombre cuando se encontró con Jacob en Betel: “Yo soy el Dios Omnipotente, crece y multiplícate; una nación y conjunto de naciones procederán de ti, y reyes saldrán de tus lomos” (Gn. 35:11).
Jacob se lo dijo a José: “Y dijo a José: El Dios Omnipotente me apareció en Luz en la tierra de Canaán, y me bendijo” (Gn. 48:3). Moisés lo vuelve a repetir a la próxima generación… ¡y cantando!: “Antes que naciesen los montes y formases la tierra y el mundo, desde el siglo y hasta el siglo, tú eres Dios.” (Sal. 90:2).
La revelación de este maravilloso nombre también es para nosotros. Dios es Todo Suficiente para salvarnos a través de la obra completa y perfecta de Jesucristo.
Dios es Todo Suficiente para suplir nuestras necesidades emocionales. “Echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros” (1 Pedro 5:7).
Dios es Todo Suficiente para librarnos de nuestros temores. Sal. 34:4: “Busqué a Jehová, y él me oyó, y me libró de todos mis temores.”
Dios es Todo Suficiente para suplir necesidades materiales. “Y el que da semilla al que siembra, y pan al que come, proveerá y multiplicará vuestra sementera…” (2 Co. 9:10).
En tiempos difíciles, Dios quiere mostrarse como El Shaddai, el Todo Suficiente que sabe cuidar de cada uno de sus hijos.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Lunes 4 de septiembre, 2023
“Recupera lo que puedes haber perdido”
“Así que, amados hermanos, podemos entrar con libertad al Lugar Santísimo del cielo por causa de la sangre de Jesús. Por su muerte, Jesús abrió un nuevo camino, un camino que da vida…Ya que tenemos un gran Sumo Sacerdote que gobierna la casa de Dios, entremos directamente a la presencia de Dios con corazón sincero y con plena confianza en él”. Hebreos 10:19-22
Toda relación se construye, disfruta y fortalece a través de la comunicación. Como hijos de Dios, tenemos la oración como el recurso más valioso para acercarnos en todo momento a Él.
Este es uno de los privilegios más grandes que tenemos, por eso, cuando nuestra vida de oración se debilita y dejamos de acercarnos al Señor, sufrimos pérdidas importantes.
Pérdidas en nuestra relación con Dios.
- Cuando dejamos de orar nuestro conocimiento de Su persona es limitado.
- La perspectiva espiritual de lo que sucede a nuestro alrededor comienza a distorsionar porque empezamos a ver las cosas desde un punto de vista natural, humano, y entonces nuestra fe no se desarrolla correctamente.
- Perdemos dirección espiritual. De Dios tenemos la dirección que necesitamos para tomar buenas decisiones. Él nos dice: “Te haré entender, y te enseñaré el camino en que debes andar” (Sal. 32:8).
- Dejamos de sentir lo que Dios sienten por aquellos que aún no le conocen.
Pérdidas en nuestra alma.
- Si dejamos de orar ya no vamos a experimentar el amor, la paz y la seguridad de Dios como antes porque esto es el resultado de nuestra relación con Él. Para un niño el lugar más seguro siempre serán los brazos de sus padres no importa cuán fuerte sea la tormenta.
- Perdemos terreno que le habíamos ganado a nuestras debilidades ya que la fuerza para vencer la recibimos del Espíritu Santo.
Pérdida de bendiciones.
- Los suministros espirituales para los tiempos de prueba están disponibles para los hijos que piden, que buscan y que llaman. Esto es posible a través de la oración.
- Cuando no oramos el cielo está cerrado. Las bendiciones están listas, pero hay una pausa en la entrega porque no hay peticiones hechas con fe.
- Dejamos de ser canales para convertirnos en lagunas. La laguna es una masa de agua estancada, recibe pero no tiene desembocadura, no da. Cuando dejamos de orar, perdemos la oportunidad de bendecir a otros.
Nuestro Padre celestial siempre está listo y deseoso de que vayamos a Él, porque no solo nos escucha, sino que también nos quiere hablar. Los encuentros con el Señor son los que hacen la diferencia en nosotros cada día.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Domingo 3 de septiembre, 2023
Puedes ver el sermón de hoy a partir de las 11 am haciendo click aquí.
¡Dios te bendiga!
“Avanzando con fe”
“Como no podían llevarlo hasta Jesús debido a la multitud, abrieron un agujero en el techo, encima de donde estaba Él. Luego bajaron al hombre en la camilla, justo delante de Jesús. Al ver la fe de ellos, Jesús le dijo al paralítico: ‘Hijo mío, tus pecados te son perdonados’”. Marcos 2:4-5.
En cierta ocasión, llegaron cuatro amigos trayendo a un paralitico en una camilla. Jesús estaba enseñando dentro de una casa que estaba abarrotada de gente. Era imposible pasar por la puerta, y mucho menos con una camilla. Pero estos hombres no se iban a quedar allí parados lamentándose, no llevarían de regreso a su amigo en las mismas condiciones.
Jesús espera que demostremos verdadera fe y que nos atrevamos a enfrentar cualquier obstáculo. Que estemos dispuestos a quedarnos después de hora si es necesario para “reparar el techo”. Jesús busca hijos que se atrevan a perseverar hasta obtener las respuestas que necesitan.
Dios lo dejó claro en Jeremías 29:12-13: “Entonces me invocaréis. Vendréis y oraréis a mí, y yo os escucharé. Me buscaréis y me hallaréis, porque me buscaréis de todo vuestro corazón”.
¿Realmente estás orando con el máximo interés, buscando que Dios actúe con poder? ¿Cuánto tiempo estás dispuesto a perseverar en oración por una respuesta? A veces la respuesta puede llegar en un día, otras veces puede tomarse un poco más de tiempo. Pero Dios siempre responde las oraciones de fe de todo aquel que persevera.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Viernes 1 de septiembre, 2023
“En total comunión”
“Los gobernantes, al ver la osadía con que hablaban Pedro y Juan, y al darse cuenta de que eran gente sin estudios ni preparación, quedaron asombrados y reconocieron que habían estado con Jesús”. Hechos 4:13.
Allí estaban dos de los discípulos del Señor frente a los sabios religiosos que los intimidaban para que no hablaran más de Jesús. ¡Imposible! ¡Cómo iban a dejar de decir lo que habían visto y oído! Pedro dio un sermón tan poderoso que esta gente quedó maravillada y solo pudieron exclamar: “Han estado con Jesús”.
Cuando un discípulo ha estado con Jesús se nota en su manera de hablar. Sus palabras son dichas con autoridad. Después que Pedro y Juan sanaran al paralítico, los religiosos judíos le preguntaron: “¿Con qué potestad, o en qué nombre habéis hecho vosotros esto? ¡En el nombre de Jesucristo de Nazaret! (vs. 7,10). Ahí radica la autoridad.
Un discípulo que ha estado con Jesús manifiesta convicciones firmes. Nadie quebranta su fe porque sabe en Quién ha creído. “Sepan, pues, todos ustedes y todo el pueblo de Israel que… Jesucristo es la piedra que desecharon ustedes los constructores, y que ha llegado a ser la piedra angular” (vs. 10-11).
Un discípulo que ha estado con Jesús está dispuesto a todo por amor al Señor, incluso a perder su propia vida. Pedro y Juan fueron muy contundentes ante la intimidación de las autoridades religiosas: “Juzgad si es justo delante de Dios obedecerlos a vosotros antes que a Dios…” (v. 19). No había manera de atemorizarlos.
Un discípulo que ha estado con Jesús tiene un mensaje claro que transmitir. “Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos” (v. 12). Jesús es el único camino a Dios. Lo aceptas o lo rechazas. El mensaje no se negocia.
Necesitamos la autoridad, las convicciones firmes y la disposición que tenían los primeros discípulos de Jesús para transmitir lo que Cristo vino a ofrecer al mundo, y la manera de obtener todo esto es manteniéndonos en estrecha comunión con Él.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Jueves 31 de agosto, 2023
“¿Quién tiene el control?”
“Mejor es el que tarda en airarse que el fuerte; y el que se enseñorea de su espíritu, que el que toma una ciudad.” Proverbios 16:32.
De acuerdo con este versículo, el secreto de la fortaleza y el poder no está en controlar a otros sino en controlarnos a nosotros mismos. El rey Salomón dice que es más fuerte el que puede enseñorear su espíritu que el que toma una ciudad entera.
La palabra enseñorear en hebreo es mashal que significa “gobernar, apoderarse, dominar, regir, reinar”. Se refiere a una persona que puede tomar decisiones sin ser gobernado por sus pasiones, deseos y sentimientos. ¿Es posible? Humanamente no, sobrenaturalmente sí.
Cuando aceptamos a Cristo como Salvador y Señor de nuestra vida, el Espíritu Santo viene a morar en nosotros para transformarnos, guiarnos y ayudarnos, siempre que nos rindamos a su gobierno. No se trata de cambiar a través del autocontrol, esto no es efectivo. Solo el Espíritu Santo puede equiparnos con dominio propio.
¿Quién controla tu vida? ¿Tus deseos, los del mundo, los del diablo? ¿Se manifiesta la obra del Espíritu Santo en tu carácter, palabras y conducta? Tal vez necesitemos hacer una nueva “rendición”, entregando el control al Espíritu Santo para dar lugar a su guía permanente. “Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios, éstos son hijos de Dios.” (Romanos 8:14).
Es cierto, el mundo sería muy diferente si todos pudiéramos enseñorearnos de nuestro espíritu, pero el cambio es posible uno a uno. Que empiece por ti y por mí. Que hoy el Espíritu Santo nos controle para que nuestra vida refleje que somos verdaderos hijos de Dios.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Miércoles 30 de agosto, 2023
“Silencio”
“Esto sucedió el viernes por la tarde, el día de preparación, cuando el día de descanso estaba por comenzar. Mientras llevaban el cuerpo, las mujeres de Galilea iban detrás y vieron la tumba donde lo colocaron. Luego fueron a sus casas y prepararon especias y ungüentos para ungir el cuerpo de Jesús; pero cuando terminaron ya había comenzado el día de descanso, así que descansaron como ordena la ley.” Lucas 23:54-56
¡Qué difícil habrá sido ese sábado para todos los seguidores del Señor! Sus corazones estaban destrozados, tenían muchas preguntas dando vueltas en sus cabezas y ninguna respuesta, solo silencio, un silencio que los llevó a cuestionarse muchas cosas…
No podemos condenar a los discípulos por lo que sentían, porque muchas veces nosotros llegamos a sentir lo mismo frente a los silencios de Dios. Pero es importante recordar, que cada vez que Dios guardó silencio, siempre fue con un propósito.
Dios irrumpió en la vida de Moisés con una zarza ardiendo después de 40 años de silencio. Un ángel le llevó a Daniel una revelación poderosa después de 21 días. Los ángeles vinieron a servir a Jesús después de 40 días de ayuno y tentación. Dios envió a Jesucristo al mundo después de 400 años de silencio. Y después del sábado silencioso vino la obra culmine de Dios: Jesús resucitó de los muertos, su obra salvadora entró en acción, comenzó la dispensación de la gracia, y ahora sabemos que a la final trompeta vamos a resucitar como Él.
Tal vez te encuentres en un “sábado silencioso”, sin respuestas, sin fe ni esperanza, pero eso no significa que Dios dejó de trabajar en el plan que trazó para ti.
Alguien dijo que en toda buena interpretación musical el silencio debe tener tanto peso como el sonido porque sirve para dar fuerza al mensaje que tiene la obra. Así que si prestas atención, podrás descubrir en este tiempo de silencio lo que Dios quiere decirte y probarás una vez más, que nunca se olvidó de ti.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Martes 29 de agosto, 2023
“Su ayuda no se tarda”
“Pacientemente esperé a Jehová, y se inclinó a mí, y oyó mi clamor. Y me hizo sacar del pozo de la desesperación, del lodo cenagoso; puso mis pies sobre peña, y enderezó mis pasos. Puso luego en mi boca cántico nuevo, alabanza a nuestro Dios. Verán esto muchos, y temerán, y confiarán en Jehová.” Salmo 40:1-3.
Muchos justos ante los ojos de Dios han pasado literalmente por el “pozo de la desesperación”. José fue arrojado a un pozo por sus hermanos, Daniel a uno lleno de leones hambrientos, Jeremías fue puesto en una cisterna sucia.
La palabra “desesperación” en hebreo es el vocablo shaon, cuya raíz etimológica significa: estruendo, tumulto, estrépito. Generalmente se refiere al alboroto de la batalla, donde todo lo que se escucha está relacionado con la muerte.
En la mente del que está en esa condición solo hay miedo a sufrir pérdidas, temor a quedarse solo, encerrado para siempre, como si estuviera siendo absorbido por lodo. Así se sintió David, el rey que tenía el corazón de Dios, el dulce pastor de Israel que inspiraba a otros con sus alabanzas. Y así podríamos sentirnos nosotros…
Pero hay una forma de salir adelante y la encontramos en el mismo Salmo: Esperar en Jehová con paciencia porque el Señor vendrá en nuestro auxilio. Y dejarnos ayudar. “Me hizo sacar”. Dios tiene recursos inagotables para ayudarnos a vencer el miedo, la ansiedad y la desesperanza. Debemos estar atentos a la ayuda que Él nos envíe.
Las evidencias de haber sido librados son claras: Comenzamos a caminar seguros. Nos damos cuenta que nuestra experiencia puede ayudar a otros a buscar en Dios la salida que están necesitando. Y hay un “canto nuevo” en nuestra alma. David lo expresó así en los vs. 16 y 17: “Gócense y alégrense en ti todos los que te buscan, y digan siempre los que aman tu salvación: Jehová sea enaltecido. Aunque afligido yo y necesitado, Jehová pensará en mí. Mi ayuda y mi libertador eres tú; Dios mío, no te tardes.”
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Lunes 28 de agosto, 2023
“Permanecer unidos”
“Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer”. Juan 15:5.
Una parábola es un relato corto, una historia sencilla en donde se establece una comparación. Jesús usaba este recurso al aprovechar situaciones o elementos con los que todos estaban familiarizados para enseñarles una verdad espiritual.
En el versículo mencionado, el Señor usa la vid para establecer una comparación entre ella y nuestra vida. ¿Qué sucede cuando una rama es cortada? Se seca. ¿Una rama puede dar frutos sin estar unida a la planta? Nunca. Así sucede con nosotros y Jesús. Él es la vid verdadera, nosotros las ramas, si no dependemos de Él totalmente no hay vida espiritual. La lección es fácil de comprender y aplicar.
Nuestra relación con Cristo es vital. Sin Él, nada podemos hacer. Este “nada” es absoluto. En griego es oudeis, que significa “nadie, ninguno”. El Señor da vida y la sustenta con la palabra de su poder. Lo reconozcamos o no, si Él retirara su mano de nuestra vida viviríamos en un caos absoluto.
La idea clave en esta parábola es la permanencia. Si recurrimos a Jesús solo en los momentos de necesidad, entonces vivimos como una rama desprendida que solo intenta unirse a la vid cuando quiere uvas. La naturaleza nos enseña que esto no es posible. El fruto es el resultado de una conexión ininterrumpida con la planta.
Jesús nos quiere injertados firmemente en Él para que podamos disfrutar de la vida abundante que nos prometió y que demos mucho fruto.
¿Cómo vas a comenzar tu día? ¿Estás conectado a Cristo? Nuestra dependencia de Él es esencial. No hay nada como vivir plenamente unidos al Señor.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Domingo 27 de agosto, 2023
“Declarado justo”
“Y como insistían en preguntarle, se enderezó y les dijo: El que de vosotros esté sin pecado sea el primero en arrojar la piedra contra ella. Pero ellos, al oír esto, acusados por su conciencia, salían uno a uno, comenzando desde los más viejos hasta los postreros...” Juan 8:7,9a.
Jesús experimentó en carne propia la condenación. Lo condenaron por no guardar el sábado, por manifestar que era el Hijo de Dios, por decir que era preexistente a Abraham, por denunciar a los hipócritas, por hacer el bien y estar en contra del status quo religioso. Así que Jesús sabe lo que se siente cuando eres acusado verbalmente y condenado en el corazón. Claro, la gran diferencia está en que Jesús nunca pecó.
Pero Jesús no vino a acusar al pecador, sino a salvarlo. “Porque no envió Dios a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por él.” (Juan 3:17). Cuando los religiosos que buscaban tentar a Jesús para acusarle escucharon sus palabras, dejaron caer las piedras y se marcharon, solo quedaron la mujer y el Maestro. Entonces el Señor se acercó y le dijo: “Ni yo te condeno; vete, y no peques más.” (V.11).
La ley condena. Jesús salva. La ley es como un termómetro que solo sirve para “medir la fiebre”; solo el Señor puede curarnos. Cuando nos acercamos a Él y manifestamos verdadero arrepentimiento, perdona todos nuestros pecados y nos asegura que ya no pesa sobre nosotros ninguna condenación. “¿Quién es el que condenará? Cristo es el que murió; más aún, el que también resucitó, el que además está a la diestra de Dios, el que también intercede por nosotros.” (Romanos 8:34).
¡Eres libre por su sacrificio! No dejes que pensamientos condenatorios o acusaciones de los demás te hagan retroceder. Tu fe en Cristo te ha salvado.
“Por lo tanto, ya que fuimos declarados justos a los ojos de Dios por medio de la fe, tenemos paz con Dios gracias a lo que Jesucristo nuestro Señor hizo por nosotros. Debido a nuestra fe, Cristo nos hizo entrar en este lugar de privilegio inmerecido en el cual ahora permanecemos, y esperamos con confianza y alegría participar de la gloria de Dios.” Romanos 5:1-2.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Viernes 25 de agosto, 2023
“Y después de verte en el espejo…”
“El que escucha la palabra pero no la pone en práctica es como el que mira su cara en un espejo y en cuanto se va, se olvida de cómo era”. Santiago 1:23-24.
Santiago nos presenta esta comparación para hablarnos acerca de lo que nos puede pasar si solo leemos o escuchamos la Palabra de Dios y no hacemos nada con lo que el Señor nos enseña. Hay pasajes que nos motivan a seguir adelante, otros que nos exhortan a cuidar nuestra vida espiritual, o abandonar el pecado. ¿Qué estamos haciendo con esas verdades?
Cuando te ves despeinado, no esperas a que abra la peluquería para que hagan algo. De la misma manera, cuando Dios te habla, no puedes esperar a ir a la iglesia el domingo para comenzar a hacer cambios en tu vida. Debe haber una acción inmediata.
Tampoco deberíamos mirarnos en el espejo de la Palabra para pensar en los cambios que otros tienen que hacer. La actitud correcta es “recibir con humildad el mensaje que Dios nos ha dado” (v. 21), y aceptar ser perfeccionados.
Si vamos a compararnos con alguien, que sea con Cristo. Leemos en 2 Corintios 3:18: “Por tanto, todos nosotros, mirando con el rostro descubierto y reflejando como en un espejo la gloria del Señor, somos transformados de gloria en gloria en su misma imagen por la acción del Espíritu del Señor”.
Aquí está la clave para nuestra transformación: Dejar que el Espíritu Santo trabaje en nosotros. Aunque nos esmeremos mucho, no tenemos la capacidad de asemejarnos a Cristo con nuestras propias fuerzas, por eso el Espíritu Santo vino a morar en nosotros. Él es quien produce los cambios; nuestra parte en el proceso es someternos a Él cada día y obedecerle.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Jueves 24 de agosto, 2023
“Sinceramente, gracias”
“Yendo Jesús a Jerusalén, pasaba entre Samaria y Galilea. Y al entrar en una aldea, le salieron al encuentro diez hombres leprosos, los cuales se pararon de lejos y alzaron la voz, diciendo: ¡Jesús, Maestro, ten misericordia de nosotros! Cuando él los vio, les dijo: Id, mostraos a los sacerdotes. Y aconteció que mientras iban, fueron limpiados. Entonces uno de ellos, viendo que había sido sanado, volvió glorificando a Dios a gran voz, y se postró rostro en tierra a sus pies dándole gracias; y éste era samaritano. Respondiendo Jesús, dijo: ¿No son diez los que fueron limpiados? Y los nueve, ¿dónde están?”. Lucas 17:11-20.
Los contextos cambian, las culturas pueden ser diferentes, pero el corazón humano es siempre el mismo. A través de esta historia Jesús pone en evidencia una realidad: No todos son realmente agradecidos. ¡Solo uno de los diez sanados fue capaz de reconocer el milagro y darle gracias al Señor! La pregunta de Jesús sigue resonando hasta hoy: ¿Dónde están los otros nueve?
¿Por qué a algunas personas les resulta difícil ser agradecidas? Hay varias razones.
Hay personas que creen que merecen lo que reciben. Se miran a sí mismos y creen que todo lo obtienen por merecimiento propio, como si el mundo estuviera en deuda con ellos. ¡Parecen ser el centro del universo! Jesús siempre ha reprobado esta actitud. Los fariseos eran un típico ejemplo de esto.
Hay personas que no han aprendido a ser agradecidas. Nadie les dio ejemplo, han crecido en un ambiente egoísta, mezquino, o tal vez de supervivencia. Necesitan saber que el agradecimiento es una actitud que nace en el corazón y se manifiesta externamente.
Hay personas que solo se enfocan en sí mismas. Sus metas son egoístas. Cuando hacen regalos, piensan en la forma que le devolverán el gesto.
Si Cristo ha venido a morar en nuestro corazón y somos conscientes de lo que Él hizo por nosotros, sabemos que nada merecemos, que todo lo obtenemos por gracia.
Dar gracias enaltece al Señor y lo reconoce como la fuente de todas nuestras bendiciones. Él espera que seamos agradecidos, no que tengamos la actitud de los nueve leprosos del pasaje que fueron sanados y simplemente siguieron su camino.
El apóstol Pablo dice: “Sed agradecidos” (Colosenses 3:15). “Dad gracias en todo” (1 Tesalonicenses 5:18). “Dando siempre gracias por todo” (Efesios 5:20). Debemos tener siempre esta actitud, porque así reflejamos el carácter de Cristo.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Miércoles 23 de agosto, 2023
“¿Qué eliges?”
“Pero tú quédate aquí conmigo…” Deuteronomio 5:31.
Cerca de tres millones de israelitas salieron de Egipto rumbo a Canaán. Cuando conocieron a Dios en Sinaí se llenaron de espanto y terror por su presencia a tal punto que le dijeron a Moisés que ellos no querían hablar con Dios directamente porque morirían. “¿Para qué exponernos a morir consumidos por este terrible fuego? Si volvemos a escuchar la voz del Señor nuestro Dios, moriremos… Mejor acércate tú, y escucha todo lo que el Señor nuestro Dios te diga, y ya luego nos dirás lo que te haya comunicado…” (Deuteronomio 5:25,27).
Moisés sentía temor santo y reverente por Dios, nunca terror al punto de querer huir de su presencia por miedo a perder la vida. Él llegó a construir una relación tan estrecha con Dios que sus diálogos eran como de dos verdaderos amigos.
Cuando el pueblo prefirió tomar un intercesor en vez de relacionarse directamente con Dios, Él le dijo a Moisés: “Ve y diles que regresen a sus tiendas”. (Deuteronomio 5:30). Después de despedirlos, Dios habló al corazón de Moisés: “Pero tú quédate conmigo”. Casi puedo escuchar a Dios diciéndole: “Todos los demás se han retirado, nadie quiere pasar tiempo conmigo, ¿quieres quedarte Moisés? Tengo mucho que decirte…”.
¿Has escuchado la voz del Señor diciéndote: “Quédate conmigo”? ¿Cómo respondiste? Pienso que muchos de nosotros tenemos nuestras agendas tan cargadas de actividades y vivimos tan apurados, que finalmente el Señor nos dice: “Bueno, vuélvete a tu casa, a tus cosas… Tal vez mañana sea el día de un encuentro real…”
Creo que la mayoría vuelve a sus múltiples ocupaciones sin ninguna preocupación acerca de lo que acaba de perder, pero hay un grupo especial que escoge la buena parte que nunca les será quitada: Una experiencia maravillosa con el Padre Celestial que transforma el espíritu, el alma y hasta el cuerpo.
¿Eres de los que se “vuelven a su casa” o buscas con anhelo tiempo para estar en la presencia del Señor?
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Martes 22 de agosto, 2023
“Dios tiene tu vida en sus manos”
“Jehová el Señor es mi fortaleza, el cual hace mis pies como de ciervas, y en mis alturas me hace andar” Habacuc 3:19.
Habacuc fue un profeta que atravesó un tiempo de crisis política, financiera y económica. La situación se había vuelto insostenible en Israel, pero a diferencia de aquellos que pueden enloquecer en medio de una situación así, Habacuc fue a su casa a orar, meditar y esperar en Dios. Y la respuesta llegó.
Observe cómo describe el profeta su encuentro con Dios. “Oh Jehová, he oído tu palabra, y temí. Oh Jehová, aviva tu obra en medio de los tiempos, en medio de los tiempos hazla conocer; en la ira acuérdate de la misericordia… Su gloria cubrió los cielos, y la tierra se llenó de su alabanza. Y el resplandor fue como la luz; rayos brillantes salían de su mano, y allí estaba escondido su poder”. (Habacuc 3:2-4).
Después de ese encuentro, todo cambió para Habacuc. Así expresó lo que había en su corazón: “Aunque la higuera no florezca, ni en las vides haya frutos, aunque falte el producto del olivo, y los labrados no den mantenimiento, y las ovejas sean quitadas de la majada, y no haya vacas en los corrales; con todo, yo me alegraré en Jehová, y me gozaré en el Dios de mi salvación.” (Hab. 3:17-18).
Las circunstancias no controlaron los sentimientos de Habacuc, sino la fe en la capacidad de Dios para darle una solución a cualquier situación.
Cuando los problemas que atraviesas te parezcan demasiado grandes, ve a Dios y deja que te recuerde quién está a cargo de tu vida.
“Jehová el Señor es mi fortaleza, el cual hace mis pies como de ciervas, y en mis alturas me hace andar” Habacuc 3:19.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Lunes 21 de agosto, 2023
“Secarnos o recuperar nuestra vitalidad”
“Y todos los pozos que habían abierto los criados de Abraham su padre en sus días, los filisteos los habían cegado y llenado de tierra. Y volvió a abrir Isaac los pozos de agua que habían abierto en los días de Abraham su padre, y que los filisteos habían cegado después de la muerte de Abraham; y los llamó por los nombres que su padre los había llamado.” Génesis 26:15,18
En Canaán, para encontrar agua potable que garantizará la subsistencia, había que cavar pozos profundos. Cuando Isaac va a ver los pozos que habían sido abiertos por los criados de su padre, encuentra que los filisteos los habían segado. Envidiaban tanto a Isaac, que decidieron complicar su vida tapando las fuentes de agua. Pero lejos de ser amedrentado por sus enemigos, él recordó las promesas que Dios les había dado y decidió recuperar los pozos perdidos. Así lo hizo, y además encontró pozos nuevos para poder asentarse en ese territorio.
Metafóricamente hablando, nuestro corazón también puede ser “tapado” por nuestro enemigo. Desde donde debería fluir Agua Viva, ahora solo hay un montón de tierra; y a menos que identifiquemos lo que está obstruyendo el fluir de Cristo en nuestras vidas, podemos secarnos y morir espiritualmente.
Hay muchas cosas que pueden estar impidiendo que ese río de Dios fluya en ti: Desaliento, desilusión, sentimientos de soledad, pereza, frustración, cansancio…
¡Es hora de levantarte y recuperar lo perdido! No permitas que Satanás te siga engañando. Él quiere verte morir de sed, pero el Señor espera que lo resista. Dios te ha dado poder para vencer.
El Señor está esperando que te vuelvas a Él de todo corazón. Estás solo a un paso de que se cumpla su Palabra: “El que cree en mí, como dice la Escritura, de su interior correrán ríos de agua viva.” (Juan 7:38). Él es el único que puede recupera tu corazón y saciar tu sed.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Domingo 20 de agosto, 2023
Puedes ver el sermón de hoy a partir de las 11 am haciendo click aquí.
¡Dios te bendiga!
No olvides seguir dependiendo de Él.
“Jehová estará con vosotros, si vosotros estuviereis con él; y si le buscareis, será hallado de vosotros; mas si le dejareis, él también os dejará”. 2 Crónicas 15:2b.
El rey Asa y su ejército venían de obtener la victoria más importante. Dios había destruido al ejército enemigo de ¡un millón de soldados! Venían eufóricos celebrando el triunfo, y a su regreso a Jerusalén les sale al encuentro Azarías, un profeta de Dios que tenía un mensaje de parte de Él: “Oídme, Asa y todo Judá y Benjamín: Jehová estará con vosotros, si vosotros estuviereis con él; y si le buscareis, será hallado de vosotros; mas si le dejareis, él también os dejará” (v. 2). Las palabras de Azarías, les hizo recordar Quién les había dado la victoria y de Quién debían seguir dependiendo.
Muchas veces nos sucede que después de experimentar una victoria espiritual o recibir una respuesta milagrosa de Dios, nos olvidamos de seguir dependiendo de Él. Es fácil llegar a pensar que tenemos derecho permanente al favor y la bendición de Dios aunque no le busquemos. Sin embargo, si queremos su respaldo, necesitamos acudir a Él en todo momento.
Para convertirnos en las personas que Dios quiere que seamos y cumplir con su voluntad en nuestra vida, debemos sumergirnos en una relación de dependencia diaria y no circunstancial. Si descuidamos nuestra relación con el Señor, nos privamos de todos los beneficios que Él promete a aquellos que le buscan con interés.
El profeta Jeremías lo expresó de esta manera: “Mi porción es Jehová, dijo mi alma; por tanto, en él esperaré. Bueno es Jehová a los que en él esperan, al alma que le busca”. (Lamentaciones 3:24-25). Estas son las palabras de alguien que ha buscado al Señor y le ha hallado. De alguien que sabe que fuera del Señor no habrá nada que satisfaga verdaderamente su vida.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Viernes 18 de agosto, 2023
“Pasado, presente y futuro en Sus manos”
“Ahora escuchen con cuidado, ustedes los que dicen: ‘Hoy y mañana iremos a tal o cual ciudad, y estaremos allá un año, y haremos negocios, y ganaremos dinero’. ¡Si ni siquiera saben cómo será el día de mañana! ¿Y qué es la vida de ustedes? Es como la neblina, que en un momento aparece, y luego se evapora. Lo que deben decir es: ‘Si el Señor quiere, viviremos y haremos esto o aquello’.” Santiago 4:13-15.
Santiago, el hermano de Jesús, siempre fue muy directo. Lo sabemos por sus intervenciones en la iglesia primitiva, pero también por su epístola. Con total claridad nos dice que debemos tener cuidado de la forma en que nos referimos al mañana.
Uno de los errores que podemos cometer, es estar muy confiados de que tendremos el día de mañana y manejarnos como si no estuviéramos regidos por lo que Dios ha determinado. Por supuesto que también la Biblia nos dice que debemos planificar, ser organizados, y prepararnos para el futuro, pero la intención de Santiago es recordarnos que el futuro siempre estará en las manos de Dios. Nunca debemos olvidar esto.
Antes de planificar debemos orar preguntándole al Señor qué tiene pensado para nosotros. A veces Dios nos mostrará claramente lo que debamos hacer, otras veces nos impulsará a avanzar hasta llegar a la puerta abierta, y en otras ocasiones, esperará que nosotros avancemos hasta que Él nos detenga con una puerta cerrada. Una puerta cerrada no significa que nos hemos equivocado en todo lo que hemos hecho. El apóstol Pablo había predicado en muchos lugares, pero cuando avanzó hacia la región de Asia y Bitinia, el Espíritu Santo se lo prohibió (Hechos16:6-10). Luego le mostró otra puerta abierta y partió para Macedonia.
El futuro no nos debe provocar ansiedad, como nos exhortó el Señor (Mateo 6:25), pero tampoco debemos llegar a creer que nosotros tenemos el control total de lo que pasará. Ahí es cuando Santiago nos dice que debemos sujetarnos a la voluntad de Dios.
Cuando te toque planificar para mañana, recuerda que tus planes están en las manos del Señor. No uses la expresión: “Si Dios quiere” y luego en la práctica te guíes por tus deseos y percepciones. Si conoces cómo Dios ha obrado en el pasado, entonces confía que sabrá guiar tu futuro.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Jueves 17 de agosto, 2023
“Nos libra de nuestras aflicciones”
“Porque Jehová vio que Israel sufría una amarga aflicción, y que no había siervo ni libre, ni nadie que ayudara a Israel.” 2 Reyes 14:26.
Israel se encontraba en una condición deplorable. Sus líderes eran corruptos, inmorales, idólatras, y el pueblo imitaba a los cananeos y seguía a sus dioses. Las consecuencias fueron desastrosas, a tal punto que nadie quería ayudar a Israel. Ni siquiera les convenía a los pueblos vecinos hacer alianzas con los hebreos porque no tenían nada que ofrecer. Estaban en “amarga aflicción”.
La palabra aflicción usada aquí es el vocablo hebreo oni que significa “depresión, miseria, angustia, pobreza, abatir, humillar, quebrantar, deshonrar”. El pueblo estaba experimentando todo esto: pobreza espiritual y económica, eran menospreciados por todos, y habían caído en depresión. No había salida.
Dios era el único que podía ayudar a Israel. Siempre es así, Él ve la aflicción de su pueblo y acude a socorrerlo. Su misericordia y compasión no le permiten permanecer quieto.
¡Qué incomprensible es la misericordia de Dios! ¿Crees que su pueblo merecía esta salvación? Claro que no. De la misma manera sucede con nosotros, nunca seremos merecedores de la salvación de Dios, de sus rescates oportunos, de su benevolencia, de sus bendiciones diarias.
¿Por qué Dios se mueve con esa compasión? Porque Él realmente ama a su pueblo, no lo puede ver en amarga aflicción. Dios siempre nos está buscando para darnos oportunidad de arrepentimiento y restaurar nuestra relación con Él. ¡Sigue siendo Emanuel, Dios con nosotros!
Siempre que nos volvamos sinceramente al Señor, nos perdonará y nos guiará por el camino correcto. Él está atento a nuestro clamor. “Entonces clamaron a Jehová en su angustia, y los libró de sus aflicciones.” (Salmo 107:6).
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Miércoles 16 de agosto, 2023
“Un instrumento de victoria”
“Después de Aod fue Samgar, hijo de Anat, quien rescató a Israel. En una ocasión mató a seiscientos filisteos con una aguijada para bueyes”. Jueces 3:31.
Después que murió Josué, el sucesor de Moisés que introdujo a Israel en la tierra prometida, Dios levantó jueces para liberar al pueblo de la opresión de sus enemigos. Samgar fue uno de ellos. Es interesante notar que el significado de su nombre en hebreo es “El que huye”. El nombre que le habían puesto sus padres no concordaba con el llamado de Dios para él. Samgar tuvo que ir en contra de su propia identidad para ser vencedor. Yo le cambiaría el nombre por “No-más-Samgar”. ¡Qué valiente resultó este juez!
Durante una batalla, este campesino mató a 600 enemigos solo con una vara larga con punta de hierro que usaba para arrear a los bueyes. Seiscientas personas son un gran batallón. Si recuerdas, este era el número del ejército de David antes de ser nombrado rey. ¡Una persona puesta en las manos de Dios puede más que un numeroso batallón de soldados adiestrados para la guerra!
Presta atención al instrumento con el que libró esa batalla, una aguijada. Por favor, busca en Google una imagen de este instrumento y podrás decir conmigo: “¿Con esto mató a 600 filisteos…?” ¡Tremendo!
¿Y por qué una aguijada y no una espada? Es que los filisteos siempre le quitaban las armas y hasta los herreros a Israel. Entonces, como no había espadas, había que usar lo que tuvieran a mano. El instrumento que servía para que los bueyes hicieran el trabajo ¡se convirtió en un arma mortal!
Cuántas veces nos sentimos como una aguijada cuando el Señor nos llama a hacer algo para Él y decimos: “Yo no sirvo para esto”, “no soy apto para este trabajo”, “nunca enfrenté a grandes desafíos…”. Cuando el Señor nos llama a hacer algo, no se trata de nosotros, sino de Quien nos capacita. No importa el instrumento cuando es Dios quien da la fuerza y el poder.
Cuanto más insignificante es el instrumento, más gloria trae al Señor. Sansón mató a mil con una quijada de burro, Dios habló a Balaam por medio de una burra, una simple piedra derribó a Goliat. El poder de Dios es el que hace útil a un simple instrumento.
Dios quiere usarte para su gloria. No huyas más de su llamado. Confía en quién te dice el “Yo Soy está contigo”. ¡Todo lo puedes en Cristo que te fortalece!
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Martes 15 de agosto, 2023
“Nuestra identidad celestial”
“Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de Aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable; vosotros que en otro tiempo no erais pueblo, pero que ahora sois pueblo de Dios; que en otro tiempo no habíais alcanzado misericordia, pero ahora habéis alcanzado misericordia”. 1 Pedro 2:9-10.
¡Qué privilegio tremendo tenemos los que somos hijos de Dios! Antes de recibir a Cristo como Salvador y Señor de nuestras vidas estábamos en tinieblas, sin rumbo, sin esperanza a causa del pecado, pero Jesús nos dio vida y ahora somos su pueblo. ¡Aleluya!
En este pasaje, el apóstol Pedro menciona cuatro privilegios alcanzados por los redimidos.
Somos “linaje escogido”. Ahora pertenecemos a la familia de Abraham por la fe. Somos llamados hermanos junto con Cristo. ¡Bendita genealogía espiritual! Ahora Dios es nuestro Padre. Desde la eternidad Él nos eligió para que fuésemos suyos, “según nos escogió en él antes de la fundación del mundo” (Efesios 1:4a). Cada día Dios está concentrado en ti, pues eres su hijo amado, su escogido, heredero de todas las riquezas espirituales.
“Real sacerdocio”. Bajo el antiguo pacto, la realeza y el sacerdocio estaban separados. Ahora nosotros, en la persona de nuestro Rey de reyes y Señor de señores, somos reyes y sacerdotes para Dios.
“Nación santa”. Somos una nación porque estamos bajo su gobierno. Al ser santa significa que está apartada y libre de destrucción como consecuencia del pecado. Cristo ahora es nuestra justicia.
“Pueblo adquirido”. Cristo fue el que nos adquirió, el que pagó el precio de nuestro rescate. Su obra de redención requirió el precio del derramamiento de su sangre. Nuestro valor depende de Aquel a quien le pertenecemos. Eres su posesión exclusiva y ¡eres su especial tesoro!
Estos privilegios tan altos no tienen el propósito de ser lucidos o simplemente hablar de ellos, sino que deberían afectar diariamente la manera en que vivimos y el servicio que llevamos a cabo al anunciar las virtudes de Aquel que ha hecho grandes cosas por nosotros.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Lunes 14 de agosto, 2023
“Renovación en Su presencia”
“Y aquel que tenía semejanza de hombre me tocó otra vez, y me fortaleció, y me dijo: Muy amado, no temas; la paz sea contigo; esfuérzate y aliéntate. Y mientras él me hablaba, recobré las fuerzas, y dije: Hable mi señor, porque me has fortalecido”. Daniel 10:18-19.
Después de haber leído y escudriñado los escritos del profeta Jeremías, Daniel sabía que estaba cerca el tiempo de la restauración de Israel. Después de setenta años, el pueblo de Dios volvería a su tierra y se levantaría otra vez como nación. Pero, ¿estaba preparado espiritualmente el pueblo para enfrentar esta nueva etapa? ¿Tenían los recursos necesarios para levantarse nuevamente?
El profeta Daniel había buscado a Dios por espacio de tres semanas para tener respuestas y estaba exhausto, a tal punto que no podía ponerse en pie. Ya no era el adolescente que había sido traído de Jerusalén a Babilonia.
¡Pero Dios siempre interviene a tiempo y envía un ángel para darle nuevas fuerzas! Con cada palabra que escuchaba, Daniel sentía que estaba siendo renovado. Veamos con atención cuáles fueron esas palabras:
“Muy amado”: Todo hijo de Dios debe saber que es muy amado por el Padre Celestial. La Biblia dice que Él no hace diferencias, el amor que te tiene a ti es el mismo que le tuvo a Daniel. Cuando recordamos cuánto nos ama y experimentamos ese amor aun en los pequeños detalles de nuestro día a día, aumenta nuestra motivación para seguir adelante.
“No temas, la paz sea contigo”: Cuando la paz del Señor llena nuestra alma, los temores se van. Cuando Jesús nos dice que nos da su paz, también nos dice “no se turbe vuestro corazón ni tenga miedo” (Juan 14:27). ¡Su paz nos hace vivir confiados bajo su cuidado y protección!
“Esfuérzate y aliéntate”: Hay una parte que debemos hacer nosotros. Dios renueva nuestras fuerzas, pero nosotros debemos decidir seguir adelante. Si nos dice que debemos levantarnos, eso es lo que nos toca hacer. Si nos dice “esfuérzate”, significa que debemos emplear esas fuerzas en lo que nos pida. Si nos dice “aliéntate”, debemos creer que el Espíritu Santo nos dará el apoyo necesario para seguir adelante.
“Mientras él hablaba recobré las fuerzas”. No necesitas que venga literalmente un ángel del cielo a fortalecerte porque Dios ya te ha dado las palabras que renovarán tu vida como la de Daniel. Ahora debes creerlas para ser fortalecido.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Domingo 13 de agosto, 2023
Puedes ver el sermón de hoy a partir de las 11 am haciendo click aquí.
¡Dios te bendiga!
“Venciendo gigantes”
“Porque únicamente Og rey de Basán había quedado del resto de los gigantes. Su cama, una cama de hierro, ¿no está en Rabá de los hijos de Amón? La longitud de ella es de nueve codos, y su anchura de cuatro codos, según el codo de un hombre”. Deuteronomio 3:11.
El rey Og dormía en una cama que medía más de ¡13 pies de largo por 6 pies de ancho! Si estás acostumbrado al sistema métrico, son 4,11 metros de largo por 1,82 m de ancho. ¿Puedes hacerte una idea de su tamaño? ¡Media un metro y medio más que Goliat!
Este rey intimidaba con solo verlo. ¿Alguien podría tener el valor suficiente para enfrentarlo? Sí, si a esa persona Dios le había prometido la victoria; pero había que creer la promesa. La generación de israelitas que salió de Egipto no pasó la prueba y murieron en el desierto. Pero sus hijos, la siguiente generación, creyeron y avanzaron confiando en Dios.
Casi al final de los 40 años de peregrinación por el desierto, el pueblo de Israel se encontraba al este del Jordán, y el rey Og los enfrentó. Allí mismo Dios le habló a Moisés y le dijo: “No le tengas miedo, porque en tu mano lo he entregado, a él y a todo su pueblo, y a su tierra; y harás de él como hiciste de Sehón rey de los amorreos, que habitaba en Hesbón. E hirieron a él y a sus hijos, y a toda su gente, sin que le quedara uno, y se apoderaron de su tierra” (Números 21:34-35). ¡Qué promesa! Si Dios iba delante de ellos, estaba todo dicho.
La generación que Dios levantó en el desierto aprendió a tener mentalidad conquistadora, así que arrasaron con Og y con todos los que se les opusieron. “El resto de Galaad, y todo Basán, del reino de Og, toda la tierra de Argob, que se llamaba la tierra de los gigantes, lo di a la media tribu de Manasés”. (Deuteronomio 3:13). La tierra de los gigantes de Anac ahora era la tierra de los ¡gigantes de Dios!
¿Estás enfrentando una situación desbordante, inmensa, imposible de vencer? Las victorias sobre el enemigo y las circunstancias que parecen más grandes que nuestras posibilidades vienen cuando avanzamos con fe en las promesas de Dios.
Recuerda las veces en las que el Señor intervino y te dio la victoria. No mires con miedo a aquello que te está intimidando, mira al Señor. Siempre Él es más grande. ¡Dios es el Poderoso Gigante que pelea por ti!
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Viernes 11 de agoto, 2023
“Hay respuesta para el que invoca Su Nombre”
“Y todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo.” Hechos 2:21.
Víctor Polischuk fue un inmigrante ucraniano que se refugió en el norte de Argentina y allí comenzó su historia cristiana. Mientras estaba trabajando en el campo fue pateado por un caballo que lo dejó tendido en el suelo sin poder moverse, solo podía tocarse el pecho y notar que varias de sus costillas estaban quebradas. Inmóvil, pudo recordar un versículo que había aprendido en la iglesia ortodoxa de su país, y con toda su alma exclamó: “¡Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado?!” En ese momento, una luz del cielo tocó su cuerpo y sus costillas fueron sanadas. Se levantó maravillado por lo que había experimentado. ¡El Señor respondió a alguien que había invocado su Nombre!
Inmediatamente buscó una iglesia y allí entregó su vida a Cristo, se bautizó, fue lleno del Espíritu Santo y Dios comenzó a usarlo. Predicaba el evangelio en todos los pueblos vecinos. Ponía sus manos sobre los enfermos y eran sanados, endemoniados liberados, creyentes eran llenos del Espíritu Santo. ¡Dios se movía con poder!
En cierta ocasión, lo invitaron a compartir el evangelio en un lugar al que solo se podía llegar caminando. Después de caminar varias horas, exhausto, se recostó y se quedó dormido. De pronto lo despertó un ángel y recibió fuerzas sobrenaturales para seguir hasta el pueblo donde compartiría la Palabra. Al llegar, esa noche, Dios hizo cosas extraordinarias: salvación, sanidad y liberación. ¡Dios seguía manifestándose a través de un simple hombre que invocaba el Nombre del Señor!
Una noche, ya anciano y parapléjico, le pidió a su familia que abrieran las ventanas de su habitación y les dijo que ángeles habían venido a llevarlo a la presencia de Dios. En ese mismo instante falleció. ¡Tal era su intimidad con el Señor!
¿Por qué te conté la historia de mi abuelo? Porque es alguien que conocí, con sus virtudes y defectos. Un hombre sencillo pero lleno de fe que invocó el Nombre del Señor y fue salvo. Su vida me sigue recordando que Jesucristo es el mismo, ayer, hoy y por los siglos. El mismo Dios que estuvo con Moisés, Elías, Juan el Bautista, Víctor, está con todo aquel que le invoca de corazón.
Si estás pasando momentos de desesperación, sin respuestas, sin salida, invoca su Nombre, clama a Él. Ten la seguridad de que te está escuchando y entrará en acción.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Jueves 10 de agosto, 2023
“Raíces de confianza”
“Bendito es el hombre que confía en el Señor, cuya confianza es el Señor. Será como árbol plantado junto al agua, que extiende sus raíces junto a la corriente; no temerá cuando venga el calor, y sus hojas estarán verdes; en año de sequía no se angustiará ni cesará de dar fruto”. Jeremías 17:7-8.
Los expertos en árboles recomiendan estudiar bien los terrenos antes de decidir dónde plantarlos. No es lo mismo un árbol plantado junto al agua que uno plantado en un terreno que depende exclusivamente de la lluvia para crecer. Y si el suelo está compuesto de piedra caliza, las raíces no llegan a tener profundidad y difícilmente el árbol resista vientos fuertes. En cambio, si se planta en un terreno fértil, con suficiente agua, crecerá y desarrollará raíces profundas que le permitan resistir hasta vientos huracanados.
Así es el que confía en Dios. Sus raíces llegan a ser tan profundas que nunca le falta el agua que lo alimente. Puede cambiar el clima e incluso atravesar temporadas de sequías, pero él siempre permanece verde.
También es cierto que los árboles que más crecen y que más años viven son los que están junto a otros árboles. Árboles débiles son protegidos por otros más fuertes. ¡Qué buena enseñanza para los cristianos! Crecemos más fuertes y más sanos cuando estamos juntos recibiendo el alimento espiritual que el Señor proporciona a su Iglesia.
Pero si no confiamos en Dios y actuamos con autosuficiencia o dependiendo de lo que nos promete el hombre, Jeremías dice que terminaremos siendo como una “retama” en el desierto, que gira y gira llevada por el viento sin ningún destino certero. “Así ha dicho Jehová: Maldito el varón que confía en el hombre, y pone carne por su brazo, y su corazón se aparta de Jehová. Será como la retama en el desierto, y no verá cuando viene el bien, sino que morará en los sequedales en el desierto, en tierra despoblada y deshabitada” (vs. 5-6).
Dios quiere que crezcamos fuertes, sanos y que demos fruto en todo tiempo. Eso es posible si estamos unidos a Él, alimentando nuestro espíritu diariamente. La oración, la Palabra, la comunión con el Cuerpo de Cristo, el servicio, nutren nuestra alma y nos permiten estar firmes y confiados cuando llega la hora de la prueba.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Miércoles 9 de agosto, 2023
“Victoria en cada prueba”
“En lo cual vosotros os alegráis, aunque ahora por un poco de tiempo, si es necesario, tengáis que ser afligidos en diversas pruebas”. (1 Pedro 1:6).
Como hijos de Dios nos alegramos por la esperanza viva que tenemos desde el momento en que recibimos a Cristo como Salvador y Señor de nuestras vidas. Pedro dice que nos produce gozo saber que tenemos una herencia en los cielos, pero mientras tanto, y si es necesario, debemos aceptar que podemos pasar por diversas pruebas.
La palabra griega para “diversas” es poikilos que significa “multicolor, variado, de diversas formas”. La raíz de la primera sílaba es pik, que en español sería la palabra “pictórico”; de ahí que signifique “diverso” o “multicolor”. Pedro está usando esta palabra para decirnos que los creyentes en Cristo podemos pasar por diferentes pruebas.
A veces tenemos la idea de que toda prueba es un castigo, una disciplina o consecuencia de algo que hicimos mal. Pero Pedro nos dice: “Amados, no se sorprendan de las pruebas de fuego por las que están atravesando como si algo extraño les sucediera. En cambio, alégrense mucho, porque estas pruebas los hacen ser partícipes con Cristo de su sufrimiento, para que tengan la inmensa alegría de ver su gloria cuando sea revelada a todo el mundo”. (1 Pedro 4:12-13).
Cuando las situaciones difíciles ponen a prueba nuestro testimonio, la verdad de la Palabra, nuestra posición como hijos de Dios, cuando debemos soportar desprecios, burlas y somos confrontados por la fe que tenemos, dice Pedro que debemos alegrarnos porque estamos pasando por lo mismo que Cristo pasó y también saldremos victoriosos.
Para cada prueba hay una manifestación especial de la gracia de Dios. Es muy interesante notar que el apóstol Pedro en su primera carta solo usa dos veces la palabra poikilos. La primera para describir la variedad de pruebas, y la segunda para expresar que la gracia de Dios también es muy diversa, “multicolor”. “la multiforme gracia de Dios.” (1 Pedro 4:10). ¡Hay una manifestación de la gracia de Dios que se ajusta perfectamente al tipo de prueba que estemos pasando!
El Señor no siempre actúa de la misma manera en cada tribulación. A veces nos da una salida rápida, otras veces nos capacita con fortaleza para soportarla. En algunas pruebas sabemos exactamente lo que Dios quiere hacer, en otras no. A veces nos envía ayuda, y en otras ocasiones solo contaremos con su presencia. Nuestras pruebas pueden ser muy variadas, pero la gracia de Dios también lo es.
Pedro, al final de su primera carta, nos dice con qué propósito el Señor aplica su multiforme gracia a nuestras pruebas. “Mas el Dios de toda gracia, que nos llamó a su gloria eterna en Jesucristo, después que hayáis padecido un poco de tiempo, él mismo os perfeccione, afirme, fortalezca y establezca.” (1 Pedro 5:10).
¿Cómo estás viendo tu prueba? ¿Te parece que nadie ha pasado por lo que tú estás pasando? ¿Crees que es tan difícil que no habrá ayuda sobrenatural suficiente para sacarte de esa situación? Hoy el Señor quiere recordarte que Él siempre prepara una salida. Su gracia es abundante y te ayudará a salir victorioso una vez más.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Martes 8 de agosto, 2023
“Ahora veo”
“Respondió el hombre, y les dijo: Pues esto es lo maravilloso, que vosotros no sepáis de dónde sea, y a mí me abrió los ojos”. Juan 9:30.
Cuando esté en la eternidad con Cristo y su Iglesia, voy a sentarme al lado de este hombre ciego sanado por Jesús para que me cuente esta historia con lujo de detalles. He leído docenas de veces este pasaje y siempre disfruto el relato. Puedo imaginarme la escena y me gozo por lo que hizo Jesús en él. También admiro su valentía y sagacidad para enfrentarse a los religiosos hipócritas de su época.
Por favor, lee todo el capítulo 9 del evangelio de Juan, despacio, frase por frase, y no te pierdas ningún detalle de esta maravillosa historia. El relato comienza con una pregunta para Jesús. La gente tenía la idea que si alguien nacía con alguna discapacidad o enfermedad era como consecuencia del pecado sus padres. Tremendo error que Jesús se encargó de corregir. El Señor dijo que esta enfermedad tenía el propósito de glorificar a Dios. ¡Y vaya si lo hizo!
Creo que este ciego jamás se imaginó los problemas que iba a enfrentar al ser sanado. Los religiosos de esa época lo abrumaron con preguntas, investigaron la vida de sus padres, y al final ¡lo expulsaron de la sinagoga! Para mucha gente, su situación era mejor cuando estaba ciego que ahora que había sido sanado por el Mesías. Increíble…
Este hombre confrontó a los religiosos de tal forma que hasta hay detalles de humor y sarcasmo que me hacen reír. “¿Por qué me preguntan tanto? ¿Quieren ustedes también hacerse discípulos de Jesús…?” Uf, eso los enfureció, y siguieron acosándolo: “¡Nosotros no sabemos de dónde es Jesús ni de dónde procede!” “¿En serio? ¿Ustedes los sabelotodo no saben quién es el que me sanó milagrosamente…?” ¡Tenían al Mesías, el Hijo de Dios frente a sus narices y no le conocían!
Hoy hay muchos que pueden hablar de Jesús; conocen sus historias pero no le conocen a Él. En contraste, hay personas que con sencillez y humildad se han acercado al Señor y les ha dado vista espiritual. Son los que, como el ciego sanado, pueden adorarle porque han conocido al Salvador de sus vidas. “Y él dijo: Creo, Señor; y le adoró” (v. 38).
Que el Señor nos use para guiar hacia Él a los que están ciegos espiritualmente porque es el único que puede darles vista. Él dijo: “El Espíritu del Señor está sobre mí por cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas a los pobres; me ha enviado a sanar a los quebrantados de corazón; a pregonar libertad a los cautivos, y vista a los ciegos…” (Lucas 4:18a).
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Lunes 7 de agosto, 2023
“No cambies tu enfoque”
“…Corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante, puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe…” Hebreos 12:1-2.
La vida cristiana es una maratón que debe correrse con paciencia. Llegan a la meta los que perseveran, los que mantienen el ritmo y no se desesperan cuando ven que otros parecen ir más rápido o se salen del camino. En esta carrera hay premio para todos los que cruzan la línea de llegada y la única manera de lograrlo, de acuerdo con el autor de Hebreos, es manteniendo la mirada en Jesús durante todo el trayecto.
La frase “puestos los ojos” significa atención no divida, alejar la mirada de todas las distracciones con el fin de contemplar a Cristo. Para correr bien debemos mantener nuestros ojos en el Señor. Si nos miramos a nosotros mismos o contemplamos las circunstancias que nos rodean, vamos a tropezar y caer.
Si le preguntaras a Pedro por qué se hundió mientras caminaba sobre el agua te diría que fue cuando se enfocó en las olas en lugar de seguir mirando al Señor. Si le preguntaras a Moisés por qué la generación que salió de Egipto no entró a la tierra prometida te diría que fue porque se concentraron en las dificultades antes que en Dios. Cada vez que sufrimos un tropiezo en nuestra carrera es porque cambiamos nuestro enfoque.
¿Estás corriendo bien la carrera? ¿Cómo estás respondiendo a las presiones a lo largo del camino? Recuerda que Cristo siempre corre con nosotros. Cuando nos sometemos al Señor y seguimos su dirección nos mantenemos en el camino correcto. Así que no cambies tu enfoque, sigue con los ojos puestos en el Señor y asegúrate de llegar a la meta y recibir tu recompensa.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Domingo 6 de agosto, 2023
“Fe para preservación del alma”
“Pero cuando venga el Hijo del Hombre, ¿hallará fe en la tierra?” Lucas 18:8.
Esta declaración aparece al final de la parábola de la viuda y el juez injusto. El propósito de este relato fue animar a sus oyentes a orar siempre y no desmayar. La oración es fundamental para mantenernos firmes en la fe.
La pregunta que hace el Señor en este versículo cobra mucho más sentido en la medida que nos estamos acercando a los últimos tiempos. Una de las señales es que “el amor de muchos se enfriará” y otros tantos “apostatarán de la fe”. ¿No estamos siendo testigos de esto? Si el Señor viniera hoy, ¿hallaría verdadera fe en la tierra?
Si nuestra fe está basada en la inmediatez de las respuestas a nuestras peticiones, podemos perderla en cualquier momento. La verdadera fe sabe esperar en Dios hasta las últimas consecuencias.
Si amoldamos nuestra fe al sistema, comenzamos a perderla. El mundo, regido por Satanás, tiene principios contrarios a los del Señor. El enemigo es el padre de la mentira y su objetivo es que rechacemos la verdad de Dios. Por eso el apóstol Pablo nos aconseja en Romanos 12:2ª: “No imiten las conductas ni las costumbres de este mundo, más bien dejen que Dios los transforme en personas nuevas…”.
También la Biblia dice que en los últimos tiempos habrá muchos falsos profetas y falsos maestros que harán apartar a la gente de la verdad y la fe. La misma Iglesia de Cristo se volverá tibia en su relación con Dios.
Judas, el hermano de Jesús, nos exhorta a contender ardientemente por la fe: “Amados, por la gran solicitud que tenía de escribiros acerca de nuestra común salvación, me ha sido necesario escribiros exhortándoos que contendáis ardientemente por la fe que ha sido una vez dada a los santos” (1:3).
Sólo la fe verdadera persevera a pesar de las dificultades, los obstáculos y la oposición. Te pregunto: ¿Cómo está tu fe?
Que todos los que esperamos confiados la venida del Señor, seamos hallados con una fe viva y arraigada en Su Palabra. “Pero nosotros no somos de los que retroceden para perdición, sino de los que tienen fe para preservación del alma”. Hebreos 10:39.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Viernes 4 de agosto, 2023
“Encuentros impostergables”
“La comunión íntima de Jehová es con los que le temen, y a ellos hará conocer su pacto”. Salmos 25:14.
Todos podemos saber acerca de Dios por lo que nos dice la Biblia, por lo que han investigado los teólogos o a través de las experiencias de otros. Pero no todas las personas tienen intimidad con Dios. Esto está reservado para los que le temen y le obedecen.
La expresión “comunión íntima” en hebreo es la palabra sod que significa “compañía de dos o más personas que comparten secretos, que se sientan juntas, que se comunican íntimamente”. Es mucho más que “saber algo del otro”.
Las relaciones humanas se construyen, entre otras cosas, dentro de un marco en donde ambas partes deben ser flexibles a los deseos del otro para dar lugar a la armonía y la estabilidad. Pero la comunión íntima con Dios es diferente. No es una relación donde Dios baja sus expectativas y demandas para satisfacer nuestros deseos, sino que nosotros elevamos nuestros estándares y deseos para tener comunión con Él.
La comunión íntima con Dios comienza a construirse aquí y ahora. La puerta de entrada es Cristo, nuestro Salvador, el creador de un Nuevo Pacto a través de su sacrificio, y el Espíritu Santo es quien nos enseña a construirla día a día.
Dios nos dio un consejo bien práctico para compartir comunión íntima con Él: “Mas tú, cuando ores, entra en tu aposento, y cerrada la puerta, ora a tu Padre que está en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público”. (Mateo 6:16). Deja lo que estás haciendo, ve a un lugar privado, y comienza a orar y buscar su presencia. Escucha lo que quiera decirte. Comparte tus sentimientos con Él. Permite que te enseñe. Y si te comparte un secreto, no siempre es para que lo hagas público.
Cuando comienzas a compartir comunión íntima con Él, tu alma encuentra todo lo que necesita. David, en el Salmo 63:5 menciona de manera muy gráfica lo que experimentaba al estar en su presencia: “Mi alma queda del todo satisfecha, como si comiera los mejores platillos, y mis labios te aclaman jubilosos”.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Jueves 3 de agosto, 2023
“Que no se apague el fuego”
“Y el fuego encendido sobre el altar no se apagará, sino que el sacerdote pondrá en él leña cada mañana...” Levítico 6:12.
La inauguración del tabernáculo fue una celebración maravillosa. Todo estaba en orden. El holocausto estaba listo… solo faltaba el fuego. Entonces Dios irrumpió con su presencia y cayó fuego del cielo sobre el altar. “Y salió fuego de delante de Jehová, y consumió el holocausto con las grosuras sobre el altar; y viéndolo todo el pueblo, alabaron, y se postraron sobre sus rostros” (Levítico 9:24).
El altar del holocausto tenía el fuego de Dios, pero a partir de ese momento el pueblo debía mantenerlo encendido continuamente. No importaba en qué lugar del desierto se encontrara el tabernáculo, los sacerdotes debían ocuparse de eso.
Dios les dijo que debían reponer la leña cada mañana. No era al mediodía, ni a la tarde ni a la noche. Lo primero que debían hacer al comenzar el día era añadir leña al fuego, después podían seguir con el resto de sus obligaciones.
Gracias al sacrificio perfecto de Cristo en la cruz ya no debemos presentar más sacrificios, todo eso fue temporal. Incluso el fuego de ese altar un día se extinguió, pero nunca dejó de arder el fuego santo de Dios.
En Lucas 3:16 leemos: “Respondió Juan (el Bautista), diciendo a todos: Yo a la verdad os bautizo en agua; pero viene uno más poderoso que yo, de quien no soy digno de desatar la correa de su calzado; él os bautizará en Espíritu Santo y fuego”. Fue muy evidente el día que se cumplió esta palabra: “Y se les aparecieron lenguas repartidas, como de fuego, asentándose sobre cada uno de ellos.” (Hechos 2:3). A partir de allí, la Iglesia de Cristo recibió el poder del Espíritu Santo para cumplir con la misión que se le encomendó.
Si has recibido a Cristo como Salvador y Señor de tu vida, el Espíritu Santo ha venido a morar en ti, pero su fuego debe ser avivado cada día.
¿Cómo está tu fuego? ¿Arde con intensidad o solo es una pequeña llama que se está extinguiendo?
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Miércoles 2 de agosto, 2023
“¿Servir o ser servidos?”
“Entonces él se sentó y llamó a los doce, y les dijo: Si alguno quiere ser el primero, será el postrero de todos, y el servidor de todos”. Marcos 9:35.
Jesús sabía que le quedaba poco tiempo antes de ir a la cruz y se lo dijo a sus seguidores. Sin embargo, quienes debían apoyarlo y ser sensibles a esa situación, estaban pensando en ellos mismos al preguntarse quién sería el mayor en el Reino de los Cielos. Jesús, que conocía el corazón de sus discípulos, les preguntó abiertamente qué era lo que estaban discutiendo en el camino. Nadie respondió. El silencio los delataba. Entonces el Señor les presentó esta paradoja: El que quiera ser el primero, tiene que ser el servidor de todos.
¡Increíble! Cerca de tres años y medio con el Maestro y no habían aprendido de Él lo que era la humildad y el servicio. La Biblia dice que “…se despojó a sí mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres” (Filipenses 2:7).
La perspectiva de Jesús es opuesta a la del sistema en que vivimos. Para el Señor, el verdadero éxito es el resultado de una vida entregada, sometida a Dios, obediente a su Palabra y con una actitud de siervo. Incluso antes de ir a la cruz fue el único que tomó el lebrillo, se ciñó la toalla y les lavó los pies a todos sus discípulos, incluyendo a Judas. “Porque ejemplo os he dado, para que como yo os he hecho, vosotros también hagáis” (Juan 13:15).
Hoy, el mensaje sigue siendo el mismo. Los verdaderos discípulos son los que tienen un corazón de siervo. Los grandes líderes son los que sirven, no los servidos. Los que están más cerca de Jesús son los siervos, no los señores. Seguir a Jesús implica servirle: “Si alguno me sirve, sígame; y donde yo estuviere, allí también estará mi servidor. Si alguno me sirviere, mi Padre le honrará” (Juan 12:26).
Comienza este día con una actitud diferente, sirviendo a Dios, a tu familia y a quienes lo necesiten. Deja que Él use tu vida para su gloria y que muchos vean a Jesús a través de ti.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Martes 1 de agosto, 2023
“Con Dios somos mayoría”
“Esforzaos y animaos; no temáis, ni tengáis miedo del rey de Asiria, ni de toda la multitud que con él viene; porque más hay con nosotros que con él. Con él está el brazo de carne, mas con nosotros está Jehová nuestro Dios para ayudarnos y pelear nuestras batallas. Y el pueblo tuvo confianza en las palabras de Ezequías rey de Judá”. 2 Crónicas 32:7-8.
Muchas veces enfrentamos las situaciones más difíciles después de haber hecho grandes decisiones espirituales. El rey Ezequías estaba terminando la celebración de la Pascua cuando los asirios se acercaron a Jerusalén para sitiarla y conquistarla.
Ezequías se movilizó enseguida. Cerró todos los canales de agua que los enemigos pudieran usar, reedificó los muros caídos, construyó torres de vigilancia e hizo edificar otro muro de protección. Además, preparó al pueblo con espadas y armas. Sin embargo, el ejército de Senaquerib era innumerable, con carros y caballos de combate y mucho armamento. Era poco probable que el pueblo pudiera resistir mucho tiempo. Pero la confianza del rey de Judá no estaba en todo lo que había preparado sino en Dios que les protegería.
Ezequías le dice al pueblo que confiaran y fueran valientes porque tenían a Dios de su parte y eran más los que estaban con ellos que con el rey de Asiria. Se refería al ejército celestial. ¡Aleluya! Con Dios siempre somos mayoría. Y añade: “Con él está el brazo de carne, mas con nosotros está Jehová nuestro Dios para ayudarnos y pelear nuestras batallas.” ¿Acaso hay poder humano suficiente que pueda vencer a Dios? ¡Él es el Todopoderoso!
A pesar de la continua intimidación del enemigo, Ezequías se apoyó en Dios y ¡un solo ángel destruyó a un ejército innumerable! “Y aconteció que aquella misma noche salió el ángel de Jehová, y mató en el campamento de los asirios a ciento ochenta y cinco mil; y cuando se levantaron por la mañana, he aquí que todo era cuerpos de muertos”. (2 Reyes 19:35).
Dios sigue peleando nuestras batallas. Nuestra parte es no desanimarnos, confiar en el Señor y no tener miedo. Él nos ayuda a vencer.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Lunes 31 de julio, 2023
“Deja de intentarlo en tus fuerzas”
“Respondiendo Simón, le dijo: Maestro, toda la noche hemos estado trabajando, y nada hemos pescado; mas en tu palabra echaré la red.” Lucas 5:5.
Pedro y sus compañeros pasaron toda la noche intentando pescar. Ni a la derecha ni a la izquierda, ni cerca de la ribera ni en lo profundo. Los peces parecían estar agazapados en algún rincón del mar de Galilea esperando la señal del Hijo de Dios. Finalmente, cansados, frustrados y con las manos vacías, los pescadores decidieron volver a sus casas.
¿Alguna vez te has sentido así? Hiciste todo lo que estaba a tu alcance para resolver una situación y no sucedió nada. ¿Has pensado en darte por vencido? No lo hagas, porque el Señor está a punto mostrarte lo que puede hacer.
El Señor le dijo a Simón: “Boga mar adentro, y echad vuestras redes para pescar” (v.4). ¿Otra vez? ¡Si lo hemos intentado toda la noche! ¿Cuántas veces habremos tirado la red… 30, 35 veces? Pero ahora es diferente porque hay una palabra del Hijo de Dios, y si el Creador del universo dice ahora, entonces es ahora.
Cuando el Señor le ordenó a Pedro ir mar adentro, le respondió con la palabra “Maestro”. Pero cuando vuelve trayendo la red repleta de peces, lo llamó “Señor”: “Viendo esto Simón Pedro, cayó de rodillas ante Jesús, diciendo: Apártate de mí, Señor, porque soy hombre pecador” (v. 8).
El próximo pescador de hombres había cambiado su percepción de Jesús. Ya no era simplemente el Maestro que enseñaba y explicaba la Palabra de Dios como nadie, ahora Jesús era el Señor de su vida. A partir de ese momento Simón empieza a ser formado como Pedro, un discípulo con flaquezas, pero obediente hasta el punto de ser un mártir por amor a Quien le cambió la vida.
La palabra del Señor para ti es: “Deja de intentarlo en tus fuerzas”. Escucha al Señor y cuando tengas su palabra, obedécelo inmediatamente y lo verás hacer grandes cosas para su gloria.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Domingo 30 de julio, 2023
Puedes ver el sermón de hoy a partir de las 11 am haciendo click aquí.
¡Dios te bendiga!
“No vas a hundirte”
“Y los discípulos, viéndole andar sobre el mar, se turbaron, diciendo: ¡Un fantasma! Y dieron voces de miedo. Pero en seguida Jesús les habló, diciendo: ¡Tened ánimo; yo soy, no temáis! Mateo 14:26-27.
Las tormentas tienden a nublar nuestra visión. Les pasó a los discípulos en alta mar. Conocían el Mar de Galilea como la palma de su mano. Más de una vez habrán tenido que luchar contra alguna tempestad, pero esta tormenta parecía de las peores. Fatigados de tanto remar y ver que no avanzaban, comenzaron a desesperarse. Necesitaban ayuda urgente. Entonces llegó Jesús… pero los discípulos no pudieron reconocerlo.
¿Un fantasma? ¿En serio? ¿Después de tanto tiempo de estar con Jesús? Está claro que ellos no estaban esperando al Señor. Tal vez olvidaron cuánto poder tenía el Hijo de Dios.
La verdad es que nosotros no somos muy diferentes. ¿En cuántas tormentas olvidamos que el Señor siempre está a nuestro lado? A veces hasta llegamos a dudar de su poder para rescatarnos. Pero Él siempre llega a tiempo para extendernos su mano y salvarnos.
El Señor se dirigió a los discípulos en medio de la tempestad con estas palabras a las que también debemos prestar atención:
“Tened ánimo”. Nos exhorta a cambiar la desesperación por esperanza.
“Yo soy”. Él es el Yo Soy siempre presente. “…el mismo, ayer, hoy y por los siglos” (Hebreos 13:8).
“No temáis”. Debemos entregarle al Señor todo lo que nos preocupa y aprender a descansar en Él. Al poner nuestra confianza en Cristo los temores empiezan a desaparecer.
Cuando nuestra esperanza parece hundirse, cuando nuestros recursos para hallar la salida se agotan, el Señor se hace presente y toma el control con su poder.
Que hoy puedas encontrar el descanso que viene de saber que el Hijo de Dios tiene el poder para calmar toda tormenta que pueda azotar tu vida. Confía y descansa en Él.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Viernes 28 de julio, 2023
“Un plan sin errores”
“Pero Jehová estaba con José y le extendió su misericordia, y le dio gracia en los ojos del jefe de la cárcel… No necesitaba atender el jefe de la cárcel cosa alguna de las que estaban al cuidado de José, porque Jehová estaba con José, y lo que él hacía, Jehová lo prosperaba.” Génesis 39:21-23.
Hay cuatro verdades espirituales que podemos extraer de estos versículos:
- Dios está con nosotros siempre. V. 21a.
Dios nunca abandona a sus hijos. A pesar de las situaciones difíciles que debió atravesar José, nunca pensó que Dios lo había abandonado. Isaías 43:2: “Cuando pases por las aguas, yo estaré contigo; y si por los ríos, no te anegarán. Cuando pases por el fuego, no te quemarás, ni la llama arderá en ti”.
- Dios da gracia al que le cree a pesar de las circunstancias. V. 21b.
Al igual que José, nuestra parte es seguir creyendo. José tuvo una actitud proactiva, y por eso halló gracia.
Debemos ver las circunstancias que nos rodean como parte del plan de Dios para que sus propósitos se cumplen en nuestra vida.
- Dios respalda al que no se da por vencido. Vs. 22-23.
Somos llamados a pelear la buena batalla de la fe todos los días. Nuestra confianza en el Señor nos moviliza a aceptar los retos y los desafíos como parte de nuestro crecimiento.
Mientras José estuvo en la cárcel aprendió el idioma del lugar, se familiarizó con su cultura y el funcionamiento del gobierno egipcio, etc. Dios se tomó 13 años para hacerlo gobernador de Egipto, y la esclavitud y la cárcel fueron su universidad. Cuando llegó la hora, ya estaba preparado.
- Dios levanta al que espera confiado en Él.
El testimonio de José, sus palabras, su influencia fueron fundamentales en el plan de Dios con Israel. En ningún tramo de su vida dejó de confiar en Dios sino que reconoció que todo lo que había atravesado formaba parte del plan que Él había trazado para su vida.
Dios nunca trabaja sin un plan. Quizás no puedas entenderlo todo hoy, pero aun en las dificultades y el sufrimiento, el Señor está cumpliendo sus buenos propósitos en tu vida. “Sabemos que Dios ha preparado todo para el bien de los que lo aman, es decir, de los que él ha llamado de acuerdo con su plan”. Romanos 8:28.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Jueves 27 de julio, 2023
“Un reloj que no se detiene”
“Andad sabiamente para con los de afuera, redimiendo el tiempo.” Colosenses 4:5.
El tiempo es oro. Seguramente habrás escuchado esta frase más de una vez, pero ¿te ha hecho pensar en el valor del tiempo? Dios nos ha dado veinticuatro horas para administrar. Podemos invertirlas correctamente o desperdiciarlas. Está en nuestras manos esta decisión.
La palabra redimir en griego significa “comprar, pagar el rescate, mejorar las oportunidades, aprovechar, adquirir”. Cristo nos redimió en la cruz para darnos vida eterna, para que vivamos un día a la vez y lo honremos con nuestras acciones diarias. Ahora nos toca a nosotros hacer las decisiones correctas.
Si permanentemente tuviéramos frente a nosotros un reloj en donde pudiéramos ver cómo se van yendo los minutos de nuestra vida, quizás tomaríamos verdadera conciencia de lo rápido que pasa el tiempo y la importancia de administrarlo mejor.
Debemos saber disfrutar el tiempo que pasamos con nuestro cónyuge, hijos, familiares, amigos, hermanos de la iglesia. También debemos recordar que el tiempo pasa y las oportunidades también, y lo que es peor…no vuelven. Y nunca debemos olvidar que el tiempo que pasamos con Dios alimentando nuestra alma y espíritu no podemos postergarlo porque es el que marca el resto de nuestra vida.
El apóstol Pablo también les habló sobre este tema a los creyentes de Éfeso: “Mirad, pues, con diligencia cómo andéis, no como necios sino como sabios, aprovechando bien el tiempo, porque los días son malos.” (Efesios 5:15-16). Como mayordomos del precioso regalo del tiempo que Dios nos ha dado debemos considerar siempre si estamos viviendo de acuerdo con su voluntad.
Pregúntale al Señor qué desea para ti. Él te guiará para que puedas sacarle el máximo provecho al tiempo que dispuso darte.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Miércoles 26 de julio, 2023
“Vivir confiados”
“Por la misericordia de Jehová no hemos sido consumidos, porque nunca decayeron sus misericordias. Nuevas son cada mañana; grande es tu fidelidad”. (Lamentaciones 3:22-23).
La misericordia es el amor compasivo de Dios hacia nosotros. Es su “amor inmerecido”. Por eso debemos acercarnos al Señor con humildad, reconociendo que si Dios actúa lo hace porque quiere, no porque lo merezcamos. Y su deseo es actuar todos los días con su amor inalterable, como un Padre que anhela lo mejor para sus hijos.
Vivir confiados en la misericordia de Dios nos trae el reposo diario que necesitamos.
Su misericordia nos recuerda que Dios conoce nuestras debilidades, temores, fracasos, y aun así decide amarnos incondicionalmente. ¡Aleluya!
Su misericordia nos da seguridad de que el Señor nunca va a dejarnos de amar aunque tengamos el peor día de nuestra vida.
Su misericordia nos recuerda que su ayuda no tiene fin. Cada día el Todopoderoso nos extiende su mano para levantarnos y decirnos: “No temas, yo te ayudo”.
Su misericordia nos da la certeza de que su presencia nos acompaña siempre, y cuando vienen a nuestra mente “dardos de fuego del maligno”, podemos recordar sus promesas de protección y cuidado.
Al final del día, cuando nos hemos movido y sostenido en su misericordia, podremos decir como Jeremías: “Grande es tu fidelidad”.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Martes 25 de julio, 2023
“¿Cuál es tu respuesta?”
“A partir de ese momento, muchos de sus discípulos se apartaron de él y le abandonaron. Entonces Jesús, mirando a los doce, les preguntó: ¿Ustedes también van a marcharse? Simón Pedro le contestó: Señor, ¿a quién iremos? Solo Tú tienes palabras de vida eterna.” Juan 6:66-68.
Ese día había comenzado de una manera tremenda. Una multitud de personas estaba buscando desesperadamente a Jesús. Cualquier discípulo hubiera pensado: “¡Al fin las multitudes vienen a Cristo!” Pero Jesús conocía la intención de sus corazones. Lo buscaban para hacerlo rey porque habían visto el milagro de la multiplicación de los panes y los peces.
El Señor siempre fue claro cuando llamaba a las personas a seguirle. Nunca les prometió liberación política, social, beneficios económicos o prosperidad. En esta oportunidad, Jesús les explicó que su verdadera necesidad era espiritual y que solo se supliría a través de una relación con Él. ¡Palabras difíciles de aceptar para quienes solo querían el pan de cada día!
Después de escuchar estas palabras, muchos le abandonaron, pero Jesús no cambió su mensaje ni sus demandas. Tampoco deberíamos hacerlo nosotros. El que quiere seguir a Jesús debe ajustarse a lo que Él dice.
Los apóstoles se preocuparon cuando vieron que la multitud se marchaba. Entonces Jesús los miró y les dijo: “¿Quieren irse ustedes también?” Ante esta pregunta, Pedro fue claro: “Señor, ¿a quién iremos? Solo Tú tienes palabras de vida eterna”. Él sabía lo que había encontrado, sabía lo que tenía, conocía quién era Jesús.
En este tiempo, en donde abundan las “doctrinas utilitarias” que acomodan el evangelio a los deseos de las personas, Jesús nos sigue haciendo la misma pregunta: “¿Quieren irse ustedes también?” “¿Seguirán la verdad o los deseos de su corazón?” Tu respuesta estará fundamentada en lo que hayas conocido y experimentado del Hijo de Dios.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Lunes 24 de julio, 2023
“¿Necesitas sabiduría?”
“Enséñanos a entender la brevedad de la vida, para que crezcamos en sabiduría.” Salmo 90:12.
La palabra sabiduría, en hebreo khama, significa destreza, habilidad, discernimiento para aconsejar, prudencia, cordura en la vida diaria. Consiste, básicamente, en aplicar bien lo que uno sabe a lo que uno hace.
En la Palabra de Dios, “el principio de la sabiduría es el temor de Jehová”. Para vivir con sabiduría debemos buscar a Dios y conocer y hacer su voluntad. El sabio obedece siempre al Señor y deja los resultados en sus manos.
Cuando no tenemos sabiduría, dice Santiago 1:6, debemos pedírsela a Dios: “Y si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada.” Su Palabra es la fuente inagotable de esa sabiduría.
Todos, cada día, tenemos que tomar decisiones. Podemos hacerlo con la sabiduría de Dios o dejarnos guiar por nuestras experiencias, capacitación o intuición. Los resultados estarán determinados por lo que escojamos seguir.
Necesitamos la sabiduría de Dios para saber administrar el tiempo que Él nos regala. Necesitamos saber establecer prioridades, cuidar de nuestro crecimiento espiritual y relación con el Señor, invertir tiempo en nuestra familia, administrar bien nuestras finanzas, usar nuestros talentos, entre tantas otras cosas. ¡Todo lo debemos hacer con la sabiduría de Dios!
Toma tiempo hoy para pensar qué es lo que está guiándote y pídele al Señor que te ayude a ordenar cada aspecto de tu vida con la sabiduría que Él promete darte.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Domingo 23 de julio, 2023
“Corrigiendo el rumbo”
“¿Quién podrá entender sus propios errores? Líbrame de los que me son ocultos.” Salmo 19:12.
Te has sentido alguna vez intranquilo. Tú conciencia está inquieta, se enciende una luz roja en tu corazón pero no tienes en claro la causa. ¿Qué haces? ¿Continúas como si nada hubiera pasado, o te detienes a pensar qué es lo que pasa?
¡Qué peligroso es avanzar sin darnos cuenta de nuestras equivocaciones! Puede costarnos la vida.
En el Salmo 19 encontramos la manera de librarnos de ellos: Conociendo la Palabra de Dios. Nuestra percepción de los hechos, nuestros puntos de vista, nuestras experiencias, no son referencias objetivas, por eso necesitamos acudir a la Biblia. “La ley de Jehová es perfecta, que convierte el alma; el testimonio de Jehová es fiel, que hace sabio al sencillo. Los mandamientos de Jehová son rectos, que alegran el corazón; el precepto de Jehová es puro, que alumbra los ojos.” (Salmo 19:7-8).
Si la conciencia nos reprende pero no conocemos lo que Dios dice en su Palabra, será como la luz roja que parpadea pero no sabemos por qué. Al escudriñar las Escrituras, “se alumbran nuestros ojos”, “nos hace sabios” y “trae nueva vida al alma”.
Necesitamos mucho más que leer solo un devocional, necesitamos leer la Palabra de Dios diariamente. Cuando más nos alimentamos de la Palabra de Dios, más la vamos a desear. “Son más deseables que el oro, incluso que el oro más puro. Son más dulces que la miel, incluso que la miel que gotea del panal. Sirven de advertencia para tu siervo, una gran recompensa para quienes las obedecen.” (Salmo 19:10-11).
Si se enciende alguna luz roja en tu interior, el Espíritu Santo te llevará a la referencia perfecta, la Biblia, y podrás corregir oportunamente el rumbo.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Viernes 21 de julio, 2023
“Levanta tu cabeza”
“Yo Jehová vuestro Dios, que os saqué de la tierra de Egipto, para que no fueseis sus siervos, y rompí las coyundas de vuestro yugo, y os he hecho andar con el rostro erguido”. Levítico 26:13.
Cuatrocientos treinta años estuvo Israel en Egipto hasta su liberación. El pueblo hebreo terminó siendo esclavo y trabajando para faraón en condiciones humillantes. Siempre llegaban a sus casas con la cabeza agachada y los hombros caídos por el cansancio.
La nueva generación israelita no sabía lo que significaba caminar con el rostro erguido. Estaban acostumbrados a bajar la vista, obedecer órdenes y no manifestar disconformidad porque si no eran castigados angustiosamente.
Entonces Dios levantó a Moisés y los liberó de Egipto con poder, señales y milagros. Faraón supo quién era Jehová, y el mundo reconoció que el Señor peleaba por Israel. Todo lo hizo Dios. En su misericordia los liberó y los llevó a Canaán, tierra en donde “fluía leche y miel”.
Era necesario recordarle a Israel que por gracia Dios había roto el yugo de esclavitud que los oprimía para que pudieran andar con el rostro erguido. Ahora podían levantar la cabeza y mirar hacia arriba, no con soberbia sino con dignidad.
Los años han pasado y Dios sigue siendo el único que puede hacernos libre de la esclavitud del pecado, pero recuerda, tienes un enemigo muy real que no quiere que vivas dignamente como hijo de Dios y trabajará diariamente para que vuelvas a “Egipto”, al mundo, a los viejos hábitos. Por eso debes mantente alerta, no caigas en sus engaños, Dios te ha dado una nueva vida, te hizo libre por gracia y te ha dado el poder para caminar con dignidad.
¡Levanta tu cabeza, eres un hijo de Dios, camina con los ojos puestos en Jesús!
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Jueves 20 de julio, 2023
“Estoy contigo”
“He aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo”. Mateo 28:20b.
Los discípulos habían disfrutado de la presencia y obra de Jesús por unos tres años y medio, pero ahora debía ascender a los cielos y sentarse en su trono. La despedida era muy dolorosa para sus seguidores, pero el Señor les aseguró que estaría con ellos hasta el fin.
Esta promesa no fue solo para los primeros discípulos, sino para todo seguidor de Cristo en cualquier lugar y en cualquier tiempo de la historia. El problema es que a veces no “sentimos” su presencia y esto nos hace olvidar su promesa. Hay días en que estamos solos, sin amigos, sin familia y pensamos que el Señor también se ha alejado de nosotros. Oramos con la intención de acercarnos a Él y nuestras súplicas parecen monólogos; incluso nuestros oídos espirituales escuchan mejor el “ruido” de las hojas cayendo de los árboles que la voz de Dios.
El profeta Elías se sintió solo, también David, Jeremías, Ezequiel, Isaías por mencionar a algunos. Hasta el apóstol Pablo: “En mi primera defensa ninguno estuvo a mi lado, sino que todos me desampararon…” (2 Timoteo 4:16). Sin embargo, todos ellos sabían que Dios nunca desampara a sus hijos.
Jesús conoce muy bien ese sentimiento de soledad. “A los suyos vino, y los suyos no le recibieron”. Sus discípulos lo dejaron solo en Getsemaní, en el sanedrín, en la crucifixión. Hasta en la cruz, humanamente hablando, sintió que el Padre lo había abandonado. ¡Por supuesto que sabe lo que es la soledad!
El Señor nos entiende y sabe lo que necesitamos. De hecho, tal vez este devocional sea una respuesta suya para ti. Dios usa lo que tiene a mano para decirte: “No estás solo. Yo estoy contigo y seguiré a tu lado todos los días hasta el fin del mundo”. Jesús nunca romperá esta promesa, por lo tanto, hoy puedes encontrar fuerzas en Él. ¡No estás solo!
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Miércoles 19 de julio, 2023
“Vida en lugar de muerte”
“La mano de Jehová vino sobre mí, y me llevó en el Espíritu de Jehová, y me puso en medio de un valle que estaba lleno de huesos. Y me hizo pasar cerca de ellos por todo en derredor; y he aquí que eran muchísimos sobre la faz del campo, y por cierto secos en gran manera. Y me dijo: Hijo de hombre, ¿vivirán estos huesos? Y dije: Señor Jehová, tú lo sabes.” Ezequiel 37:1-3.
El profeta Ezequiel tuvo una visión impactante. Frente a él había huesos secos. Era lo que quedaba de un ejército que tiempo atrás había perdido la guerra. Ese campo de batalla ahora era un cementerio. Ya no se escuchaban gritos de ánimo, voces de mando, ni corridas estratégicas. Solo había silencio.
Muchas veces podemos ser parte de una situación semejante. Los deseos de luchar, de avanzar, de conquistar, han desaparecido. Lo que antes era una relación estrecha con Dios ahora parece seca. Tal vez nuestro matrimonio o la comunicación con la familia esté en modo de silencio; o proyectos que nos motivaban hoy estén sepultados. Solo vemos como el profeta, un valle de huesos secos.
La visión del profeta fue interrumpida por Dios para preguntarle: “¿Vivirán estos huesos?” La respuesta de Ezequiel fue muy sincera: “Tú sabes lo que harás”. A veces nosotros solo vemos huesos secos, pero Dios ve un ejército levantándose del polvo para glorificarle con nuevas victorias.
El que da vida es el Espíritu de Dios y Él le dio una orden a Ezequiel: “Profetiza sobre estos huesos y diles: Huesos secos, oíd palabra de Jehová. Así ha dicho Jehová el Señor a estos huesos: He aquí, yo hago entrar espíritu en vosotros, y viviréis” (vs. 4-5). Y Dios comenzó el proceso. Primero unió los huesos, después aparecieron los tendones, los músculos y la piel. Y al fin volvió la vida a estos cuerpos cuando el Espíritu de Dios sopló sobre ellos (vs. 6-10).
Si hay algo que te parece imposible, sin esperanza, Dios quiere recordarte que Él puede darle vida. Vuelve a desarrollar una relación profunda, íntima y personal con el Señor y le escucharás decir: “Yo soy el Señor, el Dios de todo ser viviente. No hay nada imposible para mí.” Jeremías 32:27.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Martes 18 de julio, 2023
“El perdón sana”
“La cordura del hombre detiene su furor, y su honra es pasar por alto la ofensa.” Proverbios 19:11.
Este proverbio no es para los necios, es para los que actúan con discernimiento, inteligencia, prudencia y sabiduría de Dios. Ellos pueden detener su furor porque el Espíritu Santo los controla. El fruto del dominio propio es evidente en sus vidas.
La palabra “ofensa” en hebreo es peshá, y tiene un significado bastante amplio: “Revuelta, falta, fraude, infracción, maldad, pecado, rebelión, traición”. ¿Has sufrido alguna de estas ofensas? Tal vez más de una.
El diablo sabe cómo robarnos la paz, el gozo, la fe. Es especialista en maximizar malos entendidos, distorsionar la realidad, mal interpretar palabras, acciones, circunstancias. Cuando alguien ataca nuestra dignidad, orgullo, u honor nos sentimos mal e internamente comenzamos a experimentar agitación y furor, y cuando ese furor se manifiesta perdemos nuestra “honra”. Nada hermoso sale de nosotros si nos dejamos llevar por nuestros impulsos.
¡Cuántas relaciones se han roto por las ofensas! Sabiendo esto, la Palabra de Dios nos exhorta a confesarlas y expresar arrepentimiento con el deseo de restauración. “Confesaos vuestras ofensas unos a otros, y orad unos por otros…” (Santiago 5:16). Cuando vencemos el mal con el bien, le estamos dando la oportunidad a la otra persona de arrepentirse.
Ninguno está libre de ser ofendido, por eso es tan importante pensar en la manera que el Señor espera que actuemos. Hay ofensas que requerirán ser tratadas con la ayuda de personas maduras espiritualmente, pero otras deberemos pasarlas por alto si sabemos de dónde proceden. No podemos permitir que el diablo las use para llenar nuestro corazón de amargura, resentimiento, frustración y deseos de venganza.
El Señor nos ofrece su ayuda a través del Espíritu Santo para perdonar a quienes nos ofendieron. Puede ser doloroso hacerlo, pero vale la pena enfrentar las heridas que nos provocaron y experimentar el toque sanador de Dios.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Lunes 17 de julio, 2023
“Acceso al poder más asombroso”
“Entonces Pedro se puso de pie, junto con los otros once, y con potente voz dijo: Varones judíos, y ustedes, habitantes todos de Jerusalén, sepan esto, y entiendan bien mis palabras. Contra lo que ustedes suponen, estos hombres no están ebrios, pues apenas son las nueve de la mañana. Más bien, esto es lo que dijo el profeta Joel: Y en los postreros días, dice Dios, derramaré de mi Espíritu sobre toda carne…” Hechos 2:14-17a.
Algo extraordinario había sucedido en el aposento alto. Después de estar allí diez días, ciento veinte discípulos fueron llenos del Espíritu Santo. La promesa del Padre desde los tiempos de Joel reafirmada por Jesús se había cumplido.
Pedro fue claro en decir que los acontecimientos que acababan de presenciar eran sobrenaturales. Los discípulos no eran hombres y mujeres de letras como para aprender instantáneamente otros idiomas, el viento recio no lo provocó un gran ventilador, y las lenguas como de fuego sobre sus cabezas no eran un holograma. ¿Con qué propósito estaba sucediendo todo esto? Lo leemos en Hechos 1:8: “Recibiréis poder cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra”.
La manifestación de este poder fue evidente en Pedro enseguida. El discípulo sanguíneo, extrovertido, que había negado al Señor y huido con los demás discípulos cuando le apresaron, se paró delante de una multitud e hizo una exposición maravillosa de la Palabra de Dios. El resultado: ¡Cinco mil personas recibieron a Jesús como su Salvador! ¡Era el mismo Espíritu Santo obrando a través de Pedro! “Porque no sois vosotros los que habláis, sino el Espíritu de vuestro Padre que habla en vosotros”. (Mateo 10:20). Vemos a un Pedro antes de la venida del Espíritu Santo y otro después.
La Iglesia no existiría como tal si no fuese por el poder del Espíritu Santo. Este poder no fue solo para los apóstoles, los ciento veinte en el aposento, los de la casa de Cornelio, los de Éfeso, ¡es para todos los creyentes en Cristo! Recordemos el mensaje de Pedro: “Porque para vosotros es la promesa, y para vuestros hijos, y para todos los que están lejos; para cuantos el Señor nuestro Dios llamare”. (Hechos 2:39).
Sí, este poder es para ti. No te conformes con ser solo un seguidor de Jesús. Él tiene planes que quiere llevar a cabo a través de tu vida y ha prometido capacitarte con Su Espíritu para hacerlo. Ya no se trata de cuánto puedas hacer tú, sino de cuánto le dejes hacer a Él a través de ti.
Tenemos acceso al poder más asombroso que el mundo ha conocido: el poder del Espíritu Santo. Dejemos que se manifieste en nuestra vida.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Domingo 16 de julio, 2023
“Verdad inalterable”
“Pues no somos como muchos, que medran falsificando la Palabra de Dios, sino que con sinceridad, como de parte de Dios, y delante de Dios, hablamos en Cristo”. 2 Corintios 2:17.
La palabra “medrar” en griego es kapeleuo que significa “dedicarse a la reventa, traficar; vendedor de cosas de poco valor”. Esta palabra se usaba para mencionar a la persona que trataba de conseguir ganancias por medios deshonestos. Además Pablo usa la palabra “falsificar” que significa “diferente al original; burda imitación; copia falsa”, para referirse a los que adulteran la Palabra de Dios para obtener un beneficio personal.
Pablo les advierte a los corintios que muchos que parecían tener la verdad, predicaban sin entender el mensaje de Dios o sin importarles lo que pudiera sucederles a sus oyentes.
En contraste, los que seguimos fielmente el evangelio hablamos de Cristo con sinceridad. La palabra “sinceridad” significa “puro, libre de mezclas”. Así es el creyente fiel, habla la verdad sin adulterarla a pesar de las consecuencias que traiga el proclamarla.
Hoy somos presionados por el sistema a modificar la verdad. Somos presionados por amigos y familiares para dejar de lado los principios cristianos y cambiar nuestra ética y moral. Compañeros de trabajo y de estudios que muchas veces tratan de intimidarnos a través de burlas, amenazas y confrontaciones para que dejemos pasar muchas cosas que sabemos que a Dios no le agradan.
Sin embargo, somos llamados a ser misericordiosos y compasivos, pero eso no incluye cambiar la Palabra de Dios. Estamos del lado del apóstol Pablo, aunque muchos cambien la verdad para su propio beneficio, nosotros no lo haremos. Hablaremos siempre con sinceridad de parte de Dios, conscientes de que un día daremos cuenta de nuestras acciones y palabras.
El mundo necesita saber la verdad, lo único que puede hacer libres a los que aún no conocen a Cristo. “Y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres”. Juan 8:32.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Viernes 14 de julio, 2023
“Huye”
“Huye también de las pasiones juveniles, y sigue la justicia, la fe, el amor y la paz, con los que de corazón limpio invocan al Señor”. 2 Timoteo 2:22.
Timoteo era un joven llamado por Dios para servirle. En sus primeros años, el apóstol Pablo le aconseja llenarse del Espíritu Santo, dejar de lado la cobardía, la vergüenza y el qué dirán para avanzar en la fe y el ministerio. Pero también sabía que en la ciudad de Éfeso estaría expuesto a un sinnúmero de tentaciones y ataques del diablo para apartarlo de la voluntad de Dios. Por eso Pablo es muy contundente al decirle que no juguetee con las pasiones juveniles, sino que ¡huya!
La expresión “pasiones juveniles” en griego es epithumía, y significa “intenso deseo, codicia, concupiscencia, malos deseos que están listos para expresarse en una actividad corporal”. Santiago usa esta misma palabra cuando dice: “Cada uno es tentado, cuando de su propia concupiscencia es atraído y seducido” (1:14). Santiago y Pablo no se están enfocando en una tentación en particular, sino en cualquier tentación que encienda nuestros malos deseos.
Si observamos con atención, somos bombardeados permanentemente a través de los medios de comunicación con una oferta de productos que buscan despertar esas pasiones a las que se refiere el apóstol Pablo. El blanco normalmente son los jóvenes, sin embargo, estas pasiones también seducen a los adultos. Así que esta exhortación es para todos.
Mantén presente en tu mente que un pequeño desliz lleva a otro, y a otro, hasta que terminamos aceptando lo que es malo como bueno. Debemos ser conscientes de que el diablo no desaprovechará ninguna oportunidad para debilitarnos y que finalmente cedamos a la tentaciones.
Escucha al Espíritu Santo y acepta su ayuda, en Él tienes todos los recursos que necesitas para vencer.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Jueves 13 de julio, 2023
“Ayuda mi incredulidad”
“… si puedes hacer algo, ten misericordia de nosotros, y ayúdanos. Jesús le dijo: Si puedes creer, al que cree todo le es posible”. Marcos 9:22b-23.
Este era un padre realmente desesperado. Su hijo estaba muy enfermo y ya no sabía qué hacer por él. Cuando este hombre se encuentra con Jesús le explica la situación del muchacho y le pide ayuda, pero según la construcción gramatical usada en el original bíblico, lo hace de una forma irónica. Le dice: “Si puedes…” En otras palabras: “Tus discípulos lo intentaron pero no pudieron… ¿tú puedes?”
La respuesta del Señor es interesante. Usa las mismas palabras que el padre pero esta vez el desafiado es él. Le dice: “Si tú puedes creer…” La sanidad de su hijo no dependía de la capacidad de Jesús sino de la fe del padre. ¡El poder de Cristo nunca está en discusión! ¡Él todo lo puede! Pero lo que no estaba claro era la fe del necesitado.
En ese momento el padre se quiebra y “clama” a Jesús: “¡Creo! ¡Ayuda mi incredulidad!” Eso era todo lo que quería escuchar el Señor. Este hombre apenas podía creer, pero le pide a Jesús que lo ayude con su incredulidad. En ese mismo momento el Señor obró el milagro.
No necesitamos desafiar a Dios con frases como “si eres Dios entonces…”. “Si tienes tanto poder…”. “Si realmente me amas…” o “si crees que lo merezco…” Nada de eso toca el corazón de Dios. Jesús nos enseñó cómo pedir al Padre Celestial de manera personal y directa: “Y cuando ores, no seas como los hipócritas; porque ellos aman el orar en pie en las sinagogas y en las esquinas de las calles, para ser vistos de los hombres; de cierto os digo que ya tienen su recompensa. Mas tú, cuando ores, entra en tu aposento, y cerrada la puerta, ora a tu Padre que está en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público. Y orando, no uséis vanas repeticiones, como los gentiles, que piensan que por su palabrería serán oídos”. (Mateo 6:5-7).
Escucha al Señor: “Yo todo lo puedo, pero tú, ¿realmente puedes creer en mí? Porque al que cree, todo le es posible”.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Miércoles 12 de julio, 2023
“Decisiones inalterables”
“Yo, por tanto, he determinado ahora edificar casa al nombre de Jehová mi Dios, según lo que Jehová habló a David mi padre, diciendo: Tu hijo, a quien yo pondré en el trono en lugar tuyo, él edificará casa a mi nombre”. 1 Reyes 5:5.
Salomón determinó edificar una casa para Dios. La palabra determinar en hebreo significa “afirmar, anunciar, dar aviso, contar, declarar, prometer”. Este verbo se refiere a lo que se comunica a través de las palabras y los hechos de una persona. Determinar es manifestar con acciones lo que se ha decidido en el corazón. Este rey dijo a todos lo que había resuelto en su corazón, y en los siguientes años se vio reflejado en la construcción del templo más extraordinario de la historia.
Nuestras determinaciones siempre manifiestan las prioridades de nuestro corazón. Si para nosotros lo más importante es que Dios gobierne cada área de nuestra vida, entonces resolveremos construir nuestra vida espiritual continuamente. Cualquier decisión que hagamos deberá estar sujeta a esta determinación.
Las determinaciones que se hacemos en el corazón también se expresan públicamente. Ningún verdadero hijo de Dios debe avergonzarse de sus decisiones por Cristo. Por otro lado, cuando hacemos declaraciones públicas nos estamos comprometiendo verdaderamente a llevarlas a cabo. Lo que expresamos es lo que realmente creemos.
Una determinación verdadera permanecerá a través del tiempo. Salomón tardó aproximadamente siete años en terminar el templo, pero nunca hizo una pausa ni se desanimó viendo todo el trabajo que había que hacer. Salomón siempre vio la mano de Dios proveyendo todo lo que necesitaba e incluso dándole ayudantes fieles. Cuando estamos determinados a que el Señor edifique nuestra vida, Él nos enviará la ayuda necesaria.
Que tu determinación de seguir construyendo tu vida espiritual bajo cualquier presión se mantenga firme. Dios ha comenzado una excelente obra en ti, deja que la complete.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Martes 11 de julio, 2023
“Bendita gracia”
“Y deseaba llenar su vientre de las algarrobas que comían los cerdos, pero nadie le daba. Y volviendo en sí, dijo: ¡Cuántos jornaleros en casa de mi padre tienen abundancia de pan, y yo aquí perezco de hambre! Me levantaré e iré a mi padre…” Lucas 15:16-18.
Una crisis es una “situación grave y decisiva que pone en peligro el desarrollo de un asunto o un proceso” según el diccionario. Todos podemos atravesar crisis ya sea por malas decisiones, por culpa de otros o por circunstancias de la vida. Según la Palabra, Dios usa las crisis para transformarnos.
Muchas veces Dios permite ciertas crisis para darnos la oportunidad de corregir nuestro rumbo. En el caso del hijo pródigo, “volvió en sí” recién cuando no tenía nada para comer, ni siquiera podía tocar las algarrobas de los cerdos. ¡Qué crisis tan dura! Pero fue la única manera de que reaccionara e hiciera decisiones diferentes para salir de esa condición. ¡Cuán bajo podemos caer si no reaccionamos a tiempo!
Dios también permite crisis para que recordemos que somos vulnerables y débiles. A veces nos sentimos tan fuertes y seguros que necesitamos un sacudón para reconocer que solo la gracia de Dios es la que nos sostiene. El hijo prodigo se fue de la casa muy seguro de sí mismo, creyendo que podía vivir de la bolsa de dinero que le había dado su padre, pero estaba equivocado.
Muchos hombres de Dios pudieron reconocer su absoluta necesidad de Dios al enfrentarse a las peores crisis de sus vidas. Josafat ante un numerosísimo ejército dijo: “No sabemos qué hacer”. Jacob en Peniel: “Le tengo miedo a mi hermano”. Los apóstoles frente a la persecución: “Mira sus amenazas”. Gedeón escondido en un lagar: “Mi familia es pobre y soy el menor”. Pero a partir de esas circunstancias pusieron su confianza en Dios y experimentaron liberaciones gloriosas.
El hijo pródigo se confrontó consigo mismo y dijo: “Me levantaré, iré a mi Padre, y le diré que he pecado”. Solo al tocar fondo pudo recapacitar y dar el primer paso para ser restaurado. Al regresar a su casa arrepentido, su padre corrió hasta él para recibirlo y restituir su lugar en la familia. Lo mismo hace el Padre celestial por nosotros cuando le fallamos, porque ninguna debilidad o pecado supera la gracia de Dios.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Lunes 10 de julio, 2023
“Como Él lo estableció”
“Y el furor de Jehová se encendió contra Uza, y lo hirió, porque había extendido su mano al arca; y murió allí delante de Dios. Y David tuvo pesar, porque Jehová había quebrantado a Uza; por lo que llamó aquel lugar Pérez-uza hasta hoy”. 1 Crónicas 13:10-11.
David quería traer el arca de Dios a Jerusalén. La intención era buena, pero el método no. Dios nunca dijo que el arca se podía trasladar en un carruaje tirado por animales, sino que los sacerdotes eran los responsables. Dios tuvo que mostrarle a David que no alcanza con las buenas intenciones, sino que las cosas hay que hacerlas a Su manera.
Todo marchaba al compás de la música de alabanza y adoración. El ambiente era maravilloso. ¡Nos hubiéramos gozado con el pueblo! Pero Dios no tolera la desobediencia, y las consecuencias eran inevitables.
Cuando David vio lo que le sucedió a Uza se sintió muy mal y tuvo que ir a la Palabra para entender lo que había pasado. “Entonces dijo David: El arca de Dios no debe ser llevada sino por los levitas; porque a ellos ha elegido Jehová para que lleven el arca de Jehová, y le sirvan perpetuamente”. (1 Crónicas 15:2). ¡Ahora sí lo haría de acuerdo a la voluntad de Dios!
Gracias a Dios por el sacrificio de Cristo en la cruz, porque Él logro la propiciación y hoy la ira de Dios no se manifiesta inmediatamente. Si no fuera así, hoy mismo sufriríamos terribles castigos.
Que esta historia nos ayude a recordar que no podemos relacionarnos con Dios como nosotros creamos conveniente. Él ya definió esa relación a través de Su Palabra y nosotros debemos ajustarnos a Su voluntad.
Poder acercarnos con libertad al Señor es uno de los más grandes privilegios que tenemos como sus hijos, pero eso no significa que lo hagamos de cualquier manera. No debemos olvidarnos que Él es Dios.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Domingo 9 de julio, 2023
Puedes ver el sermón de hoy a partir de las 11 am haciendo click aquí.
¡Dios te bendiga!
“Prueba de fe”
“Y cuando las plantas de los pies de los sacerdotes que llevan el arca de Jehová, Señor de toda la tierra, se asienten en las aguas del Jordán, las aguas del Jordán se dividirán; porque las aguas que vienen de arriba se detendrán en un montón.” Josué 3:13.
Para conquistar la tierra prometida primero había que cruzar un río muy real que incluso desbordaba en esa época del año (v. 15). Imagínese un pueblo de casi tres millones de personas pasando por allí. La travesía parecía imposible.
Sin embargo, Dios les dijo que abriría las aguas y pasarían en seco, pero el milagro sucedería cuando las plantas de los pies de los sacerdotes pisaran el agua.
¿Por qué no abrir el río antes? ¿Y si los sacerdotes pisaban en falso y se hundían? ¿Y si la corriente los arrastraba antes de que se abriera el Jordán? ¿Por qué había que pisar el agua primero…? Sin duda Dios estaba probando la fe del pueblo. Fe es creer que lo que Dios dijo sucederá.
Nuestra fe también será probada. Para que se abran nuestros “Jordanes” es necesario que demos el primer paso; pero no en “las aguas” donde el Señor nunca dijo que haría un milagro. Cuidado que hay muchos que en otros tiempos se ahogaron en el Jordán. Por eso necesitamos Su Palabra como base de nuestra fe. No se trata de movernos guiados por nuestros propios deseos, sino avanzar en la palabra que Él nos habló primero.
Para recibir lo mejor de Dios debemos estar dispuestos a creer. Para ver un milagro hay que dar pasos de fe. Para que una puerta se abra, hay que golpear. Para que nos atiendan, hay que llamar. Para encontrar, hay que buscar. “Porque todo aquel que pide, recibe; y el que busca, halla; y al que llama, se le abrirá.” (Mateo 7:8).
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Viernes 7 de julio, 2023
“No calles”
“Jesús recorrió todas las ciudades y aldeas… enseñando en las sinagogas y anunciando la Buena Noticia acerca del reino; y sanaba toda clase de enfermedades y dolencias. Cuando vio a las multitudes, les tuvo compasión porque estaban confundidas y desamparadas como ovejas sin pastor. Jesús les dijo a sus discípulos: ‘Son muchos los que necesitan entrar al reino de Dios, pero son muy pocos los discípulos para anunciarles las buenas noticias. Por eso, pídanle a Dios que envíe más discípulos, para que compartan las buenas noticias con toda esa gente.’” Mateo 9:35-38.
Si el Señor caminara hoy entre nosotros, ¿vería una situación diferente a la que se describe en este versículo? ¡No! La gente sigue confundida, desamparada, sufriendo y sin rumbo. La desesperanza se apodera día a día de más personas y tú y yo somos portadores del mensaje que puede salvar sus vidas.
Tu testimonio es la mejor herramienta para decirles a otros lo que Dios puede hacer. Estoy seguro que tienes mucho que contar. Aunque quizás estés pasando por pruebas en este momento, recuerda lo que Dios ha hecho en el pasado. Trae a memoria las intervenciones divinas. Si esto fortalece tú fe, también ayudará a los necesitados.
Hay personas que se encuentran solas, sin nadie que las escuche, dedicar un poco de tu tiempo para acompañarlas y escucharlas puede ser la forma en la que Dios te use para decirles que hay Alguien que promete estar con ellas siempre y que les ayudará a atravesar sus momentos difíciles.
Tal vez tus vecinos necesiten ayuda. Un pequeño servicio puede abrir un corazón cerrado y comenzar a ver a Jesús a través de tus acciones. En algún momento te preguntarán por tu paz y esperanzas y podrás decirles Quién hizo la obra en tu corazón.
Estamos rodeados de personas hambrientas y no saben de qué. Pero nosotros tenemos la respuesta a su necesidad y la responsabilidad de darla. Nunca te avergüences de dar la mejor noticia que se haya ofrecido a la humanidad. Ella tiene el poder de cambiar el destino eterno de una persona.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Jueves 6 de julio, 2023
“Inseparables”
“Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir, ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro”. Romanos 8:38-39.
Los cristianos romanos de la época de Pablo estaban pasando por situaciones muy difíciles. Tal vez muchos de ellos podrían estar pensando que el Señor los había abandonado. Por eso el apóstol toma tiempo para escribirles y dejarles saber que no hay nada ni nadie que pueda separarlos de Cristo y de su amor inquebrantable.
Comienza diciéndoles que ni la muerte, ni la vida podrían separarlos del amor de Dios. Quería darles la seguridad espiritual de que sin importar cuales fueran las circunstancias por las que estuvieran pasando, podían estar seguros y confiados en el amor del Señor.
Ni ángeles, ni principados, ni potestades. Hay un mundo espiritual invisible que la Palabra de Dios nos ha revelado. Satanás y sus secuaces trabajan sin descanso para arrastrar a las personas hacia la condenación eterna, pero ninguno de ellos puede tocar a un hijo de Dios. El amor del Señor nos cubre y podemos descansar bajo su protección.
Ni lo presente ni lo porvenir. “Ni el presente con su inestabilidad, ni el futuro con su incertidumbre” dijo un erudito bíblico. Nuestro presente y nuestro futuro están en las manos del Señor. Él es sabio, soberano y en su providencia ha diseñado un plan perfecto para nuestras vidas.
Ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna cosa creada. Imagina cualquier cosa que pudiera ser un problema muy grande e inmediatamente verás a Dios más grande, mal alto y más profundo. Él es Todopoderoso.
Cualquier situación que pudiéramos estar pasando encajaría en alguna de estas categorías, pero ninguna puede separarnos del amor de Dios.
¿A qué le temes? ¿A la muerte, al diablo, al futuro, a algunas personas? El apóstol Juan también dice que “en el amor no hay temor, sino que el perfecto amor echa fuera el temor” (1 Juan 4:18a). Si tu prioridad es recibir y disfrutar el amor de Cristo, verás que todos esos temores comenzarán a desvanecerse, y podrás experimentar la verdad de que “en todas las cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó” (v. 37).
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Miércoles 5 de julio, 2023
“Sigue creyendo”
“La oración eficaz del justo puede mucho. Elías era hombre sujeto a pasiones semejantes a las nuestras, y oró fervientemente…” Santiago 5:16-17.
Elías oraba bajo la dirección de Dios. Él sabía lo que Dios quería porque se lo comunicaba. Cuando estamos en su presencia entendemos lo que Dios quiere hacer. De Él viene la visión, el discernimiento, la revelación de sus planes futuros, las maneras en que quiere moverse en nosotros y a través de nosotros.
Elías oraba con fervor. Cuando leemos algunas de sus oraciones en los libros históricos descubrimos su deseo ardiente por Dios. Nada era igual después de que él oraba.
Elías oraba con fe. El creía que cada palabra suya era escuchada por Dios. Así que podía orar para que llueva o que deje de llover, para que resucitara un muerto, para que no falte aceite en la casa de una viuda, o para que Dios haga descender fuego del cielo. Sus oraciones nos muestran que todo es posible si le creemos al Señor.
Elías oraba esperando el tiempo de Dios. Podía orar para que no lloviera y esperar la siguiente instrucción de Dios. Después de tres años… ¡tres años! Dios le dice que vuelva a orar por lluvia. Eran oraciones acompañadas de obediencia, y el Señor siempre responde a estas oraciones.
Elías oraba buscando que Dios recibiera toda la gloria. Él nunca persiguió beneficioso personales, ni reconocimiento. Siempre llevó al pueblo a escuchar a Dios y adorarle a Él.
Si tú eres un hijo de Dios entonces eres justo delante de Él. Tus oraciones serán respondidas en el tiempo y la forma fijados por Dios. Solo confía y lo verás hacer grandes obras.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Martes 4 de julio, 2023
“Él sabe por qué lo permite”
“Así se quedó Jacob solo; y luchó con él un varón hasta que rayaba el alba y descoyuntó el muslo de Jacob mientras con él luchaba. Y llamó Jacob el nombre de aquel lugar, Peniel; porque dijo: Vi a Dios cara a cara, y fue librada mi alma. Y cuando había pasado Peniel, le salió el sol; y cojeaba de su cadera”. Génesis 32:24-25,30-31.
La luz del nuevo amanecer permitía ver la silueta de un hombre que caminaba cabizbajo, a paso lento y cojeando. Era el patriarca Jacob que volvía a su familia distinto de como se había ido. Algo había cambiado, no solo su apariencia sino también su corazón.
Antes de Peniel, Jacob caminaba siempre erguido, con la cabeza alta, pensando en la próxima estrategia que usaría para salvar su pellejo. Había aprendido a arreglárselas solo, a sobrevivir usando estrategias dudosas. Pero después de su lucha con el ángel no fue el mismo, nunca más pudo caminar con el orgullo que le caracterizaba.
Jacob aprendió a depender de Dios. Su autosuficiencia había recibido un golpe mortal. Su cojera llegó a tiempo. Su debilidad humana dio lugar a la fortaleza divina.
Hay cojeras que Dios ha permitido en nuestras vidas con propósito. Sin ellas no estaríamos a su lado, no tendríamos el deseo de buscarle, ni dependeríamos de Él. El mismo apóstol Pablo al orar por su aguijón recibió esta respuesta de parte del Señor: “Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad”. (2 Corintios 12:9a).
Si Dios ha decidido que convivas con esa “cojera” no te enojes con Él, sabe lo que está haciendo. Que puedas decir como el apóstol Pablo: “Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de Cristo. Por lo cual, por amor a Cristo me gozo en las debilidades, en afrentas, en necesidades, en persecuciones, en angustias; porque cuando soy débil, entonces soy fuerte”. (2 Co. 12:9-10).
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Lunes 3 de julio, 2023
“Dios sabe cómo cuidarte”
“Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias.” Filipenses 4:6.
¡Cuántas situaciones, diariamente, pueden llevarnos a estar preocupados y hasta producirnos ansiedad! La Biblia llama a eso “afanarse”. Esta palabra en griego es merimnao, que significa “dividirse por una distracción, estar en ansiosa inquietud”.
“Por nada estéis afanosos”. ¿Será posible no estar afanados por nada? El apóstol Pablo nos dice que es posible si podemos confiar en el cuidado del Padre Celestial. No creas que esto es mera teoría paulina. El apóstol pasó por todo tipo de situaciones apremiantes y supo encomendarlas una a una al Señor.
“Por tanto os digo: No os afanéis por vuestra vida, qué habéis de comer o qué habéis de beber; ni por vuestro cuerpo, qué habéis de vestir. ¿No es la vida más que el alimento, y el cuerpo más que el vestido?” (Mateo 6:25). Dios conoce todas nuestras necesidades y sabe cómo suplirlas. Si Dios cuida de las aves y las flores del campo, qué no hará por sus hijos.
¿Qué debes hacer entonces si las preocupaciones comienzan a tomar el control de tu vida? Debes ir a Dios en oración y ruego. En el pasaje que Filipenses, Pablo dice que la oración guardará de ansiedad nuestro corazón. Orar resultará en la protección más eficaz contra las preocupaciones.
Cuando ores, no olvides hacerlo con acción de gracias. Expresarle agradecimiento al Señor antes de que Él actúe, es una clara evidencia de fe que recompensará.
Revisa tu lista de necesidades. Antes de comenzar tu día, recurre al Señor. Háblale de ellas y permítele que se manifieste como el Padre que sabe dar buenas dádivas a sus hijos. El Señor está esperando que deposites todas tus cargas en Él y no vivas en ansiosa inquietud. ¡Dios tiene cuidado de sus hijos!
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Domingo 2 de julio, 2023
Puedes ver el sermón de hoy a partir de las 11 am haciendo click aquí.
¡Dios te bendiga!
“¡Libres!”
“Jehová, si mirares a los pecados, ¿quién, oh Señor, podrá mantenerse? Pero en ti hay perdón, para que seas reverenciado”. Salmo 130:3-4.
En la actualidad, la palabra pecado ha pasado a ser un arcaísmo, es casi desconocida por las nuevas generaciones. Por supuesto, ninguna universidad ni escuela tiene el mínimo interés de traer el tema a la mesa de discusión, y esto es un gran problema, porque si no se reconoce el pecado, no hay posibilidad alguna de salvación.
La palabra que se traduce como pecado en hebreo es avón que proviene de avá y significa “torcer, actuar perversamente, cometer iniquidad, hacer inicuamente, mal, maldad, malo, perverso, trastornar”. Pecado es torcer la ley de Dios, es actuar en contra de su santidad, es pervertir sus palabras, es actuar con mala intención. Evidentemente, todos hemos pecado, de una u otra forma, lo reconozcamos o no.
Como menciona el salmista, nadie podría mantenerse en pie si Dios simplemente aplicara su justicia, pero debido a su gracia y misericordia, Él envió a Cristo a tomar nuestro lugar y morir por nuestros pecados. Aunque el costo para nuestro Salvador fue enorme, voluntariamente pagó el castigo que merecíamos, tomó sobre sí mismo nuestros pecados, los llevó a la cruz, y canceló nuestra deuda en su totalidad. ¡Aleluya!
Observa lo que dice Miqueas 7:8-9: “¿Qué Dios como tú, que perdona la maldad, y olvida el pecado del remanente de su heredad? No retuvo para siempre su enojo, porque se deleita en misericordia. El volverá a tener misericordia de nosotros; sepultará nuestras iniquidades, y echará en lo profundo del mar todos nuestros pecados.” Cuando reconocemos nuestros pecados y le pedimos perdón a Dios, el no solo nos perdona, sino que nunca más los traerá a su memoria.
¡Somos libres de la deuda del pecado, su esclavitud y la culpa que nos agobiaba! Caminar con Cristo es caminar en libertad.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Viernes 30 de junio, 2023
“Tú tienes el mensaje”
“Y Pablo permaneció dos años enteros en una casa alquilada, y recibía a todos los que a él venían, predicando el reino de Dios y enseñando acerca del Señor Jesucristo, abiertamente y sin impedimento.” Hechos 28:30-31.
¡Cuántas situaciones difíciles tuvo que atravesar el apóstol Pablo para que se cumpliera este versículo! Fue apresado en Jerusalén; un grupo de judíos ultra religiosos planeó matarlo; fue eximido de ser juzgado en Jerusalén por haber apelado al César; sufrió un naufragio; fue picado por una serpiente venenosa. Incluso algunos dudaban de que fuera un apóstol de Cristo. ¿Qué más podía pasarle?
Pablo dice que todos sus sufrimientos redundaron en beneficio del reino de Dios (Filipenses 1:13). En esos años, muchos recibieron a Cristo como Salvador, el evangelio fue predicado a las personas más prominentes e influyentes de su época. Pablo fue llamado “una plaga” para el mundo pecador (Hechos 24:5), uno que “trastornaba el mundo” (Hechos 17:6), un “sectario” (Hechos 28:22). Sin embargo, a través de él, muchos estaban conociendo la verdad que trae salvación eterna.
Al llegar a Roma, mientras esperaba ser juzgado, Pablo siguió predicando el evangelio. Él se encontraba en una casa alquilada y bajo la custodia permanente de un soldado romano, pero podía predicar abiertamente y sin impedimento. Hacía tiempo que no había experimentado esa libertad religiosa, y por supuesto no desaprovechó un solo momento. Siguió cumpliendo con la misión que Dios le había encomendado.
Pablo nos dejó un gran ejemplo: Aprovechar las oportunidades que tenemos hoy. Si esperamos a que llegue el momento ideal para hablar del Señor, se nos pasará la vida y nos estaremos lamentando por haber perdido las ocasiones que se nos presentaron.
Vivimos en un país con libertad de expresión… pero para los cristianos verdaderos esa libertad está restringida. Sin embargo, tenemos ámbitos en donde todavía podemos hablar “abiertamente y sin impedimento” de Jesús. Hay personas que todavía no han escuchado la Verdad, que no tienen esperanza de vida eterna, y el tiempo se acorta. Tú tienes el mensaje, ¡compártelo!
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Jueves 29 de junio, 2023
“Primer amor”
“Pero tengo contra ti, que has dejado tu primer amor. Recuerda, por tanto, de dónde has caído, y arrepiéntete, y haz las primeras obras; pues si no, vendré pronto a ti, y quitaré tu candelero de su lugar, si no te hubieres arrepentido”. Apocalipsis 2:4-5.
La iglesia de Cristo en Éfeso era muy buena en obras, doctrina, paciencia, santidad… Todo iba bien hasta que Dios dijo “pero”. Si Dios dice “pero”, es mejor prestar atención.
“Has dejado tu primer amor”. No fue una pérdida por accidente, sino una decisión intencional y voluntaria. La construcción gramatical griega de este versículo dice literalmente: “Pero estoy teniendo contra ti que el amor de ti, el primero, dejaste ir”. No solo habían perdido el entusiasmo inicial, la alegría de servir, el gozo de ver a una persona salvada, sino que el Señor ya no era lo que más amaban. La obra, el servicio, la firmeza en la doctrina, y tantas otras cosas pasaron a ser lo más importante, y amar a Jesús por sobre todas las cosas fue desplazado del primer lugar.
Las justificaciones podrían haber sido bíblicas: “Amamos la verdad, sabemos distinguir muy bien a los falsos profetas, nos esforzamos al máximo en el servicio, ayudamos a los necesitados, recibimos con amor a los que son salvos…”. Todo eso es muy loable, pero si esos amores están antes que el amor a Jesús, algo está mal.
Si nuestro amor por el Señor no es constante, llegará el momento en que nos dedicaremos a hacer cosas, pero sin la motivación correcta. Ocuparemos el tiempo en actividades, pero nos alejaremos de la presencia de Dios, y si nos alejamos de la comunión íntima con el Señor, el amor finalmente se enfriará.
El predicador y escritor del S. XIX Charles Spurgeon dijo una vez: “Una iglesia no tiene razón de ser cuando el amor se ha enfriado. Si pierdes el amor por Jesús, lo pierdes todo”.
Acércate al Señor; pon “leña” cada día a tu relación con Él para que esa llama nunca se apague. Pasa tiempo en su presencia. Recuerda todo lo que hizo por ti. Dile cuánto lo amas. Que tu relación de amor con el Señor sea tan evidente que otros digan: “Sí que está enamorado de Jesús”.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Miércoles 28 de junio, 2023
“Verdadera paz”
“Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús.” Filipenses 4:7.
Cuando una situación inesperada llega a nuestra vida, comenzamos a hacernos preguntas de todo tipo: ¿Por qué a mí? ¿Qué hice para merecerlo? ¿Por qué Dios lo permitió? ¿Cómo no me di cuenta? ¿En qué estaba pensando cuando sucedió? ¿Cuál fue la causa? Nuestra mente trabaja sin descanso para encontrar respuestas.
La verdad es que probablemente no lleguemos a “entender” todo lo que nos pasa. La palabra “entendimiento” en griego es nous que significa “intelecto, mente, pensamiento”. Pablo usa mucho esta palabra en sus epístolas porque a él le gustaba profundizar. Nunca se conformaba con una respuesta simple; indagaba hasta que sus inquietudes estuvieran satisfechas. Pero Pablo también aprendió que no siempre iba a lograr entenderlo todo. Tal vez muchas de nuestras preguntas se vayan con nosotros al hogar celestial; sin embargo, hay un regalo divino para nosotros aquí y ahora que es de mayor valor que algunas respuestas: La paz de Dios.
Poco antes de que el Señor fuera crucificado, Él tranquilizó a sus discípulos, diciéndoles: “La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo”. (Juan 14.27). No les estaba diciendo que todas sus circunstancias serían fáciles, pero sí que su paz los sostendría y fortalecería en los momentos más difíciles de la vida.
Solo una relación con Jesús nos conduce a una paz verdadera. Cuando vamos a su presencia y le pedimos que nos dé su paz, Él lo hará, a tal punto que será inexplicable para nuestro intelecto. Cuando el Señor toma el control de nuestra mente y emociones, podemos tener descanso.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Martes 27 de junio, 2023
“No tentarás al Señor”
“Entonces el diablo le llevó a la santa ciudad, y le puso sobre el pináculo del templo, y le dijo: Si eres Hijo de Dios, échate abajo; porque escrito está: A sus ángeles mandará acerca de ti, y, en sus manos te sostendrán, para que no tropieces con tu pie en piedra. Jesús le dijo: Escrito está también: No tentarás al Señor tu Dios”. Mateo 4:5-7.
Jesús fue tentado en todo para identificarse con nosotros de modo que podemos estar seguros que nos entiende cuando estamos bajo cualquier presión. Incluso, dice la Biblia que fue llevado por el Espíritu Santo al desierto para ser tentado. Allí el diablo le tendió tres trampas, pero de todas Jesús salió victorioso.
La primera tentación tenía que ver con obligar a Jesús a demostrar que realmente era el Hijo de Dios. Satanás le tienta a “forzar” al Padre para que intervenga de manera sobrenatural. En otras palabras, le estaba diciendo: “Vamos Jesús, si haces esto, la Biblia promete que ángeles te van a rescatar y será una excelente autopromoción.” ¡Qué maquinación perversa! ¡El pseudo hermeneuta Satanás hasta intenta usar la Palabra para respaldar su propuesta! Parece que esto de usar versículos sin analizar el contexto no es de ahora…
Satanás usó solo una parte del Salmo 91 tratando de forzar el texto para decir algo que Dios nunca dijo: “Métete en problemas que de todas maneras yo te ayudaré”. No, jamás dijo eso. Por eso el Señor enfrenta al diablo con la Palabra de Dios y le responde: “Escrito está: No tentarás al Señor tu Dios”.
La palabra “tentar” en griego es peirazo, que significa “poner a prueba, incentivar”. Es decir, retar a Dios para que haga algo según nuestra conveniencia aunque sea una negligencia.
Israel muchas veces tentó a Dios de esta manera y siempre sufrió terribles consecuencias por su testarudez y rebeldía. “Y llamó el nombre de aquel lugar Masah y Meriba, por la rencilla de los hijos de Israel, y porque tentaron a Jehová, diciendo: ¿Está, pues, Jehová entre nosotros, o no?” (Éxodo 17:7).
Actualmente el diablo sigue usando la misma estrategia para hacernos pecar contra Dios. Apela a nuestro orgullo para hacernos creer que ya somos autosuficientes, intocables, a prueba de todo. Pero Dios nunca dijo: “Sé negligente que nunca te llegarán las consecuencias”.
En tiempo de tentación necesitamos someternos a Dios, escuchar su voz y actuar con diligencia. Vayamos diariamente a Su Palabra para que sea nuestra guía. Y si el enemigo busca enredarte con sus mentiras, respóndele: ¡“Escrito está”!
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Lunes 26 de junio, 2023
“Nuestro Protector”
“Jehová es tu guardador; Jehová es tu sombra a tu mano derecha.” Salmo 121:5.
Israel aprendió por experiencia los beneficios de vivir bajo una sombra protectora, renovadora y refrescante. Desde que salieron de Egipto hasta entrar en Canaán, caminaron por el desierto abrasador durante cuarenta años. Imagina la situación… Todos anhelaban algo de sombra para descansar.
Dios siempre nos ha mostrado que es proactivo para suplir las necesidades de su pueblo, su providencia se ha manifestado de maneras milagrosas en todas las épocas. A los israelitas, durante su viaje de conquista, les acompañó la nube de su presencia (Éxodo 13:21-22), los llevó a lugares donde había palmeras, les proveyó comida y agua.
En hebreo la palabra sombra es tzel y significa “protección”. Los judíos describían a Dios a través de cosas que podían sentir, tocar, gustar, ver y experimentar. Para ellos, decir que Dios “es tu sombra a tu mano derecha” significaba que Él era su protección en todo momento.
Aunque hoy contamos con tecnología que nos permite pasar mejor los días de calor, nuestras almas siguen necesitando renovación y descanso espiritual. Por eso Dios quiere que recordemos la promesa que nos hizo: “El que habita al abrigo del Altísimo morará bajo la sombra del Omnipotente.” (Salmo 91:1). Él será el refrigerio que necesitan nuestras almas y nos enviará su ayuda en tiempos de necesidad.
Si hoy te sientes agotado, desprotegido, emocionalmente extenuado y sin fuerzas, Dios es la sombra que trae refrigerio a tu alma cansada. El Padre Celestial sabe darte el descanso que necesitas y la fortaleza suficiente para que continúes el camino que trazó para ti.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Domingo 25 de junio, 2023
Puedes ver el sermón de hoy a partir de las 11 am haciendo click aquí.
¡Dios te bendiga!
“Brazo en movimiento”
“Oh Señor, ten misericordia de nosotros, pues nosotros esperamos en ti. Tú, brazo de ellos en la mañana, sé también nuestra salvación en tiempo de la tribulación”. Isaías 33:2.
Israel se encontraba amenazado por Asiria, un país que se caracterizaba por su crueldad. En esa situación es que claman a Dios por salvación. La verdad es que no merecían la ayuda de Dios porque se habían alejado de Él, sin embargo, apelan a su misericordia.
Es muy llamativa la expresión de Isaías “brazo de ellos”, en hebreo zeroá, que significa “brazo estirado hacia afuera”. Se refiere al brazo en movimiento, no a un brazo inmóvil. Israel le pide a Dios que su brazo se extienda para ayudarlos en ese momento crítico.
Es interesante notar que le piden a Dios que su brazo se extienda desde el inicio del día. No claman pidiendo ayuda para el final de su jornada, cuando ya habían intentado todo en sus propias fuerzas. Por el contrario, su oración es que Dios los ayude “desde la mañana”.
Desde tiempos antiguos Dios se había manifestado a su pueblo como el Todopoderoso que salva con su brazo extendido: “Por tanto, dirás a los hijos de Israel: Yo soy Jehová; y yo os sacaré de debajo de las tareas pesadas de Egipto, y os libraré de su servidumbre, y os redimiré con brazo extendido, y con juicios grandes” (Éxodo 6:6). También lo menciona en Deuteronomio 4:34; 5:15; 7:19; 11:2; 26:8; 2 Reyes 17:36; Salmo 98:1 y muchos pasajes más. Cuando oraban haciendo referencia al brazo extendido de Dios sabían muy bien de qué se trataba.
¿Puedes imaginar a Dios con su brazo extendido ayudando a su pueblo para librarlo de la tribulación? Ahora… ¿puedes imaginarlo con sus brazos extendidos para darte salvación? Sin duda que nuestra mente viaja rápidamente al monte Calvario, donde Cristo fue crucificado en nuestro lugar para salvarnos. Pero, ¿puedes imaginarlo hoy con sus brazos extendidos desde su trono ayudándote?
Los brazos del Señor siguen extendidos para sanar, renovar, liberar, ayudar a todo el que se acerque con fe a Él. “El Dios eterno es tu refugio, y sus brazos eternos te sostienen…”. Deuteronomio 33:27ª.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Viernes 23 de junio, 2023
“¿A quién pides consejo?”
“Y el rey respondió al pueblo duramente, dejando el consejo que los ancianos le habían dado; y les habló conforme al consejo de los jóvenes, diciendo: Mi padre agravó vuestro yugo, pero yo añadiré a vuestro yugo; mi padre os castigó con azotes, mas yo os castigaré con escorpiones”. 1 Reyes 12:13-14.
El joven rey Roboam decidió tomar tres días para meditar y escuchar el consejo de personas sabias que le ayudaran a tomar una decisión. Pero finalmente, eligió ignorar el consejo de los ancianos que le recomendaron ser compasivo y escuchó a sus inmaduros amigos, “jóvenes que se habían criado con él, y estaban delante de él” (v. 8) que le decían lo que él quería escuchar.
Roboam le respondió al pueblo: “Mi padre agravó vuestro yugo, pero yo añadiré a vuestro yugo; mi padre os castigó con azotes, mas yo os castigaré con escorpiones” (v.14). Pero el pueblo no lo pudo soportar y se dividió. Desde allí en adelante diez tribus se separaron formando el Reino del Norte, y él se quedó con el Reino del Sur con solo dos tribus. Mal consejo, mala decisión.
Muchas veces pedimos un consejo, aunque en realidad ya hemos tomado una decisión en nuestro corazón. En otros casos, buscamos consejeros que nos digan solo lo que queremos oír. En cualquiera de los casos, mi pregunta es: ¿para qué buscar consejo entonces?
Si realmente queremos hacer la voluntad de Dios, entonces debemos aprender a seleccionar a nuestros consejeros. El consejo sabio, maduro y espiritual, es el que Dios puede usar para librarnos de problemas y mantenernos en la senda correcta.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Jueves 22 de junio, 2023
“No vuelvas atrás”
“… nuestros padres no quisieron obedecer, sino que le desecharon, y en sus corazones se volvieron a Egipto.” Hechos 7:39.
Cuando el diácono Esteban estaba siendo interrogado por los judíos religiosos acerca de su fe en Cristo, con mucha sabiduría y elocuencia les habló sobre la dureza del corazón de Israel para obedecer a Dios con estas palabras: “En su corazón se volvieron a Egipto”.
Los israelitas iban rumbo a Canaán, pero mirando siempre por el espejo retrovisor a Egipto. La mirada la tenían puesta en lo que habían dejado en lugar de aquello que iban a alcanzar. Preferían los ajos y las cebollas en esclavitud que el maná en libertad. “Nos acordamos del pescado que comíamos en Egipto de balde, de los pepinos, los melones, los puerros, las cebollas y los ajos; y ahora nuestra alma se seca; pues nada sino este maná ven nuestros ojos.” (Números 11:5-6).
Como hijos de Dios, cada vez que deseamos volver a lo que dejamos por seguir a Cristo, nos detenemos e incluso podemos retroceder. Cuando pensamos: “Antes no teníamos ataques del diablo”, “me divertía más”, “tenía más amigos”, “todo el mundo me amaba”, “mentía más, pero tenía más dinero…”, nuestro corazón se vuelve al mundo aunque sigamos realizando algunas “prácticas” cristianas.
En Gálatas 5:1 leemos: “Estad, pues, firmes en la libertad con que Cristo nos hizo libres, y no estéis otra vez sujetos al yugo de esclavitud.” El apóstol Pablo les recuerda a los gálatas que el Señor nos liberó para que vivamos en libertad, pero a la vez les hace un llamamiento a mantenerse firmes en esa libertad, no sometiéndose nuevamente al yugo de la esclavitud.
Para que esto suceda debemos experimentar un cambio de mentalidad, dejar de pensar y actuar como esclavos, y aceptar de verdad la libertad que Cristo puso a nuestra disposición.
¡Cuántas oportunidades de ser bendecidos podemos perder si seguimos mirando por el “espejo retrovisor”! Cada vez que elegimos la “seguridad de las cebollas y los ajos” que nos ofrece el mundo, cerramos nuestras manos a los extraordinarios “racimos de uvas de Canaán”.
Lo que Cristo vino a ofrecernos, no está en el lugar de donde nos rescató.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Miércoles 21 de junio, 2023
“Nunca cambia”
“Toda buena dádiva y todo don perfecto desciende de lo alto, del Padre de las luces, en el cual no hay mudanza, ni sombra de variación.” Santiago 1:17.
Santiago, uno de los hermanos de Jesús, escribe esta carta a cristianos que estaban pasando pruebas severas y persecución. Muchos de ellos creían que Dios los estaba tentando, pero Santiago es claro en su exposición diciéndoles que nunca tienta a nadie ni tiene el propósito de que alguien caiga en algún pecado. Al contrario, las pruebas sirven para crecer en fe y dependencia de Dios cuando el corazón es espiritualmente sensible.
Dios tiene para sus hijos buenas dádivas y dones que se ajustan a lo que necesitamos. El Señor nunca se equivoca con lo que nos da o permite. Santiago toma como ejemplo a los astros del cielo para hablar de “las luces”. Si el Creador diseñó todos los astros del universo y cada uno con su luz particular, ¡cómo no reconocerlo a Él como la luz perfecta donde está todo perfectamente claro!
El escritor está tratándonos de decir que Dios es inmutable: significa que no cambia, sus atributos permanecen eternamente, su carácter es inquebrantable, su gobierno es estable y duradero, sus propósitos son indestructibles. Para esto usa dos palabras griegas que son usadas en astronomía: “mudanza” y “sombra”, relativas a los cambios de los cuerpos celestes, las variaciones del día y la noche, el movimiento del sol y la luna, las diferencias de brillo entre estrellas y planetas. Todo lo creado es variable pero su Creador no, Él permanece para siempre.
Aunque las cosas cambien a nuestro alrededor, aunque nuestro cuerpo cambie, aunque las personas cambien, el Señor sigue siendo el mismo. Podemos confiar en Él porque su Palabra nos confirma su inmutabilidad. Si dice que su amor y misericordia son eternos, debemos creer en Él, si dice que sus promesas se cumplen, no podemos dudar, si dice que Dios tiene recursos para ayudarnos en las pruebas y una salida a cada situación difícil, nuestra fe debe permanecer en Él. Recuerda esta verdad inalterable: “Jesucristo es el mismo ayer, y hoy, y por los siglos.” (Hebreos 13:8). ¡El Dios de los milagros nunca ha cambiado y sigue interviniendo en nuestras vidas!
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Martes 20 de junio, 2023
“No dar lugar a la codicia”
“Levántate, santifica al pueblo, y di: Santificaos para mañana; porque Jehová el Dios de Israel dice así: Anatema hay en medio de ti, Israel; no podrás hacer frente a tus enemigos hasta que hayáis quitado el anatema de en medio de vosotros.” Josué 7:13.
Israel salía victorioso de sus batallas porque Dios estaba con ellos. Cuando se apartaban del Señor, eran derrotados. Esto fue notorio desde el inicio de la conquista.
La primera ciudad para conquistar del otro lado del río Jordán era Jericó. Dios había derribado la muralla para que el pueblo pudiera pasar, pero quería probar su obediencia. Les había dicho que no debían quedarse con nada de lo que había en esa ciudad porque era “anatema”.
La palabra anatema en hebreo es jerem que significa “objeto condenado, dedicado a exterminación, cosas prohibidas”. “Pero vosotros guardaos del anatema; ni toquéis, ni toméis alguna cosa del anatema, no sea que hagáis anatema el campamento de Israel, y lo turbéis… ”. Josué 6:18.
Pero Acán se hizo el distraído y tomó un precioso manto babilónico, doscientas piezas de plata y un lingote de oro. ¡Quién se iba a enterar…! Pero cuando Israel fue a conquistar la segunda ciudad, Hai, muchísimo más pequeña que Jericó, cayeron derrotados. Entonces Josué consultó a Dios y la respuesta fue que el pueblo había tomado del anatema, y mientras no lo quitaran, no podrían vencer a sus enemigos.
Entonces Acán reconoció su falta: “Pues vi entre los despojos un manto babilónico muy bueno, y doscientos siclos de plata, y un lingote de oro de peso de cincuenta siclos, lo cual codicié y tomé…” (Josué 7:21). Él no necesitaba nada del anatema; Dios tenía muchísimo más que eso para darle, pero la codicia es ese deseo incontrolable de querer más.
Hoy, el diablo sigue usando el mismo engaño para tentarnos. Nos ofrece tener más, pero para obtenerlo debemos mentir, tomar lo que no es nuestro y justificar acciones que no son correctas. Si lo hacemos, terminaremos esclavizados y sufriendo una derrota tras otra.
Lo que nos ofrece Dios es de mayor valor que aquello con lo que el diablo nos tienta. Si quieres ver la mano del Señor obrando a tu favor, tendrás que confiar en su provisión y obedecerle.
¡Engrandece a Dios con tus decisiones! Verás que siempre recompensa a los que esperan en Él.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Lunes 19 de junio, 2023
“Yo estoy contigo”
“Y te pondré en este pueblo por muro fortificado de bronce, y pelearán contra ti, pero no te vencerán; porque yo estoy contigo para guardarte y para defenderte, dice Jehová. Y te libraré de la mano de los malos, y te redimiré de la mano de los fuertes”. Jeremías 15:20-21.
Como cristianos, somos presionados constantemente por nuestra cultura a tolerar el pecado, abandonar los valores bíblicos y alejarnos de Dios. Por eso, más que nunca, necesitamos convicciones firmes, valor y una fe inalterable.
No podemos extrañarnos del comportamiento antagonista del sistema contra los que permanecen fieles a la verdad divina. Ya lo dijo Jesús: “Si fuerais del mundo, el mundo amaría lo suyo; pero porque no sois del mundo… el mundo os aborrece.” (Juan 15:19). También lo dijo el apóstol Juan: “Hermanos míos, no os extrañéis si el mundo os aborrece”. (1 Juan 3:13). Puede ser que muchas personas se levanten en contra nuestra para presionarnos a cambiar nuestros valores, pero Dios ha prometido fortalecernos en todo tiempo para permanecer firmes.
El Señor será un muro fortificado de bronce a nuestro alrededor. No hay manera de derribarlo. Un muro de piedra se puede desmantelar piedra por piedra, pero no uno de bronce. Dios es nuestra protección contra todos los ataques que puedan venir contra nosotros.
“Pelearán contra ti pero no te vencerán”. Nadie dijo que no vamos a tener que enfrentar situaciones difíciles, pero la promesa es que nadie nos vencerá. El Poderoso Gigante está con nosotros y tenemos la victoria asegurada.
“Yo estoy contigo para guardarte y defenderte”. ¡Amen, así será! Su presencia será evidente sobre nosotros en todo tiempo. No hay momento ni circunstancia en que Dios nos abandone. ¡Él mismo nos defenderá! Cuando le damos nuestra causa a Dios, interviene con su justicia y levanta nuestra cabeza.
“Te libraré de la mano de los malos”. Gente mala hubo y habrá en esta vida, pero el Dios que no cambia seguirá librando a sus hijos de sus ataques.
No tengas temor, Dios es tu Ayudador. La promesa que le dio a Jeremías sigue vigente. “Y pelearán contra ti, pero no te vencerán; porque yo estoy contigo, dice Jehová, para librarte”. (Jeremiadas 1:19).
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Domingo 18 de junio, 2023
Puedes ver el sermón de hoy a partir de las 3 pm.
¡Dios te bendiga!
“Una decisión impostergable”
“Yendo ellos, uno le dijo en el camino: Señor, te seguiré adondequiera que vayas. Y le dijo Jesús: Las zorras tienen guaridas, y las aves de los cielos nidos; mas el Hijo del Hombre no tiene dónde recostar la cabeza. Y dijo a otro: Sígueme. Él le dijo: Señor, déjame que primero vaya y entierre a mi padre. Jesús le dijo: Deja que los muertos entierren a sus muertos; y tú ve, y anuncia el reino de Dios. Entonces también dijo otro: Te seguiré, Señor; pero déjame que me despida primero de los que están en mi casa. Y Jesús le dijo: Ninguno que poniendo su mano en el arado mira hacia atrás, es apto para el reino de Dios.” Lucas 9:57-62.
Cada vez que Jesús se acercaba a una persona y la invitaba a ser su discípulo le pedía una cosa: Seguirle. En esa época implicaba dejar todo y caminar con Él a donde fuera. Había que dejar casa, trabajo, familia, proyectos y arriesgarse a vivir por fe. Aunque hoy no todos necesariamente vayan a dejar todas estas cosas, sigue siendo la decisión más importante de nuestra vida, por lo que se deben tomar en cuenta varias cosas de acuerdo al pasaje de Lucas.
En primer lugar debe ser una decisión bien pensada. “Y le dijo Jesús: Las zorras tienen guaridas, y las aves de los cielos nidos; mas el Hijo del Hombre no tiene dónde recostar la cabeza” (v. 58). Seguir a Cristo implica rendirlo todo a Él. ¿Qué es lo que más te costaría entregarle a Jesús? Si es nada, entonces estás listo para ser su discípulo.
Es una decisión impostergable. “Jesús le dijo: Deja que los muertos entierren a sus muertos; y tú ve, y anuncia el reino de Dios” (v. 60). Algunos dudaban entre seguirle en ese momento o esperar a que su situación familiar cambiara, pero la decisión no se podía retrasar. Nadie sabe lo que sucederá mañana con su vida, por lo que es necesaria una acción inmediata.
Es una decisión irrevocable. “Y Jesús le dijo: Ninguno que poniendo su mano en el arado mira hacia atrás, es apto para el reino de Dios” (v. 62). Algunos seguían a Jesús “para ver si resultaba en algo favorable”. El Señor solo era una opción más para ellos. Pero quien tiene un verdadero encuentro con Cristo y puede vislumbrar lo que será la vida eterna, ¿por qué retrocedería? ¡Jamás abandonaría lo que estaba buscando!
Es una decisión ineludible. Todos debemos tomar esta decisión: Seguir o no seguir a Jesús. Nadie puede ignorar este llamado. Un día, cada persona estará frente al Trono de Dios y dará cuenta de la decisión que haya tomado. Dios quiera que la tuya haya sido seguir a Jesús, y que esa determinación te lleve a animar a otros a seguir a Cristo.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Viernes 16 de junio, 2023
“Aprender a contentarnos”
“No lo digo porque tenga escasez, pues he aprendido a contentarme, cualquiera que sea mi situación. Sé vivir humildemente, y sé tener abundancia; en todo y por todo estoy enseñado, así para estar saciado como para tener hambre, así para tener abundancia como para padecer necesidad”. Filipenses 4:11-12.
El apóstol Pablo pasó por grandes necesidades, incluyendo hambre, pero su descanso no dependía de lo que tenía, sino de Dios que sabía lo que hacía en cada circunstancia.
Cuando habla de “necesidad”, en griego es histéresis que significa “quedarse corto, escasez, carecer de ciertas cosas”. En física esta palabra se aplica a los metales que son comprimidos, apretados, estirados y retorcidos para medir su flexibilidad y ductilidad. Es decir, estas necesidades probaban su dependencia de Dios, su firmeza y forjaban su carácter.
Cuando somos presionados por las necesidades de la vida debemos tener la flexibilidad y resistencia necesarias para poder mantenernos en pie y permitir que nuestro carácter sea transformado por esas presiones.
Que el Señor nos ayude a contentarnos con lo que nos da hoy y mantengamos una actitud de agradecimiento por su cuidado y provisión. Recuerda que todo lo que tenemos viene de Dios. “Pero gran ganancia es la piedad acompañada de contentamiento.” (1 Timoteo 6:6).
Pablo concluye su carta a los filipenses con una promesa para aquellos que confían y esperan en el Proveedor Celestial: “Mi Dios, pues, suplirá todo lo que os falta conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús.” (Filipenses 4:19).
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Jueves 15 de junio, 2023
“Discierne dónde está el veneno”
“Y salió uno al campo a recoger hierbas y encontró un arbusto silvestre cuyos frutos eran como calabazas. Llenó su capa con ellas, y cuando llegó a la casa las cortó y las puso en el guiso sin saber qué eran. Después sirvieron el guiso a los profetas para que lo comieran. Mientras comían, ellos gritaron: ¡Eliseo, hombre de Dios, el guiso está envenenado!...” 2 Reyes 4:39-40.
Por lo que dice el pasaje, Eliseo estaba con cien hijos de profetas y no tenían nada para comer, entonces le pidió a su criado que prepara un guiso. El joven, inexperto, salió a buscar vegetales al campo y encontró ciertas calabazas que parecían muy apetecibles, y sobre todo, muy parecidas a las que comían siempre… pero eran ¡venenosas! Sin notarlo, estas “casi calabazas” fueron a parar a los platos de los hambrientos comensales. Menos mal que apareció Eliseo y guiado por Dios solucionó el problema quitando milagrosamente el veneno (v. 41).
Esta historia tiene mucho significado para nosotros. Vivimos recibiendo información por diferentes medios permanentemente, y esta sobreexposición nos puede llevar a consumir información sin evaluar su calidad, veracidad y procedencia. Hay muchas cosas que parecen buenas, sin embargo contienen veneno.
Cada uno de nosotros es responsable de distinguir entre lo que alimenta y lo que enferma. Debemos estar atentos porque Satanás no ahorrará recursos para debilitar nuestra fe.
Te pregunto: ¿Estás chequeando la procedencia de lo que recibes a nivel espiritual? ¿Estás seguro de que te alimentas con la verdad? Si lo que recibes procede de “otros evangelios” como dijo el apóstol Pablo (Gálatas 1:8-9), estarás expuesto a una intoxicación espiritual.
¿Cómo podemos estar seguros de que nos estamos alimentando sanamente? Teniendo la misma actitud de los hermanos de Berea, según leemos en Hechos 17:10-11: “Enviaron de noche a Pablo y a Silas hasta Berea. Y ellos, habiendo llegado, entraron en la sinagoga de los judíos. Y estos… recibieron la palabra con toda solicitud, escudriñando cada día las Escrituras para ver si estas cosas eran así.”
La única manera de combatir el error es con la verdad, y para eso necesitamos leer y estudiar la Palabra de Dios cada día. Si conocemos la verdad, podremos diferenciar fácilmente lo que es saludable de lo que envenena.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Miércoles 14 de junio, 2023
“Tormentas inesperadas”
“Y él estaba en la popa, durmiendo sobre un cabezal; y le despertaron, y le dijeron: Maestro, ¿no tienes cuidado que perecemos?” Marcos 4:38.
Los discípulos habían iniciado la travesía de cruzar el lago Genesaret con Jesús. De pronto, sucede algo inesperado: una tormenta. Se generó tan rápido y era tan intensa que no supieron que hacer. Mientras tanto Jesús dormía muy tranquilo.
¿Y ahora qué hacemos? Los discípulos comenzaron a clamar al Señor con desesperación. No tuvieron ningún problema en despertarlo. Sabían que solo los podía salvar el Maestro.
¿Cuántas veces hemos sido sorprendidos por tormentas? Todo parece estar en calma y de repente, “el viento y las olas” empiezan a golpear nuestra vida. Entonces surge la pregunta: “Y ahora que hacemos”. La respuesta es: Clamar. En la Biblia, clamar se refiere a hablar de manera audible con gran sentimiento acerca de una necesidad urgente. Eso fue lo que hicieron los discípulos.
Cuando enfrentamos un problema lo más natural es intentar solucionarlo. Sin embargo, el Señor nos enseña una manera diferente de manejar las “tormentas”: Buscar refugio y auxilio en Él.
La Palabra de Dios nos asegura que el Padre celestial escucha nuestro clamor y responde. En el Salmo 3:4 leemos: “Con mi voz clamé a Jehová, y él me respondió…”.
Recuerde: Dios está en su trono. Salmo 11:4. Dios dijo que actúa cuando ponemos nuestra confianza en Él. Hebreos 11:6. Dios nunca desampara a sus hijos. Mateo 28:20.
Si su corazón está turbado, clame al Señor. Sepa que está ante la presencia de Aquel que es su poderoso protector, capaz de socorrerlo en cualquier tormenta.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Martes 13 de junio, 2023
“Pelea las batallas correctas”
“Vino, pues, David con los suyos a la ciudad, y he aquí que estaba quemada, y sus mujeres y sus hijos e hijas habían sido llevados cautivos. Y David se angustió mucho, porque el pueblo hablaba de apedrearlo, pues todo el pueblo estaba en amargura de alma, cada uno por sus hijos y por sus hijas; mas David se fortaleció en Jehová su Dios.” 1 Samuel 30:3,6.
Este fue uno de los momentos más difíciles en la vida de David. Él y su ejército habían perdido a sus familias en manos de los amalecitas. La pregunta que nos hacemos la mayoría al leer estos versículos es: “¿Dónde estaba David?”
En ese tiempo se estaba refugiando en la tierra de los filisteos para no caer en las manos de Saúl y no había pedido dirección a Dios para vivir en ese lugar. Aparentemente tomó esa decisión por temor a Saúl. Ahora el rey de los filisteos, el jefe de ese territorio, lo estaba convocando para que peleara en sus filas contra Israel. ¡Y allí estaba David y su ejército, peleando una batalla equivocada mientras sus familias estaban siendo atacadas por sus enemigos!
Muchas veces nos sucede como a David, nos olvidamos de pelear la batalla más importante: Cuidar de nuestra vida espiritual y la de nuestra familia. Entonces quedamos a merced del enemigo, quien poco a poco apaga nuestra fe hasta que finalmente nos separamos de Dios.
¿Estás consciente de las estrategias que está usando el diablo contra tu vida y la de tu familia? ¿Con quién pasas más tiempo, con tu teléfono o con el Señor y tu familia? ¿Sabes lo que hacen y sienten tus hijos? ¿Cuándo fue la última vez que oraste con ellos y por ellos?
No debemos esperar a que el enemigo arrase con nuestra vida y nuestro hogar para pensar en hacer algo. A veces, algunas situaciones pueden revertirse, pero otras veces es demasiado tarde.
Fortalécete en Dios. Evalúa tus batallas. Hay algunas de ellas que tal vez sean enredos del enemigo para distraerte de los asuntos que son eternos. Presta atención a tu familia y haz lo que sea necesario para cuidar tu relación con el Señor.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Lunes 12 de junio, 2023
“Dios termina lo que comienza”
“Si anduviere yo en medio de la angustia, tú me vivificarás... Jehová cumplirá su propósito en mí; tu misericordia, oh Jehová, es para siempre; no desampares la obra de tus manos.” Salmo 138:7-8.
La palabra “propósito” en hebreo es gamar, que significa “terminar, completar, concluir, acabarse”. Responde al “para qué”. Se puede aplicar a un artesano haciendo un cántaro con el propósito de usarlo para contener agua.
David, el autor de este Salmo, asegura que Dios acabará de manera perfecta lo que empezó. Lo ha visto actuando de muchas maneras en su propia vida y en el pueblo de Israel. Por otro lado, es conocedor de las Escrituras y sabe que Dios siempre tiene un propósito en mente cuando hace algo. Dios nunca pierde el tiempo, no necesita hacer pruebas para saber si algo funcionará, nunca experimenta para saber qué resultados obtendrá… ¡Él es Omnisciente!
Los propósitos de Dios nunca son improvisados. Lo que nos sucede hoy no le ha tomado por sorpresa. Desde la eternidad también ha preparado la salida para cada situación.
Por experiencia todos sabemos que pasaremos tiempos de angustia, desasosiego, estrés o temor. David también sabía que no estaba exento de pasar tiempos difíciles; por eso escribe de modo condicional: “Si anduviere yo en medio de la angustia.” Su respuesta es que Dios lo iba a vivificar en esos tiempos.
Tal vez estés por comenzar una semana difícil, con imprevistos, situaciones que puedan generarte estrés. Debes recordar que Dios también lo sabe y tiene los recursos que necesitas para avanzar y ser perfeccionado según los propósitos que trazó para tu vida.
Me uno a la afirmación del apóstol Pablo en Filipenses 1:6: “Estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo”.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Domingo 11 de junio, 2023
Puedes ver el sermón de hoy a partir de las 11 am haciendo click aquí.
¡Dios te bendiga!
“¡Solo Jesús nos hace libres!”
“Te digo que sus muchos pecados han sido perdonados, por eso ella me demostró tanto amor; pero una persona a quien se le perdona poco demuestra poco amor.” Lucas 7:47.
¿Irías a comer a la casa de alguien que es parte de un grupo religioso que busca algún motivo para matarte? Lo cierto es que Jesús fue, compartió tiempo con ellos e incluso participó de la comida. Pero sucedió algo que sorprendió a todos… menos a Jesús. Mientras hablaban, una mujer pecadora conocida por toda la ciudad, entró a la casa, abrió un frasco de perfume carísimo, lo derramó en los pies de Jesús y los secó con sus cabellos. Los religiosos estaban horrorizados; no podían entender lo que estaba pasando. Para ellos esta mujer estaba contaminando a Jesús; pero para Él era tiempo de salvación.
Mientras los fariseos seguían discutiendo y dudando de que Jesús fuera realmente el Mesías Salvador, esa mujer recibió el perdón de todos sus pecados y fue justificada en ese mismo momento.
¡Qué bueno que Jesús no se intimidó, ni actuó condicionado por el “qué dirán”! El Señor no vino a condenar sino a salvar. Por eso, cuando nos arrepentimos de todos nuestros pecados sinceramente, Él no solo nos perdona, sino que ¡no se acuerda más de ellos! “Sepultará nuestras iniquidades, y echará en lo profundo del mar todos nuestros pecados.” Miqueas 7:19.
Ahora, ¿qué espera Jesús que hagamos una vez que hemos sido perdonados? ¿Estará feliz si seguimos pidiendo perdón por aquello que ya limpió en nuestras vidas? ¿Nos sentiremos menos culpables si seguimos insistiendo en la necesidad de perdón? La verdad es que no. Lo que Jesús quiere es que aceptemos su perdón, dejemos el pasado atrás y caminemos de su mano hacia adelante.
Los que realmente saben el valor que tiene el perdón de Jesús no quieren volver a pecar, ni siquiera lo piensan, jamás retroceden. Ellos son los que “aman más” porque reconocen de donde los sacó el Señor.
Cuando aceptamos a Jesús como nuestro Salvador, Él nos ve cubiertos por su justicia. Nadie puede hacer suficiente bien para merecer su salvación. ¡Solamente Jesús nos hace libres!
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Viernes 9 de junio, 2023
“Querer y buscar”
“Grandes son las obras de Jehová, buscadas de todos los que las quieren.” Salmo 111:2.
¡El Señor hace maravillas! Sus obras son tremendas desde la eternidad hasta la eternidad. Eso no está en discusión. Pero ver y experimentar sus obras, es algo que cada uno debe decidir.
En primer lugar, hay que “querer” las obras de Dios. Nada sucederá en nuestra vida si no deseamos que Él actúe con su poder. La palabra “querer”, en hebreo jefets, significa “desear, deleitarse, agradable, considerar algo valioso”. Significa entonces que el que quiera experimentar a Dios debe desearlo. Cristo no se manifiesta a nadie que no anhele su presencia, que no tenga deseos de pasar tiempo aprendiendo a escuchar su voz. Muchas veces Dios probará nuestro deseo para que nos demos cuenta si es genuino y si somos capaces de perseverar en ese anhelo.
En segundo lugar, debemos “buscar” a Dios hasta que se manifieste con poder. En una cultura donde reina lo instantáneo, el Señor nos recuerda que debemos persistir en esa búsqueda. Recordemos que Jesús a sus discípulos “les refirió una parábola sobre la necesidad de orar siempre, y no desmayar” (Lucas 18:1). También será probado el interés de esa búsqueda para saber si queremos al Dios de las maravillas o las maravillas de Dios solamente. Él siempre responde al que le busca de todo corazón. “Cercano está Jehová a todos los que le invocan, a todos los que le invocan de veras.” (Salmo 145:18).
Dios quiere hacer hoy grandes obras en tu vida. Tú parte será buscarlo como quien busca esa perla de gran precio y estar dispuesto a entregarlo todo para tener esa relación única y llegar a experimentar lo que el Señor nos ha prometido.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Jueves 8 de junio, 2023
“El escudo de la fe”
“Nuestra alma espera a Jehová; nuestra ayuda y nuestro escudo es él. Por tanto, en él se alegrará nuestro corazón, porque en su santo nombre hemos confiado. Sea tu misericordia, oh Jehová, sobre nosotros, según esperamos en ti.” Salmo 33:20-22.
Al final del versículo 20 hay una declaración de protección segura: “Él es nuestro escudo”. Los escudos en la antigüedad servían de protección a corta distancia cuando los ataques eran cuerpo a cuerpo, pero también a larga distancia, cuando un ejército enemigo arrojaba flechas sobre los soldados.
Efesios 6:10-18 dice que debemos estar firmes en nuestra confianza en Dios y que debemos tener la armadura espiritual puesta en todo tiempo. Una parte vital de esa armadura es el escudo de la fe “con que podáis apagar todos los dardos de fuego del maligno”.
Vivimos tiempos turbulentos y el diablo sabe qué “dardos” dispararnos. Hay dardos de duda que nos quieren generar incertidumbre acerca de nuestro futuro. Hay dardos de malos pensamientos, porque Satanás no dejará de tentarnos. Hay dardos de palabras envenenadas que pueden venir contra nosotros de personas que tienen el corazón lleno de amargura. Hay dardos de mala comunicación, que intentan tergiversar nuestras palabras y cambiar el sentido de lo que decimos.
Sin el escudo de la fe, estos dardos pueden destruir nuestra relación con Dios y con los que nos rodean, por eso necesitamos estar alerta y con el escudo de la fe alto para permanecer firmes.
Que podamos decir como el salmista David en momentos de incertidumbre: “Te amo, oh Jehová, fortaleza mía. Jehová, roca mía y castillo mío, y mi libertador; Dios mío, fortaleza mía, en él confiaré; mi escudo, y la fuerza de mi salvación, mi alto refugio” Sal. 18:1-2.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Miércoles 7 de junio, 2023
“Digno de recibir adoración”
Pablo y Silas iban muy seguros al pueblo de Filipos porque el apóstol había visto en visión a un varón macedonio que le imploraba que pasase a ayudarlos. Después que el Espíritu Santo no les permitiera ir a otros lugares, entendieron que Dios los quería allí para hablar de Cristo.
Todo marchaba bien los primeros días. Después de varias sanidades, decisiones por Cristo, y liberaciones, Pablo y Silas terminaron… ¡en la cárcel! “Después de haberles azotado mucho, los echaron en la cárcel, mandando al carcelero que los guardase con seguridad. El cual, recibido este mandato, los metió en el calabozo de más adentro, y les aseguró los pies en el cepo”. (Hechos 16:23-24).
El carcelero se equivocó usando el cepo. No eran los pies de Pablo y de Silas los que debía haber atado, sino sus lenguas. A estos varones de Dios podían encerrarlos, atarlos, pero no podían callarlos. “Pero a medianoche, orando Pablo y Silas, cantaban himnos a Dios; y los presos los oían” (v. 25).
Para Pablo y Silas, la alabanza no era meramente cantar, sino glorificar a Dios desde lo más profundo de sus corazones. Era una manifestación de dependencia y seguridad en el Dios que todo lo sabe y todo lo controla.
Dios siempre manifiesta su presencia en la alabanza. Mira lo que pasó en esa improvisada “sala de audio”: “Entonces sobrevino de repente un gran terremoto, de tal manera que los cimientos de la cárcel se sacudían; y al instante se abrieron todas las puertas, y las cadenas de todos se soltaron.” (Hechos 16:26). El resultado: El carcelero y toda su casa fue salva. Fue el inicio de la congregación de los Filipenses.
La adoración es una manera de entregarnos humildemente a su señorío y reconocer que el Señor es digno de recibir alabanza en cualquier circunstancia.
“Y a todo lo creado que está en el cielo, y sobre la tierra, y debajo de la tierra, y en el mar, y a todas las cosas que en ellos hay, oí decir: Al que está sentado en el trono, y al Cordero, sea la alabanza, la honra, la gloria y el poder, por los siglos de los siglos”. Apocalipsis 5:13.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Martes 6 de junio, 2023
“Jehová reina”
“…Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre. Venga tu reino. Hágase tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra”. Mt. 6:9-10.
Generalmente, cuando pensamos en el Padrenuestro, nos enfocamos en la petición material: “Danos hoy nuestro pan cotidiano”. Sí, necesitamos la provisión de Dios. Sin embargo, esa no es la primera petición que deberíamos hacer según esta oración modelo de Jesús. Después de reconocer que estamos orando al Padre Celestial, cuyo nombre es santificado, debemos enfocarnos en el significado de la venida de Su reino.
Cuando oramos que venga Su reino, estamos pidiendo que tome el control de nuestra manera de pensar, de nuestras emociones, de nuestra voluntad. Así es como su reino comienza a ejercer influencia en este mundo: a través de nosotros.
Aunque el mundo no quiere reconocer a Dios como su Rey, ¡Jehová reina! Él está sentado en su trono y al fin se hará su soberana voluntad. Lo dice el Salmo 96:10: “Decid entre las naciones: Jehová reina. También afirmó el mundo, no será conmovido; juzgará a los pueblos en justicia.”
Nunca olvides que Dios reina. Él tiene el control de tu vida, de tu familia, de tu economía, de tu trabajo, de tus relaciones. A veces parece que Dios estuviera en silencio, sin hacer lo que esperamos, pero sigue trabajando a su manera y en su tiempo. Lo que debemos hacer es no desesperar, seguir confiando en Él, y esperar con expectativa lo que está por hacer a favor de nuestra vida.
Escatológicamente hablando, cuando el Señor Jesús vuelva otra vez en su segunda venida reinará directamente sobre el mundo entero. Mientras tanto, seguimos orando que se haga su voluntad, en la tierra como en el cielo.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Lunes 5 de junio, 2023
“Siempre estará a tu lado”
“Nadie te podrá hacer frente en todos los días de tu vida; como estuve con Moisés, estaré contigo; no te dejaré, ni te desampararé.” Josué 1:5.
Josué se encontraba frente al mayor reto de su vida. Moisés, su líder, había muerto, y ahora él debía continuar con lo que Dios le había encomendado.
El primer paso de este sucesor de Moisés era creer que Dios iba a cumplir sus promesas si le obedecía. ¡Qué descanso habrá sido para Josué escuchar a Dios decir: “Nadie podrá hacerte frente en todos los días de tu vida; como estuve con Moisés, estaré contigo; no te dejaré ni te desampararé”! (Josué 1:5).
La palabra “dejaré” en hebreo significa “no me relajaré en el cuidado que tengo hacia ti, no te voy a dejar solo, no te soltaré de la mano”. Es la promesa que todo padre le hace a su hijo cuando le dice que salte a sus brazos porque no lo dejará caer.
La otra palabra, “desampararé”, significa “no voy a renunciar a lo que te prometí, no voy a fallarte nunca”. ¡Aleluya! ¡Qué tremendas promesas para comenzar a transitar un camino desconocido, para guiar a un pueblo complicado, para atreverse a conquistar una tierra para la gloria de Dios!
Nosotros tenemos al mismo Padre Celestial haciéndonos promesas muy específicas, aquí y ahora. Lo que Dios nos promete en su Palabra está al alcance de todos…los que le creen.
¿No te da seguridad saber que Dios te dice “nunca soltaré tu mano”? ¿No te sientes impulsado a llevar adelante sus planes cuando te dice “no te voy a fallar nunca”? Empieza tu día recordando lo que el Señor te ha prometido, y cuando lleguen los desafíos, acuérdate que ya te dijo: “Estaré contigo, no te dejaré, ni te desampararé”.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Domingo 4 de junio, 2023
Puedes ver el sermón de hoy a partir de las 11 am haciendo click aquí.
¡Dios te bendiga!
“Discernir y obedecer”
“Pero el alimento sólido es para los que han alcanzado madurez, para los que por el uso tienen los sentidos ejercitados en el discernimiento del bien y del mal.” Hebreos 5:14.
La palabra “discernir”, en griego diakrino, significa “separar, discriminar, distinguir, determinar, hacer un juicio para decidir”. Para discernir correctamente necesitamos hacerlo sobre una base sólida, objetiva e imparcial y esa es la Palabra de Dios. Hebreos 4:12 dice: “Porque la Palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos; y penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón.”
También necesitamos la guía del Espíritu Santo. En lo natural, nosotros solo podemos confiar en lo que vemos, escuchamos, sentimos y sabemos, pero cuando el Espíritu Santo abre nuestro entendimiento de manera sobrenatural, podemos ver las cosas desde la perspectiva de Dios.
Si podemos discernir correctamente, también debemos ser valientes para obedecer. De nada sirve saber lo que es correcto y no hacer lo correcto.
Necesitamos aprender a escuchar al Señor, ser sensibles y obedientes a su dirección; esto dará lugar a un caminar íntimo con Él que nos conducirá a recibir diariamente lo mejor que tiene para nosotros.
Proverbios 3:21-24 dice: “Hijo mío, no pierdas de vista el sentido común ni el discernimiento. Aférrate a ellos, porque refrescarán tu alma; son como las joyas de un collar. Te mantienen seguro en tu camino, y tus pies no tropezarán. Puedes irte a dormir sin miedo; te acostarás y dormirás profundamente".
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Viernes 2 de junio, 2023
“Vaciarnos de nosotros mismos”
“Ve y pide para ti vasijas prestadas de todos tus vecinos, vasijas vacías, no pocas”. 2 Reyes 4:3.
La esposa de un profeta de Dios no solo había quedado viuda sino muy endeudada, a tal punto que el acreedor había venido para llevarse a dos de sus hijos como siervos. Esta madre en su desesperación acudió por ayuda al profeta Eliseo quien le dijo algo que en principio parecía absurdo: “Consigue todas las vasijas vacías que puedas”.
El segundo paso era: “Luego entra y enciérrate junto a tus hijos. Ve llenando todas las vasijas y poniendo aparte las que estén llenas” (v. 4). La viuda solo tenía un poquito de aceite, así que le debe haber parecido raro que Eliseo le dijera que fuera poniendo aparte las vasijas llenas. Pero ella y sus hijos obedecieron y vieron como el aceite corría sin parar, llenando todas las vasijas. ¡Qué milagro! El aceite seguía fluyendo… mientras había vasijas vacías.
Aprendemos una gran lección espiritual de esta historia: Dios está listo para derramar su poder en nuestras vidas, pero es necesario que nos vaciemos de nosotros mismos. Mientras estemos llenos de autosuficiencia, no habrá espacio para que Dios actúe en nosotros.
Un gran predicador del S. XIX dijo: “No es nuestro vacío, sino la llenura de nosotros mismos lo que estorba el fluir de la gracia”. (Spurgeon).
Nunca olvidemos que no se trata de “nuestro aceite” sino del suyo, para que al fin la gloria y la honra las reciba Él.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Jueves 1 de junio, 2023
“¿Gloriarme en mis debilidades?”
“¿Quién enferma, y yo no enfermo? ¿A quién se le hace tropezar, y yo no me indigno? Si es necesario gloriarse, me gloriaré en lo que es de mi debilidad”. 2 Corintios 11:29-30.
Cuando leemos las historias del apóstol Pablo, las formas poderosas en que Dios lo usaba, pensamos que solo le faltaba una capa roja para ser un superhéroe. Sin embargo, el apóstol siempre se mostró tal cual era, sin esconder sus debilidades.
La palabra debilidad en griego es astheneia que significa “carencia de fortaleza, falta de fuerza, incapacidad de producir resultados, propenso a sufrimientos físicos, fragilidad”. En otras palabras, el apóstol Pablo estaba lleno del Espíritu Santo y de poder, pero seguía siendo un ser humano tan frágil como nosotros.
Pablo nos cuenta que él también se enfermaba. ¿Alguien que es usado para sanar a otros se puede enfermar? ¿Por qué no oró por él mismo para ser sano? Bueno, aparentemente había orado por lo menos tres veces por una situación en particular (2 Corintios 12:7-10) y la respuesta de Dios fue: “Bástate mi gracia porque mi poder se perfecciona en la debilidad” (2 Corintios 12:9). Dios tenía un propósito mayor que la sanidad.
El Señor puede hacer cosas extraordinarias a través de nosotros, pero nunca dijo que nuestro cuerpo sería inmortal mientras vivamos en este mundo.
¿Dios es poderoso para sanar? ¡Por supuesto! Pero también seguimos siendo vulnerables. La buena noticia es que Dios se mueve en medio de nuestra vulnerabilidad. El Señor puede hacer mucho más a través de alguien débil que depende de Él, que de alguien autosuficiente.
Si te sientes tan frágil como una vasija de barro, bienvenido a las manos del Alfarero. Estás siendo moldeado perfectamente para los propósitos que Dios espera cumplir a través de tu vida.
Pastor Pablo Giovanini
Puedes ver el sermón de hoy a partir de las 11 am haciendo click aquí.
¡Dios te bendiga!
“Aquel que lo sabe todo”
“Oh Jehová, tú me has examinado y conocido. Tú has conocido mi sentarme y mi levantarme; has entendido desde lejos mis pensamientos. Has escudriñado mi andar y mi reposo, y todos mis caminos te son conocidos. Pues aún no está la palabra en mi lengua, y he aquí, oh Jehová, tú la sabes toda. Detrás y delante me rodeaste, y sobre mí pusiste tu mano.” Salmo 139:1-5.
Dios es Omnisciente, todo lo sabe. Observa de qué manera se detalla este atributo de Dios en estos versículos:
Dios nos diseñó desde la eternidad, nos creó y nos formó. Conoce cada detalle de nuestro espíritu, alma y cuerpo. Sabe de nuestras debilidades y fortalezas. Conoce nuestros éxitos y fracasos. ¡Todo lo sabe! “Oh Jehová, tú me has examinado y conocido”. V. 1.
Dios conoce todas nuestras acciones y obras. Tiene en su memoria todos nuestros tiempos, desde que nos levantamos hasta que nos acostamos. “Tú has conocido mi sentarme y mi levantarme”. V. 2.
Dios sabe lo que pensamos. Es el único que puede conocer nuestros pensamientos. Ni mentalistas, ni profetas, ni el mismo Satanás saben lo que pensamos. Solo Dios es Omnisciente. “Has entendido desde lejos mis pensamientos”. V. 2.
El Señor conoce las decisiones que vamos a tomar mucho antes de que las ejecutemos. “Has escudriñado mi andar y mi reposo, y todos mis caminos te son conocidos”. V. 3.
Dios no solo sabe lo que vamos decir, sino que entiende lo que intentamos comunicar. ¡Cuántas veces no sabemos cómo orar! Sin embargo, Dios conoce lo que hay en nuestro corazón aun antes de expresarlo. “Pues aún no está la palabra en mi lengua, y he aquí, oh Jehová, tú la sabes toda”. V. 4.
Dios sabe cómo protegernos. Estamos rodeados de su presencia, de su amor, de su misericordia y de su gracia infinita. “Detrás y delante me rodeaste”. V. 5.
Dios sabe cómo bendecirnos. Como hijos suyos su anhelo es que seamos bendecidos siempre. “Y sobre mí pusiste tu mano”. V. 5.
Dios tiene un plan para ti en este día. Vive confiado en la Omnisciencia de Dios. Todo estará bajo Su control si le has dado el primer lugar en tu vida.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Viernes 22 de septiembre, 2023
“Hijos de un Dios Santo”
“Entonces hizo un azote de cuerdas y expulsó del templo a todos, y a las ovejas y bueyes; esparció las monedas de los cambistas y volcó las mesas, y dijo a los que vendían palomas: ‘Saquen esto de aquí, y no conviertan la casa de mi Padre en un mercado’”. Juan 2:15-16.
El templo era un caos. Se escuchaban balidos de animales, los gritos de los vendedores, anuncios de los cambistas y las quejas de los que venían a adorar a Dios. En medio de ese desorden apareció Jesús.
En el v. 15 leemos que el Señor se hizo un azote de cuerdas. Un látigo no se arma en unos segundos, tomó un poco de tiempo. Debió trenzar las cuerdas y unirlas fuerte para que no se rompieran. Me imagino a Jesús probando el látigo contra el piso. Entonces empezó a poner las cosas en orden. Echó fuera a todos los que habían convertido el lugar de adoración a Dios en una cueva de ladrones (Mateo 21:13); incluso sacó a los animales. ¡Increíble que estuvieran dentro del templo!
En ningún momento Jesús azotó a una persona. El látigo le sirvió para llamar la atención y mostrar autoridad. Entonces volcó las mesas de los cambistas y reprendió a todo el que estaba haciendo negocios. El Señor tenía derecho a hacerlo por ser judío, pero sobre todo por ser el Hijo de Dios. Una vez que hubo limpiado el templo, entraron los que realmente querían adorar a Dios. Incluso Jesús pudo sanar a mucha gente. “Y vinieron a él en el templo ciegos y cojos, y los sanó”. (Mateo 21:14).
Siempre mencionamos este pasaje para referirnos a los negocios literales que “mercaderes” del evangelio llevan a cabo en algunos templos actualmente, sin embargo, pocas veces lo aplicamos a nuestra vida. Ahora nosotros somos el templo del Espíritu Santo (1 Co. 3:16,17; 6:19) y debemos vigilar que nada se interponga en nuestra relación con el Señor.
No permitamos que nada contamine nuestra devoción al Señor. Que nuestras acciones se correspondan con nuestra identidad: Hijos de un Dios Santo.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Jueves 21 de septiembre, 2023
“Mayor es el que está en ti”
“Volviendo los mensajeros otra vez, dijeron: Así dijo Ben-adad: Yo te envié a decir: Tu plata y tu oro, y tus mujeres y tus hijos me darás… Y he aquí un profeta vino a Acab rey de Israel, y le dijo: Así ha dicho Jehová: ¿Has visto esta gran multitud? He aquí yo te la entregaré hoy en tu mano, para que conozcas que yo soy Jehová.” 1 Reyes 20:5,13.
Esta historia no es solo el relato de un acontecimiento histórico, sino que tiene como propósito mostrarnos cómo opera el enemigo y la victoria que Dios da a los confían en Él.
Muchas veces los ataques del enemigo se dirigen a nuestras finanzas: “Tu oro y plata me darás”. Cuando nuestros bienes o trabajo están en peligro, analicemos las causas, el origen de la situación. A veces es el resultado de nuestras malas decisiones, pero en otras oportunidades son ataques del enemigo para robarnos las bendiciones de Dios.
Satanás no se quedará satisfecho solo con robarnos bienes materiales, él quiere arrasarlo todo. Está enfocado en destruir tu familia. “Tus mujeres y tus hijos me darás” le dijo el enemigo al rey de Israel. Por eso necesitamos estar alertas y no darle ningún lugar en nuestro hogar. Debemos intervenir a tiempo si identificamos su intromisión.
No permitas que el diablo te robe el amor que te unió a tu cónyuge. No dejes que tus hijos se pierdan al ser presionados por programas educativas ateos, o entretenimiento que desprecia los valores bíblicos, o compañías que influyen negativamente sobre sus vidas. Actúa enseguida. Enséñales a tus hijos a relacionarse con Dios, a experimentar su amor y a saber reconocer los ataques de Satanás.
Recuerda que nuestra lucha no es “contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes.” (Efesios 6:12), pero bajo la sangre de Jesús ¡somos más que vencedores!
Enfrenta tus batallas en oración y con la autoridad que te delegó el Señor para deshacer todo ataque del diablo. Nunca olvides que “Mayor es el que está en ti que el que está en el mundo” (1 Juan 4:4).
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Miércoles 20 de septiembre, 2023
“Sigue orando”
“Porque el hijo deshonra al padre, la hija se levanta contra la madre, la nuera contra su suegra, y los enemigos del hombre son los de su casa. Mas yo a Jehová miraré, esperaré al Dios de mi salvación; el Dios mío me oirá”. Miqueas 7:6-7.
Miqueas fue llamado a profetizar lo que le sucedería a Israel y a Judá por haberse apartado de los caminos de Dios. Eran tiempos difíciles para alguien que quería ser fiel al Señor. No se podía confiar en los líderes políticos ni religiosos, tampoco en los amigos (v.5) ni en la familia. Los justos eran condenados y los ricos opresores actuaban con total impunidad.
Hoy vivimos tiempos parecidos. De hecho Jesús lo profetizó: “Estará dividido el padre contra el hijo, y el hijo contra el padre; la madre contra la hija, y la hija contra la madre; la suegra contra su nuera, y la nuera contra su suegra.” (Lucas 12:53). Lamentablemente, para muchos seguidores de Jesús, la familia ha dejado de ser el ámbito de protección, seguridad y confianza.
Aunque Miqueas se sentía solo, tomó la mejor decisión de su vida: “Mas yo a Jehová miraré”. Es la manera de no desilusionarse cuando los que se suponen deben apoyarte de manera incondicional en los momentos difíciles, te abandonan. Hebreos nos anima a hacer lo mismo que Miqueas: “Puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, el cual por el gozo puesto delante de él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio, y se sentó a la diestra del trono de Dios. Considerad a aquel que sufrió tal contradicción de pecadores contra sí mismo, para que vuestro ánimo no se canse hasta desmayar.” (Hebreos 12:2-3).
Hay momentos en que lo único que podemos hacer por nuestros seres queridos es orar ya que hemos agotado todos los recursos y argumentos posibles para acercarlos al Señor sin ver resultados. Miqueas estaba seguro de que Dios lo oiría y esa debe ser también nuestra seguridad.
No bajes los brazos. Pon tu mirada en Cristo y continúa orando por tus seres queridos. Tus oraciones hacen la diferencia.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Martes 19 de septiembre, 2023
“Toma tiempo para escuchar”
“Mas el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, él os enseñará todas las cosas, y os recordará todo lo que yo os he dicho”. (Juan 14:26).
El Espíritu Santo ha venido a morar en el corazón de todo aquel que ha recibido a Cristo como Salvador y Señor de su vida. Habita en nosotros con muchos propósitos y uno de ellos es hablar a nuestro espíritu.
Desde que el Espíritu Santo irrumpió en la Iglesia a partir de Hechos 2, ha sido notorio que Él habla permanentemente a los creyentes. No se expresa a través una voz audible, sino que es esa voz interior que debemos aprender a reconocer.
Presta atención a los siguientes pasajes bíblicos: “Y mientras Pedro pensaba en la visión, le dijo el Espíritu: He aquí, tres hombres te buscan”. (Hch. 10:19). “Y el Espíritu me dijo que fuese con ellos sin dudar”. (Hch. 11:12). “Ministrando éstos al Señor, y ayunando, dijo el Espíritu Santo: Apartadme a Bernabé y a Saulo para la obra a que los he llamado”. (Hch. 13:2). “Esto dice el Espíritu Santo: Así atarán los judíos en Jerusalén al varón de quien es este cinto, y le entregarán en manos de los gentiles.” (Hch. 21:11). “El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias.” (Apocalipsis 2:7ª). El Espíritu Santo habla a todo aquel que le quiere oír.
Aprendemos a escuchar… escuchando. No se trata de tomar un curso, sino de desarrollar nuestros oídos espirituales a través de una comunión diaria con el Espíritu Santo. Él te hablará y nada de lo que te diga se va a contradecir con la Palabra de Dios. Esto te servirá también para distinguir Su voz de otras voces.
Dedica suficiente tiempo a la comunión con el Espíritu Santo. Él no hablará con nadie que tenga prisa. Permítele enseñarte las cosas profundas y ocultas de Dios. Cuanto más nos rindamos a Él, más transformados seremos a imagen de Cristo, más dispuestos estaremos a llevar a cabo la voluntad de Dios y mejor equipados para servirle.
Ser guiados por el Espíritu Santo debe ser el estilo de vida de todo hijo de Dios.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Lunes 18 de septiembre, 2023
“Excelso”
“Entonces Melquisedec, rey de Salem y sacerdote del Dios Altísimo, sacó pan y vino; y le bendijo diciendo: Bendito sea Abram del Dios Altísimo, creador de los cielos y de la tierra; y bendito sea el Dios Altísimo, que entregó tus enemigos en tu mano.” Génesis 14:18-20.
Esta es la primera vez que se usa el término “El-Elión” para referirse a Dios. Su significado es: “Excelso, supremo, lo más elevado, mayor, superior”.
Este es uno de los nombres de Dios más importante para los hebreos porque expresa su grandeza, infinitud, eternidad, soberanía y poder ilimitados. Piensa en el universo, en lo que conocemos y en lo desconocido, sobre todo está el Altísimo. ¡Qué grande es nuestro Dios!
Esta palabra también se aplica directamente a Jesús. La utilizó el ángel Gabriel en el anuncio a María: “Este será grande, y será llamado Hijo del Altísimo; y el Señor Dios le dará el trono de David su padre; y reinará sobre la casa de Jacob para siempre, y su reino no tendrá fin”. (Lucas 1:32-33). ¡Bendito sea Jesús, Hijo de Dios, Altísimo Señor!
Si Jesús es más grande que cualquier cosa creada, entonces de qué preocuparse. Si Él creó todas las cosas y todo está sujeto a Él, imagínate lo que puede hacer.
El amor de Jesús también es altísimo. “…Cuál sea la anchura, la longitud, la profundidad y la altura, y de conocer el amor de Cristo, que excede a todo conocimiento, para que seáis llenos de toda la plenitud de Dios.” (Efesios 3:18b-19). No podemos medirlo, nos sobrepasa, no alcanzamos a comprenderlo en plenitud, pero lo podemos recibir y disfrutar. Su amor nos transforma.
Si estamos al abrigo del Altísimo, nada ni nadie nos puede separar de Él. “Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir, ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro.” Romanos 8:38-39. ¡Eternamente seguros!
Si nuestro Dios es El-Elión, merece toda la gloria, honra, alabanza y adoración. Comienza tu día adorando al Altísimo y descansa en la seguridad de estar bajo su protección.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Domingo 17 de septiembre, 2023
Puedes ver el sermón de hoy a partir de las 11 am haciendo click aquí.
¡Dios te bendiga!
“Él nunca llega tarde”
“Y viéndoles remar con gran fatiga, porque el viento les era contrario, cerca de la cuarta vigilia de la noche vino a ellos andando sobre el mar, y quería adelantárseles.” Marcos 6:48.
Las intervenciones sobrenaturales de Dios se hacen patentes cuando sus hijos están pasando por necesidades. Así sucedió en esta historia. El milagro fue extraordinario: ¡Jesús caminó sobre el agua!
Los apóstoles llevaban bastante tiempo remando con el viento en contra. El Señor les había pedido que cruzaran al otro lado, pero sus esfuerzos parecían inútiles. El viento soplaba más fuerte, a tal punto que parecían estancados en medio de la tormenta. Sin embargo, es importante notar, que no retrocedieron.
Marcos dice que Jesús vio que remaban con “gran fatiga”. Esta palabra en griego es basanízo que significa “afligido, atormentado, agobiado”. El sentimiento de los discípulos era de agobio y frustración por no poder avanzar. Toda su experiencia en el mar parecía no servir de mucho en ese punto.
¿Has llegado a sentirte como los discípulos? ¿Estás pasando por situaciones difíciles y nada parece mejorar? Jesús sabe cómo te sientes. Él no solo está viendo tu fatiga y aflicción, sino que también ¡intervendrá a tu favor!
El Maestro llegó en el momento justo para ayudar a sus discípulos. De pronto… ¡se adelantó! ¿A dónde va Jesús? ¿Nos dejará solos? Por supuesto que no. Jesús se subió al barco y calmó la tempestad en un segundo. ¡Aleluya! Él nunca llega tarde, sus tiempos son perfectos y sigue cumpliendo sus propósitos en medio de nuestras tormentas.
Jesús tiene el control de tu tempestad, y si clamas a Él se asegurará de que llegues a puerto seguro.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Viernes 15 de septiembre, 2023
“Conducidos a un lugar más alto”
“Seis días después, Jesús tomó a Pedro, a Jacobo y a Juan su hermano, y los llevó aparte a un monte alto; y se transfiguró delante de ellos, y resplandeció su rostro como el sol, y sus vestidos se hicieron blancos como la luz.” Mateo 17:1-2.
Jesús jamás hizo acepción de personas, pero hubo eventos en los que solo participaron Pedro, Jacobo y Juan. ¿Por qué? Porque ellos querían más.
A estos buscadores de todo lo que podían recibir de Dios, el Señor se les reveló de una manera especial, única. Eso fue lo que sucedió en aquel monte alto. Literalmente el versículo dice que Jesús los “llevó”. Esta palabra en griego es anafero y significa “conducir a personas a un lugar más elevado”. Interesante. Para experimentar la gloria de Dios debemos ser conducidos a lugares más altos, espiritualmente hablando.
Algunos se preguntan: ¿Por qué hay personas que escuchan la voz del Espíritu Santo y otros no? ¿Por qué no son muchos los que tienen experiencias extraordinarias con Dios? ¿Acaso Dios tiene hijos “preferidos”? No, de ninguna manera. La respuesta a estas preguntas es simple: Quienes más buscan más reciben.
Jesús conduce a lugares más altos a aquellos que no se conforman con los panes y los peces, a quienes se atreven a dar unos pasos sobre el agua mientras los demás miran, a quienes no practican un cristianismo nominal.
Dios sigue buscando hombres y mujeres que anhelen más de Él, que quieran seguir creciendo. A ellos les dará a conocer su poder y su gloria. “Entonces me invocaréis, y vendréis y oraréis a mí, y yo os oiré; y me buscaréis y me hallaréis, porque me buscaréis de todo vuestro corazón. Y seré hallado por vosotros, dice Jehová.” Jeremías 29:12-14ª.
¿Eres uno de ellos?
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Jueves 14 de septiembre, 2023
“Cambio heridas por cicatrices”
“Y llamó José a su hijo mayor Manasés, porque dijo: Dios me hizo olvidar todos mis sufrimientos y a todos los de la casa de mi padre”. Génesis 41:51.
La historia de José es impactante. Después de trece años de sufrimiento, vendido por sus hermanos, esclavo de Potifar, enviado a la cárcel por falsas acusaciones, al fin Dios lo reivindica y termina siendo gobernador de Egipto. En medio de esa etapa de restauración y recompensa de parte de Dios nace su primer hijo y lo llama Manasés, que en hebreo significa “hacer olvidar”.
José no perdió la memoria, lo que perdió fue el dolor. Él siempre recordó a su padre y a sus hermanos. Su amor por su familia era tan profundo que pudo perdonarlos con la ayuda de Dios.
“Dios me hizo olvidar”, es decir, me ayudó a olvidar las penas y removió el resentimiento de mi corazón. Esto fue evidente cuando se reencontró con sus hermanos; después de probarlos, les dio abrigo, vivienda y alimento en Egipto. Me imagino lo feliz que se sentiría José cuando les presentó a su hijo Manasés. Seguramente toda la familia supo enseguida lo que significaba su nombre.
Dios es el que sana nuestras heridas y las transforma en cicatrices. Tal vez tengamos muchas marcas físicas de accidentes o golpes. Incluso podemos tener otras en el corazón producidas por personas o situaciones que nos lastimaron, pero Dios es nuestro sanador.
Dios nunca dijo que obraría en nuestra memoria al punto de hacernos olvidar toda circunstancia difícil. Lo que nos prometió es quitarnos el dolor y transformar nuestras heridas en cicatriz como testimonio de su obra restauradora.
¿Cómo está tu corazón? ¿Hay recuerdos que todavía te duelen? ¿Hay personas, lugares o situaciones que al recordarlas te producen angustia? Puede ser muy difícil traer a la luz esas situaciones desgarradoras, pero vale la pena si sigues el ejemplo de José: entregarle a Dios el dolor que tú nunca podrás manejar y permitirle hacer un milagro en tu corazón.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Miércoles 13 de septiembre, 2023
“Caminos más altos”
“¡Oh profundidad de las riquezas de la sabiduría y de la ciencia de Dios! ¡Cuán insondables son sus juicios, e inescrutables sus caminos! Romanos 11:33.
Si no pusiéramos la cita a estas palabras, seguramente pensaríamos que se trata de un Salmo de David, pero son palabras del apóstol Pablo. A través de ellas el apóstol alaba a Dios por la perfección de sus planes eternos.
Los caminos de Dios son “inescrutables”, significa que no pueden ser comprendidos plenamente por el ser humano. Aun así, cuando pasamos por experiencias difíciles de explicar y no llegamos a entenderlas plenamente, nuestra fe nos dice que Dios sabe lo que está haciendo. Él no actúa de manera arbitraria, sino que gobierna nuestras vidas con perfecta sabiduría, justicia y amor.
Al leer las historias completas de hombres y mujeres como Abraham, Moisés, José, Ester, Rut, Elías, Daniel, y tantos otros, no tenemos ninguna duda acerca de lo perfecto que fueron los planes y propósitos de Dios. Sin embargo, atravesaron situaciones que en principio eran difíciles e incomprensibles.
Lo mismo puede sucedernos a nosotros hoy. No entendemos por qué el Señor está permitiendo ciertas circunstancias en nuestra vida, pero debemos seguir adelante, creyendo que no hay equivocación en los planes de Dios.
En Isaías 55:8-11 Dios mismo nos dice: "Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni vuestros caminos mis caminos, dice el Señor. Como son más altos los cielos que la tierra, así son mis caminos más altos que vuestros caminos, y mis pensamientos más que vuestros pensamientos. Así como la lluvia y la nieve caen de los cielos, y no vuelven allá, sino que riegan la tierra y la hacen germinar y producir…así también mi palabra, cuando sale de mi boca, no vuelve a mí vacía, sino que hace todo lo que yo quiero, y tiene éxito en todo aquello para lo cual la envié”.
Teniendo en cuenta que Dios quiere lo mejor para sus hijos, descansemos en su sabiduría y amor infinitos. “Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados.” Romanos 8:28.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Martes 12 de septiembre, 2023
“Saber esperar”
“Y él esperó siete días, conforme al plazo que Samuel había dicho; pero Samuel no venía a Gilgal, y el pueblo se le desertaba. Entonces dijo Saúl: Traedme holocausto y ofrendas de paz. Y ofreció el holocausto. Y cuando él acababa de ofrecer el holocausto, he aquí Samuel que venía… Entonces Samuel dijo: ¿Qué has hecho?” 1 Samuel 13:8-11.
¿Alguna vez haz considerado lo que revela la impaciencia?
Orgullo. Si lees las historias de Saúl verás que solo quería quedar bien ante los ojos del pueblo. Buscaba el reconocimiento y la adulación. Ser aprobado. Él creía que estaba por encima de todos, incluso de Dios. Prov. 16:18: "Al orgullo le sigue la destrucción; a la altanería el fracaso". Los orgullosos pocas veces se dan cuenta de su problema, a pesar de que quienes los rodean están muy conscientes de ello.
Sabios en nuestra propia opinión. Podemos llegar a pensar que manejamos el tiempo mejor que Dios. Que podemos ayudarlo con sus “retrasos”. Que si Él no hace lo que dijo que iba a hacer, nosotros podemos encargarnos. Ser sabio en su propia opinión llevó a Saúl a tomar el lugar del sacerdote, cosa que Dios había prohibido, y sufrió las consecuencias. Prov. 3:7: "No seas sabio en tu propia opinión; teme a Dios y apártate del mal".
Independencia. Presta atención a las palabras de Saúl: “Ahora descenderán los filisteos contra mí a Gilgal, y yo no he implorado el favor de Jehová. Me esforcé, pues, y ofrecí holocausto”. “No he implorado”, “me esforcé”, “ofrecí”. ¡Qué ciego estaba al pensar que podía ignorar a Dios!
Muchas veces nosotros sabemos por la Palabra de Dios lo que es correcto, pero las presiones de los demás, los plazos que nos imponen, la ayuda que no llega, nos impacienta y empezamos a tomar decisiones fuera de la voluntad del Señor.
La madurez espiritual se manifiesta en la capacidad de esperar con tranquila confianza, teniendo fe de que, en el tiempo de Dios, llegarán las respuestas que necesitamos.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Lunes 11 de septiembre, 2023
“No vuelvas a ser esclavo”
“Cristo nos redimió de la maldición de la ley, hecho por nosotros maldición (porque está escrito: Maldito todo el que es colgado en un madero), para que en Cristo Jesús la bendición de Abraham alcanzase a los gentiles, a fin de que por la fe recibiésemos la promesa del Espíritu.” Gálatas 3:13-14.
El sacrificio de Jesús en la cruz fue perfecto. Esto significa que no debemos añadirle acciones de ningún tipo a su obra redentora. ¡Todo lo que necesitábamos para ser salvos ya fue provisto por Jesucristo! No hay nada que completar. ¡Aleluya!
Para muchos este concepto bíblico está claro en la teoría, pero en la práctica se contradicen. La culpa, la vergüenza y el temor nos pueden jugar una mala pasada y podemos terminar creyendo las mentiras con las que Satanás busca esclavizarnos espiritualmente.
En la mayoría de las culturas hispanas, la consulta a brujos, santeros, médiums, es normal. Muchos se acercan a estas personas para que les ayuden con problemas de salud, relaciones rotas, venganzas, deshacer maldiciones, entre otras cosas. El diablo, el dios de este siglo, ha cegado el entendimiento de la gente para que crean más en cuestiones esotéricas que en la Palabra de Dios. Incluso muchos cristianos son capaces de leer el horóscopo para saber cómo les irá en el día… y después ¡¡leen la Biblia!!
Haber vivido en estos ambientes ha condicionado la fe de muchos cristianos, y aunque creen que Jesús tiene poder para salvar, piensan que ciertas historias de su pasado relacionadas con la hechicería y maldiciones, siguen siendo parte de su vida. Frente a semejante mentira del infierno, debemos recordar el pasaje con el comenzamos. Cristo murió en la cruz para llevarse toda maldición sobre Él, y esta fue una obra perfecta y completa. No hay ningún mal que la cruz no haya podido cancelar. Toda persona es libre desde el mismo momento que acepta a Cristo como su Salvador y Señor. Ya no hay lugar para el enemigo porque el Espíritu Santo viene a hacer morada en ella. “Sabemos que el que ha nacido de Dios no está en pecado: Jesucristo, que nació de Dios, le guarda y el maligno no le toca.” (1 Juan 5:18).
No permitas que Satanás y sus demonios te hagan dudar del sacrificio perfecto de Jesús en la cruz. No permitas que aquellos que distorsionan la Palabra Dios con el fin de manipularte te mantengan esclavizado. Pablo nos exhorta: “Por precio fuisteis comprados; no os hagáis esclavos de los hombres.” (1 Corintios 7:23). El apóstol no está hablando de la esclavitud literal sino espiritual. Y otra vez: “Estad, pues, firmes en la libertad con que Cristo nos hizo libres, y no estéis otra vez sujetos al yugo de esclavitud.” (Gálatas 5:1).
¡¡Dale gracias al Señor por su sacrificio perfecto!!
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Domingo 10 de septiembre, 2023
“¿A quién vas a agradar?”
“Pues, ¿busco ahora el favor de los hombres o el de Dios? ¿O trato de agradar a los hombres? Pues si todavía agradara a los hombres, no sería siervo de Cristo”. Gálatas 1:10.
Los hermanos de Galacia estaban apartándose de la gracia y volviéndose a guardar la Ley de Moisés creyendo que así obtendrían la salvación. Entonces Pablo les dice claramente que quien sigue “otro evangelio” diferente al de la gracia de Cristo, sea maldito. ¿Por qué es tan contundente? Porque quiere agradar a Dios antes que a los hombres.
La palabra “agradar” en griego es aresko y significa “complacer a otros con emoción”, “adaptarse a las opiniones y deseos de otros para complacerlos”. Por supuesto el apóstol jamás iba a complacer a los que seguían sus propios caminos, falsas enseñanzas o torcían la Palabra de Dios. Pablo sabía a quién iba a rendirle cuentas. Fíjate cómo lo dice: “Sino que según fuimos aprobados por Dios para que se nos confiase el evangelio, así hablamos; no como para agradar a los hombres, sino a Dios, que prueba nuestros corazones”. (1 Tesalonicenses 2:4).
No está mal agradar a los que amamos, a los hermanos en la fe, a los que necesitan del Señor. El apóstol Pablo también lo hacía. El problema radica en poner a Dios en segundo lugar para no perder ciertos beneficios otorgados por los hombres, como aceptación, estima, compañía, seguridad, dinero, bienes materiales, reconocimiento…
Cuando entendemos que el Señor es todo para nosotros, que nos ha dado vida eterna y abundante, que nos delegó autoridad para vivir en victoria, que además nos colma de bendiciones, pero por sobre todas las cosas que es nuestro Padre, Señor y Rey, entonces podemos compartir la misma convicción del apóstol: Si no agradara a Dios, no sería siervo de Cristo.
¿A quién estás sirviendo? ¿De quién estás buscando aprobación? No hay mayor gozo para un hijo de Dios que agradar a su Padre Celestial, ahora y por la eternidad. ¡Que mi vida entera sea agradable a ti Señor!
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Viernes 8 de septiembre, 2023
“Necesitamos conectarnos”
“Entonces aquellos cinco hombres salieron, y vinieron a Lais; y vieron que el pueblo que habitaba en ella estaba seguro, ocioso y confiado, conforme a la costumbre de los de Sidón… Y estaban lejos de los sidonios, y no tenían negocios con nadie… llegaron a Lais, al pueblo tranquilo y confiado; y los hirieron a filo de espada, y quemaron la ciudad. Y no hubo quien los defendiese, porque estaban lejos de Sidón, y no tenían negocios con nadie.” (Jueces 18:7, 27,28).
Lais era una ciudad cananea situada el norte de Jerusalén. Estaba separada de los de Sidón y no había establecido alianzas militares con nadie. Los habitantes de esa ciudad tenían costumbres parecidas a los sidonios, abocados más a la agricultura y el comercio que a los conflictos bélicos.
La principal debilidad de esta ciudad fue estar aislada. Sus habitantes se sentían autónomos, independientes y auto protegidos. Creían que no necesitaban la ayuda de nadie. ¿Cómo llegaron a este punto? Dice el versículo que leímos que “estaban seguros, ociosos y confiados”. Ese fue el motivo de su caída.
Puede que en algún momento de nuestra vida nos sintamos como los ciudadanos de Lais, “seguros, ociosos y confiados”, a tal punto que dejemos de relacionarnos, de comunicarnos, de animarnos y orar unos por otros. El diablo es muy astuto y sabe que si logra separarnos del Cuerpo de Cristo somos presa fácil.
Hay una vieja ilustración que vale la pena recordar. Un pastor fue a visitar a un hermano que hacía tiempo que no veía. Mientras los dos se sentaban frente a una fogata, este hermano comenzó a hablar acerca de todas las razones que le impedían asistir a la iglesia. El pastor, en medio de la conversación se inclinó hacia el fuego y separó una brasa que poco a poco alejada de las llamas se fue apagando. Enseguida el hermano entendió el mensaje y a partir de ese día nunca dejó de congregarse. Buen ejemplo para nosotros.
Hebreros 10:25 dice: “No dejemos de congregarnos, como acostumbran hacerlo algunos, sino animémonos unos a otros, y con mayor razón ahora que vemos que aquel día se acerca”.
Nunca abandones la comunión. Ahora más que nunca necesitamos seguir preocupados unos por otros, nutriéndonos y creciendo espiritualmente y siendo de bendición.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Jueves 7 de septiembre, 2023
“Continúa aunque se corte la luz”
“Aunque ande en valle de sombra de muerte, No temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo”. Salmo 23:4
Había un domador de tigres extraordinario que hacía funciones diarias en un circo. Un día, en medio de la función, mientras se encontraba frente al tigre llevando en una mano un látigo y en la otra una silla, se cortó la luz. Todos los espectadores lanzaron un grito de espanto porque sabían que los tigres pueden ver muy bien en la oscuridad. Los segundos que corrían parecían horas interminables, hasta que de pronto volvió la luz. La escena era la misma, el domador seguía frente al tigre y el tigre inmóvil. Todos aplaudieron maravillados… o más bien aliviados.
Después de la función, un espectador se acercó al domador y le preguntó: “¿Cómo hizo para continuar sin problemas cuando se cortó la luz? Todos sabemos que los tigres pueden ver muy bien en la oscuridad…” El domador respondió: “Es que el tigre no sabe que yo no puedo ver en la oscuridad; así que seguí haciendo la función como si lo estuviera viendo”.
A veces nos pasa como a este domador, nuestra fe viene creciendo, nos sentimos victoriosos, parece que todas las preguntas tienen respuestas, las oraciones son contestadas… Pero en un momento, de manera abrupta, “se corta la luz”. Parece que espiritualmente no vemos nada. Ahora tenemos respuestas a peticiones pendientes, promesas en pausa, y parece que Dios no nos escucha. Entonces la fe empieza a flaquear y empezamos a ser gobernados por nuestras emociones.
Hay una gran diferencia entre sentirnos victoriosos y vivir como victoriosos. Romanos 8:37 dice: “Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó.” No importa cómo te sientas, Dios dice que eres más que vencedor. No depende de tus circunstancias sino de lo que Dios dice.
Cuando empieces a detectar que tus sentimientos parecen ser mayores que tu fe, recurre inmediatamente a Dios. No hace falta un prólogo, ni ser muy elocuentes para hablar con el Señor, Él nos dice que debemos “acercarnos confiadamente al trono de la gracia para hallar el oportuno socorro”.
Solo abandónate en sus brazos y escucha lo que Él quiera decirte porque tiene dirección para tu vida. Afirma tu fe en las declaraciones de Dios a sus hijos: “Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis. Entonces me invocaréis, y vendréis y oraréis a mí, y yo os oiré; y me buscaréis y me hallaréis, porque me buscaréis de todo vuestro corazón. Y seré hallado por vosotros, dice Jehová…” Jeremías 29:11-14.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Miércoles 6 de septiembre, 2023
“Designados para esta hora”
“¿Quién sabe si no llegaste a ser reina precisamente para un momento como este?” Ester 4:14.
Ester, una hermosa doncella judía, gana el primer lugar en el concurso de belleza Miss Persia y con ello se convierte en reina, esposa del rey Asuero. ¿Se imagina la satisfacción de esta joven? Era el orgullo de todos los hebreos. ¿Puede escuchar a Mardoqueo susurrarle al oído a una invitada a la boda: “Esa… es mi ahijada”? Si hubieran existido las revistas dedicadas a las noticias sociales uno de sus titulares habría sido: “De esclava a reina”. Ester, la joven que llegó a lo más alto... en un año.
Todo marchaba fantásticamente bien. Pero Amán, el malo de la película, logra que el rey firme un documento para que todos los judíos fueran sentenciados a muerte en una fecha determinada. La única manera de poder evitar esa tragedia estaba solo en las manos de Ester. Bajo estas circunstancias su tío Mardoqueo le dice: “No creas que por estar en el palacio escaparás cuando todos los demás judíos sean asesinados. Si te quedas callada en un momento como este, el alivio y la liberación para los judíos surgirán de algún otro lado, pero tú y tus parientes morirán. ¿Quién sabe si no llegaste a ser reina precisamente para un momento como este?” Ester 4:13-14.
Mardoqueo dio en la tecla. Si Dios en su providencia había permitido que Ester ocupara ese lugar, era con un propósito. Ella entendió el mensaje, asumió el riesgo y terminó siendo la heroína de la historia. Por su valor y determinación vino la salvación a su pueblo.
¿Y qué de nosotros? ¿Sabemos cómo nos quiere usar Dios en este momento? La misión más importante que se nos ha encomendado es mostrar el camino de salvación a todos los que nos rodean, y necesitamos hacerlo con el mismo valor que lo hizo Ester.
Como hijos de Dios hemos llegado hasta aquí para ser instrumentos suyos en medio del caos, ansiedad, desesperanza y confusión. Tú has experimentado los beneficios de la salvación de Cristo, por lo tanto, sabes de qué se trata. Con tus palabras, a tu manera, eres hoy el portador del mensaje. ¿Por qué crees que Dios se ha manifestado tantas veces a tu vida? ¿Con qué propósito Dios te ha sanado? ¿Por qué crees que Dios te puso en contacto con tantas personas? ¿Por qué crees que Dios te ha bendecido tanto?
Muchos necesitan creen en Jesucristo para alcanzar salvación eterna hoy y tú has sido designado por Dios para esta hora.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Martes 5 de septiembre, 2023
"El Dios Todo Suficiente"
“Y dijo a José: El Dios Omnipotente me apareció en Luz en la tierra de Canaán, y me bendijo”. Gn. 48:3.
Cada uno de los nombres de Dios describe un aspecto diferente de su carácter y su obra. Uno de ellos es El Shaddai que significa "uno que nutre, suple y satisface". Esta palabra es traducida como "Dios Todopoderoso", “Dios Omnipotente” o "Dios que es más que suficiente". Los teólogos concluyen que el significado completo de este nombre es el “Dios todo suficiente para las necesidades de su pueblo”.
Dios comenzó a revelarse con este nombre en la vida de Abraham. El Shaddai fue todo suficiente para sus necesidades, proveyendo esperanza y paciencia, fuerza, sabiduría y recursos materiales.
Dios continuó revelándose como El Shaddai a su descendencia. Isaac, el hijo de Abraham, usó este nombre para bendecir a su hijo Jacob: “Y el Dios Omnipotente te bendiga, y te haga fructificar y te multiplique, hasta llegar a ser multitud de pueblos; y te dé la bendición de Abraham, y a tu descendencia contigo...” (Gn. 28:3-4).
Dios vuelve a utilizar este nombre cuando se encontró con Jacob en Betel: “Yo soy el Dios Omnipotente, crece y multiplícate; una nación y conjunto de naciones procederán de ti, y reyes saldrán de tus lomos” (Gn. 35:11).
Jacob se lo dijo a José: “Y dijo a José: El Dios Omnipotente me apareció en Luz en la tierra de Canaán, y me bendijo” (Gn. 48:3). Moisés lo vuelve a repetir a la próxima generación… ¡y cantando!: “Antes que naciesen los montes y formases la tierra y el mundo, desde el siglo y hasta el siglo, tú eres Dios.” (Sal. 90:2).
La revelación de este maravilloso nombre también es para nosotros. Dios es Todo Suficiente para salvarnos a través de la obra completa y perfecta de Jesucristo.
Dios es Todo Suficiente para suplir nuestras necesidades emocionales. “Echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros” (1 Pedro 5:7).
Dios es Todo Suficiente para librarnos de nuestros temores. Sal. 34:4: “Busqué a Jehová, y él me oyó, y me libró de todos mis temores.”
Dios es Todo Suficiente para suplir necesidades materiales. “Y el que da semilla al que siembra, y pan al que come, proveerá y multiplicará vuestra sementera…” (2 Co. 9:10).
En tiempos difíciles, Dios quiere mostrarse como El Shaddai, el Todo Suficiente que sabe cuidar de cada uno de sus hijos.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Lunes 4 de septiembre, 2023
“Recupera lo que puedes haber perdido”
“Así que, amados hermanos, podemos entrar con libertad al Lugar Santísimo del cielo por causa de la sangre de Jesús. Por su muerte, Jesús abrió un nuevo camino, un camino que da vida…Ya que tenemos un gran Sumo Sacerdote que gobierna la casa de Dios, entremos directamente a la presencia de Dios con corazón sincero y con plena confianza en él”. Hebreos 10:19-22
Toda relación se construye, disfruta y fortalece a través de la comunicación. Como hijos de Dios, tenemos la oración como el recurso más valioso para acercarnos en todo momento a Él.
Este es uno de los privilegios más grandes que tenemos, por eso, cuando nuestra vida de oración se debilita y dejamos de acercarnos al Señor, sufrimos pérdidas importantes.
Pérdidas en nuestra relación con Dios.
- Cuando dejamos de orar nuestro conocimiento de Su persona es limitado.
- La perspectiva espiritual de lo que sucede a nuestro alrededor comienza a distorsionar porque empezamos a ver las cosas desde un punto de vista natural, humano, y entonces nuestra fe no se desarrolla correctamente.
- Perdemos dirección espiritual. De Dios tenemos la dirección que necesitamos para tomar buenas decisiones. Él nos dice: “Te haré entender, y te enseñaré el camino en que debes andar” (Sal. 32:8).
- Dejamos de sentir lo que Dios sienten por aquellos que aún no le conocen.
Pérdidas en nuestra alma.
- Si dejamos de orar ya no vamos a experimentar el amor, la paz y la seguridad de Dios como antes porque esto es el resultado de nuestra relación con Él. Para un niño el lugar más seguro siempre serán los brazos de sus padres no importa cuán fuerte sea la tormenta.
- Perdemos terreno que le habíamos ganado a nuestras debilidades ya que la fuerza para vencer la recibimos del Espíritu Santo.
Pérdida de bendiciones.
- Los suministros espirituales para los tiempos de prueba están disponibles para los hijos que piden, que buscan y que llaman. Esto es posible a través de la oración.
- Cuando no oramos el cielo está cerrado. Las bendiciones están listas, pero hay una pausa en la entrega porque no hay peticiones hechas con fe.
- Dejamos de ser canales para convertirnos en lagunas. La laguna es una masa de agua estancada, recibe pero no tiene desembocadura, no da. Cuando dejamos de orar, perdemos la oportunidad de bendecir a otros.
Nuestro Padre celestial siempre está listo y deseoso de que vayamos a Él, porque no solo nos escucha, sino que también nos quiere hablar. Los encuentros con el Señor son los que hacen la diferencia en nosotros cada día.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Domingo 3 de septiembre, 2023
Puedes ver el sermón de hoy a partir de las 11 am haciendo click aquí.
¡Dios te bendiga!
“Avanzando con fe”
“Como no podían llevarlo hasta Jesús debido a la multitud, abrieron un agujero en el techo, encima de donde estaba Él. Luego bajaron al hombre en la camilla, justo delante de Jesús. Al ver la fe de ellos, Jesús le dijo al paralítico: ‘Hijo mío, tus pecados te son perdonados’”. Marcos 2:4-5.
En cierta ocasión, llegaron cuatro amigos trayendo a un paralitico en una camilla. Jesús estaba enseñando dentro de una casa que estaba abarrotada de gente. Era imposible pasar por la puerta, y mucho menos con una camilla. Pero estos hombres no se iban a quedar allí parados lamentándose, no llevarían de regreso a su amigo en las mismas condiciones.
Jesús espera que demostremos verdadera fe y que nos atrevamos a enfrentar cualquier obstáculo. Que estemos dispuestos a quedarnos después de hora si es necesario para “reparar el techo”. Jesús busca hijos que se atrevan a perseverar hasta obtener las respuestas que necesitan.
Dios lo dejó claro en Jeremías 29:12-13: “Entonces me invocaréis. Vendréis y oraréis a mí, y yo os escucharé. Me buscaréis y me hallaréis, porque me buscaréis de todo vuestro corazón”.
¿Realmente estás orando con el máximo interés, buscando que Dios actúe con poder? ¿Cuánto tiempo estás dispuesto a perseverar en oración por una respuesta? A veces la respuesta puede llegar en un día, otras veces puede tomarse un poco más de tiempo. Pero Dios siempre responde las oraciones de fe de todo aquel que persevera.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Viernes 1 de septiembre, 2023
“En total comunión”
“Los gobernantes, al ver la osadía con que hablaban Pedro y Juan, y al darse cuenta de que eran gente sin estudios ni preparación, quedaron asombrados y reconocieron que habían estado con Jesús”. Hechos 4:13.
Allí estaban dos de los discípulos del Señor frente a los sabios religiosos que los intimidaban para que no hablaran más de Jesús. ¡Imposible! ¡Cómo iban a dejar de decir lo que habían visto y oído! Pedro dio un sermón tan poderoso que esta gente quedó maravillada y solo pudieron exclamar: “Han estado con Jesús”.
Cuando un discípulo ha estado con Jesús se nota en su manera de hablar. Sus palabras son dichas con autoridad. Después que Pedro y Juan sanaran al paralítico, los religiosos judíos le preguntaron: “¿Con qué potestad, o en qué nombre habéis hecho vosotros esto? ¡En el nombre de Jesucristo de Nazaret! (vs. 7,10). Ahí radica la autoridad.
Un discípulo que ha estado con Jesús manifiesta convicciones firmes. Nadie quebranta su fe porque sabe en Quién ha creído. “Sepan, pues, todos ustedes y todo el pueblo de Israel que… Jesucristo es la piedra que desecharon ustedes los constructores, y que ha llegado a ser la piedra angular” (vs. 10-11).
Un discípulo que ha estado con Jesús está dispuesto a todo por amor al Señor, incluso a perder su propia vida. Pedro y Juan fueron muy contundentes ante la intimidación de las autoridades religiosas: “Juzgad si es justo delante de Dios obedecerlos a vosotros antes que a Dios…” (v. 19). No había manera de atemorizarlos.
Un discípulo que ha estado con Jesús tiene un mensaje claro que transmitir. “Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos” (v. 12). Jesús es el único camino a Dios. Lo aceptas o lo rechazas. El mensaje no se negocia.
Necesitamos la autoridad, las convicciones firmes y la disposición que tenían los primeros discípulos de Jesús para transmitir lo que Cristo vino a ofrecer al mundo, y la manera de obtener todo esto es manteniéndonos en estrecha comunión con Él.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Jueves 31 de agosto, 2023
“¿Quién tiene el control?”
“Mejor es el que tarda en airarse que el fuerte; y el que se enseñorea de su espíritu, que el que toma una ciudad.” Proverbios 16:32.
De acuerdo con este versículo, el secreto de la fortaleza y el poder no está en controlar a otros sino en controlarnos a nosotros mismos. El rey Salomón dice que es más fuerte el que puede enseñorear su espíritu que el que toma una ciudad entera.
La palabra enseñorear en hebreo es mashal que significa “gobernar, apoderarse, dominar, regir, reinar”. Se refiere a una persona que puede tomar decisiones sin ser gobernado por sus pasiones, deseos y sentimientos. ¿Es posible? Humanamente no, sobrenaturalmente sí.
Cuando aceptamos a Cristo como Salvador y Señor de nuestra vida, el Espíritu Santo viene a morar en nosotros para transformarnos, guiarnos y ayudarnos, siempre que nos rindamos a su gobierno. No se trata de cambiar a través del autocontrol, esto no es efectivo. Solo el Espíritu Santo puede equiparnos con dominio propio.
¿Quién controla tu vida? ¿Tus deseos, los del mundo, los del diablo? ¿Se manifiesta la obra del Espíritu Santo en tu carácter, palabras y conducta? Tal vez necesitemos hacer una nueva “rendición”, entregando el control al Espíritu Santo para dar lugar a su guía permanente. “Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios, éstos son hijos de Dios.” (Romanos 8:14).
Es cierto, el mundo sería muy diferente si todos pudiéramos enseñorearnos de nuestro espíritu, pero el cambio es posible uno a uno. Que empiece por ti y por mí. Que hoy el Espíritu Santo nos controle para que nuestra vida refleje que somos verdaderos hijos de Dios.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Miércoles 30 de agosto, 2023
“Silencio”
“Esto sucedió el viernes por la tarde, el día de preparación, cuando el día de descanso estaba por comenzar. Mientras llevaban el cuerpo, las mujeres de Galilea iban detrás y vieron la tumba donde lo colocaron. Luego fueron a sus casas y prepararon especias y ungüentos para ungir el cuerpo de Jesús; pero cuando terminaron ya había comenzado el día de descanso, así que descansaron como ordena la ley.” Lucas 23:54-56
¡Qué difícil habrá sido ese sábado para todos los seguidores del Señor! Sus corazones estaban destrozados, tenían muchas preguntas dando vueltas en sus cabezas y ninguna respuesta, solo silencio, un silencio que los llevó a cuestionarse muchas cosas…
No podemos condenar a los discípulos por lo que sentían, porque muchas veces nosotros llegamos a sentir lo mismo frente a los silencios de Dios. Pero es importante recordar, que cada vez que Dios guardó silencio, siempre fue con un propósito.
Dios irrumpió en la vida de Moisés con una zarza ardiendo después de 40 años de silencio. Un ángel le llevó a Daniel una revelación poderosa después de 21 días. Los ángeles vinieron a servir a Jesús después de 40 días de ayuno y tentación. Dios envió a Jesucristo al mundo después de 400 años de silencio. Y después del sábado silencioso vino la obra culmine de Dios: Jesús resucitó de los muertos, su obra salvadora entró en acción, comenzó la dispensación de la gracia, y ahora sabemos que a la final trompeta vamos a resucitar como Él.
Tal vez te encuentres en un “sábado silencioso”, sin respuestas, sin fe ni esperanza, pero eso no significa que Dios dejó de trabajar en el plan que trazó para ti.
Alguien dijo que en toda buena interpretación musical el silencio debe tener tanto peso como el sonido porque sirve para dar fuerza al mensaje que tiene la obra. Así que si prestas atención, podrás descubrir en este tiempo de silencio lo que Dios quiere decirte y probarás una vez más, que nunca se olvidó de ti.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Martes 29 de agosto, 2023
“Su ayuda no se tarda”
“Pacientemente esperé a Jehová, y se inclinó a mí, y oyó mi clamor. Y me hizo sacar del pozo de la desesperación, del lodo cenagoso; puso mis pies sobre peña, y enderezó mis pasos. Puso luego en mi boca cántico nuevo, alabanza a nuestro Dios. Verán esto muchos, y temerán, y confiarán en Jehová.” Salmo 40:1-3.
Muchos justos ante los ojos de Dios han pasado literalmente por el “pozo de la desesperación”. José fue arrojado a un pozo por sus hermanos, Daniel a uno lleno de leones hambrientos, Jeremías fue puesto en una cisterna sucia.
La palabra “desesperación” en hebreo es el vocablo shaon, cuya raíz etimológica significa: estruendo, tumulto, estrépito. Generalmente se refiere al alboroto de la batalla, donde todo lo que se escucha está relacionado con la muerte.
En la mente del que está en esa condición solo hay miedo a sufrir pérdidas, temor a quedarse solo, encerrado para siempre, como si estuviera siendo absorbido por lodo. Así se sintió David, el rey que tenía el corazón de Dios, el dulce pastor de Israel que inspiraba a otros con sus alabanzas. Y así podríamos sentirnos nosotros…
Pero hay una forma de salir adelante y la encontramos en el mismo Salmo: Esperar en Jehová con paciencia porque el Señor vendrá en nuestro auxilio. Y dejarnos ayudar. “Me hizo sacar”. Dios tiene recursos inagotables para ayudarnos a vencer el miedo, la ansiedad y la desesperanza. Debemos estar atentos a la ayuda que Él nos envíe.
Las evidencias de haber sido librados son claras: Comenzamos a caminar seguros. Nos damos cuenta que nuestra experiencia puede ayudar a otros a buscar en Dios la salida que están necesitando. Y hay un “canto nuevo” en nuestra alma. David lo expresó así en los vs. 16 y 17: “Gócense y alégrense en ti todos los que te buscan, y digan siempre los que aman tu salvación: Jehová sea enaltecido. Aunque afligido yo y necesitado, Jehová pensará en mí. Mi ayuda y mi libertador eres tú; Dios mío, no te tardes.”
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Lunes 28 de agosto, 2023
“Permanecer unidos”
“Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer”. Juan 15:5.
Una parábola es un relato corto, una historia sencilla en donde se establece una comparación. Jesús usaba este recurso al aprovechar situaciones o elementos con los que todos estaban familiarizados para enseñarles una verdad espiritual.
En el versículo mencionado, el Señor usa la vid para establecer una comparación entre ella y nuestra vida. ¿Qué sucede cuando una rama es cortada? Se seca. ¿Una rama puede dar frutos sin estar unida a la planta? Nunca. Así sucede con nosotros y Jesús. Él es la vid verdadera, nosotros las ramas, si no dependemos de Él totalmente no hay vida espiritual. La lección es fácil de comprender y aplicar.
Nuestra relación con Cristo es vital. Sin Él, nada podemos hacer. Este “nada” es absoluto. En griego es oudeis, que significa “nadie, ninguno”. El Señor da vida y la sustenta con la palabra de su poder. Lo reconozcamos o no, si Él retirara su mano de nuestra vida viviríamos en un caos absoluto.
La idea clave en esta parábola es la permanencia. Si recurrimos a Jesús solo en los momentos de necesidad, entonces vivimos como una rama desprendida que solo intenta unirse a la vid cuando quiere uvas. La naturaleza nos enseña que esto no es posible. El fruto es el resultado de una conexión ininterrumpida con la planta.
Jesús nos quiere injertados firmemente en Él para que podamos disfrutar de la vida abundante que nos prometió y que demos mucho fruto.
¿Cómo vas a comenzar tu día? ¿Estás conectado a Cristo? Nuestra dependencia de Él es esencial. No hay nada como vivir plenamente unidos al Señor.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Domingo 27 de agosto, 2023
“Declarado justo”
“Y como insistían en preguntarle, se enderezó y les dijo: El que de vosotros esté sin pecado sea el primero en arrojar la piedra contra ella. Pero ellos, al oír esto, acusados por su conciencia, salían uno a uno, comenzando desde los más viejos hasta los postreros...” Juan 8:7,9a.
Jesús experimentó en carne propia la condenación. Lo condenaron por no guardar el sábado, por manifestar que era el Hijo de Dios, por decir que era preexistente a Abraham, por denunciar a los hipócritas, por hacer el bien y estar en contra del status quo religioso. Así que Jesús sabe lo que se siente cuando eres acusado verbalmente y condenado en el corazón. Claro, la gran diferencia está en que Jesús nunca pecó.
Pero Jesús no vino a acusar al pecador, sino a salvarlo. “Porque no envió Dios a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por él.” (Juan 3:17). Cuando los religiosos que buscaban tentar a Jesús para acusarle escucharon sus palabras, dejaron caer las piedras y se marcharon, solo quedaron la mujer y el Maestro. Entonces el Señor se acercó y le dijo: “Ni yo te condeno; vete, y no peques más.” (V.11).
La ley condena. Jesús salva. La ley es como un termómetro que solo sirve para “medir la fiebre”; solo el Señor puede curarnos. Cuando nos acercamos a Él y manifestamos verdadero arrepentimiento, perdona todos nuestros pecados y nos asegura que ya no pesa sobre nosotros ninguna condenación. “¿Quién es el que condenará? Cristo es el que murió; más aún, el que también resucitó, el que además está a la diestra de Dios, el que también intercede por nosotros.” (Romanos 8:34).
¡Eres libre por su sacrificio! No dejes que pensamientos condenatorios o acusaciones de los demás te hagan retroceder. Tu fe en Cristo te ha salvado.
“Por lo tanto, ya que fuimos declarados justos a los ojos de Dios por medio de la fe, tenemos paz con Dios gracias a lo que Jesucristo nuestro Señor hizo por nosotros. Debido a nuestra fe, Cristo nos hizo entrar en este lugar de privilegio inmerecido en el cual ahora permanecemos, y esperamos con confianza y alegría participar de la gloria de Dios.” Romanos 5:1-2.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Viernes 25 de agosto, 2023
“Y después de verte en el espejo…”
“El que escucha la palabra pero no la pone en práctica es como el que mira su cara en un espejo y en cuanto se va, se olvida de cómo era”. Santiago 1:23-24.
Santiago nos presenta esta comparación para hablarnos acerca de lo que nos puede pasar si solo leemos o escuchamos la Palabra de Dios y no hacemos nada con lo que el Señor nos enseña. Hay pasajes que nos motivan a seguir adelante, otros que nos exhortan a cuidar nuestra vida espiritual, o abandonar el pecado. ¿Qué estamos haciendo con esas verdades?
Cuando te ves despeinado, no esperas a que abra la peluquería para que hagan algo. De la misma manera, cuando Dios te habla, no puedes esperar a ir a la iglesia el domingo para comenzar a hacer cambios en tu vida. Debe haber una acción inmediata.
Tampoco deberíamos mirarnos en el espejo de la Palabra para pensar en los cambios que otros tienen que hacer. La actitud correcta es “recibir con humildad el mensaje que Dios nos ha dado” (v. 21), y aceptar ser perfeccionados.
Si vamos a compararnos con alguien, que sea con Cristo. Leemos en 2 Corintios 3:18: “Por tanto, todos nosotros, mirando con el rostro descubierto y reflejando como en un espejo la gloria del Señor, somos transformados de gloria en gloria en su misma imagen por la acción del Espíritu del Señor”.
Aquí está la clave para nuestra transformación: Dejar que el Espíritu Santo trabaje en nosotros. Aunque nos esmeremos mucho, no tenemos la capacidad de asemejarnos a Cristo con nuestras propias fuerzas, por eso el Espíritu Santo vino a morar en nosotros. Él es quien produce los cambios; nuestra parte en el proceso es someternos a Él cada día y obedecerle.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Jueves 24 de agosto, 2023
“Sinceramente, gracias”
“Yendo Jesús a Jerusalén, pasaba entre Samaria y Galilea. Y al entrar en una aldea, le salieron al encuentro diez hombres leprosos, los cuales se pararon de lejos y alzaron la voz, diciendo: ¡Jesús, Maestro, ten misericordia de nosotros! Cuando él los vio, les dijo: Id, mostraos a los sacerdotes. Y aconteció que mientras iban, fueron limpiados. Entonces uno de ellos, viendo que había sido sanado, volvió glorificando a Dios a gran voz, y se postró rostro en tierra a sus pies dándole gracias; y éste era samaritano. Respondiendo Jesús, dijo: ¿No son diez los que fueron limpiados? Y los nueve, ¿dónde están?”. Lucas 17:11-20.
Los contextos cambian, las culturas pueden ser diferentes, pero el corazón humano es siempre el mismo. A través de esta historia Jesús pone en evidencia una realidad: No todos son realmente agradecidos. ¡Solo uno de los diez sanados fue capaz de reconocer el milagro y darle gracias al Señor! La pregunta de Jesús sigue resonando hasta hoy: ¿Dónde están los otros nueve?
¿Por qué a algunas personas les resulta difícil ser agradecidas? Hay varias razones.
Hay personas que creen que merecen lo que reciben. Se miran a sí mismos y creen que todo lo obtienen por merecimiento propio, como si el mundo estuviera en deuda con ellos. ¡Parecen ser el centro del universo! Jesús siempre ha reprobado esta actitud. Los fariseos eran un típico ejemplo de esto.
Hay personas que no han aprendido a ser agradecidas. Nadie les dio ejemplo, han crecido en un ambiente egoísta, mezquino, o tal vez de supervivencia. Necesitan saber que el agradecimiento es una actitud que nace en el corazón y se manifiesta externamente.
Hay personas que solo se enfocan en sí mismas. Sus metas son egoístas. Cuando hacen regalos, piensan en la forma que le devolverán el gesto.
Si Cristo ha venido a morar en nuestro corazón y somos conscientes de lo que Él hizo por nosotros, sabemos que nada merecemos, que todo lo obtenemos por gracia.
Dar gracias enaltece al Señor y lo reconoce como la fuente de todas nuestras bendiciones. Él espera que seamos agradecidos, no que tengamos la actitud de los nueve leprosos del pasaje que fueron sanados y simplemente siguieron su camino.
El apóstol Pablo dice: “Sed agradecidos” (Colosenses 3:15). “Dad gracias en todo” (1 Tesalonicenses 5:18). “Dando siempre gracias por todo” (Efesios 5:20). Debemos tener siempre esta actitud, porque así reflejamos el carácter de Cristo.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Miércoles 23 de agosto, 2023
“¿Qué eliges?”
“Pero tú quédate aquí conmigo…” Deuteronomio 5:31.
Cerca de tres millones de israelitas salieron de Egipto rumbo a Canaán. Cuando conocieron a Dios en Sinaí se llenaron de espanto y terror por su presencia a tal punto que le dijeron a Moisés que ellos no querían hablar con Dios directamente porque morirían. “¿Para qué exponernos a morir consumidos por este terrible fuego? Si volvemos a escuchar la voz del Señor nuestro Dios, moriremos… Mejor acércate tú, y escucha todo lo que el Señor nuestro Dios te diga, y ya luego nos dirás lo que te haya comunicado…” (Deuteronomio 5:25,27).
Moisés sentía temor santo y reverente por Dios, nunca terror al punto de querer huir de su presencia por miedo a perder la vida. Él llegó a construir una relación tan estrecha con Dios que sus diálogos eran como de dos verdaderos amigos.
Cuando el pueblo prefirió tomar un intercesor en vez de relacionarse directamente con Dios, Él le dijo a Moisés: “Ve y diles que regresen a sus tiendas”. (Deuteronomio 5:30). Después de despedirlos, Dios habló al corazón de Moisés: “Pero tú quédate conmigo”. Casi puedo escuchar a Dios diciéndole: “Todos los demás se han retirado, nadie quiere pasar tiempo conmigo, ¿quieres quedarte Moisés? Tengo mucho que decirte…”.
¿Has escuchado la voz del Señor diciéndote: “Quédate conmigo”? ¿Cómo respondiste? Pienso que muchos de nosotros tenemos nuestras agendas tan cargadas de actividades y vivimos tan apurados, que finalmente el Señor nos dice: “Bueno, vuélvete a tu casa, a tus cosas… Tal vez mañana sea el día de un encuentro real…”
Creo que la mayoría vuelve a sus múltiples ocupaciones sin ninguna preocupación acerca de lo que acaba de perder, pero hay un grupo especial que escoge la buena parte que nunca les será quitada: Una experiencia maravillosa con el Padre Celestial que transforma el espíritu, el alma y hasta el cuerpo.
¿Eres de los que se “vuelven a su casa” o buscas con anhelo tiempo para estar en la presencia del Señor?
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Martes 22 de agosto, 2023
“Dios tiene tu vida en sus manos”
“Jehová el Señor es mi fortaleza, el cual hace mis pies como de ciervas, y en mis alturas me hace andar” Habacuc 3:19.
Habacuc fue un profeta que atravesó un tiempo de crisis política, financiera y económica. La situación se había vuelto insostenible en Israel, pero a diferencia de aquellos que pueden enloquecer en medio de una situación así, Habacuc fue a su casa a orar, meditar y esperar en Dios. Y la respuesta llegó.
Observe cómo describe el profeta su encuentro con Dios. “Oh Jehová, he oído tu palabra, y temí. Oh Jehová, aviva tu obra en medio de los tiempos, en medio de los tiempos hazla conocer; en la ira acuérdate de la misericordia… Su gloria cubrió los cielos, y la tierra se llenó de su alabanza. Y el resplandor fue como la luz; rayos brillantes salían de su mano, y allí estaba escondido su poder”. (Habacuc 3:2-4).
Después de ese encuentro, todo cambió para Habacuc. Así expresó lo que había en su corazón: “Aunque la higuera no florezca, ni en las vides haya frutos, aunque falte el producto del olivo, y los labrados no den mantenimiento, y las ovejas sean quitadas de la majada, y no haya vacas en los corrales; con todo, yo me alegraré en Jehová, y me gozaré en el Dios de mi salvación.” (Hab. 3:17-18).
Las circunstancias no controlaron los sentimientos de Habacuc, sino la fe en la capacidad de Dios para darle una solución a cualquier situación.
Cuando los problemas que atraviesas te parezcan demasiado grandes, ve a Dios y deja que te recuerde quién está a cargo de tu vida.
“Jehová el Señor es mi fortaleza, el cual hace mis pies como de ciervas, y en mis alturas me hace andar” Habacuc 3:19.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Lunes 21 de agosto, 2023
“Secarnos o recuperar nuestra vitalidad”
“Y todos los pozos que habían abierto los criados de Abraham su padre en sus días, los filisteos los habían cegado y llenado de tierra. Y volvió a abrir Isaac los pozos de agua que habían abierto en los días de Abraham su padre, y que los filisteos habían cegado después de la muerte de Abraham; y los llamó por los nombres que su padre los había llamado.” Génesis 26:15,18
En Canaán, para encontrar agua potable que garantizará la subsistencia, había que cavar pozos profundos. Cuando Isaac va a ver los pozos que habían sido abiertos por los criados de su padre, encuentra que los filisteos los habían segado. Envidiaban tanto a Isaac, que decidieron complicar su vida tapando las fuentes de agua. Pero lejos de ser amedrentado por sus enemigos, él recordó las promesas que Dios les había dado y decidió recuperar los pozos perdidos. Así lo hizo, y además encontró pozos nuevos para poder asentarse en ese territorio.
Metafóricamente hablando, nuestro corazón también puede ser “tapado” por nuestro enemigo. Desde donde debería fluir Agua Viva, ahora solo hay un montón de tierra; y a menos que identifiquemos lo que está obstruyendo el fluir de Cristo en nuestras vidas, podemos secarnos y morir espiritualmente.
Hay muchas cosas que pueden estar impidiendo que ese río de Dios fluya en ti: Desaliento, desilusión, sentimientos de soledad, pereza, frustración, cansancio…
¡Es hora de levantarte y recuperar lo perdido! No permitas que Satanás te siga engañando. Él quiere verte morir de sed, pero el Señor espera que lo resista. Dios te ha dado poder para vencer.
El Señor está esperando que te vuelvas a Él de todo corazón. Estás solo a un paso de que se cumpla su Palabra: “El que cree en mí, como dice la Escritura, de su interior correrán ríos de agua viva.” (Juan 7:38). Él es el único que puede recupera tu corazón y saciar tu sed.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Domingo 20 de agosto, 2023
Puedes ver el sermón de hoy a partir de las 11 am haciendo click aquí.
¡Dios te bendiga!
No olvides seguir dependiendo de Él.
“Jehová estará con vosotros, si vosotros estuviereis con él; y si le buscareis, será hallado de vosotros; mas si le dejareis, él también os dejará”. 2 Crónicas 15:2b.
El rey Asa y su ejército venían de obtener la victoria más importante. Dios había destruido al ejército enemigo de ¡un millón de soldados! Venían eufóricos celebrando el triunfo, y a su regreso a Jerusalén les sale al encuentro Azarías, un profeta de Dios que tenía un mensaje de parte de Él: “Oídme, Asa y todo Judá y Benjamín: Jehová estará con vosotros, si vosotros estuviereis con él; y si le buscareis, será hallado de vosotros; mas si le dejareis, él también os dejará” (v. 2). Las palabras de Azarías, les hizo recordar Quién les había dado la victoria y de Quién debían seguir dependiendo.
Muchas veces nos sucede que después de experimentar una victoria espiritual o recibir una respuesta milagrosa de Dios, nos olvidamos de seguir dependiendo de Él. Es fácil llegar a pensar que tenemos derecho permanente al favor y la bendición de Dios aunque no le busquemos. Sin embargo, si queremos su respaldo, necesitamos acudir a Él en todo momento.
Para convertirnos en las personas que Dios quiere que seamos y cumplir con su voluntad en nuestra vida, debemos sumergirnos en una relación de dependencia diaria y no circunstancial. Si descuidamos nuestra relación con el Señor, nos privamos de todos los beneficios que Él promete a aquellos que le buscan con interés.
El profeta Jeremías lo expresó de esta manera: “Mi porción es Jehová, dijo mi alma; por tanto, en él esperaré. Bueno es Jehová a los que en él esperan, al alma que le busca”. (Lamentaciones 3:24-25). Estas son las palabras de alguien que ha buscado al Señor y le ha hallado. De alguien que sabe que fuera del Señor no habrá nada que satisfaga verdaderamente su vida.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Viernes 18 de agosto, 2023
“Pasado, presente y futuro en Sus manos”
“Ahora escuchen con cuidado, ustedes los que dicen: ‘Hoy y mañana iremos a tal o cual ciudad, y estaremos allá un año, y haremos negocios, y ganaremos dinero’. ¡Si ni siquiera saben cómo será el día de mañana! ¿Y qué es la vida de ustedes? Es como la neblina, que en un momento aparece, y luego se evapora. Lo que deben decir es: ‘Si el Señor quiere, viviremos y haremos esto o aquello’.” Santiago 4:13-15.
Santiago, el hermano de Jesús, siempre fue muy directo. Lo sabemos por sus intervenciones en la iglesia primitiva, pero también por su epístola. Con total claridad nos dice que debemos tener cuidado de la forma en que nos referimos al mañana.
Uno de los errores que podemos cometer, es estar muy confiados de que tendremos el día de mañana y manejarnos como si no estuviéramos regidos por lo que Dios ha determinado. Por supuesto que también la Biblia nos dice que debemos planificar, ser organizados, y prepararnos para el futuro, pero la intención de Santiago es recordarnos que el futuro siempre estará en las manos de Dios. Nunca debemos olvidar esto.
Antes de planificar debemos orar preguntándole al Señor qué tiene pensado para nosotros. A veces Dios nos mostrará claramente lo que debamos hacer, otras veces nos impulsará a avanzar hasta llegar a la puerta abierta, y en otras ocasiones, esperará que nosotros avancemos hasta que Él nos detenga con una puerta cerrada. Una puerta cerrada no significa que nos hemos equivocado en todo lo que hemos hecho. El apóstol Pablo había predicado en muchos lugares, pero cuando avanzó hacia la región de Asia y Bitinia, el Espíritu Santo se lo prohibió (Hechos16:6-10). Luego le mostró otra puerta abierta y partió para Macedonia.
El futuro no nos debe provocar ansiedad, como nos exhortó el Señor (Mateo 6:25), pero tampoco debemos llegar a creer que nosotros tenemos el control total de lo que pasará. Ahí es cuando Santiago nos dice que debemos sujetarnos a la voluntad de Dios.
Cuando te toque planificar para mañana, recuerda que tus planes están en las manos del Señor. No uses la expresión: “Si Dios quiere” y luego en la práctica te guíes por tus deseos y percepciones. Si conoces cómo Dios ha obrado en el pasado, entonces confía que sabrá guiar tu futuro.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Jueves 17 de agosto, 2023
“Nos libra de nuestras aflicciones”
“Porque Jehová vio que Israel sufría una amarga aflicción, y que no había siervo ni libre, ni nadie que ayudara a Israel.” 2 Reyes 14:26.
Israel se encontraba en una condición deplorable. Sus líderes eran corruptos, inmorales, idólatras, y el pueblo imitaba a los cananeos y seguía a sus dioses. Las consecuencias fueron desastrosas, a tal punto que nadie quería ayudar a Israel. Ni siquiera les convenía a los pueblos vecinos hacer alianzas con los hebreos porque no tenían nada que ofrecer. Estaban en “amarga aflicción”.
La palabra aflicción usada aquí es el vocablo hebreo oni que significa “depresión, miseria, angustia, pobreza, abatir, humillar, quebrantar, deshonrar”. El pueblo estaba experimentando todo esto: pobreza espiritual y económica, eran menospreciados por todos, y habían caído en depresión. No había salida.
Dios era el único que podía ayudar a Israel. Siempre es así, Él ve la aflicción de su pueblo y acude a socorrerlo. Su misericordia y compasión no le permiten permanecer quieto.
¡Qué incomprensible es la misericordia de Dios! ¿Crees que su pueblo merecía esta salvación? Claro que no. De la misma manera sucede con nosotros, nunca seremos merecedores de la salvación de Dios, de sus rescates oportunos, de su benevolencia, de sus bendiciones diarias.
¿Por qué Dios se mueve con esa compasión? Porque Él realmente ama a su pueblo, no lo puede ver en amarga aflicción. Dios siempre nos está buscando para darnos oportunidad de arrepentimiento y restaurar nuestra relación con Él. ¡Sigue siendo Emanuel, Dios con nosotros!
Siempre que nos volvamos sinceramente al Señor, nos perdonará y nos guiará por el camino correcto. Él está atento a nuestro clamor. “Entonces clamaron a Jehová en su angustia, y los libró de sus aflicciones.” (Salmo 107:6).
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Miércoles 16 de agosto, 2023
“Un instrumento de victoria”
“Después de Aod fue Samgar, hijo de Anat, quien rescató a Israel. En una ocasión mató a seiscientos filisteos con una aguijada para bueyes”. Jueces 3:31.
Después que murió Josué, el sucesor de Moisés que introdujo a Israel en la tierra prometida, Dios levantó jueces para liberar al pueblo de la opresión de sus enemigos. Samgar fue uno de ellos. Es interesante notar que el significado de su nombre en hebreo es “El que huye”. El nombre que le habían puesto sus padres no concordaba con el llamado de Dios para él. Samgar tuvo que ir en contra de su propia identidad para ser vencedor. Yo le cambiaría el nombre por “No-más-Samgar”. ¡Qué valiente resultó este juez!
Durante una batalla, este campesino mató a 600 enemigos solo con una vara larga con punta de hierro que usaba para arrear a los bueyes. Seiscientas personas son un gran batallón. Si recuerdas, este era el número del ejército de David antes de ser nombrado rey. ¡Una persona puesta en las manos de Dios puede más que un numeroso batallón de soldados adiestrados para la guerra!
Presta atención al instrumento con el que libró esa batalla, una aguijada. Por favor, busca en Google una imagen de este instrumento y podrás decir conmigo: “¿Con esto mató a 600 filisteos…?” ¡Tremendo!
¿Y por qué una aguijada y no una espada? Es que los filisteos siempre le quitaban las armas y hasta los herreros a Israel. Entonces, como no había espadas, había que usar lo que tuvieran a mano. El instrumento que servía para que los bueyes hicieran el trabajo ¡se convirtió en un arma mortal!
Cuántas veces nos sentimos como una aguijada cuando el Señor nos llama a hacer algo para Él y decimos: “Yo no sirvo para esto”, “no soy apto para este trabajo”, “nunca enfrenté a grandes desafíos…”. Cuando el Señor nos llama a hacer algo, no se trata de nosotros, sino de Quien nos capacita. No importa el instrumento cuando es Dios quien da la fuerza y el poder.
Cuanto más insignificante es el instrumento, más gloria trae al Señor. Sansón mató a mil con una quijada de burro, Dios habló a Balaam por medio de una burra, una simple piedra derribó a Goliat. El poder de Dios es el que hace útil a un simple instrumento.
Dios quiere usarte para su gloria. No huyas más de su llamado. Confía en quién te dice el “Yo Soy está contigo”. ¡Todo lo puedes en Cristo que te fortalece!
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Martes 15 de agosto, 2023
“Nuestra identidad celestial”
“Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de Aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable; vosotros que en otro tiempo no erais pueblo, pero que ahora sois pueblo de Dios; que en otro tiempo no habíais alcanzado misericordia, pero ahora habéis alcanzado misericordia”. 1 Pedro 2:9-10.
¡Qué privilegio tremendo tenemos los que somos hijos de Dios! Antes de recibir a Cristo como Salvador y Señor de nuestras vidas estábamos en tinieblas, sin rumbo, sin esperanza a causa del pecado, pero Jesús nos dio vida y ahora somos su pueblo. ¡Aleluya!
En este pasaje, el apóstol Pedro menciona cuatro privilegios alcanzados por los redimidos.
Somos “linaje escogido”. Ahora pertenecemos a la familia de Abraham por la fe. Somos llamados hermanos junto con Cristo. ¡Bendita genealogía espiritual! Ahora Dios es nuestro Padre. Desde la eternidad Él nos eligió para que fuésemos suyos, “según nos escogió en él antes de la fundación del mundo” (Efesios 1:4a). Cada día Dios está concentrado en ti, pues eres su hijo amado, su escogido, heredero de todas las riquezas espirituales.
“Real sacerdocio”. Bajo el antiguo pacto, la realeza y el sacerdocio estaban separados. Ahora nosotros, en la persona de nuestro Rey de reyes y Señor de señores, somos reyes y sacerdotes para Dios.
“Nación santa”. Somos una nación porque estamos bajo su gobierno. Al ser santa significa que está apartada y libre de destrucción como consecuencia del pecado. Cristo ahora es nuestra justicia.
“Pueblo adquirido”. Cristo fue el que nos adquirió, el que pagó el precio de nuestro rescate. Su obra de redención requirió el precio del derramamiento de su sangre. Nuestro valor depende de Aquel a quien le pertenecemos. Eres su posesión exclusiva y ¡eres su especial tesoro!
Estos privilegios tan altos no tienen el propósito de ser lucidos o simplemente hablar de ellos, sino que deberían afectar diariamente la manera en que vivimos y el servicio que llevamos a cabo al anunciar las virtudes de Aquel que ha hecho grandes cosas por nosotros.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Lunes 14 de agosto, 2023
“Renovación en Su presencia”
“Y aquel que tenía semejanza de hombre me tocó otra vez, y me fortaleció, y me dijo: Muy amado, no temas; la paz sea contigo; esfuérzate y aliéntate. Y mientras él me hablaba, recobré las fuerzas, y dije: Hable mi señor, porque me has fortalecido”. Daniel 10:18-19.
Después de haber leído y escudriñado los escritos del profeta Jeremías, Daniel sabía que estaba cerca el tiempo de la restauración de Israel. Después de setenta años, el pueblo de Dios volvería a su tierra y se levantaría otra vez como nación. Pero, ¿estaba preparado espiritualmente el pueblo para enfrentar esta nueva etapa? ¿Tenían los recursos necesarios para levantarse nuevamente?
El profeta Daniel había buscado a Dios por espacio de tres semanas para tener respuestas y estaba exhausto, a tal punto que no podía ponerse en pie. Ya no era el adolescente que había sido traído de Jerusalén a Babilonia.
¡Pero Dios siempre interviene a tiempo y envía un ángel para darle nuevas fuerzas! Con cada palabra que escuchaba, Daniel sentía que estaba siendo renovado. Veamos con atención cuáles fueron esas palabras:
“Muy amado”: Todo hijo de Dios debe saber que es muy amado por el Padre Celestial. La Biblia dice que Él no hace diferencias, el amor que te tiene a ti es el mismo que le tuvo a Daniel. Cuando recordamos cuánto nos ama y experimentamos ese amor aun en los pequeños detalles de nuestro día a día, aumenta nuestra motivación para seguir adelante.
“No temas, la paz sea contigo”: Cuando la paz del Señor llena nuestra alma, los temores se van. Cuando Jesús nos dice que nos da su paz, también nos dice “no se turbe vuestro corazón ni tenga miedo” (Juan 14:27). ¡Su paz nos hace vivir confiados bajo su cuidado y protección!
“Esfuérzate y aliéntate”: Hay una parte que debemos hacer nosotros. Dios renueva nuestras fuerzas, pero nosotros debemos decidir seguir adelante. Si nos dice que debemos levantarnos, eso es lo que nos toca hacer. Si nos dice “esfuérzate”, significa que debemos emplear esas fuerzas en lo que nos pida. Si nos dice “aliéntate”, debemos creer que el Espíritu Santo nos dará el apoyo necesario para seguir adelante.
“Mientras él hablaba recobré las fuerzas”. No necesitas que venga literalmente un ángel del cielo a fortalecerte porque Dios ya te ha dado las palabras que renovarán tu vida como la de Daniel. Ahora debes creerlas para ser fortalecido.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Domingo 13 de agosto, 2023
Puedes ver el sermón de hoy a partir de las 11 am haciendo click aquí.
¡Dios te bendiga!
“Venciendo gigantes”
“Porque únicamente Og rey de Basán había quedado del resto de los gigantes. Su cama, una cama de hierro, ¿no está en Rabá de los hijos de Amón? La longitud de ella es de nueve codos, y su anchura de cuatro codos, según el codo de un hombre”. Deuteronomio 3:11.
El rey Og dormía en una cama que medía más de ¡13 pies de largo por 6 pies de ancho! Si estás acostumbrado al sistema métrico, son 4,11 metros de largo por 1,82 m de ancho. ¿Puedes hacerte una idea de su tamaño? ¡Media un metro y medio más que Goliat!
Este rey intimidaba con solo verlo. ¿Alguien podría tener el valor suficiente para enfrentarlo? Sí, si a esa persona Dios le había prometido la victoria; pero había que creer la promesa. La generación de israelitas que salió de Egipto no pasó la prueba y murieron en el desierto. Pero sus hijos, la siguiente generación, creyeron y avanzaron confiando en Dios.
Casi al final de los 40 años de peregrinación por el desierto, el pueblo de Israel se encontraba al este del Jordán, y el rey Og los enfrentó. Allí mismo Dios le habló a Moisés y le dijo: “No le tengas miedo, porque en tu mano lo he entregado, a él y a todo su pueblo, y a su tierra; y harás de él como hiciste de Sehón rey de los amorreos, que habitaba en Hesbón. E hirieron a él y a sus hijos, y a toda su gente, sin que le quedara uno, y se apoderaron de su tierra” (Números 21:34-35). ¡Qué promesa! Si Dios iba delante de ellos, estaba todo dicho.
La generación que Dios levantó en el desierto aprendió a tener mentalidad conquistadora, así que arrasaron con Og y con todos los que se les opusieron. “El resto de Galaad, y todo Basán, del reino de Og, toda la tierra de Argob, que se llamaba la tierra de los gigantes, lo di a la media tribu de Manasés”. (Deuteronomio 3:13). La tierra de los gigantes de Anac ahora era la tierra de los ¡gigantes de Dios!
¿Estás enfrentando una situación desbordante, inmensa, imposible de vencer? Las victorias sobre el enemigo y las circunstancias que parecen más grandes que nuestras posibilidades vienen cuando avanzamos con fe en las promesas de Dios.
Recuerda las veces en las que el Señor intervino y te dio la victoria. No mires con miedo a aquello que te está intimidando, mira al Señor. Siempre Él es más grande. ¡Dios es el Poderoso Gigante que pelea por ti!
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Viernes 11 de agoto, 2023
“Hay respuesta para el que invoca Su Nombre”
“Y todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo.” Hechos 2:21.
Víctor Polischuk fue un inmigrante ucraniano que se refugió en el norte de Argentina y allí comenzó su historia cristiana. Mientras estaba trabajando en el campo fue pateado por un caballo que lo dejó tendido en el suelo sin poder moverse, solo podía tocarse el pecho y notar que varias de sus costillas estaban quebradas. Inmóvil, pudo recordar un versículo que había aprendido en la iglesia ortodoxa de su país, y con toda su alma exclamó: “¡Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado?!” En ese momento, una luz del cielo tocó su cuerpo y sus costillas fueron sanadas. Se levantó maravillado por lo que había experimentado. ¡El Señor respondió a alguien que había invocado su Nombre!
Inmediatamente buscó una iglesia y allí entregó su vida a Cristo, se bautizó, fue lleno del Espíritu Santo y Dios comenzó a usarlo. Predicaba el evangelio en todos los pueblos vecinos. Ponía sus manos sobre los enfermos y eran sanados, endemoniados liberados, creyentes eran llenos del Espíritu Santo. ¡Dios se movía con poder!
En cierta ocasión, lo invitaron a compartir el evangelio en un lugar al que solo se podía llegar caminando. Después de caminar varias horas, exhausto, se recostó y se quedó dormido. De pronto lo despertó un ángel y recibió fuerzas sobrenaturales para seguir hasta el pueblo donde compartiría la Palabra. Al llegar, esa noche, Dios hizo cosas extraordinarias: salvación, sanidad y liberación. ¡Dios seguía manifestándose a través de un simple hombre que invocaba el Nombre del Señor!
Una noche, ya anciano y parapléjico, le pidió a su familia que abrieran las ventanas de su habitación y les dijo que ángeles habían venido a llevarlo a la presencia de Dios. En ese mismo instante falleció. ¡Tal era su intimidad con el Señor!
¿Por qué te conté la historia de mi abuelo? Porque es alguien que conocí, con sus virtudes y defectos. Un hombre sencillo pero lleno de fe que invocó el Nombre del Señor y fue salvo. Su vida me sigue recordando que Jesucristo es el mismo, ayer, hoy y por los siglos. El mismo Dios que estuvo con Moisés, Elías, Juan el Bautista, Víctor, está con todo aquel que le invoca de corazón.
Si estás pasando momentos de desesperación, sin respuestas, sin salida, invoca su Nombre, clama a Él. Ten la seguridad de que te está escuchando y entrará en acción.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Jueves 10 de agosto, 2023
“Raíces de confianza”
“Bendito es el hombre que confía en el Señor, cuya confianza es el Señor. Será como árbol plantado junto al agua, que extiende sus raíces junto a la corriente; no temerá cuando venga el calor, y sus hojas estarán verdes; en año de sequía no se angustiará ni cesará de dar fruto”. Jeremías 17:7-8.
Los expertos en árboles recomiendan estudiar bien los terrenos antes de decidir dónde plantarlos. No es lo mismo un árbol plantado junto al agua que uno plantado en un terreno que depende exclusivamente de la lluvia para crecer. Y si el suelo está compuesto de piedra caliza, las raíces no llegan a tener profundidad y difícilmente el árbol resista vientos fuertes. En cambio, si se planta en un terreno fértil, con suficiente agua, crecerá y desarrollará raíces profundas que le permitan resistir hasta vientos huracanados.
Así es el que confía en Dios. Sus raíces llegan a ser tan profundas que nunca le falta el agua que lo alimente. Puede cambiar el clima e incluso atravesar temporadas de sequías, pero él siempre permanece verde.
También es cierto que los árboles que más crecen y que más años viven son los que están junto a otros árboles. Árboles débiles son protegidos por otros más fuertes. ¡Qué buena enseñanza para los cristianos! Crecemos más fuertes y más sanos cuando estamos juntos recibiendo el alimento espiritual que el Señor proporciona a su Iglesia.
Pero si no confiamos en Dios y actuamos con autosuficiencia o dependiendo de lo que nos promete el hombre, Jeremías dice que terminaremos siendo como una “retama” en el desierto, que gira y gira llevada por el viento sin ningún destino certero. “Así ha dicho Jehová: Maldito el varón que confía en el hombre, y pone carne por su brazo, y su corazón se aparta de Jehová. Será como la retama en el desierto, y no verá cuando viene el bien, sino que morará en los sequedales en el desierto, en tierra despoblada y deshabitada” (vs. 5-6).
Dios quiere que crezcamos fuertes, sanos y que demos fruto en todo tiempo. Eso es posible si estamos unidos a Él, alimentando nuestro espíritu diariamente. La oración, la Palabra, la comunión con el Cuerpo de Cristo, el servicio, nutren nuestra alma y nos permiten estar firmes y confiados cuando llega la hora de la prueba.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Miércoles 9 de agosto, 2023
“Victoria en cada prueba”
“En lo cual vosotros os alegráis, aunque ahora por un poco de tiempo, si es necesario, tengáis que ser afligidos en diversas pruebas”. (1 Pedro 1:6).
Como hijos de Dios nos alegramos por la esperanza viva que tenemos desde el momento en que recibimos a Cristo como Salvador y Señor de nuestras vidas. Pedro dice que nos produce gozo saber que tenemos una herencia en los cielos, pero mientras tanto, y si es necesario, debemos aceptar que podemos pasar por diversas pruebas.
La palabra griega para “diversas” es poikilos que significa “multicolor, variado, de diversas formas”. La raíz de la primera sílaba es pik, que en español sería la palabra “pictórico”; de ahí que signifique “diverso” o “multicolor”. Pedro está usando esta palabra para decirnos que los creyentes en Cristo podemos pasar por diferentes pruebas.
A veces tenemos la idea de que toda prueba es un castigo, una disciplina o consecuencia de algo que hicimos mal. Pero Pedro nos dice: “Amados, no se sorprendan de las pruebas de fuego por las que están atravesando como si algo extraño les sucediera. En cambio, alégrense mucho, porque estas pruebas los hacen ser partícipes con Cristo de su sufrimiento, para que tengan la inmensa alegría de ver su gloria cuando sea revelada a todo el mundo”. (1 Pedro 4:12-13).
Cuando las situaciones difíciles ponen a prueba nuestro testimonio, la verdad de la Palabra, nuestra posición como hijos de Dios, cuando debemos soportar desprecios, burlas y somos confrontados por la fe que tenemos, dice Pedro que debemos alegrarnos porque estamos pasando por lo mismo que Cristo pasó y también saldremos victoriosos.
Para cada prueba hay una manifestación especial de la gracia de Dios. Es muy interesante notar que el apóstol Pedro en su primera carta solo usa dos veces la palabra poikilos. La primera para describir la variedad de pruebas, y la segunda para expresar que la gracia de Dios también es muy diversa, “multicolor”. “la multiforme gracia de Dios.” (1 Pedro 4:10). ¡Hay una manifestación de la gracia de Dios que se ajusta perfectamente al tipo de prueba que estemos pasando!
El Señor no siempre actúa de la misma manera en cada tribulación. A veces nos da una salida rápida, otras veces nos capacita con fortaleza para soportarla. En algunas pruebas sabemos exactamente lo que Dios quiere hacer, en otras no. A veces nos envía ayuda, y en otras ocasiones solo contaremos con su presencia. Nuestras pruebas pueden ser muy variadas, pero la gracia de Dios también lo es.
Pedro, al final de su primera carta, nos dice con qué propósito el Señor aplica su multiforme gracia a nuestras pruebas. “Mas el Dios de toda gracia, que nos llamó a su gloria eterna en Jesucristo, después que hayáis padecido un poco de tiempo, él mismo os perfeccione, afirme, fortalezca y establezca.” (1 Pedro 5:10).
¿Cómo estás viendo tu prueba? ¿Te parece que nadie ha pasado por lo que tú estás pasando? ¿Crees que es tan difícil que no habrá ayuda sobrenatural suficiente para sacarte de esa situación? Hoy el Señor quiere recordarte que Él siempre prepara una salida. Su gracia es abundante y te ayudará a salir victorioso una vez más.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Martes 8 de agosto, 2023
“Ahora veo”
“Respondió el hombre, y les dijo: Pues esto es lo maravilloso, que vosotros no sepáis de dónde sea, y a mí me abrió los ojos”. Juan 9:30.
Cuando esté en la eternidad con Cristo y su Iglesia, voy a sentarme al lado de este hombre ciego sanado por Jesús para que me cuente esta historia con lujo de detalles. He leído docenas de veces este pasaje y siempre disfruto el relato. Puedo imaginarme la escena y me gozo por lo que hizo Jesús en él. También admiro su valentía y sagacidad para enfrentarse a los religiosos hipócritas de su época.
Por favor, lee todo el capítulo 9 del evangelio de Juan, despacio, frase por frase, y no te pierdas ningún detalle de esta maravillosa historia. El relato comienza con una pregunta para Jesús. La gente tenía la idea que si alguien nacía con alguna discapacidad o enfermedad era como consecuencia del pecado sus padres. Tremendo error que Jesús se encargó de corregir. El Señor dijo que esta enfermedad tenía el propósito de glorificar a Dios. ¡Y vaya si lo hizo!
Creo que este ciego jamás se imaginó los problemas que iba a enfrentar al ser sanado. Los religiosos de esa época lo abrumaron con preguntas, investigaron la vida de sus padres, y al final ¡lo expulsaron de la sinagoga! Para mucha gente, su situación era mejor cuando estaba ciego que ahora que había sido sanado por el Mesías. Increíble…
Este hombre confrontó a los religiosos de tal forma que hasta hay detalles de humor y sarcasmo que me hacen reír. “¿Por qué me preguntan tanto? ¿Quieren ustedes también hacerse discípulos de Jesús…?” Uf, eso los enfureció, y siguieron acosándolo: “¡Nosotros no sabemos de dónde es Jesús ni de dónde procede!” “¿En serio? ¿Ustedes los sabelotodo no saben quién es el que me sanó milagrosamente…?” ¡Tenían al Mesías, el Hijo de Dios frente a sus narices y no le conocían!
Hoy hay muchos que pueden hablar de Jesús; conocen sus historias pero no le conocen a Él. En contraste, hay personas que con sencillez y humildad se han acercado al Señor y les ha dado vista espiritual. Son los que, como el ciego sanado, pueden adorarle porque han conocido al Salvador de sus vidas. “Y él dijo: Creo, Señor; y le adoró” (v. 38).
Que el Señor nos use para guiar hacia Él a los que están ciegos espiritualmente porque es el único que puede darles vista. Él dijo: “El Espíritu del Señor está sobre mí por cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas a los pobres; me ha enviado a sanar a los quebrantados de corazón; a pregonar libertad a los cautivos, y vista a los ciegos…” (Lucas 4:18a).
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Lunes 7 de agosto, 2023
“No cambies tu enfoque”
“…Corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante, puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe…” Hebreos 12:1-2.
La vida cristiana es una maratón que debe correrse con paciencia. Llegan a la meta los que perseveran, los que mantienen el ritmo y no se desesperan cuando ven que otros parecen ir más rápido o se salen del camino. En esta carrera hay premio para todos los que cruzan la línea de llegada y la única manera de lograrlo, de acuerdo con el autor de Hebreos, es manteniendo la mirada en Jesús durante todo el trayecto.
La frase “puestos los ojos” significa atención no divida, alejar la mirada de todas las distracciones con el fin de contemplar a Cristo. Para correr bien debemos mantener nuestros ojos en el Señor. Si nos miramos a nosotros mismos o contemplamos las circunstancias que nos rodean, vamos a tropezar y caer.
Si le preguntaras a Pedro por qué se hundió mientras caminaba sobre el agua te diría que fue cuando se enfocó en las olas en lugar de seguir mirando al Señor. Si le preguntaras a Moisés por qué la generación que salió de Egipto no entró a la tierra prometida te diría que fue porque se concentraron en las dificultades antes que en Dios. Cada vez que sufrimos un tropiezo en nuestra carrera es porque cambiamos nuestro enfoque.
¿Estás corriendo bien la carrera? ¿Cómo estás respondiendo a las presiones a lo largo del camino? Recuerda que Cristo siempre corre con nosotros. Cuando nos sometemos al Señor y seguimos su dirección nos mantenemos en el camino correcto. Así que no cambies tu enfoque, sigue con los ojos puestos en el Señor y asegúrate de llegar a la meta y recibir tu recompensa.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Domingo 6 de agosto, 2023
“Fe para preservación del alma”
“Pero cuando venga el Hijo del Hombre, ¿hallará fe en la tierra?” Lucas 18:8.
Esta declaración aparece al final de la parábola de la viuda y el juez injusto. El propósito de este relato fue animar a sus oyentes a orar siempre y no desmayar. La oración es fundamental para mantenernos firmes en la fe.
La pregunta que hace el Señor en este versículo cobra mucho más sentido en la medida que nos estamos acercando a los últimos tiempos. Una de las señales es que “el amor de muchos se enfriará” y otros tantos “apostatarán de la fe”. ¿No estamos siendo testigos de esto? Si el Señor viniera hoy, ¿hallaría verdadera fe en la tierra?
Si nuestra fe está basada en la inmediatez de las respuestas a nuestras peticiones, podemos perderla en cualquier momento. La verdadera fe sabe esperar en Dios hasta las últimas consecuencias.
Si amoldamos nuestra fe al sistema, comenzamos a perderla. El mundo, regido por Satanás, tiene principios contrarios a los del Señor. El enemigo es el padre de la mentira y su objetivo es que rechacemos la verdad de Dios. Por eso el apóstol Pablo nos aconseja en Romanos 12:2ª: “No imiten las conductas ni las costumbres de este mundo, más bien dejen que Dios los transforme en personas nuevas…”.
También la Biblia dice que en los últimos tiempos habrá muchos falsos profetas y falsos maestros que harán apartar a la gente de la verdad y la fe. La misma Iglesia de Cristo se volverá tibia en su relación con Dios.
Judas, el hermano de Jesús, nos exhorta a contender ardientemente por la fe: “Amados, por la gran solicitud que tenía de escribiros acerca de nuestra común salvación, me ha sido necesario escribiros exhortándoos que contendáis ardientemente por la fe que ha sido una vez dada a los santos” (1:3).
Sólo la fe verdadera persevera a pesar de las dificultades, los obstáculos y la oposición. Te pregunto: ¿Cómo está tu fe?
Que todos los que esperamos confiados la venida del Señor, seamos hallados con una fe viva y arraigada en Su Palabra. “Pero nosotros no somos de los que retroceden para perdición, sino de los que tienen fe para preservación del alma”. Hebreos 10:39.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Viernes 4 de agosto, 2023
“Encuentros impostergables”
“La comunión íntima de Jehová es con los que le temen, y a ellos hará conocer su pacto”. Salmos 25:14.
Todos podemos saber acerca de Dios por lo que nos dice la Biblia, por lo que han investigado los teólogos o a través de las experiencias de otros. Pero no todas las personas tienen intimidad con Dios. Esto está reservado para los que le temen y le obedecen.
La expresión “comunión íntima” en hebreo es la palabra sod que significa “compañía de dos o más personas que comparten secretos, que se sientan juntas, que se comunican íntimamente”. Es mucho más que “saber algo del otro”.
Las relaciones humanas se construyen, entre otras cosas, dentro de un marco en donde ambas partes deben ser flexibles a los deseos del otro para dar lugar a la armonía y la estabilidad. Pero la comunión íntima con Dios es diferente. No es una relación donde Dios baja sus expectativas y demandas para satisfacer nuestros deseos, sino que nosotros elevamos nuestros estándares y deseos para tener comunión con Él.
La comunión íntima con Dios comienza a construirse aquí y ahora. La puerta de entrada es Cristo, nuestro Salvador, el creador de un Nuevo Pacto a través de su sacrificio, y el Espíritu Santo es quien nos enseña a construirla día a día.
Dios nos dio un consejo bien práctico para compartir comunión íntima con Él: “Mas tú, cuando ores, entra en tu aposento, y cerrada la puerta, ora a tu Padre que está en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público”. (Mateo 6:16). Deja lo que estás haciendo, ve a un lugar privado, y comienza a orar y buscar su presencia. Escucha lo que quiera decirte. Comparte tus sentimientos con Él. Permite que te enseñe. Y si te comparte un secreto, no siempre es para que lo hagas público.
Cuando comienzas a compartir comunión íntima con Él, tu alma encuentra todo lo que necesita. David, en el Salmo 63:5 menciona de manera muy gráfica lo que experimentaba al estar en su presencia: “Mi alma queda del todo satisfecha, como si comiera los mejores platillos, y mis labios te aclaman jubilosos”.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Jueves 3 de agosto, 2023
“Que no se apague el fuego”
“Y el fuego encendido sobre el altar no se apagará, sino que el sacerdote pondrá en él leña cada mañana...” Levítico 6:12.
La inauguración del tabernáculo fue una celebración maravillosa. Todo estaba en orden. El holocausto estaba listo… solo faltaba el fuego. Entonces Dios irrumpió con su presencia y cayó fuego del cielo sobre el altar. “Y salió fuego de delante de Jehová, y consumió el holocausto con las grosuras sobre el altar; y viéndolo todo el pueblo, alabaron, y se postraron sobre sus rostros” (Levítico 9:24).
El altar del holocausto tenía el fuego de Dios, pero a partir de ese momento el pueblo debía mantenerlo encendido continuamente. No importaba en qué lugar del desierto se encontrara el tabernáculo, los sacerdotes debían ocuparse de eso.
Dios les dijo que debían reponer la leña cada mañana. No era al mediodía, ni a la tarde ni a la noche. Lo primero que debían hacer al comenzar el día era añadir leña al fuego, después podían seguir con el resto de sus obligaciones.
Gracias al sacrificio perfecto de Cristo en la cruz ya no debemos presentar más sacrificios, todo eso fue temporal. Incluso el fuego de ese altar un día se extinguió, pero nunca dejó de arder el fuego santo de Dios.
En Lucas 3:16 leemos: “Respondió Juan (el Bautista), diciendo a todos: Yo a la verdad os bautizo en agua; pero viene uno más poderoso que yo, de quien no soy digno de desatar la correa de su calzado; él os bautizará en Espíritu Santo y fuego”. Fue muy evidente el día que se cumplió esta palabra: “Y se les aparecieron lenguas repartidas, como de fuego, asentándose sobre cada uno de ellos.” (Hechos 2:3). A partir de allí, la Iglesia de Cristo recibió el poder del Espíritu Santo para cumplir con la misión que se le encomendó.
Si has recibido a Cristo como Salvador y Señor de tu vida, el Espíritu Santo ha venido a morar en ti, pero su fuego debe ser avivado cada día.
¿Cómo está tu fuego? ¿Arde con intensidad o solo es una pequeña llama que se está extinguiendo?
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Miércoles 2 de agosto, 2023
“¿Servir o ser servidos?”
“Entonces él se sentó y llamó a los doce, y les dijo: Si alguno quiere ser el primero, será el postrero de todos, y el servidor de todos”. Marcos 9:35.
Jesús sabía que le quedaba poco tiempo antes de ir a la cruz y se lo dijo a sus seguidores. Sin embargo, quienes debían apoyarlo y ser sensibles a esa situación, estaban pensando en ellos mismos al preguntarse quién sería el mayor en el Reino de los Cielos. Jesús, que conocía el corazón de sus discípulos, les preguntó abiertamente qué era lo que estaban discutiendo en el camino. Nadie respondió. El silencio los delataba. Entonces el Señor les presentó esta paradoja: El que quiera ser el primero, tiene que ser el servidor de todos.
¡Increíble! Cerca de tres años y medio con el Maestro y no habían aprendido de Él lo que era la humildad y el servicio. La Biblia dice que “…se despojó a sí mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres” (Filipenses 2:7).
La perspectiva de Jesús es opuesta a la del sistema en que vivimos. Para el Señor, el verdadero éxito es el resultado de una vida entregada, sometida a Dios, obediente a su Palabra y con una actitud de siervo. Incluso antes de ir a la cruz fue el único que tomó el lebrillo, se ciñó la toalla y les lavó los pies a todos sus discípulos, incluyendo a Judas. “Porque ejemplo os he dado, para que como yo os he hecho, vosotros también hagáis” (Juan 13:15).
Hoy, el mensaje sigue siendo el mismo. Los verdaderos discípulos son los que tienen un corazón de siervo. Los grandes líderes son los que sirven, no los servidos. Los que están más cerca de Jesús son los siervos, no los señores. Seguir a Jesús implica servirle: “Si alguno me sirve, sígame; y donde yo estuviere, allí también estará mi servidor. Si alguno me sirviere, mi Padre le honrará” (Juan 12:26).
Comienza este día con una actitud diferente, sirviendo a Dios, a tu familia y a quienes lo necesiten. Deja que Él use tu vida para su gloria y que muchos vean a Jesús a través de ti.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Martes 1 de agosto, 2023
“Con Dios somos mayoría”
“Esforzaos y animaos; no temáis, ni tengáis miedo del rey de Asiria, ni de toda la multitud que con él viene; porque más hay con nosotros que con él. Con él está el brazo de carne, mas con nosotros está Jehová nuestro Dios para ayudarnos y pelear nuestras batallas. Y el pueblo tuvo confianza en las palabras de Ezequías rey de Judá”. 2 Crónicas 32:7-8.
Muchas veces enfrentamos las situaciones más difíciles después de haber hecho grandes decisiones espirituales. El rey Ezequías estaba terminando la celebración de la Pascua cuando los asirios se acercaron a Jerusalén para sitiarla y conquistarla.
Ezequías se movilizó enseguida. Cerró todos los canales de agua que los enemigos pudieran usar, reedificó los muros caídos, construyó torres de vigilancia e hizo edificar otro muro de protección. Además, preparó al pueblo con espadas y armas. Sin embargo, el ejército de Senaquerib era innumerable, con carros y caballos de combate y mucho armamento. Era poco probable que el pueblo pudiera resistir mucho tiempo. Pero la confianza del rey de Judá no estaba en todo lo que había preparado sino en Dios que les protegería.
Ezequías le dice al pueblo que confiaran y fueran valientes porque tenían a Dios de su parte y eran más los que estaban con ellos que con el rey de Asiria. Se refería al ejército celestial. ¡Aleluya! Con Dios siempre somos mayoría. Y añade: “Con él está el brazo de carne, mas con nosotros está Jehová nuestro Dios para ayudarnos y pelear nuestras batallas.” ¿Acaso hay poder humano suficiente que pueda vencer a Dios? ¡Él es el Todopoderoso!
A pesar de la continua intimidación del enemigo, Ezequías se apoyó en Dios y ¡un solo ángel destruyó a un ejército innumerable! “Y aconteció que aquella misma noche salió el ángel de Jehová, y mató en el campamento de los asirios a ciento ochenta y cinco mil; y cuando se levantaron por la mañana, he aquí que todo era cuerpos de muertos”. (2 Reyes 19:35).
Dios sigue peleando nuestras batallas. Nuestra parte es no desanimarnos, confiar en el Señor y no tener miedo. Él nos ayuda a vencer.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Lunes 31 de julio, 2023
“Deja de intentarlo en tus fuerzas”
“Respondiendo Simón, le dijo: Maestro, toda la noche hemos estado trabajando, y nada hemos pescado; mas en tu palabra echaré la red.” Lucas 5:5.
Pedro y sus compañeros pasaron toda la noche intentando pescar. Ni a la derecha ni a la izquierda, ni cerca de la ribera ni en lo profundo. Los peces parecían estar agazapados en algún rincón del mar de Galilea esperando la señal del Hijo de Dios. Finalmente, cansados, frustrados y con las manos vacías, los pescadores decidieron volver a sus casas.
¿Alguna vez te has sentido así? Hiciste todo lo que estaba a tu alcance para resolver una situación y no sucedió nada. ¿Has pensado en darte por vencido? No lo hagas, porque el Señor está a punto mostrarte lo que puede hacer.
El Señor le dijo a Simón: “Boga mar adentro, y echad vuestras redes para pescar” (v.4). ¿Otra vez? ¡Si lo hemos intentado toda la noche! ¿Cuántas veces habremos tirado la red… 30, 35 veces? Pero ahora es diferente porque hay una palabra del Hijo de Dios, y si el Creador del universo dice ahora, entonces es ahora.
Cuando el Señor le ordenó a Pedro ir mar adentro, le respondió con la palabra “Maestro”. Pero cuando vuelve trayendo la red repleta de peces, lo llamó “Señor”: “Viendo esto Simón Pedro, cayó de rodillas ante Jesús, diciendo: Apártate de mí, Señor, porque soy hombre pecador” (v. 8).
El próximo pescador de hombres había cambiado su percepción de Jesús. Ya no era simplemente el Maestro que enseñaba y explicaba la Palabra de Dios como nadie, ahora Jesús era el Señor de su vida. A partir de ese momento Simón empieza a ser formado como Pedro, un discípulo con flaquezas, pero obediente hasta el punto de ser un mártir por amor a Quien le cambió la vida.
La palabra del Señor para ti es: “Deja de intentarlo en tus fuerzas”. Escucha al Señor y cuando tengas su palabra, obedécelo inmediatamente y lo verás hacer grandes cosas para su gloria.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Domingo 30 de julio, 2023
Puedes ver el sermón de hoy a partir de las 11 am haciendo click aquí.
¡Dios te bendiga!
“No vas a hundirte”
“Y los discípulos, viéndole andar sobre el mar, se turbaron, diciendo: ¡Un fantasma! Y dieron voces de miedo. Pero en seguida Jesús les habló, diciendo: ¡Tened ánimo; yo soy, no temáis! Mateo 14:26-27.
Las tormentas tienden a nublar nuestra visión. Les pasó a los discípulos en alta mar. Conocían el Mar de Galilea como la palma de su mano. Más de una vez habrán tenido que luchar contra alguna tempestad, pero esta tormenta parecía de las peores. Fatigados de tanto remar y ver que no avanzaban, comenzaron a desesperarse. Necesitaban ayuda urgente. Entonces llegó Jesús… pero los discípulos no pudieron reconocerlo.
¿Un fantasma? ¿En serio? ¿Después de tanto tiempo de estar con Jesús? Está claro que ellos no estaban esperando al Señor. Tal vez olvidaron cuánto poder tenía el Hijo de Dios.
La verdad es que nosotros no somos muy diferentes. ¿En cuántas tormentas olvidamos que el Señor siempre está a nuestro lado? A veces hasta llegamos a dudar de su poder para rescatarnos. Pero Él siempre llega a tiempo para extendernos su mano y salvarnos.
El Señor se dirigió a los discípulos en medio de la tempestad con estas palabras a las que también debemos prestar atención:
“Tened ánimo”. Nos exhorta a cambiar la desesperación por esperanza.
“Yo soy”. Él es el Yo Soy siempre presente. “…el mismo, ayer, hoy y por los siglos” (Hebreos 13:8).
“No temáis”. Debemos entregarle al Señor todo lo que nos preocupa y aprender a descansar en Él. Al poner nuestra confianza en Cristo los temores empiezan a desaparecer.
Cuando nuestra esperanza parece hundirse, cuando nuestros recursos para hallar la salida se agotan, el Señor se hace presente y toma el control con su poder.
Que hoy puedas encontrar el descanso que viene de saber que el Hijo de Dios tiene el poder para calmar toda tormenta que pueda azotar tu vida. Confía y descansa en Él.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Viernes 28 de julio, 2023
“Un plan sin errores”
“Pero Jehová estaba con José y le extendió su misericordia, y le dio gracia en los ojos del jefe de la cárcel… No necesitaba atender el jefe de la cárcel cosa alguna de las que estaban al cuidado de José, porque Jehová estaba con José, y lo que él hacía, Jehová lo prosperaba.” Génesis 39:21-23.
Hay cuatro verdades espirituales que podemos extraer de estos versículos:
- Dios está con nosotros siempre. V. 21a.
Dios nunca abandona a sus hijos. A pesar de las situaciones difíciles que debió atravesar José, nunca pensó que Dios lo había abandonado. Isaías 43:2: “Cuando pases por las aguas, yo estaré contigo; y si por los ríos, no te anegarán. Cuando pases por el fuego, no te quemarás, ni la llama arderá en ti”.
- Dios da gracia al que le cree a pesar de las circunstancias. V. 21b.
Al igual que José, nuestra parte es seguir creyendo. José tuvo una actitud proactiva, y por eso halló gracia.
Debemos ver las circunstancias que nos rodean como parte del plan de Dios para que sus propósitos se cumplen en nuestra vida.
- Dios respalda al que no se da por vencido. Vs. 22-23.
Somos llamados a pelear la buena batalla de la fe todos los días. Nuestra confianza en el Señor nos moviliza a aceptar los retos y los desafíos como parte de nuestro crecimiento.
Mientras José estuvo en la cárcel aprendió el idioma del lugar, se familiarizó con su cultura y el funcionamiento del gobierno egipcio, etc. Dios se tomó 13 años para hacerlo gobernador de Egipto, y la esclavitud y la cárcel fueron su universidad. Cuando llegó la hora, ya estaba preparado.
- Dios levanta al que espera confiado en Él.
El testimonio de José, sus palabras, su influencia fueron fundamentales en el plan de Dios con Israel. En ningún tramo de su vida dejó de confiar en Dios sino que reconoció que todo lo que había atravesado formaba parte del plan que Él había trazado para su vida.
Dios nunca trabaja sin un plan. Quizás no puedas entenderlo todo hoy, pero aun en las dificultades y el sufrimiento, el Señor está cumpliendo sus buenos propósitos en tu vida. “Sabemos que Dios ha preparado todo para el bien de los que lo aman, es decir, de los que él ha llamado de acuerdo con su plan”. Romanos 8:28.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Jueves 27 de julio, 2023
“Un reloj que no se detiene”
“Andad sabiamente para con los de afuera, redimiendo el tiempo.” Colosenses 4:5.
El tiempo es oro. Seguramente habrás escuchado esta frase más de una vez, pero ¿te ha hecho pensar en el valor del tiempo? Dios nos ha dado veinticuatro horas para administrar. Podemos invertirlas correctamente o desperdiciarlas. Está en nuestras manos esta decisión.
La palabra redimir en griego significa “comprar, pagar el rescate, mejorar las oportunidades, aprovechar, adquirir”. Cristo nos redimió en la cruz para darnos vida eterna, para que vivamos un día a la vez y lo honremos con nuestras acciones diarias. Ahora nos toca a nosotros hacer las decisiones correctas.
Si permanentemente tuviéramos frente a nosotros un reloj en donde pudiéramos ver cómo se van yendo los minutos de nuestra vida, quizás tomaríamos verdadera conciencia de lo rápido que pasa el tiempo y la importancia de administrarlo mejor.
Debemos saber disfrutar el tiempo que pasamos con nuestro cónyuge, hijos, familiares, amigos, hermanos de la iglesia. También debemos recordar que el tiempo pasa y las oportunidades también, y lo que es peor…no vuelven. Y nunca debemos olvidar que el tiempo que pasamos con Dios alimentando nuestra alma y espíritu no podemos postergarlo porque es el que marca el resto de nuestra vida.
El apóstol Pablo también les habló sobre este tema a los creyentes de Éfeso: “Mirad, pues, con diligencia cómo andéis, no como necios sino como sabios, aprovechando bien el tiempo, porque los días son malos.” (Efesios 5:15-16). Como mayordomos del precioso regalo del tiempo que Dios nos ha dado debemos considerar siempre si estamos viviendo de acuerdo con su voluntad.
Pregúntale al Señor qué desea para ti. Él te guiará para que puedas sacarle el máximo provecho al tiempo que dispuso darte.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Miércoles 26 de julio, 2023
“Vivir confiados”
“Por la misericordia de Jehová no hemos sido consumidos, porque nunca decayeron sus misericordias. Nuevas son cada mañana; grande es tu fidelidad”. (Lamentaciones 3:22-23).
La misericordia es el amor compasivo de Dios hacia nosotros. Es su “amor inmerecido”. Por eso debemos acercarnos al Señor con humildad, reconociendo que si Dios actúa lo hace porque quiere, no porque lo merezcamos. Y su deseo es actuar todos los días con su amor inalterable, como un Padre que anhela lo mejor para sus hijos.
Vivir confiados en la misericordia de Dios nos trae el reposo diario que necesitamos.
Su misericordia nos recuerda que Dios conoce nuestras debilidades, temores, fracasos, y aun así decide amarnos incondicionalmente. ¡Aleluya!
Su misericordia nos da seguridad de que el Señor nunca va a dejarnos de amar aunque tengamos el peor día de nuestra vida.
Su misericordia nos recuerda que su ayuda no tiene fin. Cada día el Todopoderoso nos extiende su mano para levantarnos y decirnos: “No temas, yo te ayudo”.
Su misericordia nos da la certeza de que su presencia nos acompaña siempre, y cuando vienen a nuestra mente “dardos de fuego del maligno”, podemos recordar sus promesas de protección y cuidado.
Al final del día, cuando nos hemos movido y sostenido en su misericordia, podremos decir como Jeremías: “Grande es tu fidelidad”.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Martes 25 de julio, 2023
“¿Cuál es tu respuesta?”
“A partir de ese momento, muchos de sus discípulos se apartaron de él y le abandonaron. Entonces Jesús, mirando a los doce, les preguntó: ¿Ustedes también van a marcharse? Simón Pedro le contestó: Señor, ¿a quién iremos? Solo Tú tienes palabras de vida eterna.” Juan 6:66-68.
Ese día había comenzado de una manera tremenda. Una multitud de personas estaba buscando desesperadamente a Jesús. Cualquier discípulo hubiera pensado: “¡Al fin las multitudes vienen a Cristo!” Pero Jesús conocía la intención de sus corazones. Lo buscaban para hacerlo rey porque habían visto el milagro de la multiplicación de los panes y los peces.
El Señor siempre fue claro cuando llamaba a las personas a seguirle. Nunca les prometió liberación política, social, beneficios económicos o prosperidad. En esta oportunidad, Jesús les explicó que su verdadera necesidad era espiritual y que solo se supliría a través de una relación con Él. ¡Palabras difíciles de aceptar para quienes solo querían el pan de cada día!
Después de escuchar estas palabras, muchos le abandonaron, pero Jesús no cambió su mensaje ni sus demandas. Tampoco deberíamos hacerlo nosotros. El que quiere seguir a Jesús debe ajustarse a lo que Él dice.
Los apóstoles se preocuparon cuando vieron que la multitud se marchaba. Entonces Jesús los miró y les dijo: “¿Quieren irse ustedes también?” Ante esta pregunta, Pedro fue claro: “Señor, ¿a quién iremos? Solo Tú tienes palabras de vida eterna”. Él sabía lo que había encontrado, sabía lo que tenía, conocía quién era Jesús.
En este tiempo, en donde abundan las “doctrinas utilitarias” que acomodan el evangelio a los deseos de las personas, Jesús nos sigue haciendo la misma pregunta: “¿Quieren irse ustedes también?” “¿Seguirán la verdad o los deseos de su corazón?” Tu respuesta estará fundamentada en lo que hayas conocido y experimentado del Hijo de Dios.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Lunes 24 de julio, 2023
“¿Necesitas sabiduría?”
“Enséñanos a entender la brevedad de la vida, para que crezcamos en sabiduría.” Salmo 90:12.
La palabra sabiduría, en hebreo khama, significa destreza, habilidad, discernimiento para aconsejar, prudencia, cordura en la vida diaria. Consiste, básicamente, en aplicar bien lo que uno sabe a lo que uno hace.
En la Palabra de Dios, “el principio de la sabiduría es el temor de Jehová”. Para vivir con sabiduría debemos buscar a Dios y conocer y hacer su voluntad. El sabio obedece siempre al Señor y deja los resultados en sus manos.
Cuando no tenemos sabiduría, dice Santiago 1:6, debemos pedírsela a Dios: “Y si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada.” Su Palabra es la fuente inagotable de esa sabiduría.
Todos, cada día, tenemos que tomar decisiones. Podemos hacerlo con la sabiduría de Dios o dejarnos guiar por nuestras experiencias, capacitación o intuición. Los resultados estarán determinados por lo que escojamos seguir.
Necesitamos la sabiduría de Dios para saber administrar el tiempo que Él nos regala. Necesitamos saber establecer prioridades, cuidar de nuestro crecimiento espiritual y relación con el Señor, invertir tiempo en nuestra familia, administrar bien nuestras finanzas, usar nuestros talentos, entre tantas otras cosas. ¡Todo lo debemos hacer con la sabiduría de Dios!
Toma tiempo hoy para pensar qué es lo que está guiándote y pídele al Señor que te ayude a ordenar cada aspecto de tu vida con la sabiduría que Él promete darte.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Domingo 23 de julio, 2023
“Corrigiendo el rumbo”
“¿Quién podrá entender sus propios errores? Líbrame de los que me son ocultos.” Salmo 19:12.
Te has sentido alguna vez intranquilo. Tú conciencia está inquieta, se enciende una luz roja en tu corazón pero no tienes en claro la causa. ¿Qué haces? ¿Continúas como si nada hubiera pasado, o te detienes a pensar qué es lo que pasa?
¡Qué peligroso es avanzar sin darnos cuenta de nuestras equivocaciones! Puede costarnos la vida.
En el Salmo 19 encontramos la manera de librarnos de ellos: Conociendo la Palabra de Dios. Nuestra percepción de los hechos, nuestros puntos de vista, nuestras experiencias, no son referencias objetivas, por eso necesitamos acudir a la Biblia. “La ley de Jehová es perfecta, que convierte el alma; el testimonio de Jehová es fiel, que hace sabio al sencillo. Los mandamientos de Jehová son rectos, que alegran el corazón; el precepto de Jehová es puro, que alumbra los ojos.” (Salmo 19:7-8).
Si la conciencia nos reprende pero no conocemos lo que Dios dice en su Palabra, será como la luz roja que parpadea pero no sabemos por qué. Al escudriñar las Escrituras, “se alumbran nuestros ojos”, “nos hace sabios” y “trae nueva vida al alma”.
Necesitamos mucho más que leer solo un devocional, necesitamos leer la Palabra de Dios diariamente. Cuando más nos alimentamos de la Palabra de Dios, más la vamos a desear. “Son más deseables que el oro, incluso que el oro más puro. Son más dulces que la miel, incluso que la miel que gotea del panal. Sirven de advertencia para tu siervo, una gran recompensa para quienes las obedecen.” (Salmo 19:10-11).
Si se enciende alguna luz roja en tu interior, el Espíritu Santo te llevará a la referencia perfecta, la Biblia, y podrás corregir oportunamente el rumbo.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Viernes 21 de julio, 2023
“Levanta tu cabeza”
“Yo Jehová vuestro Dios, que os saqué de la tierra de Egipto, para que no fueseis sus siervos, y rompí las coyundas de vuestro yugo, y os he hecho andar con el rostro erguido”. Levítico 26:13.
Cuatrocientos treinta años estuvo Israel en Egipto hasta su liberación. El pueblo hebreo terminó siendo esclavo y trabajando para faraón en condiciones humillantes. Siempre llegaban a sus casas con la cabeza agachada y los hombros caídos por el cansancio.
La nueva generación israelita no sabía lo que significaba caminar con el rostro erguido. Estaban acostumbrados a bajar la vista, obedecer órdenes y no manifestar disconformidad porque si no eran castigados angustiosamente.
Entonces Dios levantó a Moisés y los liberó de Egipto con poder, señales y milagros. Faraón supo quién era Jehová, y el mundo reconoció que el Señor peleaba por Israel. Todo lo hizo Dios. En su misericordia los liberó y los llevó a Canaán, tierra en donde “fluía leche y miel”.
Era necesario recordarle a Israel que por gracia Dios había roto el yugo de esclavitud que los oprimía para que pudieran andar con el rostro erguido. Ahora podían levantar la cabeza y mirar hacia arriba, no con soberbia sino con dignidad.
Los años han pasado y Dios sigue siendo el único que puede hacernos libre de la esclavitud del pecado, pero recuerda, tienes un enemigo muy real que no quiere que vivas dignamente como hijo de Dios y trabajará diariamente para que vuelvas a “Egipto”, al mundo, a los viejos hábitos. Por eso debes mantente alerta, no caigas en sus engaños, Dios te ha dado una nueva vida, te hizo libre por gracia y te ha dado el poder para caminar con dignidad.
¡Levanta tu cabeza, eres un hijo de Dios, camina con los ojos puestos en Jesús!
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Jueves 20 de julio, 2023
“Estoy contigo”
“He aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo”. Mateo 28:20b.
Los discípulos habían disfrutado de la presencia y obra de Jesús por unos tres años y medio, pero ahora debía ascender a los cielos y sentarse en su trono. La despedida era muy dolorosa para sus seguidores, pero el Señor les aseguró que estaría con ellos hasta el fin.
Esta promesa no fue solo para los primeros discípulos, sino para todo seguidor de Cristo en cualquier lugar y en cualquier tiempo de la historia. El problema es que a veces no “sentimos” su presencia y esto nos hace olvidar su promesa. Hay días en que estamos solos, sin amigos, sin familia y pensamos que el Señor también se ha alejado de nosotros. Oramos con la intención de acercarnos a Él y nuestras súplicas parecen monólogos; incluso nuestros oídos espirituales escuchan mejor el “ruido” de las hojas cayendo de los árboles que la voz de Dios.
El profeta Elías se sintió solo, también David, Jeremías, Ezequiel, Isaías por mencionar a algunos. Hasta el apóstol Pablo: “En mi primera defensa ninguno estuvo a mi lado, sino que todos me desampararon…” (2 Timoteo 4:16). Sin embargo, todos ellos sabían que Dios nunca desampara a sus hijos.
Jesús conoce muy bien ese sentimiento de soledad. “A los suyos vino, y los suyos no le recibieron”. Sus discípulos lo dejaron solo en Getsemaní, en el sanedrín, en la crucifixión. Hasta en la cruz, humanamente hablando, sintió que el Padre lo había abandonado. ¡Por supuesto que sabe lo que es la soledad!
El Señor nos entiende y sabe lo que necesitamos. De hecho, tal vez este devocional sea una respuesta suya para ti. Dios usa lo que tiene a mano para decirte: “No estás solo. Yo estoy contigo y seguiré a tu lado todos los días hasta el fin del mundo”. Jesús nunca romperá esta promesa, por lo tanto, hoy puedes encontrar fuerzas en Él. ¡No estás solo!
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Miércoles 19 de julio, 2023
“Vida en lugar de muerte”
“La mano de Jehová vino sobre mí, y me llevó en el Espíritu de Jehová, y me puso en medio de un valle que estaba lleno de huesos. Y me hizo pasar cerca de ellos por todo en derredor; y he aquí que eran muchísimos sobre la faz del campo, y por cierto secos en gran manera. Y me dijo: Hijo de hombre, ¿vivirán estos huesos? Y dije: Señor Jehová, tú lo sabes.” Ezequiel 37:1-3.
El profeta Ezequiel tuvo una visión impactante. Frente a él había huesos secos. Era lo que quedaba de un ejército que tiempo atrás había perdido la guerra. Ese campo de batalla ahora era un cementerio. Ya no se escuchaban gritos de ánimo, voces de mando, ni corridas estratégicas. Solo había silencio.
Muchas veces podemos ser parte de una situación semejante. Los deseos de luchar, de avanzar, de conquistar, han desaparecido. Lo que antes era una relación estrecha con Dios ahora parece seca. Tal vez nuestro matrimonio o la comunicación con la familia esté en modo de silencio; o proyectos que nos motivaban hoy estén sepultados. Solo vemos como el profeta, un valle de huesos secos.
La visión del profeta fue interrumpida por Dios para preguntarle: “¿Vivirán estos huesos?” La respuesta de Ezequiel fue muy sincera: “Tú sabes lo que harás”. A veces nosotros solo vemos huesos secos, pero Dios ve un ejército levantándose del polvo para glorificarle con nuevas victorias.
El que da vida es el Espíritu de Dios y Él le dio una orden a Ezequiel: “Profetiza sobre estos huesos y diles: Huesos secos, oíd palabra de Jehová. Así ha dicho Jehová el Señor a estos huesos: He aquí, yo hago entrar espíritu en vosotros, y viviréis” (vs. 4-5). Y Dios comenzó el proceso. Primero unió los huesos, después aparecieron los tendones, los músculos y la piel. Y al fin volvió la vida a estos cuerpos cuando el Espíritu de Dios sopló sobre ellos (vs. 6-10).
Si hay algo que te parece imposible, sin esperanza, Dios quiere recordarte que Él puede darle vida. Vuelve a desarrollar una relación profunda, íntima y personal con el Señor y le escucharás decir: “Yo soy el Señor, el Dios de todo ser viviente. No hay nada imposible para mí.” Jeremías 32:27.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Martes 18 de julio, 2023
“El perdón sana”
“La cordura del hombre detiene su furor, y su honra es pasar por alto la ofensa.” Proverbios 19:11.
Este proverbio no es para los necios, es para los que actúan con discernimiento, inteligencia, prudencia y sabiduría de Dios. Ellos pueden detener su furor porque el Espíritu Santo los controla. El fruto del dominio propio es evidente en sus vidas.
La palabra “ofensa” en hebreo es peshá, y tiene un significado bastante amplio: “Revuelta, falta, fraude, infracción, maldad, pecado, rebelión, traición”. ¿Has sufrido alguna de estas ofensas? Tal vez más de una.
El diablo sabe cómo robarnos la paz, el gozo, la fe. Es especialista en maximizar malos entendidos, distorsionar la realidad, mal interpretar palabras, acciones, circunstancias. Cuando alguien ataca nuestra dignidad, orgullo, u honor nos sentimos mal e internamente comenzamos a experimentar agitación y furor, y cuando ese furor se manifiesta perdemos nuestra “honra”. Nada hermoso sale de nosotros si nos dejamos llevar por nuestros impulsos.
¡Cuántas relaciones se han roto por las ofensas! Sabiendo esto, la Palabra de Dios nos exhorta a confesarlas y expresar arrepentimiento con el deseo de restauración. “Confesaos vuestras ofensas unos a otros, y orad unos por otros…” (Santiago 5:16). Cuando vencemos el mal con el bien, le estamos dando la oportunidad a la otra persona de arrepentirse.
Ninguno está libre de ser ofendido, por eso es tan importante pensar en la manera que el Señor espera que actuemos. Hay ofensas que requerirán ser tratadas con la ayuda de personas maduras espiritualmente, pero otras deberemos pasarlas por alto si sabemos de dónde proceden. No podemos permitir que el diablo las use para llenar nuestro corazón de amargura, resentimiento, frustración y deseos de venganza.
El Señor nos ofrece su ayuda a través del Espíritu Santo para perdonar a quienes nos ofendieron. Puede ser doloroso hacerlo, pero vale la pena enfrentar las heridas que nos provocaron y experimentar el toque sanador de Dios.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Lunes 17 de julio, 2023
“Acceso al poder más asombroso”
“Entonces Pedro se puso de pie, junto con los otros once, y con potente voz dijo: Varones judíos, y ustedes, habitantes todos de Jerusalén, sepan esto, y entiendan bien mis palabras. Contra lo que ustedes suponen, estos hombres no están ebrios, pues apenas son las nueve de la mañana. Más bien, esto es lo que dijo el profeta Joel: Y en los postreros días, dice Dios, derramaré de mi Espíritu sobre toda carne…” Hechos 2:14-17a.
Algo extraordinario había sucedido en el aposento alto. Después de estar allí diez días, ciento veinte discípulos fueron llenos del Espíritu Santo. La promesa del Padre desde los tiempos de Joel reafirmada por Jesús se había cumplido.
Pedro fue claro en decir que los acontecimientos que acababan de presenciar eran sobrenaturales. Los discípulos no eran hombres y mujeres de letras como para aprender instantáneamente otros idiomas, el viento recio no lo provocó un gran ventilador, y las lenguas como de fuego sobre sus cabezas no eran un holograma. ¿Con qué propósito estaba sucediendo todo esto? Lo leemos en Hechos 1:8: “Recibiréis poder cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra”.
La manifestación de este poder fue evidente en Pedro enseguida. El discípulo sanguíneo, extrovertido, que había negado al Señor y huido con los demás discípulos cuando le apresaron, se paró delante de una multitud e hizo una exposición maravillosa de la Palabra de Dios. El resultado: ¡Cinco mil personas recibieron a Jesús como su Salvador! ¡Era el mismo Espíritu Santo obrando a través de Pedro! “Porque no sois vosotros los que habláis, sino el Espíritu de vuestro Padre que habla en vosotros”. (Mateo 10:20). Vemos a un Pedro antes de la venida del Espíritu Santo y otro después.
La Iglesia no existiría como tal si no fuese por el poder del Espíritu Santo. Este poder no fue solo para los apóstoles, los ciento veinte en el aposento, los de la casa de Cornelio, los de Éfeso, ¡es para todos los creyentes en Cristo! Recordemos el mensaje de Pedro: “Porque para vosotros es la promesa, y para vuestros hijos, y para todos los que están lejos; para cuantos el Señor nuestro Dios llamare”. (Hechos 2:39).
Sí, este poder es para ti. No te conformes con ser solo un seguidor de Jesús. Él tiene planes que quiere llevar a cabo a través de tu vida y ha prometido capacitarte con Su Espíritu para hacerlo. Ya no se trata de cuánto puedas hacer tú, sino de cuánto le dejes hacer a Él a través de ti.
Tenemos acceso al poder más asombroso que el mundo ha conocido: el poder del Espíritu Santo. Dejemos que se manifieste en nuestra vida.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Domingo 16 de julio, 2023
“Verdad inalterable”
“Pues no somos como muchos, que medran falsificando la Palabra de Dios, sino que con sinceridad, como de parte de Dios, y delante de Dios, hablamos en Cristo”. 2 Corintios 2:17.
La palabra “medrar” en griego es kapeleuo que significa “dedicarse a la reventa, traficar; vendedor de cosas de poco valor”. Esta palabra se usaba para mencionar a la persona que trataba de conseguir ganancias por medios deshonestos. Además Pablo usa la palabra “falsificar” que significa “diferente al original; burda imitación; copia falsa”, para referirse a los que adulteran la Palabra de Dios para obtener un beneficio personal.
Pablo les advierte a los corintios que muchos que parecían tener la verdad, predicaban sin entender el mensaje de Dios o sin importarles lo que pudiera sucederles a sus oyentes.
En contraste, los que seguimos fielmente el evangelio hablamos de Cristo con sinceridad. La palabra “sinceridad” significa “puro, libre de mezclas”. Así es el creyente fiel, habla la verdad sin adulterarla a pesar de las consecuencias que traiga el proclamarla.
Hoy somos presionados por el sistema a modificar la verdad. Somos presionados por amigos y familiares para dejar de lado los principios cristianos y cambiar nuestra ética y moral. Compañeros de trabajo y de estudios que muchas veces tratan de intimidarnos a través de burlas, amenazas y confrontaciones para que dejemos pasar muchas cosas que sabemos que a Dios no le agradan.
Sin embargo, somos llamados a ser misericordiosos y compasivos, pero eso no incluye cambiar la Palabra de Dios. Estamos del lado del apóstol Pablo, aunque muchos cambien la verdad para su propio beneficio, nosotros no lo haremos. Hablaremos siempre con sinceridad de parte de Dios, conscientes de que un día daremos cuenta de nuestras acciones y palabras.
El mundo necesita saber la verdad, lo único que puede hacer libres a los que aún no conocen a Cristo. “Y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres”. Juan 8:32.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Viernes 14 de julio, 2023
“Huye”
“Huye también de las pasiones juveniles, y sigue la justicia, la fe, el amor y la paz, con los que de corazón limpio invocan al Señor”. 2 Timoteo 2:22.
Timoteo era un joven llamado por Dios para servirle. En sus primeros años, el apóstol Pablo le aconseja llenarse del Espíritu Santo, dejar de lado la cobardía, la vergüenza y el qué dirán para avanzar en la fe y el ministerio. Pero también sabía que en la ciudad de Éfeso estaría expuesto a un sinnúmero de tentaciones y ataques del diablo para apartarlo de la voluntad de Dios. Por eso Pablo es muy contundente al decirle que no juguetee con las pasiones juveniles, sino que ¡huya!
La expresión “pasiones juveniles” en griego es epithumía, y significa “intenso deseo, codicia, concupiscencia, malos deseos que están listos para expresarse en una actividad corporal”. Santiago usa esta misma palabra cuando dice: “Cada uno es tentado, cuando de su propia concupiscencia es atraído y seducido” (1:14). Santiago y Pablo no se están enfocando en una tentación en particular, sino en cualquier tentación que encienda nuestros malos deseos.
Si observamos con atención, somos bombardeados permanentemente a través de los medios de comunicación con una oferta de productos que buscan despertar esas pasiones a las que se refiere el apóstol Pablo. El blanco normalmente son los jóvenes, sin embargo, estas pasiones también seducen a los adultos. Así que esta exhortación es para todos.
Mantén presente en tu mente que un pequeño desliz lleva a otro, y a otro, hasta que terminamos aceptando lo que es malo como bueno. Debemos ser conscientes de que el diablo no desaprovechará ninguna oportunidad para debilitarnos y que finalmente cedamos a la tentaciones.
Escucha al Espíritu Santo y acepta su ayuda, en Él tienes todos los recursos que necesitas para vencer.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Jueves 13 de julio, 2023
“Ayuda mi incredulidad”
“… si puedes hacer algo, ten misericordia de nosotros, y ayúdanos. Jesús le dijo: Si puedes creer, al que cree todo le es posible”. Marcos 9:22b-23.
Este era un padre realmente desesperado. Su hijo estaba muy enfermo y ya no sabía qué hacer por él. Cuando este hombre se encuentra con Jesús le explica la situación del muchacho y le pide ayuda, pero según la construcción gramatical usada en el original bíblico, lo hace de una forma irónica. Le dice: “Si puedes…” En otras palabras: “Tus discípulos lo intentaron pero no pudieron… ¿tú puedes?”
La respuesta del Señor es interesante. Usa las mismas palabras que el padre pero esta vez el desafiado es él. Le dice: “Si tú puedes creer…” La sanidad de su hijo no dependía de la capacidad de Jesús sino de la fe del padre. ¡El poder de Cristo nunca está en discusión! ¡Él todo lo puede! Pero lo que no estaba claro era la fe del necesitado.
En ese momento el padre se quiebra y “clama” a Jesús: “¡Creo! ¡Ayuda mi incredulidad!” Eso era todo lo que quería escuchar el Señor. Este hombre apenas podía creer, pero le pide a Jesús que lo ayude con su incredulidad. En ese mismo momento el Señor obró el milagro.
No necesitamos desafiar a Dios con frases como “si eres Dios entonces…”. “Si tienes tanto poder…”. “Si realmente me amas…” o “si crees que lo merezco…” Nada de eso toca el corazón de Dios. Jesús nos enseñó cómo pedir al Padre Celestial de manera personal y directa: “Y cuando ores, no seas como los hipócritas; porque ellos aman el orar en pie en las sinagogas y en las esquinas de las calles, para ser vistos de los hombres; de cierto os digo que ya tienen su recompensa. Mas tú, cuando ores, entra en tu aposento, y cerrada la puerta, ora a tu Padre que está en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público. Y orando, no uséis vanas repeticiones, como los gentiles, que piensan que por su palabrería serán oídos”. (Mateo 6:5-7).
Escucha al Señor: “Yo todo lo puedo, pero tú, ¿realmente puedes creer en mí? Porque al que cree, todo le es posible”.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Miércoles 12 de julio, 2023
“Decisiones inalterables”
“Yo, por tanto, he determinado ahora edificar casa al nombre de Jehová mi Dios, según lo que Jehová habló a David mi padre, diciendo: Tu hijo, a quien yo pondré en el trono en lugar tuyo, él edificará casa a mi nombre”. 1 Reyes 5:5.
Salomón determinó edificar una casa para Dios. La palabra determinar en hebreo significa “afirmar, anunciar, dar aviso, contar, declarar, prometer”. Este verbo se refiere a lo que se comunica a través de las palabras y los hechos de una persona. Determinar es manifestar con acciones lo que se ha decidido en el corazón. Este rey dijo a todos lo que había resuelto en su corazón, y en los siguientes años se vio reflejado en la construcción del templo más extraordinario de la historia.
Nuestras determinaciones siempre manifiestan las prioridades de nuestro corazón. Si para nosotros lo más importante es que Dios gobierne cada área de nuestra vida, entonces resolveremos construir nuestra vida espiritual continuamente. Cualquier decisión que hagamos deberá estar sujeta a esta determinación.
Las determinaciones que se hacemos en el corazón también se expresan públicamente. Ningún verdadero hijo de Dios debe avergonzarse de sus decisiones por Cristo. Por otro lado, cuando hacemos declaraciones públicas nos estamos comprometiendo verdaderamente a llevarlas a cabo. Lo que expresamos es lo que realmente creemos.
Una determinación verdadera permanecerá a través del tiempo. Salomón tardó aproximadamente siete años en terminar el templo, pero nunca hizo una pausa ni se desanimó viendo todo el trabajo que había que hacer. Salomón siempre vio la mano de Dios proveyendo todo lo que necesitaba e incluso dándole ayudantes fieles. Cuando estamos determinados a que el Señor edifique nuestra vida, Él nos enviará la ayuda necesaria.
Que tu determinación de seguir construyendo tu vida espiritual bajo cualquier presión se mantenga firme. Dios ha comenzado una excelente obra en ti, deja que la complete.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Martes 11 de julio, 2023
“Bendita gracia”
“Y deseaba llenar su vientre de las algarrobas que comían los cerdos, pero nadie le daba. Y volviendo en sí, dijo: ¡Cuántos jornaleros en casa de mi padre tienen abundancia de pan, y yo aquí perezco de hambre! Me levantaré e iré a mi padre…” Lucas 15:16-18.
Una crisis es una “situación grave y decisiva que pone en peligro el desarrollo de un asunto o un proceso” según el diccionario. Todos podemos atravesar crisis ya sea por malas decisiones, por culpa de otros o por circunstancias de la vida. Según la Palabra, Dios usa las crisis para transformarnos.
Muchas veces Dios permite ciertas crisis para darnos la oportunidad de corregir nuestro rumbo. En el caso del hijo pródigo, “volvió en sí” recién cuando no tenía nada para comer, ni siquiera podía tocar las algarrobas de los cerdos. ¡Qué crisis tan dura! Pero fue la única manera de que reaccionara e hiciera decisiones diferentes para salir de esa condición. ¡Cuán bajo podemos caer si no reaccionamos a tiempo!
Dios también permite crisis para que recordemos que somos vulnerables y débiles. A veces nos sentimos tan fuertes y seguros que necesitamos un sacudón para reconocer que solo la gracia de Dios es la que nos sostiene. El hijo prodigo se fue de la casa muy seguro de sí mismo, creyendo que podía vivir de la bolsa de dinero que le había dado su padre, pero estaba equivocado.
Muchos hombres de Dios pudieron reconocer su absoluta necesidad de Dios al enfrentarse a las peores crisis de sus vidas. Josafat ante un numerosísimo ejército dijo: “No sabemos qué hacer”. Jacob en Peniel: “Le tengo miedo a mi hermano”. Los apóstoles frente a la persecución: “Mira sus amenazas”. Gedeón escondido en un lagar: “Mi familia es pobre y soy el menor”. Pero a partir de esas circunstancias pusieron su confianza en Dios y experimentaron liberaciones gloriosas.
El hijo pródigo se confrontó consigo mismo y dijo: “Me levantaré, iré a mi Padre, y le diré que he pecado”. Solo al tocar fondo pudo recapacitar y dar el primer paso para ser restaurado. Al regresar a su casa arrepentido, su padre corrió hasta él para recibirlo y restituir su lugar en la familia. Lo mismo hace el Padre celestial por nosotros cuando le fallamos, porque ninguna debilidad o pecado supera la gracia de Dios.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Lunes 10 de julio, 2023
“Como Él lo estableció”
“Y el furor de Jehová se encendió contra Uza, y lo hirió, porque había extendido su mano al arca; y murió allí delante de Dios. Y David tuvo pesar, porque Jehová había quebrantado a Uza; por lo que llamó aquel lugar Pérez-uza hasta hoy”. 1 Crónicas 13:10-11.
David quería traer el arca de Dios a Jerusalén. La intención era buena, pero el método no. Dios nunca dijo que el arca se podía trasladar en un carruaje tirado por animales, sino que los sacerdotes eran los responsables. Dios tuvo que mostrarle a David que no alcanza con las buenas intenciones, sino que las cosas hay que hacerlas a Su manera.
Todo marchaba al compás de la música de alabanza y adoración. El ambiente era maravilloso. ¡Nos hubiéramos gozado con el pueblo! Pero Dios no tolera la desobediencia, y las consecuencias eran inevitables.
Cuando David vio lo que le sucedió a Uza se sintió muy mal y tuvo que ir a la Palabra para entender lo que había pasado. “Entonces dijo David: El arca de Dios no debe ser llevada sino por los levitas; porque a ellos ha elegido Jehová para que lleven el arca de Jehová, y le sirvan perpetuamente”. (1 Crónicas 15:2). ¡Ahora sí lo haría de acuerdo a la voluntad de Dios!
Gracias a Dios por el sacrificio de Cristo en la cruz, porque Él logro la propiciación y hoy la ira de Dios no se manifiesta inmediatamente. Si no fuera así, hoy mismo sufriríamos terribles castigos.
Que esta historia nos ayude a recordar que no podemos relacionarnos con Dios como nosotros creamos conveniente. Él ya definió esa relación a través de Su Palabra y nosotros debemos ajustarnos a Su voluntad.
Poder acercarnos con libertad al Señor es uno de los más grandes privilegios que tenemos como sus hijos, pero eso no significa que lo hagamos de cualquier manera. No debemos olvidarnos que Él es Dios.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Domingo 9 de julio, 2023
Puedes ver el sermón de hoy a partir de las 11 am haciendo click aquí.
¡Dios te bendiga!
“Prueba de fe”
“Y cuando las plantas de los pies de los sacerdotes que llevan el arca de Jehová, Señor de toda la tierra, se asienten en las aguas del Jordán, las aguas del Jordán se dividirán; porque las aguas que vienen de arriba se detendrán en un montón.” Josué 3:13.
Para conquistar la tierra prometida primero había que cruzar un río muy real que incluso desbordaba en esa época del año (v. 15). Imagínese un pueblo de casi tres millones de personas pasando por allí. La travesía parecía imposible.
Sin embargo, Dios les dijo que abriría las aguas y pasarían en seco, pero el milagro sucedería cuando las plantas de los pies de los sacerdotes pisaran el agua.
¿Por qué no abrir el río antes? ¿Y si los sacerdotes pisaban en falso y se hundían? ¿Y si la corriente los arrastraba antes de que se abriera el Jordán? ¿Por qué había que pisar el agua primero…? Sin duda Dios estaba probando la fe del pueblo. Fe es creer que lo que Dios dijo sucederá.
Nuestra fe también será probada. Para que se abran nuestros “Jordanes” es necesario que demos el primer paso; pero no en “las aguas” donde el Señor nunca dijo que haría un milagro. Cuidado que hay muchos que en otros tiempos se ahogaron en el Jordán. Por eso necesitamos Su Palabra como base de nuestra fe. No se trata de movernos guiados por nuestros propios deseos, sino avanzar en la palabra que Él nos habló primero.
Para recibir lo mejor de Dios debemos estar dispuestos a creer. Para ver un milagro hay que dar pasos de fe. Para que una puerta se abra, hay que golpear. Para que nos atiendan, hay que llamar. Para encontrar, hay que buscar. “Porque todo aquel que pide, recibe; y el que busca, halla; y al que llama, se le abrirá.” (Mateo 7:8).
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Viernes 7 de julio, 2023
“No calles”
“Jesús recorrió todas las ciudades y aldeas… enseñando en las sinagogas y anunciando la Buena Noticia acerca del reino; y sanaba toda clase de enfermedades y dolencias. Cuando vio a las multitudes, les tuvo compasión porque estaban confundidas y desamparadas como ovejas sin pastor. Jesús les dijo a sus discípulos: ‘Son muchos los que necesitan entrar al reino de Dios, pero son muy pocos los discípulos para anunciarles las buenas noticias. Por eso, pídanle a Dios que envíe más discípulos, para que compartan las buenas noticias con toda esa gente.’” Mateo 9:35-38.
Si el Señor caminara hoy entre nosotros, ¿vería una situación diferente a la que se describe en este versículo? ¡No! La gente sigue confundida, desamparada, sufriendo y sin rumbo. La desesperanza se apodera día a día de más personas y tú y yo somos portadores del mensaje que puede salvar sus vidas.
Tu testimonio es la mejor herramienta para decirles a otros lo que Dios puede hacer. Estoy seguro que tienes mucho que contar. Aunque quizás estés pasando por pruebas en este momento, recuerda lo que Dios ha hecho en el pasado. Trae a memoria las intervenciones divinas. Si esto fortalece tú fe, también ayudará a los necesitados.
Hay personas que se encuentran solas, sin nadie que las escuche, dedicar un poco de tu tiempo para acompañarlas y escucharlas puede ser la forma en la que Dios te use para decirles que hay Alguien que promete estar con ellas siempre y que les ayudará a atravesar sus momentos difíciles.
Tal vez tus vecinos necesiten ayuda. Un pequeño servicio puede abrir un corazón cerrado y comenzar a ver a Jesús a través de tus acciones. En algún momento te preguntarán por tu paz y esperanzas y podrás decirles Quién hizo la obra en tu corazón.
Estamos rodeados de personas hambrientas y no saben de qué. Pero nosotros tenemos la respuesta a su necesidad y la responsabilidad de darla. Nunca te avergüences de dar la mejor noticia que se haya ofrecido a la humanidad. Ella tiene el poder de cambiar el destino eterno de una persona.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Jueves 6 de julio, 2023
“Inseparables”
“Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir, ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro”. Romanos 8:38-39.
Los cristianos romanos de la época de Pablo estaban pasando por situaciones muy difíciles. Tal vez muchos de ellos podrían estar pensando que el Señor los había abandonado. Por eso el apóstol toma tiempo para escribirles y dejarles saber que no hay nada ni nadie que pueda separarlos de Cristo y de su amor inquebrantable.
Comienza diciéndoles que ni la muerte, ni la vida podrían separarlos del amor de Dios. Quería darles la seguridad espiritual de que sin importar cuales fueran las circunstancias por las que estuvieran pasando, podían estar seguros y confiados en el amor del Señor.
Ni ángeles, ni principados, ni potestades. Hay un mundo espiritual invisible que la Palabra de Dios nos ha revelado. Satanás y sus secuaces trabajan sin descanso para arrastrar a las personas hacia la condenación eterna, pero ninguno de ellos puede tocar a un hijo de Dios. El amor del Señor nos cubre y podemos descansar bajo su protección.
Ni lo presente ni lo porvenir. “Ni el presente con su inestabilidad, ni el futuro con su incertidumbre” dijo un erudito bíblico. Nuestro presente y nuestro futuro están en las manos del Señor. Él es sabio, soberano y en su providencia ha diseñado un plan perfecto para nuestras vidas.
Ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna cosa creada. Imagina cualquier cosa que pudiera ser un problema muy grande e inmediatamente verás a Dios más grande, mal alto y más profundo. Él es Todopoderoso.
Cualquier situación que pudiéramos estar pasando encajaría en alguna de estas categorías, pero ninguna puede separarnos del amor de Dios.
¿A qué le temes? ¿A la muerte, al diablo, al futuro, a algunas personas? El apóstol Juan también dice que “en el amor no hay temor, sino que el perfecto amor echa fuera el temor” (1 Juan 4:18a). Si tu prioridad es recibir y disfrutar el amor de Cristo, verás que todos esos temores comenzarán a desvanecerse, y podrás experimentar la verdad de que “en todas las cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó” (v. 37).
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Miércoles 5 de julio, 2023
“Sigue creyendo”
“La oración eficaz del justo puede mucho. Elías era hombre sujeto a pasiones semejantes a las nuestras, y oró fervientemente…” Santiago 5:16-17.
Elías oraba bajo la dirección de Dios. Él sabía lo que Dios quería porque se lo comunicaba. Cuando estamos en su presencia entendemos lo que Dios quiere hacer. De Él viene la visión, el discernimiento, la revelación de sus planes futuros, las maneras en que quiere moverse en nosotros y a través de nosotros.
Elías oraba con fervor. Cuando leemos algunas de sus oraciones en los libros históricos descubrimos su deseo ardiente por Dios. Nada era igual después de que él oraba.
Elías oraba con fe. El creía que cada palabra suya era escuchada por Dios. Así que podía orar para que llueva o que deje de llover, para que resucitara un muerto, para que no falte aceite en la casa de una viuda, o para que Dios haga descender fuego del cielo. Sus oraciones nos muestran que todo es posible si le creemos al Señor.
Elías oraba esperando el tiempo de Dios. Podía orar para que no lloviera y esperar la siguiente instrucción de Dios. Después de tres años… ¡tres años! Dios le dice que vuelva a orar por lluvia. Eran oraciones acompañadas de obediencia, y el Señor siempre responde a estas oraciones.
Elías oraba buscando que Dios recibiera toda la gloria. Él nunca persiguió beneficioso personales, ni reconocimiento. Siempre llevó al pueblo a escuchar a Dios y adorarle a Él.
Si tú eres un hijo de Dios entonces eres justo delante de Él. Tus oraciones serán respondidas en el tiempo y la forma fijados por Dios. Solo confía y lo verás hacer grandes obras.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Martes 4 de julio, 2023
“Él sabe por qué lo permite”
“Así se quedó Jacob solo; y luchó con él un varón hasta que rayaba el alba y descoyuntó el muslo de Jacob mientras con él luchaba. Y llamó Jacob el nombre de aquel lugar, Peniel; porque dijo: Vi a Dios cara a cara, y fue librada mi alma. Y cuando había pasado Peniel, le salió el sol; y cojeaba de su cadera”. Génesis 32:24-25,30-31.
La luz del nuevo amanecer permitía ver la silueta de un hombre que caminaba cabizbajo, a paso lento y cojeando. Era el patriarca Jacob que volvía a su familia distinto de como se había ido. Algo había cambiado, no solo su apariencia sino también su corazón.
Antes de Peniel, Jacob caminaba siempre erguido, con la cabeza alta, pensando en la próxima estrategia que usaría para salvar su pellejo. Había aprendido a arreglárselas solo, a sobrevivir usando estrategias dudosas. Pero después de su lucha con el ángel no fue el mismo, nunca más pudo caminar con el orgullo que le caracterizaba.
Jacob aprendió a depender de Dios. Su autosuficiencia había recibido un golpe mortal. Su cojera llegó a tiempo. Su debilidad humana dio lugar a la fortaleza divina.
Hay cojeras que Dios ha permitido en nuestras vidas con propósito. Sin ellas no estaríamos a su lado, no tendríamos el deseo de buscarle, ni dependeríamos de Él. El mismo apóstol Pablo al orar por su aguijón recibió esta respuesta de parte del Señor: “Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad”. (2 Corintios 12:9a).
Si Dios ha decidido que convivas con esa “cojera” no te enojes con Él, sabe lo que está haciendo. Que puedas decir como el apóstol Pablo: “Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de Cristo. Por lo cual, por amor a Cristo me gozo en las debilidades, en afrentas, en necesidades, en persecuciones, en angustias; porque cuando soy débil, entonces soy fuerte”. (2 Co. 12:9-10).
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Lunes 3 de julio, 2023
“Dios sabe cómo cuidarte”
“Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias.” Filipenses 4:6.
¡Cuántas situaciones, diariamente, pueden llevarnos a estar preocupados y hasta producirnos ansiedad! La Biblia llama a eso “afanarse”. Esta palabra en griego es merimnao, que significa “dividirse por una distracción, estar en ansiosa inquietud”.
“Por nada estéis afanosos”. ¿Será posible no estar afanados por nada? El apóstol Pablo nos dice que es posible si podemos confiar en el cuidado del Padre Celestial. No creas que esto es mera teoría paulina. El apóstol pasó por todo tipo de situaciones apremiantes y supo encomendarlas una a una al Señor.
“Por tanto os digo: No os afanéis por vuestra vida, qué habéis de comer o qué habéis de beber; ni por vuestro cuerpo, qué habéis de vestir. ¿No es la vida más que el alimento, y el cuerpo más que el vestido?” (Mateo 6:25). Dios conoce todas nuestras necesidades y sabe cómo suplirlas. Si Dios cuida de las aves y las flores del campo, qué no hará por sus hijos.
¿Qué debes hacer entonces si las preocupaciones comienzan a tomar el control de tu vida? Debes ir a Dios en oración y ruego. En el pasaje que Filipenses, Pablo dice que la oración guardará de ansiedad nuestro corazón. Orar resultará en la protección más eficaz contra las preocupaciones.
Cuando ores, no olvides hacerlo con acción de gracias. Expresarle agradecimiento al Señor antes de que Él actúe, es una clara evidencia de fe que recompensará.
Revisa tu lista de necesidades. Antes de comenzar tu día, recurre al Señor. Háblale de ellas y permítele que se manifieste como el Padre que sabe dar buenas dádivas a sus hijos. El Señor está esperando que deposites todas tus cargas en Él y no vivas en ansiosa inquietud. ¡Dios tiene cuidado de sus hijos!
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Domingo 2 de julio, 2023
Puedes ver el sermón de hoy a partir de las 11 am haciendo click aquí.
¡Dios te bendiga!
“¡Libres!”
“Jehová, si mirares a los pecados, ¿quién, oh Señor, podrá mantenerse? Pero en ti hay perdón, para que seas reverenciado”. Salmo 130:3-4.
En la actualidad, la palabra pecado ha pasado a ser un arcaísmo, es casi desconocida por las nuevas generaciones. Por supuesto, ninguna universidad ni escuela tiene el mínimo interés de traer el tema a la mesa de discusión, y esto es un gran problema, porque si no se reconoce el pecado, no hay posibilidad alguna de salvación.
La palabra que se traduce como pecado en hebreo es avón que proviene de avá y significa “torcer, actuar perversamente, cometer iniquidad, hacer inicuamente, mal, maldad, malo, perverso, trastornar”. Pecado es torcer la ley de Dios, es actuar en contra de su santidad, es pervertir sus palabras, es actuar con mala intención. Evidentemente, todos hemos pecado, de una u otra forma, lo reconozcamos o no.
Como menciona el salmista, nadie podría mantenerse en pie si Dios simplemente aplicara su justicia, pero debido a su gracia y misericordia, Él envió a Cristo a tomar nuestro lugar y morir por nuestros pecados. Aunque el costo para nuestro Salvador fue enorme, voluntariamente pagó el castigo que merecíamos, tomó sobre sí mismo nuestros pecados, los llevó a la cruz, y canceló nuestra deuda en su totalidad. ¡Aleluya!
Observa lo que dice Miqueas 7:8-9: “¿Qué Dios como tú, que perdona la maldad, y olvida el pecado del remanente de su heredad? No retuvo para siempre su enojo, porque se deleita en misericordia. El volverá a tener misericordia de nosotros; sepultará nuestras iniquidades, y echará en lo profundo del mar todos nuestros pecados.” Cuando reconocemos nuestros pecados y le pedimos perdón a Dios, el no solo nos perdona, sino que nunca más los traerá a su memoria.
¡Somos libres de la deuda del pecado, su esclavitud y la culpa que nos agobiaba! Caminar con Cristo es caminar en libertad.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Viernes 30 de junio, 2023
“Tú tienes el mensaje”
“Y Pablo permaneció dos años enteros en una casa alquilada, y recibía a todos los que a él venían, predicando el reino de Dios y enseñando acerca del Señor Jesucristo, abiertamente y sin impedimento.” Hechos 28:30-31.
¡Cuántas situaciones difíciles tuvo que atravesar el apóstol Pablo para que se cumpliera este versículo! Fue apresado en Jerusalén; un grupo de judíos ultra religiosos planeó matarlo; fue eximido de ser juzgado en Jerusalén por haber apelado al César; sufrió un naufragio; fue picado por una serpiente venenosa. Incluso algunos dudaban de que fuera un apóstol de Cristo. ¿Qué más podía pasarle?
Pablo dice que todos sus sufrimientos redundaron en beneficio del reino de Dios (Filipenses 1:13). En esos años, muchos recibieron a Cristo como Salvador, el evangelio fue predicado a las personas más prominentes e influyentes de su época. Pablo fue llamado “una plaga” para el mundo pecador (Hechos 24:5), uno que “trastornaba el mundo” (Hechos 17:6), un “sectario” (Hechos 28:22). Sin embargo, a través de él, muchos estaban conociendo la verdad que trae salvación eterna.
Al llegar a Roma, mientras esperaba ser juzgado, Pablo siguió predicando el evangelio. Él se encontraba en una casa alquilada y bajo la custodia permanente de un soldado romano, pero podía predicar abiertamente y sin impedimento. Hacía tiempo que no había experimentado esa libertad religiosa, y por supuesto no desaprovechó un solo momento. Siguió cumpliendo con la misión que Dios le había encomendado.
Pablo nos dejó un gran ejemplo: Aprovechar las oportunidades que tenemos hoy. Si esperamos a que llegue el momento ideal para hablar del Señor, se nos pasará la vida y nos estaremos lamentando por haber perdido las ocasiones que se nos presentaron.
Vivimos en un país con libertad de expresión… pero para los cristianos verdaderos esa libertad está restringida. Sin embargo, tenemos ámbitos en donde todavía podemos hablar “abiertamente y sin impedimento” de Jesús. Hay personas que todavía no han escuchado la Verdad, que no tienen esperanza de vida eterna, y el tiempo se acorta. Tú tienes el mensaje, ¡compártelo!
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Jueves 29 de junio, 2023
“Primer amor”
“Pero tengo contra ti, que has dejado tu primer amor. Recuerda, por tanto, de dónde has caído, y arrepiéntete, y haz las primeras obras; pues si no, vendré pronto a ti, y quitaré tu candelero de su lugar, si no te hubieres arrepentido”. Apocalipsis 2:4-5.
La iglesia de Cristo en Éfeso era muy buena en obras, doctrina, paciencia, santidad… Todo iba bien hasta que Dios dijo “pero”. Si Dios dice “pero”, es mejor prestar atención.
“Has dejado tu primer amor”. No fue una pérdida por accidente, sino una decisión intencional y voluntaria. La construcción gramatical griega de este versículo dice literalmente: “Pero estoy teniendo contra ti que el amor de ti, el primero, dejaste ir”. No solo habían perdido el entusiasmo inicial, la alegría de servir, el gozo de ver a una persona salvada, sino que el Señor ya no era lo que más amaban. La obra, el servicio, la firmeza en la doctrina, y tantas otras cosas pasaron a ser lo más importante, y amar a Jesús por sobre todas las cosas fue desplazado del primer lugar.
Las justificaciones podrían haber sido bíblicas: “Amamos la verdad, sabemos distinguir muy bien a los falsos profetas, nos esforzamos al máximo en el servicio, ayudamos a los necesitados, recibimos con amor a los que son salvos…”. Todo eso es muy loable, pero si esos amores están antes que el amor a Jesús, algo está mal.
Si nuestro amor por el Señor no es constante, llegará el momento en que nos dedicaremos a hacer cosas, pero sin la motivación correcta. Ocuparemos el tiempo en actividades, pero nos alejaremos de la presencia de Dios, y si nos alejamos de la comunión íntima con el Señor, el amor finalmente se enfriará.
El predicador y escritor del S. XIX Charles Spurgeon dijo una vez: “Una iglesia no tiene razón de ser cuando el amor se ha enfriado. Si pierdes el amor por Jesús, lo pierdes todo”.
Acércate al Señor; pon “leña” cada día a tu relación con Él para que esa llama nunca se apague. Pasa tiempo en su presencia. Recuerda todo lo que hizo por ti. Dile cuánto lo amas. Que tu relación de amor con el Señor sea tan evidente que otros digan: “Sí que está enamorado de Jesús”.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Miércoles 28 de junio, 2023
“Verdadera paz”
“Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús.” Filipenses 4:7.
Cuando una situación inesperada llega a nuestra vida, comenzamos a hacernos preguntas de todo tipo: ¿Por qué a mí? ¿Qué hice para merecerlo? ¿Por qué Dios lo permitió? ¿Cómo no me di cuenta? ¿En qué estaba pensando cuando sucedió? ¿Cuál fue la causa? Nuestra mente trabaja sin descanso para encontrar respuestas.
La verdad es que probablemente no lleguemos a “entender” todo lo que nos pasa. La palabra “entendimiento” en griego es nous que significa “intelecto, mente, pensamiento”. Pablo usa mucho esta palabra en sus epístolas porque a él le gustaba profundizar. Nunca se conformaba con una respuesta simple; indagaba hasta que sus inquietudes estuvieran satisfechas. Pero Pablo también aprendió que no siempre iba a lograr entenderlo todo. Tal vez muchas de nuestras preguntas se vayan con nosotros al hogar celestial; sin embargo, hay un regalo divino para nosotros aquí y ahora que es de mayor valor que algunas respuestas: La paz de Dios.
Poco antes de que el Señor fuera crucificado, Él tranquilizó a sus discípulos, diciéndoles: “La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo”. (Juan 14.27). No les estaba diciendo que todas sus circunstancias serían fáciles, pero sí que su paz los sostendría y fortalecería en los momentos más difíciles de la vida.
Solo una relación con Jesús nos conduce a una paz verdadera. Cuando vamos a su presencia y le pedimos que nos dé su paz, Él lo hará, a tal punto que será inexplicable para nuestro intelecto. Cuando el Señor toma el control de nuestra mente y emociones, podemos tener descanso.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Martes 27 de junio, 2023
“No tentarás al Señor”
“Entonces el diablo le llevó a la santa ciudad, y le puso sobre el pináculo del templo, y le dijo: Si eres Hijo de Dios, échate abajo; porque escrito está: A sus ángeles mandará acerca de ti, y, en sus manos te sostendrán, para que no tropieces con tu pie en piedra. Jesús le dijo: Escrito está también: No tentarás al Señor tu Dios”. Mateo 4:5-7.
Jesús fue tentado en todo para identificarse con nosotros de modo que podemos estar seguros que nos entiende cuando estamos bajo cualquier presión. Incluso, dice la Biblia que fue llevado por el Espíritu Santo al desierto para ser tentado. Allí el diablo le tendió tres trampas, pero de todas Jesús salió victorioso.
La primera tentación tenía que ver con obligar a Jesús a demostrar que realmente era el Hijo de Dios. Satanás le tienta a “forzar” al Padre para que intervenga de manera sobrenatural. En otras palabras, le estaba diciendo: “Vamos Jesús, si haces esto, la Biblia promete que ángeles te van a rescatar y será una excelente autopromoción.” ¡Qué maquinación perversa! ¡El pseudo hermeneuta Satanás hasta intenta usar la Palabra para respaldar su propuesta! Parece que esto de usar versículos sin analizar el contexto no es de ahora…
Satanás usó solo una parte del Salmo 91 tratando de forzar el texto para decir algo que Dios nunca dijo: “Métete en problemas que de todas maneras yo te ayudaré”. No, jamás dijo eso. Por eso el Señor enfrenta al diablo con la Palabra de Dios y le responde: “Escrito está: No tentarás al Señor tu Dios”.
La palabra “tentar” en griego es peirazo, que significa “poner a prueba, incentivar”. Es decir, retar a Dios para que haga algo según nuestra conveniencia aunque sea una negligencia.
Israel muchas veces tentó a Dios de esta manera y siempre sufrió terribles consecuencias por su testarudez y rebeldía. “Y llamó el nombre de aquel lugar Masah y Meriba, por la rencilla de los hijos de Israel, y porque tentaron a Jehová, diciendo: ¿Está, pues, Jehová entre nosotros, o no?” (Éxodo 17:7).
Actualmente el diablo sigue usando la misma estrategia para hacernos pecar contra Dios. Apela a nuestro orgullo para hacernos creer que ya somos autosuficientes, intocables, a prueba de todo. Pero Dios nunca dijo: “Sé negligente que nunca te llegarán las consecuencias”.
En tiempo de tentación necesitamos someternos a Dios, escuchar su voz y actuar con diligencia. Vayamos diariamente a Su Palabra para que sea nuestra guía. Y si el enemigo busca enredarte con sus mentiras, respóndele: ¡“Escrito está”!
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Lunes 26 de junio, 2023
“Nuestro Protector”
“Jehová es tu guardador; Jehová es tu sombra a tu mano derecha.” Salmo 121:5.
Israel aprendió por experiencia los beneficios de vivir bajo una sombra protectora, renovadora y refrescante. Desde que salieron de Egipto hasta entrar en Canaán, caminaron por el desierto abrasador durante cuarenta años. Imagina la situación… Todos anhelaban algo de sombra para descansar.
Dios siempre nos ha mostrado que es proactivo para suplir las necesidades de su pueblo, su providencia se ha manifestado de maneras milagrosas en todas las épocas. A los israelitas, durante su viaje de conquista, les acompañó la nube de su presencia (Éxodo 13:21-22), los llevó a lugares donde había palmeras, les proveyó comida y agua.
En hebreo la palabra sombra es tzel y significa “protección”. Los judíos describían a Dios a través de cosas que podían sentir, tocar, gustar, ver y experimentar. Para ellos, decir que Dios “es tu sombra a tu mano derecha” significaba que Él era su protección en todo momento.
Aunque hoy contamos con tecnología que nos permite pasar mejor los días de calor, nuestras almas siguen necesitando renovación y descanso espiritual. Por eso Dios quiere que recordemos la promesa que nos hizo: “El que habita al abrigo del Altísimo morará bajo la sombra del Omnipotente.” (Salmo 91:1). Él será el refrigerio que necesitan nuestras almas y nos enviará su ayuda en tiempos de necesidad.
Si hoy te sientes agotado, desprotegido, emocionalmente extenuado y sin fuerzas, Dios es la sombra que trae refrigerio a tu alma cansada. El Padre Celestial sabe darte el descanso que necesitas y la fortaleza suficiente para que continúes el camino que trazó para ti.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Domingo 25 de junio, 2023
Puedes ver el sermón de hoy a partir de las 11 am haciendo click aquí.
¡Dios te bendiga!
“Brazo en movimiento”
“Oh Señor, ten misericordia de nosotros, pues nosotros esperamos en ti. Tú, brazo de ellos en la mañana, sé también nuestra salvación en tiempo de la tribulación”. Isaías 33:2.
Israel se encontraba amenazado por Asiria, un país que se caracterizaba por su crueldad. En esa situación es que claman a Dios por salvación. La verdad es que no merecían la ayuda de Dios porque se habían alejado de Él, sin embargo, apelan a su misericordia.
Es muy llamativa la expresión de Isaías “brazo de ellos”, en hebreo zeroá, que significa “brazo estirado hacia afuera”. Se refiere al brazo en movimiento, no a un brazo inmóvil. Israel le pide a Dios que su brazo se extienda para ayudarlos en ese momento crítico.
Es interesante notar que le piden a Dios que su brazo se extienda desde el inicio del día. No claman pidiendo ayuda para el final de su jornada, cuando ya habían intentado todo en sus propias fuerzas. Por el contrario, su oración es que Dios los ayude “desde la mañana”.
Desde tiempos antiguos Dios se había manifestado a su pueblo como el Todopoderoso que salva con su brazo extendido: “Por tanto, dirás a los hijos de Israel: Yo soy Jehová; y yo os sacaré de debajo de las tareas pesadas de Egipto, y os libraré de su servidumbre, y os redimiré con brazo extendido, y con juicios grandes” (Éxodo 6:6). También lo menciona en Deuteronomio 4:34; 5:15; 7:19; 11:2; 26:8; 2 Reyes 17:36; Salmo 98:1 y muchos pasajes más. Cuando oraban haciendo referencia al brazo extendido de Dios sabían muy bien de qué se trataba.
¿Puedes imaginar a Dios con su brazo extendido ayudando a su pueblo para librarlo de la tribulación? Ahora… ¿puedes imaginarlo con sus brazos extendidos para darte salvación? Sin duda que nuestra mente viaja rápidamente al monte Calvario, donde Cristo fue crucificado en nuestro lugar para salvarnos. Pero, ¿puedes imaginarlo hoy con sus brazos extendidos desde su trono ayudándote?
Los brazos del Señor siguen extendidos para sanar, renovar, liberar, ayudar a todo el que se acerque con fe a Él. “El Dios eterno es tu refugio, y sus brazos eternos te sostienen…”. Deuteronomio 33:27ª.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Viernes 23 de junio, 2023
“¿A quién pides consejo?”
“Y el rey respondió al pueblo duramente, dejando el consejo que los ancianos le habían dado; y les habló conforme al consejo de los jóvenes, diciendo: Mi padre agravó vuestro yugo, pero yo añadiré a vuestro yugo; mi padre os castigó con azotes, mas yo os castigaré con escorpiones”. 1 Reyes 12:13-14.
El joven rey Roboam decidió tomar tres días para meditar y escuchar el consejo de personas sabias que le ayudaran a tomar una decisión. Pero finalmente, eligió ignorar el consejo de los ancianos que le recomendaron ser compasivo y escuchó a sus inmaduros amigos, “jóvenes que se habían criado con él, y estaban delante de él” (v. 8) que le decían lo que él quería escuchar.
Roboam le respondió al pueblo: “Mi padre agravó vuestro yugo, pero yo añadiré a vuestro yugo; mi padre os castigó con azotes, mas yo os castigaré con escorpiones” (v.14). Pero el pueblo no lo pudo soportar y se dividió. Desde allí en adelante diez tribus se separaron formando el Reino del Norte, y él se quedó con el Reino del Sur con solo dos tribus. Mal consejo, mala decisión.
Muchas veces pedimos un consejo, aunque en realidad ya hemos tomado una decisión en nuestro corazón. En otros casos, buscamos consejeros que nos digan solo lo que queremos oír. En cualquiera de los casos, mi pregunta es: ¿para qué buscar consejo entonces?
Si realmente queremos hacer la voluntad de Dios, entonces debemos aprender a seleccionar a nuestros consejeros. El consejo sabio, maduro y espiritual, es el que Dios puede usar para librarnos de problemas y mantenernos en la senda correcta.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Jueves 22 de junio, 2023
“No vuelvas atrás”
“… nuestros padres no quisieron obedecer, sino que le desecharon, y en sus corazones se volvieron a Egipto.” Hechos 7:39.
Cuando el diácono Esteban estaba siendo interrogado por los judíos religiosos acerca de su fe en Cristo, con mucha sabiduría y elocuencia les habló sobre la dureza del corazón de Israel para obedecer a Dios con estas palabras: “En su corazón se volvieron a Egipto”.
Los israelitas iban rumbo a Canaán, pero mirando siempre por el espejo retrovisor a Egipto. La mirada la tenían puesta en lo que habían dejado en lugar de aquello que iban a alcanzar. Preferían los ajos y las cebollas en esclavitud que el maná en libertad. “Nos acordamos del pescado que comíamos en Egipto de balde, de los pepinos, los melones, los puerros, las cebollas y los ajos; y ahora nuestra alma se seca; pues nada sino este maná ven nuestros ojos.” (Números 11:5-6).
Como hijos de Dios, cada vez que deseamos volver a lo que dejamos por seguir a Cristo, nos detenemos e incluso podemos retroceder. Cuando pensamos: “Antes no teníamos ataques del diablo”, “me divertía más”, “tenía más amigos”, “todo el mundo me amaba”, “mentía más, pero tenía más dinero…”, nuestro corazón se vuelve al mundo aunque sigamos realizando algunas “prácticas” cristianas.
En Gálatas 5:1 leemos: “Estad, pues, firmes en la libertad con que Cristo nos hizo libres, y no estéis otra vez sujetos al yugo de esclavitud.” El apóstol Pablo les recuerda a los gálatas que el Señor nos liberó para que vivamos en libertad, pero a la vez les hace un llamamiento a mantenerse firmes en esa libertad, no sometiéndose nuevamente al yugo de la esclavitud.
Para que esto suceda debemos experimentar un cambio de mentalidad, dejar de pensar y actuar como esclavos, y aceptar de verdad la libertad que Cristo puso a nuestra disposición.
¡Cuántas oportunidades de ser bendecidos podemos perder si seguimos mirando por el “espejo retrovisor”! Cada vez que elegimos la “seguridad de las cebollas y los ajos” que nos ofrece el mundo, cerramos nuestras manos a los extraordinarios “racimos de uvas de Canaán”.
Lo que Cristo vino a ofrecernos, no está en el lugar de donde nos rescató.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Miércoles 21 de junio, 2023
“Nunca cambia”
“Toda buena dádiva y todo don perfecto desciende de lo alto, del Padre de las luces, en el cual no hay mudanza, ni sombra de variación.” Santiago 1:17.
Santiago, uno de los hermanos de Jesús, escribe esta carta a cristianos que estaban pasando pruebas severas y persecución. Muchos de ellos creían que Dios los estaba tentando, pero Santiago es claro en su exposición diciéndoles que nunca tienta a nadie ni tiene el propósito de que alguien caiga en algún pecado. Al contrario, las pruebas sirven para crecer en fe y dependencia de Dios cuando el corazón es espiritualmente sensible.
Dios tiene para sus hijos buenas dádivas y dones que se ajustan a lo que necesitamos. El Señor nunca se equivoca con lo que nos da o permite. Santiago toma como ejemplo a los astros del cielo para hablar de “las luces”. Si el Creador diseñó todos los astros del universo y cada uno con su luz particular, ¡cómo no reconocerlo a Él como la luz perfecta donde está todo perfectamente claro!
El escritor está tratándonos de decir que Dios es inmutable: significa que no cambia, sus atributos permanecen eternamente, su carácter es inquebrantable, su gobierno es estable y duradero, sus propósitos son indestructibles. Para esto usa dos palabras griegas que son usadas en astronomía: “mudanza” y “sombra”, relativas a los cambios de los cuerpos celestes, las variaciones del día y la noche, el movimiento del sol y la luna, las diferencias de brillo entre estrellas y planetas. Todo lo creado es variable pero su Creador no, Él permanece para siempre.
Aunque las cosas cambien a nuestro alrededor, aunque nuestro cuerpo cambie, aunque las personas cambien, el Señor sigue siendo el mismo. Podemos confiar en Él porque su Palabra nos confirma su inmutabilidad. Si dice que su amor y misericordia son eternos, debemos creer en Él, si dice que sus promesas se cumplen, no podemos dudar, si dice que Dios tiene recursos para ayudarnos en las pruebas y una salida a cada situación difícil, nuestra fe debe permanecer en Él. Recuerda esta verdad inalterable: “Jesucristo es el mismo ayer, y hoy, y por los siglos.” (Hebreos 13:8). ¡El Dios de los milagros nunca ha cambiado y sigue interviniendo en nuestras vidas!
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Martes 20 de junio, 2023
“No dar lugar a la codicia”
“Levántate, santifica al pueblo, y di: Santificaos para mañana; porque Jehová el Dios de Israel dice así: Anatema hay en medio de ti, Israel; no podrás hacer frente a tus enemigos hasta que hayáis quitado el anatema de en medio de vosotros.” Josué 7:13.
Israel salía victorioso de sus batallas porque Dios estaba con ellos. Cuando se apartaban del Señor, eran derrotados. Esto fue notorio desde el inicio de la conquista.
La primera ciudad para conquistar del otro lado del río Jordán era Jericó. Dios había derribado la muralla para que el pueblo pudiera pasar, pero quería probar su obediencia. Les había dicho que no debían quedarse con nada de lo que había en esa ciudad porque era “anatema”.
La palabra anatema en hebreo es jerem que significa “objeto condenado, dedicado a exterminación, cosas prohibidas”. “Pero vosotros guardaos del anatema; ni toquéis, ni toméis alguna cosa del anatema, no sea que hagáis anatema el campamento de Israel, y lo turbéis… ”. Josué 6:18.
Pero Acán se hizo el distraído y tomó un precioso manto babilónico, doscientas piezas de plata y un lingote de oro. ¡Quién se iba a enterar…! Pero cuando Israel fue a conquistar la segunda ciudad, Hai, muchísimo más pequeña que Jericó, cayeron derrotados. Entonces Josué consultó a Dios y la respuesta fue que el pueblo había tomado del anatema, y mientras no lo quitaran, no podrían vencer a sus enemigos.
Entonces Acán reconoció su falta: “Pues vi entre los despojos un manto babilónico muy bueno, y doscientos siclos de plata, y un lingote de oro de peso de cincuenta siclos, lo cual codicié y tomé…” (Josué 7:21). Él no necesitaba nada del anatema; Dios tenía muchísimo más que eso para darle, pero la codicia es ese deseo incontrolable de querer más.
Hoy, el diablo sigue usando el mismo engaño para tentarnos. Nos ofrece tener más, pero para obtenerlo debemos mentir, tomar lo que no es nuestro y justificar acciones que no son correctas. Si lo hacemos, terminaremos esclavizados y sufriendo una derrota tras otra.
Lo que nos ofrece Dios es de mayor valor que aquello con lo que el diablo nos tienta. Si quieres ver la mano del Señor obrando a tu favor, tendrás que confiar en su provisión y obedecerle.
¡Engrandece a Dios con tus decisiones! Verás que siempre recompensa a los que esperan en Él.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Lunes 19 de junio, 2023
“Yo estoy contigo”
“Y te pondré en este pueblo por muro fortificado de bronce, y pelearán contra ti, pero no te vencerán; porque yo estoy contigo para guardarte y para defenderte, dice Jehová. Y te libraré de la mano de los malos, y te redimiré de la mano de los fuertes”. Jeremías 15:20-21.
Como cristianos, somos presionados constantemente por nuestra cultura a tolerar el pecado, abandonar los valores bíblicos y alejarnos de Dios. Por eso, más que nunca, necesitamos convicciones firmes, valor y una fe inalterable.
No podemos extrañarnos del comportamiento antagonista del sistema contra los que permanecen fieles a la verdad divina. Ya lo dijo Jesús: “Si fuerais del mundo, el mundo amaría lo suyo; pero porque no sois del mundo… el mundo os aborrece.” (Juan 15:19). También lo dijo el apóstol Juan: “Hermanos míos, no os extrañéis si el mundo os aborrece”. (1 Juan 3:13). Puede ser que muchas personas se levanten en contra nuestra para presionarnos a cambiar nuestros valores, pero Dios ha prometido fortalecernos en todo tiempo para permanecer firmes.
El Señor será un muro fortificado de bronce a nuestro alrededor. No hay manera de derribarlo. Un muro de piedra se puede desmantelar piedra por piedra, pero no uno de bronce. Dios es nuestra protección contra todos los ataques que puedan venir contra nosotros.
“Pelearán contra ti pero no te vencerán”. Nadie dijo que no vamos a tener que enfrentar situaciones difíciles, pero la promesa es que nadie nos vencerá. El Poderoso Gigante está con nosotros y tenemos la victoria asegurada.
“Yo estoy contigo para guardarte y defenderte”. ¡Amen, así será! Su presencia será evidente sobre nosotros en todo tiempo. No hay momento ni circunstancia en que Dios nos abandone. ¡Él mismo nos defenderá! Cuando le damos nuestra causa a Dios, interviene con su justicia y levanta nuestra cabeza.
“Te libraré de la mano de los malos”. Gente mala hubo y habrá en esta vida, pero el Dios que no cambia seguirá librando a sus hijos de sus ataques.
No tengas temor, Dios es tu Ayudador. La promesa que le dio a Jeremías sigue vigente. “Y pelearán contra ti, pero no te vencerán; porque yo estoy contigo, dice Jehová, para librarte”. (Jeremiadas 1:19).
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Domingo 18 de junio, 2023
Puedes ver el sermón de hoy a partir de las 3 pm.
¡Dios te bendiga!
“Una decisión impostergable”
“Yendo ellos, uno le dijo en el camino: Señor, te seguiré adondequiera que vayas. Y le dijo Jesús: Las zorras tienen guaridas, y las aves de los cielos nidos; mas el Hijo del Hombre no tiene dónde recostar la cabeza. Y dijo a otro: Sígueme. Él le dijo: Señor, déjame que primero vaya y entierre a mi padre. Jesús le dijo: Deja que los muertos entierren a sus muertos; y tú ve, y anuncia el reino de Dios. Entonces también dijo otro: Te seguiré, Señor; pero déjame que me despida primero de los que están en mi casa. Y Jesús le dijo: Ninguno que poniendo su mano en el arado mira hacia atrás, es apto para el reino de Dios.” Lucas 9:57-62.
Cada vez que Jesús se acercaba a una persona y la invitaba a ser su discípulo le pedía una cosa: Seguirle. En esa época implicaba dejar todo y caminar con Él a donde fuera. Había que dejar casa, trabajo, familia, proyectos y arriesgarse a vivir por fe. Aunque hoy no todos necesariamente vayan a dejar todas estas cosas, sigue siendo la decisión más importante de nuestra vida, por lo que se deben tomar en cuenta varias cosas de acuerdo al pasaje de Lucas.
En primer lugar debe ser una decisión bien pensada. “Y le dijo Jesús: Las zorras tienen guaridas, y las aves de los cielos nidos; mas el Hijo del Hombre no tiene dónde recostar la cabeza” (v. 58). Seguir a Cristo implica rendirlo todo a Él. ¿Qué es lo que más te costaría entregarle a Jesús? Si es nada, entonces estás listo para ser su discípulo.
Es una decisión impostergable. “Jesús le dijo: Deja que los muertos entierren a sus muertos; y tú ve, y anuncia el reino de Dios” (v. 60). Algunos dudaban entre seguirle en ese momento o esperar a que su situación familiar cambiara, pero la decisión no se podía retrasar. Nadie sabe lo que sucederá mañana con su vida, por lo que es necesaria una acción inmediata.
Es una decisión irrevocable. “Y Jesús le dijo: Ninguno que poniendo su mano en el arado mira hacia atrás, es apto para el reino de Dios” (v. 62). Algunos seguían a Jesús “para ver si resultaba en algo favorable”. El Señor solo era una opción más para ellos. Pero quien tiene un verdadero encuentro con Cristo y puede vislumbrar lo que será la vida eterna, ¿por qué retrocedería? ¡Jamás abandonaría lo que estaba buscando!
Es una decisión ineludible. Todos debemos tomar esta decisión: Seguir o no seguir a Jesús. Nadie puede ignorar este llamado. Un día, cada persona estará frente al Trono de Dios y dará cuenta de la decisión que haya tomado. Dios quiera que la tuya haya sido seguir a Jesús, y que esa determinación te lleve a animar a otros a seguir a Cristo.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Viernes 16 de junio, 2023
“Aprender a contentarnos”
“No lo digo porque tenga escasez, pues he aprendido a contentarme, cualquiera que sea mi situación. Sé vivir humildemente, y sé tener abundancia; en todo y por todo estoy enseñado, así para estar saciado como para tener hambre, así para tener abundancia como para padecer necesidad”. Filipenses 4:11-12.
El apóstol Pablo pasó por grandes necesidades, incluyendo hambre, pero su descanso no dependía de lo que tenía, sino de Dios que sabía lo que hacía en cada circunstancia.
Cuando habla de “necesidad”, en griego es histéresis que significa “quedarse corto, escasez, carecer de ciertas cosas”. En física esta palabra se aplica a los metales que son comprimidos, apretados, estirados y retorcidos para medir su flexibilidad y ductilidad. Es decir, estas necesidades probaban su dependencia de Dios, su firmeza y forjaban su carácter.
Cuando somos presionados por las necesidades de la vida debemos tener la flexibilidad y resistencia necesarias para poder mantenernos en pie y permitir que nuestro carácter sea transformado por esas presiones.
Que el Señor nos ayude a contentarnos con lo que nos da hoy y mantengamos una actitud de agradecimiento por su cuidado y provisión. Recuerda que todo lo que tenemos viene de Dios. “Pero gran ganancia es la piedad acompañada de contentamiento.” (1 Timoteo 6:6).
Pablo concluye su carta a los filipenses con una promesa para aquellos que confían y esperan en el Proveedor Celestial: “Mi Dios, pues, suplirá todo lo que os falta conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús.” (Filipenses 4:19).
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Jueves 15 de junio, 2023
“Discierne dónde está el veneno”
“Y salió uno al campo a recoger hierbas y encontró un arbusto silvestre cuyos frutos eran como calabazas. Llenó su capa con ellas, y cuando llegó a la casa las cortó y las puso en el guiso sin saber qué eran. Después sirvieron el guiso a los profetas para que lo comieran. Mientras comían, ellos gritaron: ¡Eliseo, hombre de Dios, el guiso está envenenado!...” 2 Reyes 4:39-40.
Por lo que dice el pasaje, Eliseo estaba con cien hijos de profetas y no tenían nada para comer, entonces le pidió a su criado que prepara un guiso. El joven, inexperto, salió a buscar vegetales al campo y encontró ciertas calabazas que parecían muy apetecibles, y sobre todo, muy parecidas a las que comían siempre… pero eran ¡venenosas! Sin notarlo, estas “casi calabazas” fueron a parar a los platos de los hambrientos comensales. Menos mal que apareció Eliseo y guiado por Dios solucionó el problema quitando milagrosamente el veneno (v. 41).
Esta historia tiene mucho significado para nosotros. Vivimos recibiendo información por diferentes medios permanentemente, y esta sobreexposición nos puede llevar a consumir información sin evaluar su calidad, veracidad y procedencia. Hay muchas cosas que parecen buenas, sin embargo contienen veneno.
Cada uno de nosotros es responsable de distinguir entre lo que alimenta y lo que enferma. Debemos estar atentos porque Satanás no ahorrará recursos para debilitar nuestra fe.
Te pregunto: ¿Estás chequeando la procedencia de lo que recibes a nivel espiritual? ¿Estás seguro de que te alimentas con la verdad? Si lo que recibes procede de “otros evangelios” como dijo el apóstol Pablo (Gálatas 1:8-9), estarás expuesto a una intoxicación espiritual.
¿Cómo podemos estar seguros de que nos estamos alimentando sanamente? Teniendo la misma actitud de los hermanos de Berea, según leemos en Hechos 17:10-11: “Enviaron de noche a Pablo y a Silas hasta Berea. Y ellos, habiendo llegado, entraron en la sinagoga de los judíos. Y estos… recibieron la palabra con toda solicitud, escudriñando cada día las Escrituras para ver si estas cosas eran así.”
La única manera de combatir el error es con la verdad, y para eso necesitamos leer y estudiar la Palabra de Dios cada día. Si conocemos la verdad, podremos diferenciar fácilmente lo que es saludable de lo que envenena.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Miércoles 14 de junio, 2023
“Tormentas inesperadas”
“Y él estaba en la popa, durmiendo sobre un cabezal; y le despertaron, y le dijeron: Maestro, ¿no tienes cuidado que perecemos?” Marcos 4:38.
Los discípulos habían iniciado la travesía de cruzar el lago Genesaret con Jesús. De pronto, sucede algo inesperado: una tormenta. Se generó tan rápido y era tan intensa que no supieron que hacer. Mientras tanto Jesús dormía muy tranquilo.
¿Y ahora qué hacemos? Los discípulos comenzaron a clamar al Señor con desesperación. No tuvieron ningún problema en despertarlo. Sabían que solo los podía salvar el Maestro.
¿Cuántas veces hemos sido sorprendidos por tormentas? Todo parece estar en calma y de repente, “el viento y las olas” empiezan a golpear nuestra vida. Entonces surge la pregunta: “Y ahora que hacemos”. La respuesta es: Clamar. En la Biblia, clamar se refiere a hablar de manera audible con gran sentimiento acerca de una necesidad urgente. Eso fue lo que hicieron los discípulos.
Cuando enfrentamos un problema lo más natural es intentar solucionarlo. Sin embargo, el Señor nos enseña una manera diferente de manejar las “tormentas”: Buscar refugio y auxilio en Él.
La Palabra de Dios nos asegura que el Padre celestial escucha nuestro clamor y responde. En el Salmo 3:4 leemos: “Con mi voz clamé a Jehová, y él me respondió…”.
Recuerde: Dios está en su trono. Salmo 11:4. Dios dijo que actúa cuando ponemos nuestra confianza en Él. Hebreos 11:6. Dios nunca desampara a sus hijos. Mateo 28:20.
Si su corazón está turbado, clame al Señor. Sepa que está ante la presencia de Aquel que es su poderoso protector, capaz de socorrerlo en cualquier tormenta.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Martes 13 de junio, 2023
“Pelea las batallas correctas”
“Vino, pues, David con los suyos a la ciudad, y he aquí que estaba quemada, y sus mujeres y sus hijos e hijas habían sido llevados cautivos. Y David se angustió mucho, porque el pueblo hablaba de apedrearlo, pues todo el pueblo estaba en amargura de alma, cada uno por sus hijos y por sus hijas; mas David se fortaleció en Jehová su Dios.” 1 Samuel 30:3,6.
Este fue uno de los momentos más difíciles en la vida de David. Él y su ejército habían perdido a sus familias en manos de los amalecitas. La pregunta que nos hacemos la mayoría al leer estos versículos es: “¿Dónde estaba David?”
En ese tiempo se estaba refugiando en la tierra de los filisteos para no caer en las manos de Saúl y no había pedido dirección a Dios para vivir en ese lugar. Aparentemente tomó esa decisión por temor a Saúl. Ahora el rey de los filisteos, el jefe de ese territorio, lo estaba convocando para que peleara en sus filas contra Israel. ¡Y allí estaba David y su ejército, peleando una batalla equivocada mientras sus familias estaban siendo atacadas por sus enemigos!
Muchas veces nos sucede como a David, nos olvidamos de pelear la batalla más importante: Cuidar de nuestra vida espiritual y la de nuestra familia. Entonces quedamos a merced del enemigo, quien poco a poco apaga nuestra fe hasta que finalmente nos separamos de Dios.
¿Estás consciente de las estrategias que está usando el diablo contra tu vida y la de tu familia? ¿Con quién pasas más tiempo, con tu teléfono o con el Señor y tu familia? ¿Sabes lo que hacen y sienten tus hijos? ¿Cuándo fue la última vez que oraste con ellos y por ellos?
No debemos esperar a que el enemigo arrase con nuestra vida y nuestro hogar para pensar en hacer algo. A veces, algunas situaciones pueden revertirse, pero otras veces es demasiado tarde.
Fortalécete en Dios. Evalúa tus batallas. Hay algunas de ellas que tal vez sean enredos del enemigo para distraerte de los asuntos que son eternos. Presta atención a tu familia y haz lo que sea necesario para cuidar tu relación con el Señor.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Lunes 12 de junio, 2023
“Dios termina lo que comienza”
“Si anduviere yo en medio de la angustia, tú me vivificarás... Jehová cumplirá su propósito en mí; tu misericordia, oh Jehová, es para siempre; no desampares la obra de tus manos.” Salmo 138:7-8.
La palabra “propósito” en hebreo es gamar, que significa “terminar, completar, concluir, acabarse”. Responde al “para qué”. Se puede aplicar a un artesano haciendo un cántaro con el propósito de usarlo para contener agua.
David, el autor de este Salmo, asegura que Dios acabará de manera perfecta lo que empezó. Lo ha visto actuando de muchas maneras en su propia vida y en el pueblo de Israel. Por otro lado, es conocedor de las Escrituras y sabe que Dios siempre tiene un propósito en mente cuando hace algo. Dios nunca pierde el tiempo, no necesita hacer pruebas para saber si algo funcionará, nunca experimenta para saber qué resultados obtendrá… ¡Él es Omnisciente!
Los propósitos de Dios nunca son improvisados. Lo que nos sucede hoy no le ha tomado por sorpresa. Desde la eternidad también ha preparado la salida para cada situación.
Por experiencia todos sabemos que pasaremos tiempos de angustia, desasosiego, estrés o temor. David también sabía que no estaba exento de pasar tiempos difíciles; por eso escribe de modo condicional: “Si anduviere yo en medio de la angustia.” Su respuesta es que Dios lo iba a vivificar en esos tiempos.
Tal vez estés por comenzar una semana difícil, con imprevistos, situaciones que puedan generarte estrés. Debes recordar que Dios también lo sabe y tiene los recursos que necesitas para avanzar y ser perfeccionado según los propósitos que trazó para tu vida.
Me uno a la afirmación del apóstol Pablo en Filipenses 1:6: “Estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo”.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Domingo 11 de junio, 2023
Puedes ver el sermón de hoy a partir de las 11 am haciendo click aquí.
¡Dios te bendiga!
“¡Solo Jesús nos hace libres!”
“Te digo que sus muchos pecados han sido perdonados, por eso ella me demostró tanto amor; pero una persona a quien se le perdona poco demuestra poco amor.” Lucas 7:47.
¿Irías a comer a la casa de alguien que es parte de un grupo religioso que busca algún motivo para matarte? Lo cierto es que Jesús fue, compartió tiempo con ellos e incluso participó de la comida. Pero sucedió algo que sorprendió a todos… menos a Jesús. Mientras hablaban, una mujer pecadora conocida por toda la ciudad, entró a la casa, abrió un frasco de perfume carísimo, lo derramó en los pies de Jesús y los secó con sus cabellos. Los religiosos estaban horrorizados; no podían entender lo que estaba pasando. Para ellos esta mujer estaba contaminando a Jesús; pero para Él era tiempo de salvación.
Mientras los fariseos seguían discutiendo y dudando de que Jesús fuera realmente el Mesías Salvador, esa mujer recibió el perdón de todos sus pecados y fue justificada en ese mismo momento.
¡Qué bueno que Jesús no se intimidó, ni actuó condicionado por el “qué dirán”! El Señor no vino a condenar sino a salvar. Por eso, cuando nos arrepentimos de todos nuestros pecados sinceramente, Él no solo nos perdona, sino que ¡no se acuerda más de ellos! “Sepultará nuestras iniquidades, y echará en lo profundo del mar todos nuestros pecados.” Miqueas 7:19.
Ahora, ¿qué espera Jesús que hagamos una vez que hemos sido perdonados? ¿Estará feliz si seguimos pidiendo perdón por aquello que ya limpió en nuestras vidas? ¿Nos sentiremos menos culpables si seguimos insistiendo en la necesidad de perdón? La verdad es que no. Lo que Jesús quiere es que aceptemos su perdón, dejemos el pasado atrás y caminemos de su mano hacia adelante.
Los que realmente saben el valor que tiene el perdón de Jesús no quieren volver a pecar, ni siquiera lo piensan, jamás retroceden. Ellos son los que “aman más” porque reconocen de donde los sacó el Señor.
Cuando aceptamos a Jesús como nuestro Salvador, Él nos ve cubiertos por su justicia. Nadie puede hacer suficiente bien para merecer su salvación. ¡Solamente Jesús nos hace libres!
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Viernes 9 de junio, 2023
“Querer y buscar”
“Grandes son las obras de Jehová, buscadas de todos los que las quieren.” Salmo 111:2.
¡El Señor hace maravillas! Sus obras son tremendas desde la eternidad hasta la eternidad. Eso no está en discusión. Pero ver y experimentar sus obras, es algo que cada uno debe decidir.
En primer lugar, hay que “querer” las obras de Dios. Nada sucederá en nuestra vida si no deseamos que Él actúe con su poder. La palabra “querer”, en hebreo jefets, significa “desear, deleitarse, agradable, considerar algo valioso”. Significa entonces que el que quiera experimentar a Dios debe desearlo. Cristo no se manifiesta a nadie que no anhele su presencia, que no tenga deseos de pasar tiempo aprendiendo a escuchar su voz. Muchas veces Dios probará nuestro deseo para que nos demos cuenta si es genuino y si somos capaces de perseverar en ese anhelo.
En segundo lugar, debemos “buscar” a Dios hasta que se manifieste con poder. En una cultura donde reina lo instantáneo, el Señor nos recuerda que debemos persistir en esa búsqueda. Recordemos que Jesús a sus discípulos “les refirió una parábola sobre la necesidad de orar siempre, y no desmayar” (Lucas 18:1). También será probado el interés de esa búsqueda para saber si queremos al Dios de las maravillas o las maravillas de Dios solamente. Él siempre responde al que le busca de todo corazón. “Cercano está Jehová a todos los que le invocan, a todos los que le invocan de veras.” (Salmo 145:18).
Dios quiere hacer hoy grandes obras en tu vida. Tú parte será buscarlo como quien busca esa perla de gran precio y estar dispuesto a entregarlo todo para tener esa relación única y llegar a experimentar lo que el Señor nos ha prometido.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Jueves 8 de junio, 2023
“El escudo de la fe”
“Nuestra alma espera a Jehová; nuestra ayuda y nuestro escudo es él. Por tanto, en él se alegrará nuestro corazón, porque en su santo nombre hemos confiado. Sea tu misericordia, oh Jehová, sobre nosotros, según esperamos en ti.” Salmo 33:20-22.
Al final del versículo 20 hay una declaración de protección segura: “Él es nuestro escudo”. Los escudos en la antigüedad servían de protección a corta distancia cuando los ataques eran cuerpo a cuerpo, pero también a larga distancia, cuando un ejército enemigo arrojaba flechas sobre los soldados.
Efesios 6:10-18 dice que debemos estar firmes en nuestra confianza en Dios y que debemos tener la armadura espiritual puesta en todo tiempo. Una parte vital de esa armadura es el escudo de la fe “con que podáis apagar todos los dardos de fuego del maligno”.
Vivimos tiempos turbulentos y el diablo sabe qué “dardos” dispararnos. Hay dardos de duda que nos quieren generar incertidumbre acerca de nuestro futuro. Hay dardos de malos pensamientos, porque Satanás no dejará de tentarnos. Hay dardos de palabras envenenadas que pueden venir contra nosotros de personas que tienen el corazón lleno de amargura. Hay dardos de mala comunicación, que intentan tergiversar nuestras palabras y cambiar el sentido de lo que decimos.
Sin el escudo de la fe, estos dardos pueden destruir nuestra relación con Dios y con los que nos rodean, por eso necesitamos estar alerta y con el escudo de la fe alto para permanecer firmes.
Que podamos decir como el salmista David en momentos de incertidumbre: “Te amo, oh Jehová, fortaleza mía. Jehová, roca mía y castillo mío, y mi libertador; Dios mío, fortaleza mía, en él confiaré; mi escudo, y la fuerza de mi salvación, mi alto refugio” Sal. 18:1-2.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Miércoles 7 de junio, 2023
“Digno de recibir adoración”
Pablo y Silas iban muy seguros al pueblo de Filipos porque el apóstol había visto en visión a un varón macedonio que le imploraba que pasase a ayudarlos. Después que el Espíritu Santo no les permitiera ir a otros lugares, entendieron que Dios los quería allí para hablar de Cristo.
Todo marchaba bien los primeros días. Después de varias sanidades, decisiones por Cristo, y liberaciones, Pablo y Silas terminaron… ¡en la cárcel! “Después de haberles azotado mucho, los echaron en la cárcel, mandando al carcelero que los guardase con seguridad. El cual, recibido este mandato, los metió en el calabozo de más adentro, y les aseguró los pies en el cepo”. (Hechos 16:23-24).
El carcelero se equivocó usando el cepo. No eran los pies de Pablo y de Silas los que debía haber atado, sino sus lenguas. A estos varones de Dios podían encerrarlos, atarlos, pero no podían callarlos. “Pero a medianoche, orando Pablo y Silas, cantaban himnos a Dios; y los presos los oían” (v. 25).
Para Pablo y Silas, la alabanza no era meramente cantar, sino glorificar a Dios desde lo más profundo de sus corazones. Era una manifestación de dependencia y seguridad en el Dios que todo lo sabe y todo lo controla.
Dios siempre manifiesta su presencia en la alabanza. Mira lo que pasó en esa improvisada “sala de audio”: “Entonces sobrevino de repente un gran terremoto, de tal manera que los cimientos de la cárcel se sacudían; y al instante se abrieron todas las puertas, y las cadenas de todos se soltaron.” (Hechos 16:26). El resultado: El carcelero y toda su casa fue salva. Fue el inicio de la congregación de los Filipenses.
La adoración es una manera de entregarnos humildemente a su señorío y reconocer que el Señor es digno de recibir alabanza en cualquier circunstancia.
“Y a todo lo creado que está en el cielo, y sobre la tierra, y debajo de la tierra, y en el mar, y a todas las cosas que en ellos hay, oí decir: Al que está sentado en el trono, y al Cordero, sea la alabanza, la honra, la gloria y el poder, por los siglos de los siglos”. Apocalipsis 5:13.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Martes 6 de junio, 2023
“Jehová reina”
“…Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre. Venga tu reino. Hágase tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra”. Mt. 6:9-10.
Generalmente, cuando pensamos en el Padrenuestro, nos enfocamos en la petición material: “Danos hoy nuestro pan cotidiano”. Sí, necesitamos la provisión de Dios. Sin embargo, esa no es la primera petición que deberíamos hacer según esta oración modelo de Jesús. Después de reconocer que estamos orando al Padre Celestial, cuyo nombre es santificado, debemos enfocarnos en el significado de la venida de Su reino.
Cuando oramos que venga Su reino, estamos pidiendo que tome el control de nuestra manera de pensar, de nuestras emociones, de nuestra voluntad. Así es como su reino comienza a ejercer influencia en este mundo: a través de nosotros.
Aunque el mundo no quiere reconocer a Dios como su Rey, ¡Jehová reina! Él está sentado en su trono y al fin se hará su soberana voluntad. Lo dice el Salmo 96:10: “Decid entre las naciones: Jehová reina. También afirmó el mundo, no será conmovido; juzgará a los pueblos en justicia.”
Nunca olvides que Dios reina. Él tiene el control de tu vida, de tu familia, de tu economía, de tu trabajo, de tus relaciones. A veces parece que Dios estuviera en silencio, sin hacer lo que esperamos, pero sigue trabajando a su manera y en su tiempo. Lo que debemos hacer es no desesperar, seguir confiando en Él, y esperar con expectativa lo que está por hacer a favor de nuestra vida.
Escatológicamente hablando, cuando el Señor Jesús vuelva otra vez en su segunda venida reinará directamente sobre el mundo entero. Mientras tanto, seguimos orando que se haga su voluntad, en la tierra como en el cielo.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Lunes 5 de junio, 2023
“Siempre estará a tu lado”
“Nadie te podrá hacer frente en todos los días de tu vida; como estuve con Moisés, estaré contigo; no te dejaré, ni te desampararé.” Josué 1:5.
Josué se encontraba frente al mayor reto de su vida. Moisés, su líder, había muerto, y ahora él debía continuar con lo que Dios le había encomendado.
El primer paso de este sucesor de Moisés era creer que Dios iba a cumplir sus promesas si le obedecía. ¡Qué descanso habrá sido para Josué escuchar a Dios decir: “Nadie podrá hacerte frente en todos los días de tu vida; como estuve con Moisés, estaré contigo; no te dejaré ni te desampararé”! (Josué 1:5).
La palabra “dejaré” en hebreo significa “no me relajaré en el cuidado que tengo hacia ti, no te voy a dejar solo, no te soltaré de la mano”. Es la promesa que todo padre le hace a su hijo cuando le dice que salte a sus brazos porque no lo dejará caer.
La otra palabra, “desampararé”, significa “no voy a renunciar a lo que te prometí, no voy a fallarte nunca”. ¡Aleluya! ¡Qué tremendas promesas para comenzar a transitar un camino desconocido, para guiar a un pueblo complicado, para atreverse a conquistar una tierra para la gloria de Dios!
Nosotros tenemos al mismo Padre Celestial haciéndonos promesas muy específicas, aquí y ahora. Lo que Dios nos promete en su Palabra está al alcance de todos…los que le creen.
¿No te da seguridad saber que Dios te dice “nunca soltaré tu mano”? ¿No te sientes impulsado a llevar adelante sus planes cuando te dice “no te voy a fallar nunca”? Empieza tu día recordando lo que el Señor te ha prometido, y cuando lleguen los desafíos, acuérdate que ya te dijo: “Estaré contigo, no te dejaré, ni te desampararé”.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Domingo 4 de junio, 2023
Puedes ver el sermón de hoy a partir de las 11 am haciendo click aquí.
¡Dios te bendiga!
“Discernir y obedecer”
“Pero el alimento sólido es para los que han alcanzado madurez, para los que por el uso tienen los sentidos ejercitados en el discernimiento del bien y del mal.” Hebreos 5:14.
La palabra “discernir”, en griego diakrino, significa “separar, discriminar, distinguir, determinar, hacer un juicio para decidir”. Para discernir correctamente necesitamos hacerlo sobre una base sólida, objetiva e imparcial y esa es la Palabra de Dios. Hebreos 4:12 dice: “Porque la Palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos; y penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón.”
También necesitamos la guía del Espíritu Santo. En lo natural, nosotros solo podemos confiar en lo que vemos, escuchamos, sentimos y sabemos, pero cuando el Espíritu Santo abre nuestro entendimiento de manera sobrenatural, podemos ver las cosas desde la perspectiva de Dios.
Si podemos discernir correctamente, también debemos ser valientes para obedecer. De nada sirve saber lo que es correcto y no hacer lo correcto.
Necesitamos aprender a escuchar al Señor, ser sensibles y obedientes a su dirección; esto dará lugar a un caminar íntimo con Él que nos conducirá a recibir diariamente lo mejor que tiene para nosotros.
Proverbios 3:21-24 dice: “Hijo mío, no pierdas de vista el sentido común ni el discernimiento. Aférrate a ellos, porque refrescarán tu alma; son como las joyas de un collar. Te mantienen seguro en tu camino, y tus pies no tropezarán. Puedes irte a dormir sin miedo; te acostarás y dormirás profundamente".
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Viernes 2 de junio, 2023
“Vaciarnos de nosotros mismos”
“Ve y pide para ti vasijas prestadas de todos tus vecinos, vasijas vacías, no pocas”. 2 Reyes 4:3.
La esposa de un profeta de Dios no solo había quedado viuda sino muy endeudada, a tal punto que el acreedor había venido para llevarse a dos de sus hijos como siervos. Esta madre en su desesperación acudió por ayuda al profeta Eliseo quien le dijo algo que en principio parecía absurdo: “Consigue todas las vasijas vacías que puedas”.
El segundo paso era: “Luego entra y enciérrate junto a tus hijos. Ve llenando todas las vasijas y poniendo aparte las que estén llenas” (v. 4). La viuda solo tenía un poquito de aceite, así que le debe haber parecido raro que Eliseo le dijera que fuera poniendo aparte las vasijas llenas. Pero ella y sus hijos obedecieron y vieron como el aceite corría sin parar, llenando todas las vasijas. ¡Qué milagro! El aceite seguía fluyendo… mientras había vasijas vacías.
Aprendemos una gran lección espiritual de esta historia: Dios está listo para derramar su poder en nuestras vidas, pero es necesario que nos vaciemos de nosotros mismos. Mientras estemos llenos de autosuficiencia, no habrá espacio para que Dios actúe en nosotros.
Un gran predicador del S. XIX dijo: “No es nuestro vacío, sino la llenura de nosotros mismos lo que estorba el fluir de la gracia”. (Spurgeon).
Nunca olvidemos que no se trata de “nuestro aceite” sino del suyo, para que al fin la gloria y la honra las reciba Él.
Pastor Pablo Giovanini
____________________________________________________________________________________________________________
Jueves 1 de junio, 2023
“¿Gloriarme en mis debilidades?”
“¿Quién enferma, y yo no enfermo? ¿A quién se le hace tropezar, y yo no me indigno? Si es necesario gloriarse, me gloriaré en lo que es de mi debilidad”. 2 Corintios 11:29-30.
Cuando leemos las historias del apóstol Pablo, las formas poderosas en que Dios lo usaba, pensamos que solo le faltaba una capa roja para ser un superhéroe. Sin embargo, el apóstol siempre se mostró tal cual era, sin esconder sus debilidades.
La palabra debilidad en griego es astheneia que significa “carencia de fortaleza, falta de fuerza, incapacidad de producir resultados, propenso a sufrimientos físicos, fragilidad”. En otras palabras, el apóstol Pablo estaba lleno del Espíritu Santo y de poder, pero seguía siendo un ser humano tan frágil como nosotros.
Pablo nos cuenta que él también se enfermaba. ¿Alguien que es usado para sanar a otros se puede enfermar? ¿Por qué no oró por él mismo para ser sano? Bueno, aparentemente había orado por lo menos tres veces por una situación en particular (2 Corintios 12:7-10) y la respuesta de Dios fue: “Bástate mi gracia porque mi poder se perfecciona en la debilidad” (2 Corintios 12:9). Dios tenía un propósito mayor que la sanidad.
El Señor puede hacer cosas extraordinarias a través de nosotros, pero nunca dijo que nuestro cuerpo sería inmortal mientras vivamos en este mundo.
¿Dios es poderoso para sanar? ¡Por supuesto! Pero también seguimos siendo vulnerables. La buena noticia es que Dios se mueve en medio de nuestra vulnerabilidad. El Señor puede hacer mucho más a través de alguien débil que depende de Él, que de alguien autosuficiente.
Si te sientes tan frágil como una vasija de barro, bienvenido a las manos del Alfarero. Estás siendo moldeado perfectamente para los propósitos que Dios espera cumplir a través de tu vida.
Pastor Pablo Giovanini